1. i
1_. _. .. 2--º2~~~_R_ .....
_ J--.
Prof ELSA STRAUSS CORTISSOZ
Psicóloga
Universidad del Valle
Gt-DICCION:
~1<ONTt;I~S
I asunto "drogas" y "drogadicción" nos presenta un panorama bastante confu-
so, desde el punto de vista de la conceptualización que se tiene sobre el
problema y el manejo ideológico y político, donde se fundamentan la interpre-
tación y el tratamiento de estos problemas. Con este artículo intentaré mostrar,
en qué consiste la confusión y cuáles son las fronteras que debemos estable-
cer, entre lo que corresponde, a las condiciones del sujeto y lo que se atribuye
al objeto droga.
Para lograr este objetivo, recurro a las propuestas formuladas por los
autores del interesante texto: Perspectives on the History of Psychoactive
Substance Use, publicado por NIDA (1972), quienes adelantaron un trabajo
de gran magnitud, tomando como base el recuento cronológico, sobre los
hechos políticos y legislativos, rastreados desde el Siglo XIII, hasta la dé-
cada de los 70s, y las acciones adelantadas por diversos Estados, para
ejercer un manejo y control de la producción, comercialización y consumo
de sustancias psicoactivas, que desde entonces han sido utilizadas con
diversos fines.
En la introducción de ese texto, los autores proponen que el producto
del estudio de la historia, debe contribuir a "distinguir entre los efectos
farmacológicos directos producidos por la sustancia y aquellos factores
externos, los cuales influyen en la experiencia individual con una droga, la
propagación de su uso y las respuestas sociales a ésto". Y también que:
"Puede ayudar a identificar qué cambios en la sociedad pueden influír en
modificar el uso de drogas, qué poblaciones son más susceptibles de ser
DATURA lo
atraídas por una sustancia y bajo qué condiciones; por qué ciertas drogas
D. ceratocaula Ilrt.
Solanaceae han afectado a diferentes sociedades de diferente manera, por qué se
Zonas tropicales y templado·cAlidas expande el uso en ciertos lugares y no en otros ..." ..."Posiblemente lo más
de ambos hemisferios
importante de la historia puede constituirse en una prueba crítica sobre
nuestros conceptos de realidad y sobre los presupuestos donde actualmen-
te se fundamentan las actitudes y políticas hacia el uso de drogas" (1).
REVISTA
COLOMBIANA
DE PSICOLOGIA 77
2. DOSSIER
I_i R~LAClON sanas se traslada (proyecta) al objeto, grupo estaban referidas al desplaza-
SUJ~TODROGA y ésto por varias razones. Existen es- miento de la compulsión, hacia con-
tudios, como los de Zsazz, Vera ductas socialmente aceptadas, tales
Ocampo, Clavrel, por mencionar sólo como la compulsión al trabajo, y de
La primera propuesta de los his-
algunos, que nos aproximan al cono- otra parte que, los que más tiempo
toriadores refiere a esta relación, al
cimiento del sujeto dependiente al habían permanecido abstemios, per-
preguntarse sobre los efectos farma-
consumo de psicoactivos, (-conoci- tenecían a los grupos de alcohólicos-
cológicos de las sustancias en el or-
miento que permanece en el ostracis- narcómanos anónimos, siempre den-
ganismo. Farmacólogos, Químicos y
mo-), no son consultados por los le- tro de la filosofía de ser eternamente
Psiquiatras, han dado buena cuenta
gisladores, ni por quienes gobiernan, enfermos. De esta manera los tera-
de tales efectos, aclarando que:
ni por los terapéutas que se vinculan péutas se convierten "en ser parte"
"Como no existe una línea definida de
a los servicios de tratamiento. El re- del asunto. Las preguntas que Clav-
demarcación entre los diferentes tipos
sultado de ello es la esterilidad en la reul formula al respecto, en cuanto al
de fármacos que poseen acción psi-
aplicación de las normas, por una par- paciente son: "¿puede acaso, y quie-
cotrópica, se han propuesto diferen-
te y por otra, el que los "especialistas" re (el paciente), encaminarse hacia la
tes sistemas para clasificarlos, algu-
se vean frustrados en su deseo de cu- curación, e incluso podemos nosotros
nos los relacionan con la estructura
química, otros con el uso terapéutico rar al adicto, porque el deseo de saber si es legítima su presencia en
y otros sistemas se basan en la acción "cura" sólo existe en el terapeuta y en nuestro consultorio?" (5). Mi expe-
farmacológica de los compuestos a los parientes del adicto. Cura que, riencia me indica que el 99% de los
nivel del Sistema Nervioso Central". para unos y otros, está en la abstinen- pacientes que llegan a tratamiento, lo
De acuerdo a esta acción central, las cia. Los terapéutas, la familia y los hacen por múltiples causas, pero no
drogas de abuso se clasifican en de- Centros de Rehabilitación están con- por iniciativa propia. Lo hacen por pre-
presoras y estimulantes ..." (2). Es de- denados al fracaso, al no traspasar la siones familiares, laborales y algunas
cir, de alguna manera, aunque no hay frontera del síntoma. La evaluación veces sociales. Generalmente quien
un acuerdo en cómo clasificarlas, ya sobre el éxito o fracaso en el trata- solicita la primera consulta es un fa-
hay una respuesta a la preocupación miento de pacientes adictos, en dos miliar, un amigo, un compañero de
de los autores, las sustancias psico- centros de rehabilitación de Cali, así trabajo e inclusive un jefe, preocupa-
trópicas o deprimen o estimulan el lo demuestra Strauss, E. y Col. dos, molestos y culpabilizados por la
SNC. Lo que no está resuelto y causa (1991), encontraron que de 164 pa- ruina psicológica y a veces física del
gran confusión es, por una parte, que cientes que ingresaron, a una de es- paciente, por su degradación como
la preocupación se centra en los efec- tas instituciones, el 51.8% se desvin- persona y por las "conductas irres-
tos de la "droga", y por la otra que se cularon de la institución antes de ponsables del adicto".
le atribuya ser la causa de los proble- cumplir un mes de tratamiento; el El paciente, como la familia, cen-
mas humanos. 28.7% desertó entre la segunda y ter- tran su discurso en el objeto "droga".
Tamayo Mesa, O., (1.984), se- cera etapa del programa de trata- El uno, en los efectos que de su ingesta
ñala que: "Los problemas humanos miento; y solamente el 19.5% finalizó deriva,la otra en las consecuencias
relacionados con el uso de las drogas el programa. De los 204 pacientes es- económicas y la vergüenza social.
con fines no médicos pueden surgir tudiados en la segunda institución, se El sujeto está ausente de la rela-
principalmente: De la interacción en- encontró que la deserción acumula- ción terapeuta - paciente, su "decisión"
tre el individuo y la droga, (por ejem- da, al final del período del estudio, que de asistir a tratamiento es un pretexto
plo, alteraciones del comportamiento duró seis meses, era de 161 pacien- para hacer una tregua con la familia,
o en otros aspectos de la Salud Men- tes (76%). Sólo el 0.98% (2) pacientes con la empresa, con la sociedad. Clav-
tal, intoxicaciones, accidentes, muer- permanecían en tratamiento al con- reul concluye al respecto con la pregun-
te por sobredosis, etc.)" (3). cluír el estudio. (4) Finalizar o mante- ta: ¿Qué es en efecto la decisión de no
Vera Ocampo, E. (1988), señala nerse en tratamiento, sin embargo, no beber más, -la cura de desintoxica-
que el "objeto droga" se ha convertido garantiza la "cura" del paciente, tal ción-, sino una retirada estratégica im-
en la "ruta principal", a lo cual yo agre- como lo encontramos en el estudio puesta por las circunstancias?
go, desde y hacia donde se orienta sobre las características estructurales La preocupación del paciente
cualquier tipo de explicación y justifi- y funcionales de pacientes en periodo respecto a su relación con la droga es
cación, para adoptar posiciones, dise- de abstinencia vs pacientes en trata- narcisista, frente a la posible ruina de
ñar tratamientos, programas de pre- miento. Este estudio nos arrojó datos su cuerpo. En el hay la ausencia de
vención, etc. Es decir, el signo ocupa interesantes, en tanto nos mostró, tiempo y de destino, el sujeto esta in-
el lugar del Sujeto. Un asunto de per- que las diferencias entre uno y otro capacitado para pensarse a sí mismo,
No. 4 AÑO MCMXCV
78 u. NACIONAL DE COLOMBIA
BOGOTA. D.C.
3. ELSA STRAUSS DROGAS-DROGADICCION: CONFUSION y FRONTERAS
para proyectarse en la realización de denado a no distinguirse a sí mismo ron los grandes laboratorios euro-
una acción diferente al consumo. No por fuera de un ideal, que le ofrece peos, especialmente los alemanes,
está "atrapado" por la droga, sino por transitoriamente el consumo de psi- los que introdujeron en el mercado, a
la imposibilidad de identificarse como coactivos. finales del siglo pasado, drogas como
sujeto diferente a los demás, capaz de - ¿ Cuáles son los cambios en la morfina, la heroína y la cocaína,
establecer límites y ejercer un manejo la Sociedad que pueden influir en mo- provocando una demanda hasta en-
y control de sus pulsiones e impulsos, dificar el uso de drogas ... que pobla- tonces desconocida y creando un he-
como no sea, a través de otro. ciones son más susceptibles de ser cho también nuevo en la sociedad
Demostrativo de esto último, es atraídas por una sustancia y bajo que burguesa: la drogadicción" (7).
lo que la historia nos entrega sobre los condiciones? En consecuencia, lo que hoy vi-
resultados que se obtienen de los di- La historia sobre la producción, vimos es el producto de un fenómeno
ferentes modelos de tratamiento. El comercialización y consumo de sus- que tiene sus orígenes en el siglo pa-
programa terapéutico de mayor éxito tancias psicoactivas, comenzando sado, provocado por los países indus-
mundial, es el de Alcohólicos Anóni- por el alcohol, está saturada de episo- trializados, que además de involucrar-
mos. El paciente que ingresa a A.A. , dios que ilustran cómo los intereses nos como proveedores, resienten la
debe reconocerse eternamente enfer- de poder, principalmente económi- pérdida del control de un negocio al-
mo alcohólico y además debe some- cos, han sido la causa de la inducción tamente rentable. Bajo las presiones
ter su conducta al control de otro: al y posterior propagación del consumo del gobierno estadounidense, hoy
del padrino, quien asumirá el papel de de estas sustancias. La historia sobre nuestro país, además de la violencia,
su yo auxiliar, para servir de freno a la conquista y colonización del Conti- padece los rigores de una política que
su compulsión. nente Americano, por los Europeos, la nos ubica bajo la concepción mani-
El Sujeto dependiente a psi- colonización de la India por los ingle- quea de los buenos y los malos, nos
coactivos atribuye su conducta a la in- ses, las dos guerras del opio en el si- somete a la pauperización de los sue-
comprensión de los demás, al desa- glo pasado, dan buena cuenta de ello. los, con la fumigación del glifosato,
fecto, a la incomunicación familiar, a Con relación al opio el texto pu- cuando en los Estados Unidos de Nor-
la imposibilidad de controlar su com- blicado por Nida nos dice: teamérica, en el año de 1982-83, la
pulsión al consumo, entre otras. Jus- producción de Marihuana repre-
...it should be pointed out that alt-
tifica su pertenencia a un grupo de sentaba el segundo renglón de la pro-
hough the opium trade was the rna-
"amigos" con quienes comparte el jor source or friction that result in the ducción agrícola total de ese país. Es
consumo, manifestando que éstos wards with Britain, many authorities decir, como lo señala Jaramillo Aran-
son su único medio para alcanzar sa- emphasize that the conflict trascen- go (1988), ..."la moral burguesa de los
tisfacción. Para los familiares, los ami- ded the issue of opium -that it was países industrializados, la producción
almost accidental that opium was
gos son los culpables de los "malos de ciertas mercancías no es bueno ni
the major vehicle for British trade ex-
pasos" en que anda el sujeto. Paradó- ploitation, that the conflict was really malo, todo depende de dónde y quién
jicamente, encontramos algo de ver- over free trade and diplomatic rela- las produce" (8).
dad en este discurso, el Sujeto es tíons-" ... for the British opium trade Es decir, una de las pruebas crí-
adicto, en tanto es el producto de una was that opium was the Chinese ticas que nos entrega la historia sobre
wiskey and as legitimate a comercial
batalla entre mantenerse bajo la con- product as alcohol, tea, or coffee;
la realidad de la "droga", es que la
dición de objeto de una relación sim- that it was a product from wich "the gran demanda del producto proviene
biótica, en donde la madre, la familia, maximum revenue from the mini- de los países industrializados y que el
no permite su separación, y su deseo mum consuption" should be derived' control de la producción y comerciali-
and that if it were not supplied by the
de alcanzar una seudo-identidad que zación de estas sustancias, ha estado
British, it would be by others" (6).
se la brinda el momento del consumo. en algunos de los países andinos pro-
El sujeto bajo los efectos del psicoac- Refiriéndose a esta situación, ductores de coca y amapola, lo cual
tivo alcanza sentimientos de plenitud, Arango Jaramillo, M., (1988), expre- ha empezado a producir una redistri-
de grandeza, sociabilización, gratifi- sa: "En consecuencia, dentro de este bución de la economía internacional,
cación erótica, el triunfo de su narci- contexto. histórico del siglo XX, es poniendo en peligro los intereses del
cismo. Comparte una identificación conveniente destacar que el mercado poder económico de las grandes po-
con el grupo, cuando pone en común de la droga, tanto en la oferta como tencias.
sus creencias, su consumo. En los es- en la demanda, fue provocado por La demanda interna en Colom-
tados de sobriedad o no consumo, quienes hoy se rasgan las vestiduras bia existe, por parte de diversos gru-
comparte con el grupo, el rechazo fa- con el narcotráfico". ...'Vale la pena pos poblacionales. Sin embargo, no
miliar y social. El sujeto parece con- recordar que, paradójicamente, fue- será suficientemente claro, para el
REVISTA
COLOMBIANA
DE PSICOLOGIA 79
4. ELSA STRAUSS DROGAS-DROGADICCION: CONFUSION y FRONTERAS
para proyectarse en la realización de denado a no distinguirse a sí mismo ron los grandes laboratorios euro-
una acción diferente al consumo. No por fuera de un ideal, que le ofrece peos, especialmente los alemanes,
está "atrapado" por la droga, sino por transitoriamente el consumo de psi- los que introdujeron en el mercado, a
la imposibilidad de identificarse como coactivos. finales del siglo pasado, drogas como
sujeto diferente a los demás, capaz de - ¿ Cuáles son los cambios en la morfina, la heroína y la cocaína,
establecer límites y ejercer un manejo la Sociedad que pueden influir en mo- provocando una demanda hasta en-
y control de sus pulsiones e impulsos, dificar el uso de drogas ... que pobla- tonces desconocida y creando un he-
como no sea, a través de otro. ciones son más susceptibles de ser cho también nuevo en la sociedad
Demostrativo de esto último, es atraídas por una sustancia y bajo que burguesa: la drogadicción" (7).
lo que la historia nos entrega sobre los condiciones? En consecuencia, lo que hoy vi-
resultados que se obtienen de los di- La historia sobre la producción, vimos es el producto de un fenómeno
ferentes modelos de tratamiento. El comercialización y consumo de sus- que tiene sus orígenes en el siglo pa-
programa terapéutico de mayor éxito tancias psicoactivas, comenzando sado, provocado por los países indus-
mundial, es el de Alcohólicos Anóni- por el alcohol, está saturada de episo- trializados, que además de involucrar-
mos. El paciente que ingresa a A.A. , dios que ilustran cómo los intereses nos como proveedores, resienten la
debe reconocerse eternamente enfer- de poder, principalmente económi- pérdida del control de un negocio al-
mo alcohólico y además debe some- cos, han sido la causa de la inducción tamente rentable. Bajo las presiones
ter su conducta al control de otro: al y posterior propagación del consumo del gobierno estadounidense, hoy
del padrino, quien asumirá el papel de de estas sustancias. La historia sobre nuestro país, además de la violencia,
su yo auxiliar, para servir de freno a la conquista y colonización del Conti- padece los rigores de una política que
su compulsión. nente Americano, por los Europeos, la nos ubica bajo la concepción mani-
El Sujeto dependiente a psi- colonización de la India por los ingle- quea de los buenos y los malos, nos
coactivos atribuye su conducta a la in- ses, las dos guerras del opio en el si- somete a la pauperización de los sue-
comprensión de los demás, al desa- glo pasado, dan buena cuenta de ello. los, con la fumigación del glifosato,
fecto, a la incomunicación familiar, a Con relación al opio el texto pu- cuando en los Estados Unidos de Nor-
la imposibilidad de controlar su com- blicado por Nida nos dice: teamérica, en el año de 1982-83, la
pulsión al consumo, entre otras. Jus- producción de Marihuana repre-
...it should be pointed out that alt-
tifica su pertenencia a un grupo de sentaba el segundo renglón de la pro-
hough the opium trade was the rna-
"amigos" con quienes comparte el jor source or friction that result in the ducción agrícola total de ese país. Es
consumo, manifestando que éstos wards with Britain, many authorities decir, como lo señala Jaramillo Aran-
son su único medio para alcanzar sa- emphasize that the conflict trascen- go (1988), ..."la moral burguesa de los
tisfacción. Para los familiares, los ami- ded the issue of opium -that it was países industrializados, la producción
almost accidental that opium was
gos son los culpables de los "malos de ciertas mercancías no es bueno ni
the major vehicle for British trade ex-
pasos" en que anda el sujeto. Paradó- ploitation, that the conflict was really malo, todo depende de dónde y quién
jicamente, encontramos algo de ver- over free trade and diplomatic rela- las produce" (8).
dad en este discurso, el Sujeto es tíons-" ... for the British opium trade Es decir, una de las pruebas crí-
adicto, en tanto es el producto de una was that opium was the Chinese ticas que nos entrega la historia sobre
wiskey and as legitimate a comercial
batalla entre mantenerse bajo la con- product as alcohol, tea, or coffee;
la realidad de la "droga", es que la
dición de objeto de una relación sim- that it was a product from wich "the gran demanda del producto proviene
biótica, en donde la madre, la familia, maximum revenue from the mini- de los países industrializados y que el
no permite su separación, y su deseo mum consuption" should be derived' control de la producción y comerciali-
and that if it were not supplied by the
de alcanzar una seudo-identidad que zación de estas sustancias, ha estado
British, it would be by others" (6).
se la brinda el momento del consumo. en algunos de los países andinos pro-
El sujeto bajo los efectos del psicoac- Refiriéndose a esta situación, ductores de coca y amapola, lo cual
tivo alcanza sentimientos de plenitud, Arango Jaramillo, M., (1988), expre- ha empezado a producir una redistri-
de grandeza, sociabilización, gratifi- sa: "En consecuencia, dentro de este bución de la economía internacional,
cación erótica, el triunfo de su narci- contexto. histórico del siglo XX, es poniendo en peligro los intereses del
cismo. Comparte una identificación conveniente destacar que el mercado poder económico de las grandes po-
con el grupo, cuando pone en común de la droga, tanto en la oferta como tencias.
sus creencias, su consumo. En los es- en la demanda, fue provocado por La demanda interna en Colom-
tados de sobriedad o no consumo, quienes hoy se rasgan las vestiduras bia existe, por parte de diversos gru-
comparte con el grupo, el rechazo fa- con el narcotráfico". ...'Vale la pena pos poblacionales. Sin embargo, no
miliar y social. El sujeto parece con- recordar que, paradójicamente, fue- será suficientemente claro, para el
REVISTA
COLOMBIANA
DE PSICOLOGIA 79
5. DOSSIER
---------------
lector desprevenido, encontrar las in- nológicos, no están al servicio y bie- consumos de sustancias ilegales en
tenciones que hay en las publicacio- nestar del hombre, sino de la explota- los estratos medio-alto, medio y alto,
nes, cuando en la presentación de las ción de una producción, que le ha im- oscilan entre e18% y el 9.6%, mientras
conclusiones de algunas investiga- puesto a los países no alineados, que en los estratos bajo-bajo y bajo
ciones se sesga la información. Este reglas en el manejo de los mercados este mismo consumo está entre el
sesgo considero que obedece a la ne- internacionales. 4.2% y el 5.5% En cuanto al consumo
cesidad de responder a los intereses El afán competitivo de los mo- de sustancia ilegal según estrato so-
institucionales de quienes los finan- delos neoliberales, se constituye en cio-económico, las diferencias entre
cian, supeditando la objetividad del in- una condición predisponente al consu- estratos altos y bajos, muestran con
vestigador y su libertad, a la defensa mo de psicoactivos, tanto legales como más claridad tales diferencias, Con
de una política condenatoria basada ilegales. La exigencia de una mayor relación al consumo de marihuana,
sobre la concepción de lo legal y lo productividad con calidad, a menores los estratos medio y medio alto mues-
prohibido. intervalos de tiempo, produce en el su- tran consumos que oscilan entre 7.4%
Conocida es la problemática jeto no adicto la condición de agota- y eI8.6%, en cambio los estratos bajo-
que plantea a nivel mundial los altos miento físico y psicológico. bajo y bajo, muestran consumos del
índices de consumo de alcohol, sus- Los niveles de adaptación a 2.8% al 3.4%. En el caso del bazuco
tancia que goza de un comercio legal. esta condición varían de persona a y cocaína, las diferencias son aún ma-
Sin embargo, el interés político-eco- persona, dependiendo del nivel de yores: para el bazuco encontramos
nómico, se concentra en las sustan- energía y la susceptibilidad para re- que los estratos medio alto y alto os-
cias inscritas en el orden de la ilegali- sistir la tensión. Las personas con una cilan entre el 2.5% y eI2.6% y el bajo-
dad, y sorprende ver, el grado de adecuada estructuración del Yo, en- bajo y bajo del 0.8% al 2.0. Para la
sumisión de algunos colombianos a contrarán maneras de funcionar en tal cocaína los estratos medio, medio-
los intereses foráneos, que les hace forma que la ingesta de psicoactivos, alto y alto presentan porcentajes de
desvirtuar una realidad, tal como se no adquiere significado. consumo que van del 4.4% al 5.4%,
observa en la publicación de la inves- Los niveles de adaptación han frente a los estratos bajos que van del
tigación: "Bogotá y el Consumo de sido mal interpretados en función del 1.2% al 1.5%. Estas mismas diferen-
Substancias Psicoactivas, -un estu- consumo. Se ha atribuido a las clases cias se encuentran en cuanto a las
dio, una solución" (1989). económicamente deprimidas el ma- variables nivel educativo, y ocupa-
En las conclusiones los autores yor consumo de psicoactivos ilegales. ción-cargo. Los porcentajes de post-
dicen: "en Bogotá hay un problema Las investigaciones no se realizan en graduados alcanzan hasta un 20%
serio de consumo de drogas, que re- función del sujeto, sino en función de frente a un 7% de los que respondie-
quiere intervenciones que impidan el la condición económica, a la cual se ron tener un nivel de secundaria, Los
crecimiento del problema y lo reduz- le atribuye la causa de la ingesta. porcentajes de los trabajadores frente
can tanto como sea posible" (9). Nuevamente en este campo se en- a los desempleados, indican que el
Veamos cuál es el problema, y cuentra el énfasis en la cosa, en los consumo de sustancias ilegales, alcan-
siendo suspicaces, ¿por qué no se in- objetos. Aunque unas investigacio- za un 10% en los primeros frente a un
dica cuál es el problema, con qué tipo nes muestran la relación de los índi- 5% en los segundos, llamando la aten-
de drogas y su magnitud? La publica- ces de consumo e ingreso salarial, de ción que los porcentajes de los niveles
ción citada responde estas preguntas manera inversa, los resultados no ha- profesionales independientes y ejecuti-
de la siguiente manera: el contacto cen énfasis en ello, por no responder vos, presentan un 18.1% y un 14.7%,
con el alcohol en los hombres alcanza a los intereses de los patrocinadores. respectivamente, frente a obreros y
el 95%, en tanto que con Marihuana Veamos dos ejemplos que nos ilus- vendedores ambulantes que están en
8.5%, bazuco 3.8%, cocaína 3.7% Y tran lo anterior. un 12.2%, los primeros y el 10.3% los
con heroína/morfina el 0.3 %. Estos La investigación sobre el consu- segundos.
datos hablan por sí solos, sobran los mo de sustancias psicoactivas en Bo- La razón de tales planteamien-
comentarios. gotá, muestra que: a medida que se tos en estas investigaciones se funda-
¿Qué poblaciones son más sus- asciende en el estrato socio-económi- menta en la hipótesis, que las pobla-
ceptibles de ser atraídas por una sus- co, en el nivel educativo y en el tipo ciones deprimidas suplantan la
tancia? Estamos obligados a respon- de ocupación, aumenta el porcentaje satisfacción de sus carencias en el or-
der que los países industrializados, en de personas que utilizan psicoactivos den material, por la satisfacción del
tanto se basan en la premisa del con- ilegales. Por ejemplo: en la distribu- consumo. Nuevamente, bajo la con-
sumismo y la alienación del ser. Los ción de tipo de consumo sobre estrato cepción económica se sitúa al sujeto
logros económicos, científicos y tec- socio-económico, se observa que los en función de los objetos.
No. 4 AÑO MCMXCV
80 U. NACIONAL DE COLOMBIA
BOGOTA,D.C.
6. ELSA STRAUSS
DROGAS-DROGADICCION: CONFUSION y FRONTERAS
La investigación realizada por La segunda, es la posición psicodiná- Nadelmman, E. (1995), abande-
Strauss, E., y col. (1990) a través de mica extrema que no da cabida al rado de la legalización, propone, en
un censo (2.587 encuestas), en la po- efecto farmacoquímico de la ingesta. relación a la situación que vive Colom-
blación de una empresa oficial, de la Ante una y otra posición Vera Ocam- bia, tres estrategias para cambiar las
ciudad de Cali, mostró, de igual forma po, E. (1988), propone: "Creemos en- condiciones futuras: "Primero no huír
como se observó en la investigación tonces que si en la problemática toxi- de la confrontación pública y privada,
sobre Bogotá, que: "a medida que se comaníaca el universo de los objetos doméstica e internacional de la prohi-
asciende en la escala salarial, tipo de posibles se reduce al único objeto dro- bición y sus alternativas" .... "Segun-
cargo y nivel educativo, aumenta el ga, es en tanto que hay una especifi- do, unirse a las crecientes campañas
consumo de psicoactivos ilega- cidad material farmacodinámica (el en Europa, Australia y aún en Estados
les..."(10). subrayado es nuestro), que la hace Unidos para tratar el problema de las
Los datos sobre consumo de capaz de provocar lo que no vacila- drogas como un problema de salud
sustancias, como la cocaína en los mos en considerar como un trauma- pública" ..."Tercera, apoyar los es-
Estados Unidos, durante los años tismo psíquico. ... En este aspecto fuerzos actuales en Bolivia y Perú
1983 y 1984 (11), indican, que el con- traumático de la efracción de la droga para legalizar la exportación de base
sumo en población general, alcanza- en el cuerpo, indisociable de las pro- de coca y otros productos que contie-
ba porcentajes, del 34%. Esta cifra piedades farmacodinámicas que ella nen pequeñas cantidades de cocaí-
comparada con la información que so- tiene, no es una condición suficiente na ... Las bases para incluír la coca en
bre dicho consumo publica la revista para explicar la toxicomanía, pero es los convenios internacionales de pro-
Semana, del Estudio de Salud Mental sin duda una condición necesaria hibición de drogas celebrados en la
y Consumo de Sustancias Psicoacti- para que exista la problemática". Más década de los 60s han sido hoy com-
vas del Ministerio de Salud, donde al- adelante, sin embargo aclara, "no to-
pletamente desacreditadas como tes-
canza sólo un 1.8%, de alguna mane- dos los que consumen drogas se vuel-
timonio de la mala ciencia (el subra-
ra nos corrobora, que el mayor ven por eso toxicómanos. Para dar
consumo afecta a los países indus- yado es nuestro) y del prejuicio
cuenta de la entrada de un sujeto en la
trializados. cultural" (14).
toxicomanía hay que tener encuenta
Comparto la posición del politó-
otros datos".... "Creemos que esa en-
logo Nadelmman, en cuanto a que en
trada es el resultado de un encuentro,
1=ROIjT~RAS el encuentro con una problemática, la
sus planteamientos, hace énfasis en
la necesidad de liberarnos de la irra-
negación de la falta de objeto con la
cionalidad, la cual además de ser la
En esta exposición apretada he- contingencia de ese real químico que
causante del confuso tratamiento que
mos tratado de contrastar, algunos de es la droga (12).
se da a los problemas, es el instru-
los supuestos sobre los cuales se ins- Desde esta perspectiva podría-
mento para la manipulación de los in-
cribe el pensamiento y se orientan las mos intentar una primera conclusión:
tereses. Es decir, debemos reconocer
acciones, respecto al manejo de los no hay adictos sin droga, pero para
el espacio que ocupa la droga en re-
problemas asociados con el objeto que la condición de adicción se dé,
existe un Sujeto bajo cuya condición lación al sujeto, sin maximizar su pa-
droga y con el sujeto adicto, con aque-
psicodinámica se explica que: "el ob- pel, haciendo de ella el objeto princi-
llos elementos que nos entrega el co-
jeto no es aquello a través del cual se pal de análisis. Y por otra parte,
nocimiento e información, que se de-
satisface una pulsión, sino que quisie- reconocer la importancia de adoptar
riva del trabajo teórico y de los
ra ser el objeto donde la satisfacción una posición de defensa de la objeti-
estudios realizados sobre la droga-
se produce" (13). vidad de la investigación, desligada
drogadicción. A manera de conclu-
Desde la perspectiva ideológi- de la presión a que se someten los
sión, haré algunos planteamientos,
con la idea que éstos nos permitan ca, que ha servido a la instauración de investigadores, por parte de las enti-
formular límites entre una y otra con- una confrontación economico-política, dades que financian la investigación y
dición, para comprender mejor, en un encontramos igualmente dos posicio- de aquellas encargadas de dar vía li-
plano teórico, lo que nos inquieta. nes extremas: 1. Aquella que endilga a bre a su realización y difusión de re-
La categoría droga ha suscitado la droga ser la causante de muchos de sultados.
dos posiciones opuestas: los males que aquejan a la humanidad; Desde la claridad que nos entre-
1. La droga hace al adicto; y 2. y 2. Aquella que encuentra en la lega- gue la información, derivada de la inde-
el adicto es el que hace la droga. La lización del consumo de psicoactivos, pendencia conceptual, podemos empe-
primera es la posición de la mirada or- la solución a los problemas derivados zar a identificar límites de lo que a uno u
ganicista, que medicaliza el problema. de la prohibición. otro objeto de estudio corresponde 'P
REVISTA
COLOMBIANA
DE PSICOLOGIA 81
7. DOSSIER
818L10GRAj:=IA 13, Ibid.
1. Nida, Perspective on the History of 14, Nadelmman, E. "La Prohibición
Psychoactive Substance Use. De- debe debatirse" El Tiempo, Domin-
partment of Health, Education and go 3 de septiembre, 1995, p, 5B.
Walfare, Research Issues 24,
Maryland, USA, 1972, P ix.
2. Alvarez, L. R., de. 'V Curso Nacional
sobre Tratamiento y Prevención de
la Farmacodependencia y el Alco-
holismo", Hospital Mental de Antio-
quia, Medellín, julio de 1984, p. 8.
3. Tamayo Mesa, O. "V Curso Nacional
sobre Tratamiento y Prevención de
la Farmacodependencia y el Alco-
holismo", Hospital Mental de Antio-
quia, Medellín, Ibid, p. 1.
4. Strauss, E. y col. "Sistemas de Eva-
luación para Programas Terapéuti-
cos en Farmacodependencia y Al-
coholismo". Convenio Colciencias-
Univalle, Cali 1991.
5. Clavreul, J. "La Palabra del Alcohóli-
co", traducción de Estanislao Zuleta
de Psychanalyse No. 5, sin fecha.
6. NIDA, "Perspeciive on the History of
Psychoactive Substance Use". De-
partment of Health, Education and
Walfare, Research Issues 24,
Maryland USA 1972 p.
7. Arango Jaramillo, M. "Impacto del
Narcotráfico en Antioquia" Ed. J. M.
Arango, Medellín, 1988.
8. Ibid.
9. Alcaldía Mayor de Bogotá, "Bogotá y
el Consumo de Substancias Psi-
coactivas", un estudio, una solu-
ción. Imprenta Distrital, Bogotá,
1989.
10. Strauss, E. y col. "Condiciones para
la Planeación de un Programa de
Prevención Integral al Alcoholismo
y la Farmacodependencia". PIESI,
Universidad del Valle, 1989.
11. Revista SEMANA, "El País de las
adicciones" Edición No. 574, Bogo-
tá, mayo de 1993, pp: 106-109.
12. Vera Ocampo, E. "Droga, Psicoa-
nálisis y Toxicomanía. Las Huellas
de un Encuentro, Paidos, Buenos
Aires, 1988.
No. 4 AÑO MCMXCV
82 U. NACIONAL DIi COLOMBIA
BOGOTA,D.C.