El propósito de esta lección es recalcar el cuidado pastoral que Dios le ofrece a los creyentes, motivado solo por su amor y por su gracia. El ser humano, en realidad, está indefenso ante los problemas de la vida. Necesita que Dios le cuide, le acompañe y le dirija. El Salmo 23 afirma que Dios nos pastorea con amor.