El sábado se originó en el Edén como un regalo de Dios al finalizar la creación. Dios lo estableció como monumento de la Creación, lo declaró santo y bendijo. Más tarde, Dios lo pronunció como uno de los Diez Mandamientos y Jesús lo ratificó como Señor del Sábado. El sábado debe ser observado con gozo y gratitud como un tiempo para descansar y acercarse a Dios.
6. Introducción
En casa tenemos cosas que le damos
mucho valor. Las guardamos con mucho
cariño. Para algunos es una joya, otros
una fotografía o trofeo. ¿Qué regalo Dios
le dio a la primera pareja? ¿será el
sábado un regalo del Edén?
8. I. LA CREACION Y EL SABADO
1. El sábado se origina en el Edén. Génesis
2:1 al 3 presenta la base para el sábado en el
séptimo día. Este pasaje presenta varios
puntos importantes:
9. Una obra completada
2. Al final de los primeros seis días, la obra de
la Creación estaba completa (kaláh; Génesis
2:1, 2).
Dios había colmado los cielos y la tierra, y estaban
funcionando como él quería.
La palabra hebrea traducida “completó” en este
pasaje es la misma que la que usó Salomón cuando
expresó: “Fue acabada la casa con todas sus
dependencias y con todo lo necesario” (l Reyes 6:38)
10. El séptimo día
3. Tuvieron que pasar seis días antes de
que Dios descansara, a fin de que el día
de descanso fuera llamado el séptimo
día.
11. Dios descansó
4. Cuando completó la creación, Dios
descansó de crear. Literalmente,
“sabatizó” (shabat) de su obra.
La palabra lleva consigo el significado de detener lo
que estaba haciendo porque el proyecto estaba
terminado, no porque estuviera cansado.
12. Bendijo
5. En los días quinto y sexto, bendijo a las
criaturas que había hecho. Dirigió la
bendición del sábado a un período de
tiempo: el día sábado.
Las dos primeras bendiciones fueron para la
fertilidad y el llenado de la tierra.
¿Puede la bendición del sábado significar menos? La
bendición del sábado es una seguridad de que Dios
proveerá de todo lo que es necesario.
13. Dios lo santificó.
6. La palabra santificar significa “dedicar como
santo”. El séptimo día fue lo primero que
Dios identificó como santo.
Más tarde, declaró lugares como santos: el suelo
alrededor de la zarza ardiendo, el Lugar Santo en el
Tabernáculo, la ciudad de Jerusalén, etc.
Dios también instruyó que otras cosas -y personas-
debían ser santificadas, o hechas santas; entre ellas, los
sacrificios, los sacerdotes y el pueblo de Dios. Todos estos
tienen en común la intención de Dios de manifestar su
presencia. Cuando Dios santificó el sábado,
significaba que debía ser reservado para su
presencia.
14. II. EL SABADO ES UN MANDATO DIVINO
1. Dios lo pronunció como mandamiento.
Éxodo 20:8 al 11. Dios mismo pronunció este
Mandamiento con sus propias palabras, como lo
hizo con los demás.
15. Lenguaje similar al Edén
Este texto usa un lenguaje notablemente similar al que se
empleó en la descripción del séptimo día de la semana
de la Creación. día, “santo”,
“obra”,
“cielos”,
“tierra”,
“reposó”,
“bendijo”, y
“santificó”.
16. Acuérdate del sábado
El sábado no era algo nuevo, una adición a las
actividades de adoración del pueblo de Dios.
No, existía desde la Creación, como lo
revela el lenguaje del texto. El problema era
que el pueblo lo había olvidado durante su
esclavitud. En los Diez Mandamientos Dios
se lo hizo recordar.
17. Antes del pecado
El sábado no fue creado en respuesta a
la llegada del pecado. Llama nuestra
atención al séptimo día de la semana de
la Creación, antes de que el pecado
entrara en el mundo.
18. Para la humanidad
Como todos los seres humanos han
descendido a partir de la pareja creada en el
Edén, así también toda la humanidad debía
gozar de las bendiciones del sábado que
Dios dio en ese lugar y en ese momento.
Esto es parte de lo que significa acordarse
del sábado.
19. Pasado y futuro.
Pasado: recordarnos que Dios creó nuestra raza,
y que él nos invistió con individualidad y nos
concedió el privilegio de llevar su imagen.
Incluye, además, la proximidad a Dios que
experimentamos al recordar las bendiciones del
sábado que hemos tenido.
Futuro: cada semana hemos de recordar que
debemos prepararnos tanto para la venida del
sábado como para el reposo que queda para el
pueblo de Dios” (Hebreos 4:9; Isaías 65:22, 23).
20. III. GOZARNOS EN EL SÁBADO
1. El sábado fue ratificado por Jesús en su vida y
ministerio. Es el Señor del Sábado (Marcos
2:27.28)
2. Hizo el bien el día sábado (Mateo 12:9-13;
Lucas 13:10-17; Juan 5:1-17).
No se cuestiona la validez del sábado.
La controversia solo es ¿Cómo guardar el sábado?
21. Jesús y el sábado
3. El ejemplo de Jesús mostró que el sábado
seguía vigente y como debería guardarse
verdaderamente sin ser una carga.
Aliviar el dolor
Hacer el bien a otros que sufren es algo deseable en el
sábado.
22. Tiempo del fin
4. El sábado en el tiempo del fin nos
coloca un desafío.
Hacer frente a los burladores (2 Pedro 3:3-7). El
uniformismo niega la intervención divina, pero el
sábado nos recuerda que si hay un Creador
La proclamación del Evangelio contiene la
predicación del Creador, del Señor del sábado.
(Apocalipsis 14:,7)
23. Tiempo del fin
Falsas enseñanzas concernientes al sábado es parte del
conflicto final entre el verdadero Dios y el verdadero
día de reposo.
Es señal de Dios (Ezequiel 20:12, 20).
Será guardado en la tierra nueva
24. Fidelidad
5. Por eso hoy debemos gozarnos en
guardar el sábado tal como Dios lo ha
establecido en su Palabra.
De puesta a puesta del sol.
No haciendo nuestra voluntad (Isaías 58:13, 14)
Disfrutar en la Iglesia, en el hogar (Lucas 4:16)
25. C. APLICA
1. ¿Cómo está nuestra relación con Dios en
la observancia del sábado?
2. ¿Que actos de misericordia haces los
sábados como individuo, como familia
y como iglesia?
3. ¿Cómo es tu experiencia en la recepción
del sábado?
26. D. CREA
1. Junto con tu Grupo Pequeño estudia el
salmo 92 y encuentra las ideas del sábado y
la creación. Comparte tus descubrimientos.
2. Busca citas del espíritu de Profecía sobre las
bendiciones del sábado y compártelo en tu
Grupo Pequeño.
3. Visita un hospital un sábado de tarde, busca
a los enfermos que están casi solos o
abandonados y comparte con ellos palabras
de esperanza.
27. RESUMEN
El sábado se originó en el Edén, Dios lo
estableció como monumento de la
Creación, tiene la bendición de Dios, lo
declaró santo. Es un mandato de Dios,
Jesús lo ejemplificó como guardarlo. En el
tiempo del fin forma parte del mensaje a
proclamarse. Seamos fieles ahora para que
en el fin, también seamos fieles.