1. Haz Caso Cuando Te Induce Lectura: Hechos 16:6-10 Y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió. — Hechos 16:7
2. El viernes, mi día de descanso como pastor, el Espíritu Santo me indujo a llamar a una joven madre soltera de nuestra comunidad de fe para ver si había logrado reparar su automóvil. Tuve algunas reservas en cuanto a llamarla, pero obedecí. No sabía que mi obediencia ayudaría a salvarle la vida. Más tarde ella dijo: "El viernes en el trabajo estaba planteando quitarme la vida, pero creo que Dios estuvo allí para ayudarme en mi hora de necesidad. Hizo que el Pastor Williams me llamara, y con tan sólo el sonido de su voz, me hizo saber que Él me amaba“. El apóstol Pablo debió haber tenido reservas cuando el Espíritu Santo le indujo a él y a su equipo a no ir a las provincias de Asia y Bitinia. En vez de ello, sintieron el llamado del Espíritu para ir a Macedonia y predicar las buenas nuevas. En cada situación, obedecieron cuando el Espíritu les inducía. Como resultado de ello, Pablo y su equipo fueron el instrumento para el nacimiento de una nueva comunidad de fe en Filipos (Hechos 16:11-15). Como creyentes en Cristo en quienes mora el Espíritu Santo (Efésios 2:22), nuestro deseo debe ser agradarle a Él. No contristemos al Espíritu Santo (Efésios 4:30) ignorando cuando nos induce suavemente. Cuando le obedecemos, podríamos ser usados por Dios para guiar a alguien a Cristo, para discipular a nuevos creyentes -o incluso para ayudar a salvar la vida de alguien .
4. Lectura Bíblica: Hechos 16:6 al 10 6 Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia; 7 y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió. 8 Y pasando junto a Misia, descendieron a Troas. 9 Y se le mostró a Pablo una visión de noche: un varón macedonio estaba en pie, rogándole y diciendo: Pasa a Macedonia y ayúdanos. 10 Cuando vio la visión, en seguida procuramos partir para Macedonia, dando por cierto que Dios nos llamaba para que les anunciásemos el evangelio. Reina Valera Revisada (1960). 1998 (electrónica ed.) . Sociedades Bíblicas Unidas: Miami
5. Biblia del diario vivir . 16.6 No sabemos cómo el Espíritu Santo le dijo a Pablo que no fueran a Asia. Quizás fue mediante un profeta, una visión, una convicción interna o alguna otra circunstancia. Conocer la voluntad de Dios no significa que debemos escuchar su voz. Él dirige de diferentes formas. Cuando busque la voluntad de Dios: (1) asegúrese de que su plan esté en armonía con la Palabra de Dios; (2) pida a los cristianos maduros su consejo; (3) analice sus motivos: ¿está buscando hacer lo que quiere o lo que piensa que Dios quiere?; y (4) ore que Dios abra o cierre las puertas de acuerdo a su voluntad. 16.7–9 El «Espíritu» es otra manera de referirse al Espíritu Santo ( 16.6 ). El Espíritu Santo cerró la puerta dos veces a Pablo, de manera que él se preguntaba qué dirección geográfica debía tomar para anunciar el evangelio. Luego, en una visión ( 16.9 ), a Pablo se le da una dirección definitiva, y él y sus acompañantes obedientemente viajaron a Macedonia. El Espíritu Santo nos guía a buenos lugares, pero también nos aparta de malos lugares. A medida que buscamos la voluntad de Dios es importante saber qué quiere Dios que hagamos y dónde quiere que vayamos, pero también es importante saber qué no quiere Dios que hagamos y dónde no quiere que vayamos.