4. Y las hadas.
Sus travesuras hacían las
delicias de flores y
árboles.
5. Los árboles ofrecían sus troncos a los duendes para
esconderse, mientras que las flores cubrían a las hadas de
polen para hacerlas invisibles durante el juego.
6. Aquí seguro
que no nos
encuentran
¡Qué suerte
tenemos de
vivir aquí!
¡Todo es
tan bonito!
7. Pero un día todo cambió. El viento empezó a soplar tan fuerte que
parecía que tuviera dolor de barriga. Le acompañaba la lluvia que
abofeteaba a cada habitante del bosque con furia.
8. Nuestra magia no
es suficientemente
fuerte. Duendes,
flores, árboles,
hadas …
16. En este bosque
hay otros
animales a parte
de nosotros.
¡Debemos
encontrarlos!
17. Hadas, duendes, flores, árboles, cuélebres,
xanas, busgosus, nuberus y tigres… fueron
pasando la llamada de boca a oreja, de
susurro a rugido, de soplido…
18. Hasta que de todos los rincones
empezaron a surgir animales dispuestos a
recuperar la armonía de su hábitat.
19. Gatos, tigres, guepardos, leopardos,
leones, elefantes, abejas, lobos,
ratones, monos y todo tipo de aves
acudieron a la llamada JUNTOS
olvidando sus diferencias.
20. Hasta los animales en peligro de extinción vencieron su
miedo para defender el bosque. El elefante
asiático, el leopardo de las nieves, el gorila, el
orangután de Sumatra, el tigre, el oso pardo, el
lince ibérico, el guacamayo, el oso panda, el koala,
el burro y el lobo gris entre otros.
21. El bosque nos necesita.
¡Aquí estamos! Llueva o nieve,
con o sin viento.
22. Y la fuerza de su deseo fue suficiente para
que el viento se apaciguara y para que el
agua regresara a las nubes, a los
estanques y a los mares, dulcemente.
23. Y tras el esfuerzo
decidieron celebrar
una magnífica fiesta.
Si nos acompañáis
podréis ver cómo se
lo pasaron todos
JUNTOS.