1. REVELACIÓN, 1 La Biblia es el libro que contiene la Palabra de Dios expresada en palabras humanas . El término procede del griego y significa “ libros ”. La Iglesia griega usaba este plural para designar la co- lección completa de las Escrituras sagradas . El AT tiene 46 libros , aceptados por los cristianos porque en ellos descubren la preparación del gran acontecimiento salvífico en Jesucristo. El NT consta de 27 libros , que anuncian la “Buena Nueva” proclamada por Jesús . AT y NT son dos partes de una misma historia. Stephan Langton introdujo la división de la Biblia en capítulos ( 1214 ) y Sanctes Pagnini dividió cada capítulo en versículos ( 1528 ). SE 1 de 73
2. REVELACIÓN, 2 La religión cristiana se nos presenta como originada y fundada en una Revelación el histórica. El término “ revelación” significa “quitar velo que oculta algo”. En su aspecto religioso, es la manifestación que Dios hace a los hombres de su propio ser y de aquellas otras verdades necesarias o convenientes para la salvación . La revelación divina es un hablar Dios a los hombres: Dios sale al encuentro del hombre y se da a conocer de dos maneras: una natu- ral (revelación natural), y otra sobrenatural , en la cual Dios revela su misterio y su plan de salvación para todos los hombres, que lle- va a cabo enviando a su Hijo y al Espíritu Santo. Al revelarse, Dios hace a los hombres capaces de conocerle y amar- le más allá de lo que ellos podrían por sus propias fuerzas. SE 2 de 73
3. REVELACIÓN, 3 El plan de la revelación se realiza por obras y pa- labras intrínsecamente ligadas. Las obras que Dios realiza en la historia de la salvación manifies- tan y confirman la doctrina y las realidades que las palabras significan. A su vez, las palabras pro- claman las obras y explican su misterio . Las etapas de esta revelación divina son: el protoevangelio , la alian- za con Noé , la elección de Abrahán con la alianza y las promesas, el Éxodo o salida de Egipto con Moisés y la alianza sinaítica, la prome- sa a David de un Mesías descendiente de su linaje, el Exilio o cauti- vidad babilónica y la vuelta a la Tierra Prometida en el AT ; la En- carnación del Redentor, la Iglesia fundada por Cristo y la Parusía o Segunda venida del Señor en el NT . SE 3 de 73
4. REVELACIÓN, 4 “ En diversos momentos y de muchos modos habló Dios en el pasado a nuestros padres por medio de los profetas . En los últimos días nos ha hablado por medio de su Hijo ” ( Heb 1, 1-2 ). El Hijo de Dios hecho hombre es la Palabra única, perfecta e insuperable del Padre. En Él lo dice todo , no habrá otra palabra más que ésta. Aunque la Revelación esté acabada (se ha clau- surado con la muerte del último apóstol), su con- tenido podrá ser conocido mejor y gradualmente en el transcurso de los siglos. Esta es una razón de la misma existencia de la Iglesia . SE 4 de 73
5. REVELACIÓN, 5 Jesús entrega a la Iglesia su Palabra divina de dos maneras: oralmente y por escrito . Por eso, junto a la Sagrada Escritura existe en la Iglesia la Tradición . Ambas constituyen el sagrado depósito que contiene verdades de orden sobrenatural , como natural . La Biblia guarda toda la verdad, y sólo puede ser leída y comprendi- da dentro de la Tradición de la Iglesia, que hay que buscar en el Ma- gisterio, en los Santos Padres, y en las palabras y usos de la Liturgia. Los herejes acuden a la Sagrada Escritura para apoyar sus creencias. Así hizo el demonio cuando tentó a Cris- to. Pero no la interpretan según la Tradición de la Iglesia. Gracias a la Tradición , la Iglesia conoce el canon de los libros sa- grados y los entiende cada vez con más profundidad. SE 5 de 73
6. REVELACIÓN, 6 La Biblia debe ser leída en la Iglesia y con la Iglesia. Cristo quiso que hubiera en Ella un Magisterio vivo con el oficio de interpretar auténticamente la palabra divina, escrita o transmitida oralmente. El Magisterio “no está por encima de la palabra de Dios, sino a su servicio , para enseñar puramente lo transmitido, pues por mandato divino y con la asistencia del Espíritu Santo , lo escucha devota- mente, lo custodia celosamente, lo explica fielmente; y de este único depósito de la fe saca todo lo que propone como revelado por Dios para ser creído” ( Dei Verbum 10 ). SE 6 de 73
8. LIBROS DE LA BIBLIA, 2 Para acercarse a los libros de la Biblia, un lector de nuestro tiempo debe hacer el es- fuerzo de despojarse de la mentalidad pro- pia de nuestra cultura . Leer y escribir no eran actividades frecuentes en épocas históricas antiguas. El uso de la memoria tenía un papel importante en aque- llas primeras civilizaciones. La tradición oral precede siempre a la escritura y se mantiene como una realidad viva que afecta a los mismos textos durante el período de redacción. Los Evangelios , antes de ser puestos por escrito, fueron “ dichos ”: las primeras generaciones cristianas se sirvieron fundamentalmente de la enseñanza oral . SE 8 de 73
9. LIBROS DE LA BIBLIA, 3 Después del Exilio, el “resto” de Israel experi- menta la necesidad de “ hacer memoria ”, de reencontrar las raíces de su propia historia. Lo hace escuchando el “ libro de Moisés ”, que es la memoria de Israel puesta por escrito . La Escritura es el libro del pueblo de Dios surgido de la comunidad y dirigido a la comunidad, y conservado en ella, especialmente en los ámbitos de la familia , los santuarios y, más tarde, el Templo . En el NT , san Pablo cita ( 1 Tim 5, 18 ) a la vez como escritura , un texto del AT ( Dt 25, 4 ) y una frase de Jesús ( Lc 10, 7 ). San Pedro ( 2 P 3, 14-16 ) pone en el mismo plano las cartas de Pablo y el AT. La primitiva Iglesia tiene conciencia de tener en los Evangelios la definitiva Palabra de Dios. SE 9 de 73
10. LIBROS DE LA BIBLIA, 4 En su intento de explicar cómo se han formado los libros del AT , los exegetas han desarrollado unas hipótesis que siguen siendo un problema debatido y que están abiertas a nuevos descubrimientos y conclusiones. Según ellas, la formación de los libros sería el re- sultado de unas “tradiciones” orales que más tarde se recogen en diversa medida en textos. El contenido primordial de esas tradicio- nes es la historia del pueblo elegido en diferentes etapas . 1) Etapa patriarcal : La primera parte de la historia de Israel está ligada a tres generacio- nes de patriarcas arameos (Abrahán, Isaac y Jacob) y se desarrolla en el siglo XX a. C. Son los primeros personajes “ históricos ” de la Biblia. Esperanza en las promesas divinas de una tierra y una descendencia numerosa. SE 10 de 73
11. LIBROS DE LA BIBLIA, 5 2) Etapa mosaica : entre los años 1250-1200 a. C. Los libros del Éxodo, Levítico, Número y Deuteronomio narran las vicisitudes de los descendientes de Jacob-Israel, que pasan de la esclavitud en Egipto a convertirse en el Pueblo de Dios , con la mediación proféti- ca de Moisés. Yahvé se presenta a sí mismo como quien libera y salva . Es una liberación que apunta a una alianza . Código moral del Decálogo . 3) Etapa de la Monarquía : años 1000-587 a. C. A la muerte de Salomón, separación de las tribus del Norte y del Sur. Caída del Norte en el 722, y del Sur en el 587. Tradición yahvista (J) en el Sur (s. IX) y elohista (E) en el Norte (siglo VIII). Con la caída del Norte los documentos elohistas serán trasladados a Jerusalén. SE 11 de 73
12. LIBROS DE LA BIBLIA, 6 3) ( sigue ) En el año 612 (en el Sur, rey Josías), se descubre en el Templo de Jerusalén, el rollo de la ley . Tradición deuteronómica (D). Deute- ronomio (discursos de Moisés dirigidos al pue- blo), Josué, Jueces, los dos de Samuel y los dos de Reyes. 4) Etapa del Exilio : en el año 587 cae Jerusalén en poder de los babilonios. Época de los libros de Ezequiel y el Segundo Isaías. Aparece la tradición sacerdotal (P): Levítico, mitad del Éxodo, dos terceras partes de Números, quinta parte del Génesis. Idea de fondo: la Alianza santa (desde Moisés a Ezequiel, pasando por los profetas de este período), que expresa la naturaleza de las rela- ciones entre Yahvé y su pueblo. SE 12 de 73
13. LIBROS DE LA BIBLIA, 7 5) Etapa del judaísmo : sólo vuelven a Jerusalén y a la tierra prometida un “resto” de los descendientes de Judá , gracias al decreto liberador del rey persa Ciro. Período persa (538-333 a. C): redacción definitiva del Pentateuco. Se busca ayudar a vivir conforme al “ espíritu sapiencial ”: Jonás, Rut, Cantar de los Cantares, Proverbios, Eclesiastés, Job, Tobías. Período helenístico (333-63 a. C): Crónicas, Esdras y Nehemías. Últimos toques a los Salmos. Período macabeo (hacia el 175 a. C): Macabeos, Daniel. Libro más reciente : Sabiduría (siglo I a. C). SE 13 de 73
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15. INTEGRIDAD, 1 Todo lenguaje humano está siempre impregnado en una determinada cultura . En la exégesis, el conoci- miento de las lenguas originales de los escritos bí- blicos es insustituible para entender el pensamiento divino tal como Dios quiso expresarlo en nuestro lenguaje humano. Libros del AT escritos en tres lenguas: la mayor parte, en hebreo ; unos fragmentos en arameo ; dos en griego (Sabiduría y 2 Macabeos). Traducción griega de un original semita (hebreo o arameo): Tobías, Judit, fragmentos de Daniel. Versión griega de un original hebreo : 1 Macabeos; Eclesiástico (descubierto la mayor parte del hebreo hace unos sesenta años). SE 15 de 73
16. INTEGRIDAD, 2 Salvo el original arameo de San Mateo, todo el NT fue escrito en griego popular (la koiné ). La koiné del NT está llena de semitismos por el influjo de la lengua y mentalidad de sus autores. Además los antiguos copistas ignoraban las separaciones entre palabras y no usaban puntuación alguna. No contribuye a una fácil transmisión de los textos. El espíritu griego es lógico (definir) y no se cansa de mirar y explo- rar (órgano corporal: el ojo ); el hebreo es dinámico (conocer es expe- rimentar) y escucha a Dios que habla a través de la historia (órgano: el oído ). Categoría cultural de referencia para el griego es el univer- so ( kosmos ) como un todo ordenado; para el hebreo es el tiempo (historia en la que Dios actúa). Griego reflexiona, hebreo obedece. SE 16 de 73
17. INTEGRIDAD, 3 El papiro fue importado de Egipto a Palestina y se convierte en material ordinario de escritura para el antiguo Israel. En el siglo II a. C, los hebreos conocen, a través de los persas, un material más consistente de piel curtida y pulida, el pergamino (hacia el año 100 a. C, se perfeccionó en la ciudad de Pérgamo). Con estos soportes materiales tan deleznables se han perdido los originales . La distancia entre la redacción y el primer manuscrito conocido de cualquier otro texto antiguo es enorme: 1400 años para Sófocles, Esquilo, Aristófanes y Tucídides; 1600 para Eurípides; 1300 para Platón, 1200 para Demóstenes. Hasta siglo XX: manuscritos del AT más antiguos eran del siglo X d. C. En 1896, se descubren manuscritos de siglos VI-VII d. C. Entre 1947 y 1956 se descubren manuscritos de siglos II a. C - I d. C. SE 17 de 73
18. INTEGRIDAD, 4 NT : más de 5000 manuscritos griegos : el papiro más antiguo es el de Rylands , antes del año 125 (Fragmen- to del Evangelio de San Juan ). Más importantes códices : el Vaticano (B), siglo IV, pergamino, AT y NT; el Sinaítico (S) siglo IV, descubierto en un monasterio del Sinaí, conservado en el Museo Británico, AT y NT; el Alejandrino (A), siglo V, Museo Británico, AT y NT; el Códice de Efrén (C), siglo V, AT y NT con algunas lagunas, conservado en la Biblioteca de París. Tres períodos de la historia del texto del AT : hasta siglo I a. C, fluctuaciones (accidentales, no afectan la substancia); entre I a. C y VI d. C, fijación de las consonantes ; entre VI y X d. C. fijación de las vocales . SE 18 de 73
19. INTEGRIDAD, 5 Texto masorético : el que conocemos actualmente. Tras la invención de la imprenta (1445), se fijó tipográficamente hasta nuestros días. Primera edición católica: la incluida en la Biblia Políglota Complu- tense (Cisneros, 1520). Transmisión del texto griego del NT : directa- mente (códices y papiros) e indirectamente (citas de los Santos Padres y de los escritores eclesiásticos). Más de 5000 manuscritos grie- gos, más de 10000 versiones antiguas, miles de citas. Numerosas variantes . Necesidad de la crítica textual. SE 19 de 73
20. INTEGRIDAD, 6 La crítica textual es la disciplina científica que reconstruye el texto original a partir de las fuentes documentales disponibles. Los criterios seguidos para identificar el texto del NT más fiel al original son tres. Criterio geográfico : si una transcripción es idéntica en varios sitios , será la variante preferible. Criterio genealógico : Si podemos demostrar que una variante ha dado lugar a las otras, aquella es la variante original. Criterio literario-estilístico : se retiene como auténti- ca la variante más próxima al estilo, intención y con- tenidos teológicos del autor sagrado (hagiógrafo). SE 20 de 73
21. INTEGRIDAD, 7 Viejas traducciones permiten reconstruir en cierta medida los textos que utilizaron los traductores y que a menudo son más antiguos que los que con- servamos en la lengua original. La más célebre ver- sión griega del AT es la de los Setenta (LXX), he- cha en Egipto en los siglos III-II a. C . Nada más aparecer los textos del NT , se hicieron numerosas tra- ducciones a otras lenguas, sobre todo en siríaco y en latín . Traducción latina AT y NT de San Jerónimo (347-420): la Vulgata . Pablo VI instituyó la Pontifica Comisión para la Neovulgata , edi- ción latina promulgada por Juan Pablo II en 1979 , que tiene en cuenta el progreso de los estudios más recientes. SE 21 de 73
22. INSPIRACIÓN, 1 Cuando se dice que los libros bíblicos son inspirados se quiere expresar que a través de unas palabras humanas nos llega la misma Palabra de Dios . La Biblia es un libro divino “único” y, a la vez , un libro humano “como todos” los demás. Saber que Dios “escribió” la Biblia determina necesariamente un modo de leerla, estudiarla y meditarla del todo singular : se trata de alcanzar algo que procede de Dios y supera toda capacidad humana. Los libros de la Biblia, “la Iglesia los tiene por sagrados y canónicos (...) porque, escritos bajo la inspiración del Espíritu Santo , tienen a Dios por autor y como tales han sido entregados a la Iglesia” ( Dei Filius, c. 2 ). SE 22 de 73
23. INSPIRACIÓN, 2 La Iglesia ha tenido siempre la inspiración bíblica como una verdad de fe . El Magisterio encuentra su más sólido fundamento en el testi- monio de la propia Escritura y en el de los Santos Padres . En tiempo de Jesús, el pueblo judío reconocía unánimemente el va- lor sagrado de los libros del AT. Jesús reafirmó la autoridad divina de la Sagrada Escritura y su carácter inspirado ( Mt 5, 18 ; Lc 24, 44 ). NT : “Toda escritura divinamente inspirada es útil para enseñar, para argüir, para corregir, para educar en la justicia” ( 2 Tim 3, 16 ); “Ninguna profecía de la Escri- tura es de interpretación particular, pues la profecía no ha sido proferida en los tiempos pasados por volun- tad humana, antes bien, movidos por el Espíritu Santo , hablaron de parte de Dios los hombres” ( 2 P 1, 20-21 ). SE 23 de 73
24. INSPIRACIÓN, 3 Los Santos Padres , desde la época apostólica, afirman unánimemente la fe de la Iglesia en el origen divino de la Biblia. Sostuvieron que Dios es el autor de ambos Testa- mentos ( contra las herejías dualistas: gnosticismo y maniqueísmo, que contraponían AT y NT). Según ellos, los autores humanos colaboran con Dios, como el instru- mento “colabora” con el músico. Dios se deja condicionar por el ha- giógrafo en cuanto es un hombre. También toman la imagen del men- saje: el autor sagrado es equiparado a un mensajero , como embajador que tiene que memorizar, no como simple “correo”. Otra imagen: el dictado ( primacía de la actividad divina, pero reduce al hombre a mero escribiente, cosa que no es de ningún modo el hagiógrafo). SE 24 de 73
25. INSPIRACIÓN, 4 La inspiración bíblica es un carisma (gracia sobrenatural) dado por Dios a ciertos hombres, para consignar por escrito todo y sólo lo que Dios quiere comunicar a los hombres. Es sobre- natural por su origen , su contenido y su fin (santificación y salvación). “ En la composición de los libros sagrados, Dios se valió de hombres elegidos, que usaban de todas sus facultades y talentos; de este mo- do obrando Dios en ellos y por ellos, como verdaderos autores, pu- sieron por escrito todo y sólo lo que Dios quería” ( Dei Verbum 11 ). Dios es el autor principal , los hagiógrafos son también verdaderos autores, aunque secundarios . Sus facultades no están anuladas por la acción de Dios. SE 25 de 73
26. INSPIRACIÓN, 5 Teoría de la causalidad instrumental En todo instrumento puede distinguirse una doble acción: la especí- ficamente suya , y la acción instrumental en virtud del agente que lo utilice. Tanto el agente como el instrumento intervienen en toda la acción y dejan su impronta. El libro sagrado se ha de atribuir todo él y todas sus partes a Dios como autor principal y al autor sagrado como autor instrumental. El hagiógrafo sigue actuando como un ser vivo, inteligente y libre . Dios interviene dando luz en el entendimiento, moción en la voluntad. La asistencia divina perdura mientras se está realizando el trabajo literario, cesando en el momento en que el libro está acabado. Es la Iglesia quien tiene la misión de reconocer los libros inspirados. SE 26 de 73
27. INSPIRACIÓN, 6 Teoría de la obra literaria La creación de una obra literaria se puede resumir en tres tiempos: experiencia, intuición y expresión. La materia proviene de una experiencia o conjunto de experiencias. No forma parte todavía del proceso creativo propiamente dicho, y por tanto, no cae necesariamente bajo la inspiración divina. Dado que la intuición es el verdadero punto de arranque de la obra, en los autores sagrados se produce bajo el impulso del Espíritu . El momento de la expresión es creativo y se desarrolla totalmente bajo la acción del Espíritu Santo . SE 27 de 73
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29. INSPIRACIÓN, 8 “ Como todo lo que afirman los hagiógrafos, o autores inspirados, lo afirma el Espíritu Santo , se sigue que los libros sagrados enseñan sóli- damente, fielmente y sin error la verdad que Dios hizo consignar en dichos libros para salva- ción nuestra” ( Dei Verbum 11 ). Las enseñanzas bíblicas no sólo son humanas, sino Pala- bra de Dios . Este es el motivo por el que la Iglesia cree que lo enseñado en la Biblia es verdad . La verdad de la Biblia deriva de la veracidad de Dios, quien la ha inspira- do como autor principal . SE 29 de 73
30. INSPIRACIÓN, 9 La veracidad de los libros sagrados, cuando es contemplada como ausencia de error, se denomina inerrancia bíblica . No pueden separarse en los libros bíblicos partes atribuibles a Dios y partes atribuibles al hombre, sino que todo es, al mismo tiempo , Palabra de Dios y lenguaje humano. Ni concordismo (datos de acuerdo con la ciencia), ni inerrancia sólo en la fe y la moral . “ Los libros sagrados enseñan sólidamente, con fidelidad y sin error la verdad que Dios hizo consignar en dichos libros para salvación nues- tra ” ( Dei Verbum 11 ). No se trata de una verdad científica, sino salvífica , ordenada a la salvación. SE 30 de 73
31. INSPIRACIÓN, 10 San Agustín : “No leemos en el Evangelio que el Señor haya dicho: ‘Os envío al Paráclito, que os enseñará el curso del sol y de la luna’. Cristo quería hacer cris- tianos no matemáticos” ( De Ge- nesi ad litteram, 2, 9, 20 ). SE 31 de 73
32. CANON, 1 La palabra canon se deriva del griego kanon que significa “tallo de caña”, con el que se medían las longitudes. Pasó a significar me- dida, regla. Posteriormente pasó a usarse pa- ra indicar “ley” o “ norma ”. Los libros sagrados se llaman canónicos porque son el canon o “ regla” de la verdad revelada por Dios. Guiada por el Espíritu Santo y a la luz de la Tradición , la Iglesia ha discernido los escritos que deben ser conservados como Sagrada Escritura. La canonicidad de un libro supone su inspiración : es canónico por- que es inspirado, y no al revés. SE 32 de 73
33. CANON, 2 Se conoce por canon bíblico el conjunto de todos los escritos de la Biblia, y que, por su origen divino , constituyen la regla de fe y costumbres. Es el catálogo completo de los escritos inspirados . A la mayoría de los libros de la Biblia se les denomina protoca- nónicos , porque siempre y en todas las comunidades cristianas fueron tenidos por inspirados. Se les distinguen de unos pocos (7 en cada Testamento) que se llaman deuterocanónicos . Esta terminología se debe a Sixto de Siena (1569). Esta división no significa establecer una diferencia en la dignidad y autoridad de los libros sagrados: todos son igualmen- te inspirados. SE 33 de 73
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35. CANON, 4 Después de la destrucción de Jerusalén y del Templo (70 d. C.) y del fin del sacerdocio levítico, los fari- seos llegaron a tener una hegemonía absoluta. Fueron ellos quienes excluyeron algunos libros del canon. Los excluyeron porque argumentaban que un libro sagrado debe estar escrito en hebreo y sobre el suelo de Palestina . Parece que los verdaderos motivos fueron la hostilidad de los fari- seos a la dinastía de los Macabeos , y las controversias con los cristianos , rechazando la versión alejandrina de los LXX que la Iglesia usaba. La decisión oficial vino en el Sínodo de Yamnia por los años 95-100 d. C, que sacó del canon estos siete libros sagrados. En la Iglesia la fijación del canon del AT aparece en el siglo IV . SE 35 de 73
36. CANON, 5 Los libros del NT se escribieron entre los años 50 y 100 de nuestra era. Canon : tradición constante y firme. Después de la muerte del último apóstol, san Juan, cesó toda revelación pública y no aparece ya ningún otro libro inspirado o canónico. En Roma: Canon de Muratori , de fines del siglo II. Entre los siglos III al V surgieron dudas limitadas geográficamente sobre la inspiración de Hebreos, Apocalipsis, Santiago, 2 Pedro, 2 y 3 Juan, Judas. Son los libros deuterocanónicos del NT. No son dudas importantes en número y referidas a los mismos libros, sino que, unas veces , se refieren a un escrito y, otras veces , a otro. Hay que considerar las dificultades de comunicación de la época. Tam- bién influyó la difusión de libros apócrifos por los herejes . SE 36 de 73
37. CANON, 6 Además son numerosos ya los escritores que explícitamente reco- nocen la canonicidad de todos los libros del NT, incluidos los deuterocanónicos, como Clemente de Alejandría, san Ambrosio, san Agustín, san Jerónimo, etc. En occidente , los sínodos de Hipona y Cartago, y la Carta del Papa Inocencio I al Obispo de Tolosa (405), señalaron definitivamente con su autoridad el canon bíblico. En oriente , ya están todos los li- bros del NT en una Epístola de san Atanasio (367). En el año 450, unanimidad acerca del canon. Ratificado en los concilios de Florencia (siglo XV), Trento (siglo XVI), Vaticano I (1870) y Vaticano II. SE 37 de 73
38. CANON, 7 Criterios católicos de canonicidad de los libros del NT: el origen apostólico (apóstoles y sus colaboradores), la ortodoxia (confor- midad con el auténtico anuncio acerca de Cristo, de su vida y de su mensaje) y la catolicidad (los aceptados sólo por Iglesias aisla- das quedaron excluidos del canon). Al prescindir de la autoridad del Magisterio, los protestantes desarrollaron criterios subjetivos de canonicidad. Por ejemplo Lutero clasificaba los libros del NT según la importancia que dan al mis- terio de la Redención y la concordia que guardan con la tesis luterana de la “ justificación por la sola fe ”. Por este motivo rechazó la Carta a los Hebreos, la de Santiago, la de Judas y el Apocalipsis. SE 38 de 73
39. CANON, 8 Se llama apócrifo a un libro de autor desconocido, que tiene cierta afinidad con los libros sagrados en el argu- mento o en el título, pero al que la Iglesia no reconoció jamás autoridad canónica por no ser inspirado . Hay apócrifos del AT y del NT. Se clasifican en evangelios, cartas, libros proféticos, apocalipsis, etc. En su sentido primitivo significa “libros ocultos o secretos”. En la primitiva Iglesia, durante el conflicto con los herejes, especialmente los gnósticos, el término se convirtió en sinó- nimo de “ herético ”. Apareció por vez primera, con su signifi- cado actual , en tiempos de San Ireneo . En suma, el término apócrifo recogido por los católicos se refiere a la literatura judía y cristiana extrabíblica . SE 39 de 73
40. SANTIDAD Y UNIDAD, 1 Las Escrituras son santas por un triple motivo: por su origen divino (inspiradas por el Espíritu Santo); por su contenido (doctrina moral santa e intachable); por su fin (nos santifican al encauzarnos a la santi- dad). La Biblia, por tanto, exige ser leída, estudiada y meditada como algo santo y sagrado . La santidad de la Biblia se manifiesta en la conformidad con la ley moral de los juicios (explícitos o implícitos) que se emiten sobre actos, palabras y sentimientos de los personajes y hechos que presenta. Se puede afirmar una mayor perfección moral del NT sobre el AT, por tratarse del régimen definitivo de la ley evangélica. SE 40 de 73
41. SANTIDAD Y UNIDAD, 2 En el AT la gracia que salva venía figurada con he- chos y prometida con palabras, de modo que los justos podían alcanzarla por la fe en las promesas reveladas que anunciaban la venida del Redentor. En el NT , Dios facilita la gracia de un modo más perfecto y abundante, y con la gracia, la posibilidad de la salvación mediante la institución de la Iglesia . Jesús perfeccionó los preceptos morales del AT: 1) declarando su verdadero sentido (caben bajo la prohibición los actos interiores pecaminosos), 2) ordenando el mejor modo de cumplirlos (ej.: evitar todo juramento salvo en caso de necesidad, no sólo no perjurarse), 3) añadiendo ciertos consejos de mayor santidad (ej.: amor a los enemigos). SE 41 de 73
42. SANTIDAD Y UNIDAD, 3 Dios, Autor principal de la Biblia, Sabiduría infinita, en quien no puede darse ninguna contradicción, hace que los escritores sa- grados enseñen la misma verdad. Por eso, la Sagrada Escritura, más que un conjunto de obras distintas, es propiamente un libro. “ El NT está oculto en el Antiguo y el Antiguo patente en el Nuevo” ( San Agustín ). Entre ambos Testamentos no puede darse oposición o ruptura. Se da una cierta “ subordinación ” del AT al NT, por- que éste revela de modo explícito y contiene real- mente lo que en el AT está figurado y en promesas; y una cierta “ discontinuidad ” porque en el NT apare- cen “novedades” ignoradas por el AT (ej.: sacerdocio de la Nueva Ley). SE 42 de 73
43. SANTIDAD Y UNIDAD, 4 La unidad de la Escritura se aprecia por los contenidos de uno y otro Testamento. Se descubre, por una parte, al analizar el desi- gnio salvífico divino: el mensaje bíblico de la Creación (AT) y de la Redención (NT) forma parte de un único proyecto , no sólo por ser respectivamente la etapa inicial y la culminación de este pro- yecto, sino porque a la luz del NT se insinúa en el AT la acción del Hijo y del Espíritu Santo en la Creación; y, al revés, el NT nos revela la Redención como una “ nueva Creación ”. Por otra parte, se percibe también esta unidad porque presentan al mismo y único Dios: en el AT se revela como Uno , y en el NT como Uno y Trino . SE 43 de 73
44. SANTIDAD Y UNIDAD, 5 Las palabras y los hechos del AT están presentes en el NT. Palabras: promesa-cumplimiento Primera promesa de salvación: protoevangelio . Promesas hechas a los Patriarcas . Promesas he- chas al pueblo de Israel y recogidas por Jesús en las Bienaventuranzas. Promesas mesiánicas (hijo de David, Emmanuel, Siervo doliente, Hijo del hombre). Se cumplen en Jesús . Textos proféticos que se refieren al envío del Espíritu Santo (Ez, Ier, Ps 3). Otras proclamaciones de la segunda venida de Cristo, que San Pedro presenta como cumplimiento de la promesa de restauración universal (Act 3, 19-21). SE 44 de 73
45. SANTIDAD Y UNIDAD, 6 Hechos: preparación-realización Holocaustos y sacrificios del AT figuraban la inmo- lación de Cristo. Circuncisión imagen del Bautismo. Purificaciones de la Ley preanunciaban el sacramen- to de la Penitencia. El sábado actualizado en la Nue- va Ley mediante el domingo. Pueblo de Israel prepa- ción de la Iglesia. Figuras de los sacramentos, como la Eucaristía prefigurada en el sacrificio (de pan y vino) de Melquisedec. Como las verdades que contiene la Biblia se ilustran e iluminan mu- tuamente, se da una perfecta armonía en todo el conjunto. Este prin- cipio “hermenéutico” (interpretativo) bíblico se conoce por analogía de la fe bíblica. Se reconoce la armonía a la luz de la Revelación plena de Dios en Cristo. SE 45 de 73
46. INTERPRETACIÓN, 1 Como Dios habla al hombre a la manera de los hombres , para una correcta interpretación de los textos sagrados, “es preciso estar atento a lo que los autores humanos quisieron verdaderamente afirmar y a lo que Dios quiso manifestarnos mediante sus pala- bras” ( CCE 109 ). “ Para descubrir la intención de los autores sagrados es preciso tener en cuenta las condiciones de su tiempo y de su cultura , los géneros literarios usados en aquella época, las maneras de sentir, de hablar y de narrar en aquel tiempo” ( CCE 110 ). SE 46 de 73
47. INTERPRETACIÓN, 2 Se llama hermenéutica (del griego ermeneuein , interpretar) al conjunto de principios y métodos de interpretación , que nos permiten entender con exactitud unos textos y sus contextos. Si no queremos reducir la Escritura a letra muer- ta, “se ha de leer e interpretar con el mismo Espíritu con que fue escrita” ( Dei Verbum 12 ). La docilidad al Espíritu Santo es el prólogo de toda correcta dispo- sición del intérprete humano, porque para hacer una lectura plena- mente válida de las palabras inspiradas, es precisa la guía y ayuda del Espíritu. Estos textos han sido confiados a la Iglesia para ali- mentar su fe y guiar su vida de caridad . Respetar esa finalidad . SE 47 de 73
48. INTERPRETACIÓN, 3 El misterio de la Encarnación del Verbo es el misterio de unión de lo divino y lo humano en Jesucristo. “ Al igual que la Palabra sustancial de Dios se hizo semejante a los hombres en to- do, excepto en el pecado , así las palabras de Dios expresadas en lenguas humanas, se han hecho en todo semejantes al lenguaje humano, salvo en el error ” ( Dei Verbum 13 ). Las verdades sobrenaturales no son asequibles sin la fe , pero son objetivas, reales, están ahí para todo hombre. Hay que leer e inter- pretar los textos sagrados con espíritu de fe (sino la investigación exegética queda incompleta, pierde de vista su finalidad y se limite a tareas secundarias) y humildad (se muestra en el acatamiento de lo que la Iglesia enseña). SE 48 de 73
49. INTERPRETACIÓN, 4 El método histórico-crítico estudia el texto bíblico de igual modo que cualquier otro texto de la antigüedad y lo comenta con lengua- je humano. Se dice histórico porque investiga su alcance histórico y procura dilucidar los procesos históricos de producción del texto bíblico. Se llama crítico porque actúa con la ayuda de criterios científicos tan objetivos como sea posible. Este método recorre varias etapas : la crítica textual , el análisis literario (morfológico y sintáctico) y se- miántico (filología histórica), la crítica literaria (co- herencia interna de los textos), la crítica de los géne- ros , la crítica de las tradiciones (y su evolución en el curso de la historia), y la crítica de la redacción (modificaciones de los textos antes de quedar fijados). SE 49 de 73
50. INTERPRETACIÓN, 5 Los sentidos de la Escritura santa, 1 Sentido literal : aquel que ha sido expresado directamente por los autores humanos inspirados. Siendo inspirados, ese sentido es sin duda querido por Dios , autor principal. Para obtenerlo es preciso comprenderlo según las normas literarias de su tiempo. Sentido espiritual : el expresado por los textos bíblicos cuando se los lee bajo la influencia del Espíritu Santo en el contexto del misterio pascual de Cristo y de la vida nueva que proviene de Él. El NT reco- noce en Jesucristo el cumplimiento de las Escrituras. Por eso, es normal “ releer ” las Escrituras a la luz de este nuevo contexto. Por ejemplo David es tipo o figura de Jesucristo. No siempre hay distinción entre sentido literal y espiritual, sobre todo cuando un texto se refiere directamente al misterio pascual de Cristo. SE 50 de 73
51. INTERPRETACIÓN, 6 Los sentidos de la Escritura santa, 2 Sentido pleno : es un sentido profundo del texto, querido por Dios, pero no claramente expresado por el autor humano. Se descubre a la luz de otros textos bíblicos que lo utilizan. El Espíritu Santo , autor principal de la Biblia, puede guiar al autor humano en la elección de sus expresiones de tal modo que ellas expresen una verdad de la cual él no percibe toda su profundidad. Ejemplo : Isaías anuncia al Mesías con el título ” Dios-con-nosotros” (Emmanuel), del que descri- be su misión salvífica (sentido literal ). San Mateo nos confirma que se trata de Jesucristo (sentido espiritual ). El cumplimiento de la profecía rebasa con creces el anuncio: el “Dios-con-nosotros” es “Dios hecho hombre” (sentido pleno ). SE 51 de 73
52. INTERPRETACIÓN, 7 La palabra bíblica se dirige universalmente, en el tiempo y en el espacio , a toda la hu- manidad. Actualizar su mensaje supone: traducir su lenguaje al nuestro y actualizarlo a nuestro tiempo. Gracias a la actualización, la Biblia ilumina con su mensaje múltiples problemas actuales : fundamentos de la moral cristiana, la defensa de la vida humana , la naturaleza del matrimonio , las cuestiones de ética sexual , el valor santificador y santificante del trabajo , etc. Presta también un gran servicio a valores reconocidos por la cultura moder- na , como los derechos humanos, la protección de los más débiles, la aspiración a la paz, etc. El peligro a todo intento de actualizar es la “ manipulación ” de los textos bíblicos. Guía del Magisterio . SE 52 de 73
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54. INTERPRETACIÓN, 9 Los exegetas han de escuchar las reflexiones y palabras de los santos para descubrir el mensaje de la Biblia. En nuestro tiempo, se dan dos enfoques de interpretación defectuosos : hipercrítico y fundamentalista. El hipercrítico convierte la tarea exegética (crítica textual, estudios lingüístico, análisis literarios, etc.) en un fin . Los enfoques fundamentalistas , aunque movidos por la fidelidad a la Palabra de Dios, menosprecian los trabajos de los exegetas y pretenden convertir a estos estudiosos en simples traductores . No ven que Jesu- cristo se ha encarnado en una época precisa de la his- toria, en un medio social y cultural concreto . SE 54 de 73
55. ANTIGUA ALIANZA, 1 Los libros del AT, divinamente inspirados , con- servan un valor permanente . Nos transmiten en- señanzas sublimes sobre Dios , una sabiduría sal- vadora acerca del hombre y esconden el misterio de nuestra salvación . Los cristianos veneramos el AT como verdadera Palabra de Dios . Principales claves del AT para la preparación evangélica : la elección, las promesas, la alianza y la Ley, hilos que se entrecruzan en la trama del Pentateuco y que atraviesan todo el AT. Por otra parte, la tierra prometida, la monarquía, la construcción del Templo y los profetas, nuevos hilos en la trama de las narraciones de los de- más libros históricos y proféticos del AT. Finalmente, los libros sa- pienciales vienen a enriquecer y completar la preparación evangélica. SE 55 de 73
56. ANTIGUA ALIANZA, 2 Yahvé, el Dios uno y único, actúa en la historia humana eligiendo a un pueblo para ser instrumento de salvación de los demás pueblos. Elección de Noé, Abraham, todo el pueblo de Israel bajo la media- ción de otro elegido, Moisés. Tal elección llega a su plenitud en Jesucristo -su Hijo amado, el Elegido- y en la Iglesia , nuevo pueblo de Dios. La elección va acompañada de las promesas . Desde los orígenes, a todos los descendientes de Adán les promete la liberación y la victoria frente al mal. Después a Noé, un nuevo orden en el mundo. A los Patriarcas y al Pueblo conducido por Moisés, la Tierra Prometida . Israel ha recibido la Promesa, que encontrará su cumplimiento definitivo en Cristo . SE 56 de 73
57. ANTIGUA ALIANZA, 3 La elección y las promesas están garantizadas y ratificadas por una Alianza . Israel será el pueblo de la Alianza. No es un pacto entre iguales : Dios no lo necesita y toma la iniciativa. Pero se compro- mete por un pacto en el que exige como contrapartida la fidelidad de su pueblo. Los profetas anunciarán una nueva alianza, que culminará en Jesús de Nazaret. La Alianza lleva consigo la Ley : normativa que el pueblo ha de cumplir para mantener su pacto con Dios. El monoteísmo será la primera verdad de la fe de Israel. La Ley (Pentateuco) no tiene sólo su aspecto de norma, sino también el de “ intervención salvadora de Dios”. SE 57 de 73
58. ANTIGUA ALIANZA, 4 Después de Moisés, también historia salvífica . Contada en los libros históricos, desde Josué hasta los Macabeos, es una historia santa, mar- cada por la continua intervención de Dios en las vicisitudes de su pueblo. Es historia sagrada . En la historia de la salvación, Dios toma siempre la iniciativa para llamar o elegir a los hombres que van a colaborar en sus designios. Yahvé es el rey de su pueblo. Ya asentado en la tierra de Canaán, el pueblo, por influjo de los pueblos vecinos, desea tener un rey. Yahvé le hace ver los inconvenientes de la Monarquía. No cambian de parecer y Dios accede a su petición. El rey será un “lugarte- niente” de Dios. Como Ungido de Yahvé se convierte en una per- sona sagrada e inviolable. SE 58 de 73
59. ANTIGUA ALIANZA, 5 David será siempre recordado como el rey ideal de los israelitas. Sus sucesores serán los ungidos de Yahvé. David decide edificar un Templo a Yahvé y Dios le promete, a través del profeta Natán, que de su estirpe saldrá el Mesías . Salomón llevó a término el proyecto de su padre e inició la constru- cción del Templo hacia el año 970 a. C. Este Templo fue destruido por Nabucodonosor en el año 586 a, C. ( deportación a Babilonia). Después del destierro, reconstrucción más pobre que finaliza en el 515 a. C. Entre los años 20-19 a. C., Herodes el Grande inició las obras de reconstrucción parcial y embellecimiento del Templo. En el año 70 de nuestra era, fue completamente destruido por Tito. SE 59 de 73
60. ANTIGUA ALIANZA, 6 Los profetas , movidos por el Espíritu de Yahvé, se enfrentaron mu- chas veces contra la infidelidad de los reyes, con duras amenazas . Sus predicciones se cumplieron, y los reyes de Israel (Reino del Norte) y de Judá (Reino del Sur) serán deportados y el pueblo exi- liado . Los profetas dejaron entrever siempre la luz de una esperanza de salvación y presentan la futura venida de un nuevo Reino de Dios. El mesianismo surge en el seno del judaísmo: a partir del Exilio , los escritores “releyeron” textos anteriores en sentido mesiánico. Entre los católi- cos y judíos actuales, se admite la promesa me- siánica ya desde la profecía de Natán a David, hacia el año 1000 a. C. Se considera que el me- sianismo es la columna vertebral del AT. SE 60 de 73
61. ANTIGUA ALIANZA, 7 Los libros del AT que los judíos llamaron Escritos o Ketubim , y que nosotros llamamos sapienciales , vienen a completar la prepa- ración de la llegada del Evangelio. Desarrollan los contenidos de la recta conducta del hombre ante Dios y con los demás hombres, no ya como normas morales, sino como reflexiones religiosas . En el libro del Sirácida ( Eclesiástico ) se identifica Ley y Sabiduría: la Ley es la plenitud de la Sabiduría. El sabio no extrae ya su doctrina de la experiencia y observación cotidianas, sino de los textos sagrados del AT. Se entiende la sabiduría tanto como cualidad sobrenatu- ral como cualidad natural : instrumento idóneo de Israel para el diálogo con los gentiles . SE 61 de 73
62. NUEVA ALIANZA, 1 Toda la historia bíblica es una historia de salvación . El mensaje de salvación en Jesucristo llega gradualmente a través de la Antigua Alianza: el AT es preparación evangélica . El NT nos ofrece la verdad definitiva de la revelación divina. Tiene como argumento central a Jesucristo y el inicio de la Iglesia bajo el impulso y acción del Espíritu Santo . Las promesas del AT se han cumplido en y por Cristo y sobrepasan “la posesión de la tierra” para apuntar al Reino de Dios en el NT. El Reino ha venido con Cristo. Los efectos de la Nueva Alianza son muy superiores a los de la Antigua. Dios habita entre los hombres y pone en sus cora- zones su espíritu . Alcanza a todas las naciones. SE 62 de 73
63. NUEVA ALIANZA, 2 Se revela la Nueva Ley : Ley de Cristo, ley de liber- tad, ley de la caridad, inscrita en el corazón del hombre por el Espíritu Santo . La ley mosaica es el pedagogo que nos lleva a Cristo. El antiguo pueblo de Dios será sustituido por el nuevo, la Iglesia de Jesucristo. El Reino de Dios se incoa con la primera venida de Cristo en la humildad de la carne, con la que se realiza la Redención del género humano, y se instaurará definitivamente tras su segunda venida o Parusía . Jesucristo es el Mesías anunciado por los profetas. Dios concreta las promesas en David y sus descendientes: el Hijo de David será el Mesías ( Ungido de Yahvé), el Libertador, el Redentor . SE 63 de 73
64. NUEVA ALIANZA, 3 Los Evangelios son el corazón de todas las Escritu- ras. A los tres primeros (Mt, Mc, Lc) se les llama sinópticos (griego: sinopsis ) porque se pueden abar- car con una sola mirada. La palabra evangelio es transliteración del griego euangelion , que significa Buena Noticia y hace referencia a las promesas del AT cumplidas en Jesús de Nazaret. Jesús tiene un conocimiento de los misterios de Dios, del modo de actuar divino , del Reino de los Cielos y del más allá , como nadie antes lo había manifestado. Se atribuye poderes y cualidades y exi- ge de los hombres una adhesión a sí mismo que son sólo propios de Dios . Da explicaciones de la Ley de Moisés con la misma auto- ridad de Yahvé , aclarando el verdadero espíritu de ésta. SE 64 de 73
65. NUEVA ALIANZA, 4 Jesús va corroborando sus enseñanzas y la veracidad de cuanto dice con muchos milagros . Elige a sus doce apóstoles y les explica con mas detenimiento su doctrina y la significación de muchos de sus hechos. A partir de la confesión de San Pedro en Cesarea de Filipo el relato se centra en el camino que Jesús recorre hasta su Muerte en Jerusalén y su Resurrección , episodios más sobresalientes del final de la vida de Jesucristo. Envío de los Apóstoles a evangelizar. El libro de los Hechos presenta la salvación en Jesucristo a través de la Iglesia . Ésta es católica (universal) desde su nacimiento. Lucas nos ofre- ce el panorama de la vida naciente de la Iglesia como instrumento universal de salvación . SE 65 de 73
66. NUEVA ALIANZA, 5 Pablo pertenece a dos mundos: el griego y el judío. La fe en Cristo muerto y resucitado, como único camino de salvación, es en las “ Grandes Epístolas ” (Gal, 1 y 2 Cor, Rm) tema de confrontación con las otras dos vías salvíficas propuestas hasta entonces: la Ley de los judíos y la Sabiduría de los griegos. Las “ Cartas de la Cau- tividad ” (Fil, Filemón, Col, Ef) profundizan en el ser de Jesús: su existencia divina eterna, su venida al mundo, su humillación hasta la muerte en la cruz, su exaltación como Señor, su mediación en la obra de la creación y salvación, y la comunidad de salvación, la Iglesia. La noción de salvación es fundamental en las “ Cartas Pasto- rales ” (1 y 2 Tim y Tito). A Dios se le nombra como el Sal- vador que quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad. SE 66 de 73
67. NUEVA ALIANZA, 6 Las “ Cartas Católicas ” (Sant, 1 y 2 P, 1, 2 y 3 Jn, Jud) son modelos de exhortación cristiana primitiva. Conte- nido: testimonio de fe y mensaje salvífico en un am- biente de creyentes; exhortación a la vigilancia ante las desviaciones doctrinales y morales; espera de la Venida del Señor. El Apocalipsis ilumina la figura de Jesucristo glorioso , de su Esposa, la Iglesia triunfante , y exhorta a la esperanza en la vida eterna . Recoge la tensión escatológica del NT y en parti- cular del corpus paulino, pero inserta en un nuevo género lite- rario, que se divulgó en los siglos que rodean la era cristiana. Juan califica a su libro como profecía : la historia se ve como una llamada a la conversión y a la esperanza . SE 67 de 73
68. VIDA DE LA IGLESIA, 1 En la vida de la Iglesia , la Biblia ocupa un lugar importantísimo . Son libros inspirados que recogen la Palabra de Dios , dirigida en el tiempo presente a la Iglesia y al mundo entero . La mayor parte de los problemas (teológicos, canónicos y bíblicos) que afronta el diálogo ecuménico se relaciona con la interpreta- ción de los textos bíblicos. La exégesis bíblica está llamada a contribuir de manera eficaz en la tarea ecuménica, aunque no pretende resolver por sí sola todos los problemas. SE 68 de 73
69. VIDA DE LA IGLESIA, 2 La liturgia es el lugar privilegiado, no el único, en el que los fieles se acercan a los Libros Sagrados. Desde los comienzos de la Iglesia su lectura ha formado parte de la liturgia cristiana. En la Santa Misa , la liturgia de la Palabra comprende “los escritos de los profetas” ( AT ), “las memorias de los apóstoles” (sus cartas ) y los Evangelios . En la liturgia Cristo está “presente en su palabra, porque es Él mismo quien habla cuando las Sa- gradas Escrituras son leídas en la Iglesia ” ( Sa- crosanctum Concilium 7 ). El Salterio es el libro en el que la Palabra de Dios se convierte en oración del hombre. Li- turgia de las Horas . SE 69 de 73
70. VIDA DE LA IGLESIA, 3 El estudio científico de la Biblia no puede aislar- se de la investigación teológica, ni de la expe- riencia espiritual, ni del discernimiento de la Iglesia. La Exégesis produce sus mejores frutos cuando se hace en el contexto de la fe viva de la comunidad cristiana, orientada hacia la salvación del mundo entero. La reflexión teológica es reflexión sobre el dato revelado , que se contiene en la gran Tradición de la Iglesia ( Escritura y tradición oral) custodiada por el Magisterio . En este sentido se dice que la Sagrada Escritura es el alma de la Teología. SE 70 de 73
71. VIDA DE LA IGLESIA, 4 La Lectio divina está testimoniada como práctica en el ambiente mo- nástico desde épocas muy tempranas. Se trata de la lectura , individual o comunitaria, de un pasaje de la Escritura, que se desarrolla luego ba- jo la moción del Espíritu Santo en oración , meditación y contempla- ción. En el pueblo cristiano han surgido a lo largo de los siglos nu- merosas iniciativas para una lectura individual y comunitaria. La enseñanza y explicación de la doctrina cristiana ( catequesis ) tiene como primera fuente la Sagrada Escritura. La presentación de los Evangelios debe hacerse de modo que provoque un encuentro con Cristo , que da la clave de toda la revelación bíblica y transmite la llamada de Dios, llamada de amor a la que cada uno debe responder personalmente . SE 71 de 73
72. VIDA DE LA IGLESIA, 5 La predicación sacerdotal no debe exponer la Pala- bra de Dios sólo de modo general y abstracto, sino aplicar a las circunstancias concretas de la vida la verdad perenne del Evangelio. Se trata de iluminar las lecturas bíblicas como Palabra de Dios . La Palabra de Dios trasciende las culturas en las cuales se expresa, y tiene la capacidad de propagarse en todas ellas, de modo que pueda llegar a todos los hombres y mujeres de todos los tiempos. La prime- ra etapa de la inculturación es la traducción a otra lengua de la Biblia. La luz de la Palabra de Dios permite seleccionar lo que aportan las culturas, para rechazar los elementos dañinos y favorecer el de- sarrollo de los aspectos válidos. SE 72 de 73
73. VIDA DE LA IGLESIA, 6 En la vida corriente de un cristiano, la Sagrada Escritura es un re- ferente fundamental , donde encuentra de modo vivo y verdadero al Dios en quien cree, para alimentar su vida espiritual. La Iglesia ha recomendado, siempre y con insistencia, a todos los bautizados la lectura frecuente de la Biblia para que adquieran la ciencia su- prema de Jesucristo, ya que desconocer la Escritura es desconocer a Cristo. “ Al abrir el Santo Evangelio, piensa que lo que allí se narra -obras y dichos de Cristo- no sólo has de saberlo, sino que has de vivirlo . (...) Toma el Evan- gelio a diario, y léelo y vívelo como norma concre- ta . - Así han procedido los santos” ( San Josemaría, Forja 754 ). SE 73 de 73 Resumen: Compendio del Catecismo, n. 6 - 24.