El documento define el verbo desde tres perspectivas: significado, complementos y morfología. Explica que los verbos expresan acciones, procesos o estados y que exigen diferentes complementos según su significado. Describe también que los verbos están formados por una raíz léxica y desinencias gramaticales que indican tiempo, modo, número y persona. Finalmente, distingue entre verbos regulares e irregulares.
2. Definición de verbo: su significado
1. Desde el punto de vista del significado, el verbo es la clase de
palabra que expresa acciones, procesos o estados.
Jacinto ha roto la ventana (acción)
La hierba crece deprisa (proceso)
Ana parece distraída (estado)
3. Definición de verbo: sus complementos
El verbo es la palabra principal de la oración. El significado del verbo impone los
complementos que debe llevar la oración.
Por ejemplo:
El verbo dar (con el significado de entregar) exige que en la oración aparezcan al
menos:
1. El agente (esto es, la persona que da algo).
2. El objeto (es decir, aquello que se da).
3. El destinatario (la persona o ente a la que se da algo).
La estructura que exige el verbo dar es la siguiente: Alguien da algo a alguien.
Sintácticamente, esta estructura se suele plasmar como SUJETO (alguien) + VERBO
(da) + CD (algo) + CI (a alguien).
4. Definición del verbo: sus complementos
El verbo llorar, en cambio, exige la presencia de un solo complemento:
el agente (es decir, la persona que llora), que suele ser el sujeto de la
oración:
Jacinto llora
Hay verbos, como los meteorológicos, que no exigen ningún
complemento:
Llueve
A esos complementos exigidos por el verbo se les denomina
argumentos; los no exigidos por el verbo se denominan adjuntos o
circunstanciales.
5. Definición del verbo: su morfología
El verbo es una clase de palabra variable. Distinguimos dos partes:
a. La raíz: contiene el significado léxico del verbo.
b. La desinencia: contiene la información gramatical (tiempo, modo,
número y persona).
am- ábamos beb -eremos
raíz desinencia raíz desinencia
6. Morfología del verbo: la raíz
La raíz del verbo contiene el significado léxico del verbo. Puede ser
igual a la de otras clases de palabras. Por ejemplo, la raíz de temer,
temor y temible es la misma. La terminación nos permite identificar la
palabra como verbo, sustantivo o adjetivo.
temer (verbo)
temor (sustantivo)
temible (adjetivo)
7. Morfología del verbo: la desinencia
La desinencia contiene la información gramatical del verbo.
En el sustantivo o el adjetivo, la información de la terminación se
refiere al género y al número, si bien no todos los sustantivos ni
adjetivos tienen flexión de género y número.
Niñ-a-s casa-s jueves
Gén. nº nº Sin flexión de gén. ni nº, que conocemos por sus determinantes
o complementos. El/los jueves – Jueves maravilloso/s.
Buen –a-s Grande-s
nºGén. nº
Adj. de 2
terminaciones
Adj. de 1
terminación
8. Morfología del verbo: la desinencia
La desinencia del verbo nos aporta información gramatical referente a:
Tiempo: presente, pasado o futuro
Modo: indicativo, subjuntivo o imperativo
Persona: primera, segunda o tercera
Número: singular o plural
Estas informaciones pueden aparecer juntas o amalgamadas (en un solo
morfema). Pongamos como ejemplo las formas amábamos y canto:
Am – á – ba - mos Cant-o
Siempre aparecen en el
mismo morfema
Siempre aparecen en el
mismo morfema
Raíz Vocal
temática
Tiempo
y modo
Persona
y número
Raíz Tiempo, modo,
persona y número
9. El tiempo verbal
Existen tres grandes tiempos: el presente, el pasado y el futuro. En la
oración y en el texto, los verbos se relacionan entre sí y con otras palabras
para señalar relaciones de anterioridad, simultaneidad y posterioridad. Por
ejemplo:
Canta en voz alta mientras cocina la pasta
Había concluido el libro antes de hacer el examen
Llegó a casa tras haber visitado a Jacinto
Simultaneidad de las acciones
expresadas en los dos miembros
Anterioridad de la 1ª acción frente a la
expresada en el 2º miembro.
Posterioridad de la 1ª acción frente a
la expresada en el 2º miembro.
10. El modo verbal
El modo indica la actitud del hablante ante su propio enunciado. Se distinguen tres modos
verbales:
• Indicativo. Generalmente expresa contenidos que el emisor considera como seguros,
reales u objetivos.
Jacinto ha ganado la carrera
La mejor una se cosecha en Jaén
• Subjuntivo. Generalmente expresa contenidos que el emisor considera irreales, posibles y
también para expresar deseos.
Quizás llueva
Ójala llueva
• Imperativo. Sirve para expresar órdenes o peticiones:
¡Sal de aquí!
Dadme la sal
Contenido real
Contenido considerado objetivo
Contenido considerado posible
Expresión de un deseo
Orden
Petición
Con todo, el modo depende de
otros factores, de modo que
no siempre se usa el indicativo
para expresar certezas o el
subjuntivo para la expresión
de deseos o posibilidades.
11. La persona y el número en el verbo
La persona y el número siempre aparecen en el mismo morfema:
Amába-mos reía-mos soñába - mos
Hay 3 personas del singular:
• la persona que habla (yo)
• la persona que escucha (tú)
• una persona diferente a emisor y receptor (él/ella)
Hay 3 personas del plural:
• La/s persona/s que habla más otras personas (Nosotros/as)
• La/s persona/s que escucha más otras personas (vosotros/as)
• Personas que no participan de la conversación (ellos/as)
12. La conjugación verbal
El conjunto de todas las formas de un verbo constituye su conjugación. En
español existen 3 conjugaciones:
1ª conjugación: verbos cuyo infinitivo acaba en –ar: cantar, bailar, soñar…
2ª conjugación: verbos cuyo infinitivo acaba en –er: beber, roer, sorber…
3ª conjugación: verbos cuyo infinitivo acaba en –ir: vivir, reír, partir…
Los verbos se conjugan dependiendo de la conjugación a la que pertenezcan.
Por ejemplo, el pretérito imperfecto de indicativo de la 1ª conjugación
emplea el morfema de tiempo-modo “-ba” (cantábamos, bailaban, etc.). En
cambio, los de la 2ª y 3ª conjugación emplean “-ía” (reías, partíais, etc.).
13. Formas simples y formas compuestas
En español distinguimos entre formas simples y formas compuestas.
• Las formas simples se forman con raíz + desinencia: cant-aréis. En
ellas, la información gramatical (tiempo, modo, número y persona) se
encuentra en la desinencia.
• Las formas compuestas se forman con el verbo auxiliar haber + el
participio del verbo conjugado: habéis cantado, habrán reído. En
ellas, la información gramatical se expresa en el verbo auxiliar.
14. Verbos regulares y verbos irregulares
• Los verbos regulares son aquellos que emplean la misma raíz en todas
sus formas y mantienen las desinencias del modelo de su
conjugación. P. ej.: cantar, beber, partir, vivir…
• Los verbos irregulares son aquellos que presentan variaciones en la
raíz o en las desinencias. P. ej.: jugar, andar, reducir, conducir…
15. Ejemplo de verbos regulares
Los verbo cantar o amar son regulares. Mantiene su raíz (cant- / am-)
en todas sus formas y le añaden, en las formas simples, la desinencia
que les corresponde de la 1ª conjugación.
Presente indicativo: Yo cant-o Yo am-o
Pret. imp. ind.: Yo cant-aba Yo am-aba
Pret. perf. Simp.: Yo cant-é Yo am-é
Fut. Simp. Ind.: Yo cant-aré Yo am-aré
Cond. Simp. Ind.: Yo cant-aría Yo am-aría
Presente subjuntivo: Yo cant-e Yo am-e
Pret. imp. Subj.: Yo cant-ara o cant-ase Ya am-ara o am-ase
Fut. Simp. Subj: Yo cant-are Yo am-are
16. Verbos irregulares
Los verbos irregulares pueden presentar su irregularidad en la raíz, en la desinencia o en
ambas partes.
Ejemplo de irregularidad en la raíz es el verbo jugar en el presente de indicativo. Escribimos
primero la forma correcta y a continuación cómo sería la forma regular.
Yo jueg-o Yo jug-o*
Tú jueg-as Tu jug-as*…
Ejemplo de irregularidad en la desinencia es el pretérito perfecto simple de indicativo del
verbo andar :
Yo and-uve Yo and-é*
Tú and-uviste… Tú and-aste*…
Algunos verbos son irregulares tanto en la raíz como en la desinencia. Así, el pretérito
perfecto simple de indicativo del verbo ser es:
Yo fui Yo seí*
Tú fuiste Tú seíste*…
El símbolo * indica que
las formas empleadas
son incorrectas en el
castellano actual.
17. Formas no personales
Las formas no personales carecen de los morfemas de tiempo, modo, número y persona.
Son tres:
• El infinitivo. Añade a la raíz las terminaciones –ar, -er o –ir, dependiendo de la
conjugación a la que pertenezcan. Ej: cantar, beber, reír. Pueden funcionar como
sustantivos. El dulce lamentar de dos pastores.
• El gerundio añade las formas –ando o –endo. Cantando, bebiendo, riendo. Pueden
funcionar también como adverbios (El portal está bajando la calle) o como adjetivos (Le
echó agua hirviendo a las macetas).
• El participio añade las formas –ado o –ido. Cantado, bebido, partido. Hay muchos
participios irregulares como visto, abierto, dicho, hecho… Funcionan muchas veces como
adjetivos (Es un chico divertido). En este caso, posee flexión de género y número
(divertido/a/os/as). Es empleado en las formas compuestas (he sonreído, había comido…).