El propósito de esta lección es resaltar el amor redentor de Dios, quien está presto a perdonar a las personas que se arrepienten con sinceridad y que le buscan con fe. La lección nos lleva a considerar la relación entre el juicio y la salvación, entendiendo que el juicio de Dios siempre tiene el propósito de llevarnos al arrepentimiento.