1. Purgatorio (Divina Comedia)
El purgatorio de los avaros de Jennifer Strange.
El Purgatorio es el segundo de los tres cantos de La
Divina Comedia de Dante Alighieri. Lo antecede el del
Infierno y le sigue el del Paraíso. El Purgatorio de Dante
se divide en Antepurgatorio, Purgatorio y Paraíso terres-
tre. La estructura moral del Purgatorio sigue la clasifica-
ción tomística de los vicios del amor mal dirigido, y no
hace referencia a culpas específicas. Se divide en siete
giros, en las cuales se expían los siete pecados capitales:
soberbia, envidia, ira, pereza, avaricia, gula, lujuria. Al
pie de la montaña se encuentra el Antepurgatorio, y en la
cima el Paraíso terrestre. Su estructura es especular a la
del Infierno, pues si aquel es un abismo este es una monta-
ña, y el orden de las penas sufre un giro de ciento ochenta
grados: el camino de Dante va del pecado más grave al
más leve (que es la lujuria, o amor que se excede en la
medida). Cada giro tiene un custodio angélico, y preci-
samente los ángeles de la humildad, de la misericordia,
de la mansedumbre, de la solicitud, de la justicia, de la
abstinencia y de la castidad; en cada giro, además, los que
expían las culpas tienen ante sí ejemplos del vicio castiga-
do y de la virtud opuesta. En la entrada del Paraíso terres-
tre, Virgilio debe separarse del poeta. Como guía en esta
parte Dante tendrá al poeta latino Estacio, quien lo con-
ducirá al jardín celeste, donde lo acogerá Matelda, quien
es una anticipación de la aparición de Beatriz. Las almas
del Purgatorio ya están salvadas, pero antes de llegar al
Paraíso, para expiar sus pecados deben subir la monta-
ña como hacían en los tiempos de Dante los peregrinos
que se dirigían hacia Roma o Santiago de Compostela
para hacer penitencia. Cada alma debe por consiguien-
te recorrer todo el camino y purificarse en cada giro del
pecado correspondiente. Para facilitar su encuentro con
determinados personajes, el autor los coloca en el giro de
su pecado más relevante. El Purgatorio tiene la función
específica de expiación, reflexión y arrepentimiento, y es
solo a través del camino, es decir de la peregrinación ha-
cia Dios, que el alma puede aspirar a la redención. Esto
también vale para Dante, quien al principio tiene graba-
das en la frente siete P, que simbolizan los siete pecados
capitales. Al final de cada giro el ala del ángel guardián
borra una de ellas, indicando que el pecado específico ha
sido expiado.
1 Introducción
Algunas almas cristianas que llegan, van cantando y son escolta-
das por un ángel en el Canto 2, en un grabado de Gustavo Doré.
Tras sobrevivir a las profundidades del infierno (descritas
en el Infierno), Dante y Virgilio ascienden hacia la Mon-
taña del Purgatorio en la zona opuesta del mundo. Se trata
de una isla, la única en el hemisferio sur. Dante sitúa el
infierno exactamente debajo de Jerusalén, en una aper-
tura creada por la caída de Satán. El Monte Purgatorio,
exactamente en la zona opuesta del mundo, se creó por el
desplazamiento de tierra que siguió a ese evento.[1]
Dante
anuncia su intención de describir el Purgatorio invocando
a las míticas Musas, como hizo en el Canto II del Infierno:
1
2. 2 2 ANTEPURGATORIO
“y cantaré a aquel segundo Reino,
donde se purifica el espíritu humano,
y se hace digno subir al Cielo.
Resucite aquí, pues, la muerta poesía,
¡oh santas Musas!, pues que soy vuestro,”[2]
En un sentido alegórico el Purgatorio representa la vida
penitente en la concepción cristiana.[3]
En contraste al
barquero Caronte cruzando el Aqueronte en el Infierno,
las almas de los cristianos llegan al purgatorio escoltadas
por un ángel, cantando In exitu Israel de Aegypto[4]
(Can-
to II). En sus Cartas para Cangrande, Dante explica que
esto hace referencia a la salida de Israel a Egipto referi-
das ambas acerca de la redención de Cristo y acerca de
“la conversión del alma desde la agonía y la miseria del
pecado hacia el estado de gracia.”[5]
Apropiadamente, es
el Domingo de Pascua cuando Dante y Virgilio llegan.[6]
EL Purgatorio es notable porque muestra el conocimiento
medieval acerca de que la tierra era esférica.[7][8]
Durante
el poema, Dante discute las diferentes estrellas visibles
en el hemisferio sur, la posición alterada del Sol, y las
diferentes zonas horarias de la tierra. En este momento
es cuando, según dice Dante, el sol se pone en Jerusalén,
y es media noche en el río Ganges (con la constelación
Libra en el cielo occidental), y Aurora en el Purgatorio:
“Ya estaba el sol al horizonte junto
cuyo meridiano círculo cubre
a Jerusalén en su más alto punto,
y la noche, que opuesta a el sol gira,
salía del Ganges con las Balanzas,
de cuyas manos se cae cuando se alarga;
de modo que las blancas y rosadas mejillas
donde yo estaba, de la bella Aurora
por la mayor edad ya eran naranjas.”[9]
2 AntePurgatorio
En las orillas del Purgatorio, Dante y Virgilio encuen-
tran a Catón, un pagano que ha sido nombrado por Dios
guardián del pie del monte. En la zona baja de la pen-
diente (llamada “Antepurgatorio” por los comentadores),
ellos llegan a conocer dos clases principales de almas cu-
ya penitente vida cristiana fue retardado o deficiente: Los
excomulgados y los arrepentidos de forma tardía. Los
Primeros son detenidos aquí por un periodo treinta veces
largo como su periodo de contumacia o terquedad. Los
segundos incluyen a los demasiado perezosos o preocu-
pados por su arrepentimiento, y aquellos que se arrepin-
tieron en el último minuto sin haber recibido formalmen-
te la unción de los enfermos, como resultado de muertes
violentas. Estas almas serían aceptadas en el Purgatorio
gracias a su genuino arrepentimiento, pero tendrían que
esperar ahí por un tiempo igual al tiempo que permane-
cieron en la tierra.
Pia de' Tolomei (La Pia) en una pintura de Stefano Ussi, Canto
5.
Dante y Virgilio se encuentran con Sordello, escultura de Cesare
Zocchi, Canto 7.
Entre los excomulgados se encuentra Manfredo de Sici-
lia (Canto III). Entre los perezosos se encuentra Belac-
qua, con lo que Dante se encuentra aliviado de encon-
trarlo aquí y no en el infierno(Canto IV):
"... Belacqua,
ya más de ti no me conduelo; ...”[10]
Entre los que no recibieron la última unción se encuentra
3. 3
La puerta del Purgatorio, pintura de William Blake, Canto 9.
Pia d'Tolomei de Siena, quien fue asesinada por su espo-
so, Nello della Pietra de la Maremma (Canto V):
“Quizá recuerdes que soy La Pia;
Siena me hizo, y desechome Maremma :
saber tienes que quien, cuando casados fuimos,
plegaria suya diome
y luego, como alianza nupcial una de sus
gemas.”[11]
En esta categoría también esta Sordello, quien como Vir-
gilio, era de Mantua. Cuando Sordello descubre la iden-
tidad del eminente poeta, llega a inclinarse en honor a él.
Esto ayuda a mantener a Virgilio en primer plano dentro
del poema, ya que (como residente del Limbo) Virgilio
era el menos calificado como guía aquí que como lo era
en el infierno.[3]
Como residente del Purgatorio, Sordello
está capacitado para explicar la Regla de la Montaña:
que luego de la puesta del sol las almas son literalmente
incapaces de seguir escalando más peñas. Alegóricamen-
te, el Sol representa a Dios, significando que el progreso
en la penitente vida cristiana solo puede llegar a hacerse
mediante la Gracia divina[3]
(del Cantos VI al VII).
Desde que el Sol se pone, Dante sus compañeros se detie-
nen para pasar la noche en un hermoso valle donde llegan
a conocer a personas a quienes sus preocupaciones acer-
ca de sus deberes públicos y personales obstaculizaron
su progreso espiritual, especialmente fallecidos monar-
cas como Rodolfo I, Otakar, Felipe el Calvo, y Enrique
III (Cantos VII y VIII).
A medida que se acerca la noche, las almas cantan las
Completas Salve Regina y Te lucis ante terminum (otro
canto cristiano de aquella época). La hermosa descrip-
ción de Dante acerca de la noche en el valle fue la inspi-
ración de similares pasajes en la obra de Lord Byron Don
Juan:[12]
Caminando desde un sueño, Dante se da cuenta que ha-
bía sido llevado a la puerta correcta del purgatorio. Es-
ta puerta tiene tres caminos: Blanco pulido (reflejando la
pecaminosidad del verdadero yo del penitente), Negro (el
color del luto, con grietas en forma de Cruz), y Roja (sim-
bolizando la sangre de Cristo y la restauración de la vida
plena o verdadera)[13][14]
(Canto IX).
La puerta estaba custodiada por un ángel que usa la hoja
de su espada para escribir la letra “p” (significando pecca-
tum, pecado) siete veces en la frente de Dante, ordenán-
dole “Haz que lave, cuando esté dentro, estas llagas.”[15]
El ángel usa dos llaves, de plata (remordimiento) y de
oro (reconciliación) para abrir la puerta, siendo ambas
necesarias.[13]
3 Las siete gradas del Purgatorio
Desde la puerta del Purgatorio, Virgilio guía a Dante a
través del peregrino sus siete terrazas. Estos corresponden
a los siete pecados capitales o “siete raíces del pecado.”
[16] La clasificación del pecado aquí es más psicológi-
ca que la del Infierno, que se basa en motivos, en lugar
de acciones. [17] También es elaborado principalmente a
partir de La teología cristiana, y no de las fuentes clási-
cas. [18] El núcleo de la clasificación se basa en el amor,
con las primeras tres terrazas del purgatorio en relación
con el amor pervertido dirigido a los daños reales de los
demás. La terraza de la cuarta se refiere al amor deficien-
te (es decir, la pereza o acedia), mientras que las últimas
tres terrazas se relacionan con el amor excesivo o desor-
denado de las cosas buenas. [16]
Cada terraza purga un pecado en particular de manera
adecuada (aquellos en el purgatorio pueden dejar volun-
tariamente su círculo, pero solo lo hará cuando se haya
corregido el defecto dentro de sí mismos que llevaron a
cometer el pecado). La estructura de la descripción poéti-
ca de estas terrazas es más sistemática que la del Infierno,
[19] y se asocia con cada terraza son una oración apro-
piada, una bienaventuranza, y los ejemplos históricos y
mitológicos del pecado mortal pertinentes y de su virtud
opuesta.
3.1 Primer Grada (La Soberbia)
Las tres primeras terrazas del Purgatorio están relacio-
nadas con pecados causados por un mal amor que de al-
guna forma llega a herir a la persona amada. El primero
de estos es el Orgullo. En la terraza hay almas orgullo-
sas purgando sus culpas, Dante y Virgilio ven hermosas
4. 4 3 LAS SIETE GRADAS DEL PURGATORIO
El primer ejemplo de humildad está dado por la Anunciacion.
Relieve en la catedral de Auch, Canto 10.
esculturas expresando humildad, la virtud opuesta. El pri-
mer ejemplo es la Anunciación de la Virgen María, donde
ella responde al ángel Gabriel con las palabras Ecce an-
cilla Dei (“He aquí la esclava del Señor,” Lucas 1:38[16]
).
Un ejemplo de humildad de la historia clásica es cuando
el emperador Trajano, de acuerdo con una leyenda me-
dieval, en una ocasión paró su jornada para hacer justicia
a una pobre viuda (Canto X).
También asociado con la humildad esta el Padre nuestro:
Padre nuestro, que en el cielo estás,
no circunscrito, mas por el más amor
que a los primeros efectos allá arriba has.
Alabado sea tu nombre y tu valor
de toda criatura, porque es digno
rendir gracias a tu dulce vapor.
Venga a nosotros la paz de tu reino,
que a ella por nosotros no podemos no,
si ella no viene, con todo nuestro ingenio.
Como de su querer los ángeles tuyos
te ofrecen sacrificio, cantando hosanna,
así también los hombres del suyo.
Danos hoy el cotidiano maná,
sin el cual por este áspero desierto
atrás se vuelve cuando más de ir se afana.
Y como nosotros el mal que hemos sufrido
perdonamos a cada uno, también tú perdona
benigno, y no mires nuestro merecido.
Nuestra virtud que fácilmente se rinde,
no pruebes con el antiguo adversario,
mas líbranos de él, que así la incita.”[17]
Luego de haber sido introducidos en la humildad, Dan-
te y Virgilio conocen las almas de los orgullosos, quienes
han sido doblados por el peso de enormes piedras en sus
espaldas. Mientras ellos caminan por la terraza, pueden
La construcción de la Torre de Babel fue para Dante un ejemplo
de orgullo. Obra de Pieter Brueghel el Viejo, Canto 12.
llegar a ver y analizar los ejemplos de humildad en las
esculturas. La primera de estas almas es Omberto Aldo-
brandeschi, cuyo orgullo está junto a él en su descenso
(“Yo era un Italiano, hijo de un gran Toscano: / mi padre
fue Guiglielmo Aldobrandesco”[18]
), aunque está apren-
diendo a ser más humilde[19]
(“Yo / no sé si habéis oído su
nombre”[20]
). Oderisi de Gubbio es un ejemplo de orgu-
llo a causa de logros – él era un reconocido artista por sus
manuscritos iluminados.[19]
Provenzano Salvani, líder de
los gibelinos, es un ejemplo del orgullo a causa del poder
sobre otros[19]
(Canto XI).
En el Canto XIII, Dante señala, con “franca
auntoconciencia”[21]
que el orgullo es un defecto en
el:
“yo sufro mucho más la pena debajo;
mi alma ansiosa está, en suspenso; preparada
siento el gran peso de la primera terraza”[22]
Luego de la conversación con el orgulloso, Dante ve al-
gunas esculturas mucho más alejadas, estas ilustraban el
orgullo mismo. Estas mostraban a Satanás (Lucifer), la
Torre de Babel, el rey Saúl, a Aracne, el rey Roboam, y
otros. Luego los poetas acienden a la siguiente terraza, Un
ángel cepilla con sus alas la frente de Dante, borrando la
letra “P” (peccatum) correspondiente al pecado del orgu-
llo, y Dante oye la beatitud Beati pauperes spiritu (“Ben-
ditos son los pobres en espíritu” Mateo 5:3[23]
) (Canto
XII).
3.2 Segunda Grada (La Envidia)
La envidia era el pecado que “mira con deseo y repudio
la fortuna y riquezas de otros, tomando cualquier opor-
tunidad para quitarles o privarles de su felicidad”[24]
) Tal
como una de las almas envidiosas dice::
“Mi sangre estaba hirviendo con tanta
envidia, que,
5. 3.2 Segunda Grada (La Envidia) 5
El ejemplo de generosidad clásica de Dante es la amistad entre
Orestes y Pílades. De acuerdo con Cicerón De Amicitia, Pilades
pretendió ser Orestes para evitarle a este la ejecución que a este
le esperaba, Canto 13.
cuando llegaba a ver a un hombre ser feliz,
hubieras podido ver la livides que me
invadia.”[25]
Al entrar a la terraza de los envidiosos, Dante y Virgi-
lio en un primer momento oyen voces contando historias
acerca de la generosidad, la virtud opuesta. Aquí, tal co-
mo en las otras terrazas, hay un episodio de la vida de la
Virgen María. Además, hay una historia clásica, la amis-
tad de Orestes y Pílades[26]
), y Jesús predicando “Ama
a tus enemigos.”[27]
Las almas de los envidiosos vestían
túnicas grises de penitencia,[26]
y tenían sus ojos cosidos,
recordando la forma en cómo los cetreros cosían los ojos
de sus halcones para lograr entrenarlos[26]
– así se les ha-
cia más necesario poder oír que poder ver, como en este
ejemplo (Canto XIII).
Las almas de los envidiosos incluyen a Guido del Duca,
quien les habla amargamente sobre los principios éticos
de las personas que vivían a lo largo del río Arno:
“Entre brutos puercos, dignos más de be-
llotas
que de otro pasto propio del humano uso,
arrastra primero su pobre curso.
Perros encuentra luego, siguiendo abajo,
que gruñen más de lo que les toca,
y de ellos desdeñoso tuerce el morro.
Vase cayendo; y cuando más engorda,
tanto más halla perros hacerse lobos
la maldita y desventurada fosa.
Bajando luego por piélagos más hondos,
encuentra zorros tan llenos de fraude,
que no temen ingenio que los entrampe.”[28]
Las voces en el aire también incluyen ejemplos de envidia.
Uno clásico es el de Aglauros, quien (según Ovidio) fue
Caín celoso de su hermano Abel, ejemplo de Dante sobre la en-
vidia, pintado por James Tissot, Canto 14.
convertido en piedra porque estaba celosa del amor de
Hermes por su hermana, Herse. Un ejemplo bíblico es
Caín,[29]
mencionado aquí no por su acto de fratricidio,
sino por los celos que lo llevaron a él (Canto XIV).
A medida que va saliendo de la terraza, la deslumbrante
luz emitida por el ángel de la terraza hace que Dante re-
vele un poco de su conocimiento científico, pues observa
que el ángulo de incidencia de la luz es igual al ángulo de
reflexión[30]
“tal como la teoría y los experimentos habían
demostrado”[31]
(Canto XV).
El apedreamiento de San Esteban brinda claro ejemplo de la ira,
tanto como de mansedumbre por parte del santo, siendo esta la
virtud opuesta. Pintado por Rembrandt, Canto 15.
6. 6 3 LAS SIETE GRADAS DEL PURGATORIO
3.3 Tercera Grada (La Ira)
En la terraza de los iracundos, ejemplos de mansedumbre,
la virtud opuesta, son mostrados a Dante como visiones
en su mente. Como ejemplo clásico tenemos a la esposa
de Pisístrato pidiendo por la ejecución de un hombre que
había abrazado a su hija, a esto Pisístrato habría respon-
dido: “Que debieramos hacer a alguien que nos hiere / si
alguien que nos ama aprende (con el significado de temer)
de nuestra condena?"[32]
San Esteban brinda un ejemplo
bíblico, señalado en Hechos de los Apóstoles 7:54–60[33]
(Canto XV):
“Después vi gente inflamadas en ira,
con piedras matar a un jovencito, unidos en
un solo y fuerte grito: ¡Mátalo, mátalo!
Y lo veía inclinarse, por la muerte
que ya le pesaba, hacia la tierra,
mas con los ojos siempre al cielo alzados,
orando al alto Sire, entre tanta guerra,
que perdonase a sus perseguidores,
con aquel semblante que a piedad lleva.”[34]
Las almas de los llenos de ira caminaban en humarolas de
acre, esto simboliza el cegador efecto del enojo:[35]
“Oscuridad de infierno y de noche priva
de todo planeta, bajo pobre cielo,
cuanto ser puede de nubes atenebrada,
no cubrió mi rostro de tan espeso velo,
como aquel humo que allí nos cubría,
ni nunca hubo más áspero pelo,
que el ojo abierto sufrir podría;"[36]
Marco Lombardo discute con Dante acerca del Libre al-
bedrío – un tema relevante, ya que no hay razones pa-
ra discutir con alguien que no tiene control sobre sus
acciones[35]
(Canto XVI). Dante también tiene visiones
con ejemplos de ira, tales como Amán y Lavinia. La ora-
ción de esta terraza es el Agnus Dei: "Agnus Dei, qui to-
llis peccata mundi, miserere nobis... dona nobis pacem."
(“Cordero de Dios, tú que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros... danos la paz.”) (Canto XVII).
En este punto Virgilio explica a Dante la organización del
purgatorio y su relación con el amor pervertido, deficiente
o mal dirigido. Las terrazas que habían recorrido hasta el
momento habían borrado la soberbia (“Aquel que a través
de la humillación de otros, / espera la supremacía”[37]
), la
envidia (“Ese quien, cuando es superado, / teme la pro-
pia perdida de su fama, de poder, de honor, y favor; /
deseando con locura el infortunio de sus vecinos.”[38]
),
y la ira (“Aquel, sobre lastimado / recibido, resentido,
por venganza codicioso / y, con enojo, busca dañar a los
otros.”[39]
). Todos ellos, amores mal direccionados. (Can-
tos XVII y XVIII).
3.4 Cuarta Grada (La Pereza)
En la cuarta terraza se podrían encontrar las almas de
aquellos que pecaron por descuido lo que sería la Pereza.
Desde el momento en vida en que se falla al buscar el
amor, aquí son condenados a incesantes trabajos. Los
ejemplos de entusiamo o energía, las virtudes opuestas,
son clamados por las almas que recorren la terraza. Es-
tos ejemplos incluyen episodios de la vida de la Virgen
María, Julio Cesar y Eneas. Esta actividad, además, rem-
plaza las oraciones verbales de esta terraza. Estos pere-
zosos están demasiado ocupados siquiera para conversar
durante sus trabajos, por ello esta es una de las secciones
más cortas del poema.
Alegóricamente, la pereza espiritual y la falta de cuidado
llevan a la tristeza,[40]
la buenaventuranza de esta terraza
es Beati qui lugent (“Benditos sean los que sufren, pues se-
ran reconfortados,” Mateo 5:4[41]
) (Canto XVIII y XIX).
Al caer la segunda noche, con los poetas aún en la terraza,
Dante sueña con una Sirena (Canto XIX).
Los espíritus de la quinta terraza yacen boca abajo, Canto 19.
3.5 Quinta Grada (La Avaricia)
En las tres últimas terrazas se encuentran los que peca-
ron por amar buenas cosas, pero amándolas excesivamen-
te o desordenadamente. En la quinta terraza, la excesiva
preocupación por los bienes terrenales, ya sea codiciosa-
mente o extravagantemente, es castigada y purificada, y
7. 3.6 Sexta Grada (La Gula) 7
los avaros y los adinerados yacen boca abajo al suelo, sin
posibilidad de moverse. Sus oraciones son Adhaesit pavi-
mento anima mea, tomada de Salmos 119:25 (“Mi alma
esta adeherida al polvo, vivificame con Tu Palabra,”[42]
),
una oración que expresa el deseo de seguir las Leyes de
Dios(Canto XIX).
En esta terraza, Hugo el Grande se lamenta, en contraste,
cómo la avaricia había motivado las acciones de sus su-
cesores, y “profetiza” eventos que sucederían luego de la
época en la que se ubica al poema, pero antes de la época
en que es escrito el poema:
Los Templarios siendo quemados por supuesta herejía, acusación
motivada por Felipe IV de Francia. Desde el punto de vista de
Dante, esta fue una acción política motivada por la avaricia,[43]
Canto 20.
“Al otro, que hasta salió preso en una nave,
veo vender a su hija pactando precio,
como los corsarios hacen de otras esclavas.
¡Oh avaricia! ¿qué más puedes hacer,
que así te has apropiado de mi sangre
que ni te cuidas de tu propia carne?
Para que menos se vea el mal futuro y pasado,
veo en Anagni entrar la flor de lis,
y en su vicario quedar Cristo encarcelado.
Véolo ser de nuevo burlado;
veo renovar el vinagre y la hiel,
y entre vivos ladrones ser occiso.
Veo al nuevo Pilato, una vez tan cruel,
que ni eso lo sacia, pues sin decreto
hasta el Temple lleva las codiciosas velas.”[44]
Entre estos eventos se incluyen cómo Carlos II de Ná-
poles dio a su hija en matrimonio a un anciano de ma-
la fama,[45]
y cómo Felipe IV de Francia (“el hermoso”)
arrestó al Papa Bonifacio VIII en 1303 (uno de los Papas
destinados al infierno, de acuerdo con la narración en el
Inferno, pero aun así, según las ideas de Dante este era el
Vicario de Cristo[45]
). Dante también comenta acerca de
la destrucción de la Orden de los Templarios por deseos
de Felipe en 1307, lo que liberó a Felipe de las deudas
que tenía con la orden (Canto XX).
En una escena, que Dante relaciona con el episodio en
el que Jesús se aparece a dos discípulos en el camino
hacia Emaús,[46]
Dante y Virgilio son alcanzados por el
poeta Stacio (aprox. 45-96 d.C), a quien Dante presenta
(no en bases obvias o entendibles) como un convertido al
Cristianismo.[46]
Acababa de finalizar su purificación en
aquel círculo, y, como cristiano, su guía sería apta para
complementar la de Virgilio.[46]
(Canto XXI).
La Batalla entre Lápitas y Centauros es un ejemplo clásico de
gula. Pintado por Piero di Cosimo, Canto 24.
3.6 Sexta Grada (La Gula)
La sexta terraza purifica a los glotones, y en general, a
todos aquellos que a pesar de estar satisfechos insistían
al comer, beber, saciar su cuerpo.[47]
En una evocado-
ra escena del castigo de Tántalo, los glotones mueren de
hambre ante árboles llenos de frutos que nunca estaran a
su alcance.[47]
En este círculo los ejemplos son dados por
voces que se escuchan entre los árboles. Juan el Bautis-
ta, quien vivía de langostas y miel (Mateo 3:4[48]
), es un
ejemplo de las virtudes opuestas, templanza o modera-
ción;[47]
mientras que un ejemplo clásico de gula es cuan-
do los Centauros ebrios se enfrentan a los Lápitas.[47]
El rezo para esta terraza es los labios me dominan (el
Salmo 51:15: " Oh Lord, abra mis labios, y mi boca de-
clarará su alabanza " 49) Estos son las palabras de aper-
tura de la Liturgia diaria de la horas.(los rezos para las
quintas y séptimas terrazas también son tomados de la
Liturgia de las Horas) (Canto XXII a XXIV). Aquí Dan-
te también encuentra a su amigo Forese Donati y su pre-
cursor poético Bonagiunta Orbicciani. Bonagiunta tiene
palabras amables para el poema más temprano de Dan-
te, La Vita Nuova, describiéndolo como el nuevo estilo
dulce, y cotizando la línea " las Damas que tienen la inte-
ligencia de amor, " 51 escrito en la alabanza de Beatriz,
a quién él encontrará más tarde en el Purgatorio:
" Las damas que tienen la inteligencia de
Amor,
yo de mi señora desean con usted hablar;
No, que yo pueda creer para terminar su
alabanza,
Pero al discurso que puedo aliviar mi mente.
Digo que cuando pienso sobre su valor,
Tan dulce que se hace sentir en mí,
Que si yo entonces debería perder no la auda-
cia,
8. 8 3 LAS SIETE GRADAS DEL PURGATORIO
la Oratoria, yo debería enamorar toda la huma-
nidad. "[49]
Subiendo a la séptima terraza, Dante se pregunta como
es posible para almas incorpóreas tener el aspecto des-
carnado de las almas siendo privadas de comida aquí. En
explicación, Statius Habla de la naturaleza del alma y su
relación al cuerpo (Canto XXV).
Virgil, Dante, and Statius beside the flames of the seventh terrace,
Canto 25.
3.7 Séptima Grada (La Lujuria)
La terraza de la lujuria tiene una inmensa pared de lla-
mas a través del cual todos deben pasar. Almas arrepin-
tiéndose de deseo mal dirigido sexual se ejecutan a través
de las llamas gritando ejemplos de la lujuria (Sodoma y
Gomorra y Pasífae) y de la castidad y la fidelidad marital.
Como una oración, cantan el himno Sumas Deus Clemen-
tiae (Dios de la Suprema Clemencia) de la Liturgia de las
Horas (Cantos XXV y XXVI).
A medida que el círculo de la terraza, los dos grupos de
penitentes se saludan de forma que Dante se compara con
las hormigas:
“Allí veo de todas partes apresurarse
cada sombra y besarse una con otra
sin quedarse, contentas con breve fiesta:
así por entre su hilera oscura
se hociquean una con otra las hormigas,
quizá para saber del camino o la fortuna.”[50]
Dante sueña con Lea recogiendo flores, simbolizando la vida
cristiana activa (no monástica), Canto 27.
Entre las flamas, a las que no se atreve a entrar, están los
poetas románticos Guido Guinizelli y Arnaut Daniel, con
quienes Dante conversa. Le recuerdan a Dante que a Bea-
triz puede encontrarla al otro lado del Paraíso Terrenal,
finalmente Virgilio persuade a Dante para que pase entre
las llamas (Cantos XXVI y XXVII).
En los escalones del paraíso terrenal, la noche cae por ter-
cera vez, y Dante sueña con Lea y Raquel, quienes sim-
bolizan la vida cristiana activa y no monástica, y tam-
bién la vida cristiana de contemplación (monástica), am-
bas importantes[51]
(Canto XXVII):
“Joven y bella en sueños parecíame
ver una dama andando por una landa
cogiendo flores, y cantando decía:
Sepa quienquiera que mi nombre demanda
que soy Lía, y voy moviendo en torno
las bellas manos para hacerme una guirnalda.
Por placerme ante el espejo, me adorno;
pero mi hermana Raquel nunca se aparta
de su espejo, todo el día sentada.
Ella de ver sus bellos ojos está enamorada
como yo de adornarme con las manos;
a ella el mirar, y a mí el obrar nos aplaca.”[52]
9. 9
4 El Paraíso Terrenal
Dante encuentra a Matelda, Litografia de Cairoli (1889).
En la cima del Monte Purgatorio se encuentra el Paraíso
Terrenal o el Jardín del Edén.[53]
Alegóricamente, repre-
senta la inocencia que existía antes de que Adán y Eva
perdieran la Gracia de Dios – el estado que el ascenso
de Dante al purgatorio ha estado recuperando.[53]
Aquí
Dante conoce a Matilda, una mujer cuya identidad lite-
ral y alegórica “es seguramente el problema más tentador
de la Comedia.”[53]
De todas maneras, Matilda prepara a
Dante para su encuentro con Beatriz,[53]
la mujer a la que
(históricamente) Dante dedicó sus anteriores poesías, la
mujer a cuyo pedido (en la historia) Virgilio fue ordena-
do traer a Dante en su viaje,[54]
y la mujer que (alegorica-
mente) simboliza el camino a Dios[55]
(Canto XXVIII).
Con Matilda, Dante es testigo de una procesión que for-
ma una alegoría dentro de la alegoría, algo así como la
obra de Shakespeare en una obra de teatro. Tiene un es-
tilo muy diferente del Purgatorio como un todo, tiene la
forma de una máscara, donde los personajes están cami-
nando símbolos en lugar de personas reales. La procesión
consiste (Canto XXIX):
• “Veinticuatro ancianos”[56]
(a reference to Reve-
lation 4:4[57]
), representing the 24 books of the
Hebrew Bible, as classified by Jerome[58]
• “Cuatro animales” con “seis alas de plumas”[59]
(a
reference to Revelation 4:6–8[60]
), como una repre-
sentación tradicional de los cuatro Evangelistas[58]
• “Un carro triunfal en dos ruedas,”[61]
portando a
Beatrice, que es arrastrado por...
• Un Grifo,[62]
representando la divinidad y humani-
dad de Cristo[58]
• “Tres mujeres en círculos” coloreadas de rojo, verde
y blanco,[63]
representando las tres virtudes teologa-
les: Caridad, Fe, and Esperanza, respectivamente[58]
• “Otras cuatro mujeres”[64]
vestidas de púrpura,[65]
representando las cuatro virtudes cardinales:
Prudencia, Justice, Temperance, and Coraje[58]
• “Dos ancianas, con vestidos diferentes,”[66]
repre-
sentando los Hechos de los Apóstoles y las Epístolas
paulinas[58]
• “Cuatro personas de aspecto humilde,”[67]
represen-
tando las Epístolas generales[58]
• “Cuando todos los demás pasan, un solitario
anciano,”[68]
representando el Apocalipsis[58]
Beatrice Addressing Dante, by William Blake, showing the “cha-
riot triumphal” bearing Beatrice and drawn by the Griffin, as well
as four of the ladies representing virtues, Canto 29.
La apariencia de Beatrice,[69]
y una dramática escena de
reconciliación entre Beatrice y Dante, en el que ella re-
procha su pecado (Cantos XXX and XXXI), ayuda a cu-
brir la desaparición de Virgilio, que, como símbolo de la
filosofía y humanidad no cristiana, no puede ayudarle más
en su acercamiento a Dios[70]
(Y en el resto de “Divina
Comedia”, Beatriz se convierte en la guía de Dante):
“Pero Virgilio nos había privado de sí mis-
mo, Virgilio, el más gentil padre, Virgilio, a
quien me dio a mi auto para mi salvación;
e incluso toda nuestra antigua madre perdi-
da no era suficiente para mantener a mis meji-
llas, a pesar de lava de rocío, el oscurecimiento
de nuevo con lágrimas. “71[71]
Dante pues pasa por el río Lethe, que le borra la memo-
ria de sus anteriores pecados (Canto XXXI),[72]
y ve una
10. 10 7 REFERENCIAS
Matilda ayuda a Dante a pasar por el río Lethe, Canto 31.
alegoría de la historia Bíblica y de la Iglesia, en la que el
carruaje representa a la Iglesia. Esta alegoría incluye una
denuncia de los papados corruptos, y sus vínculos con la
monarquía Francesa[73]
(Canto XXXII):
“Tan segura como una fortaleza sobre una
alta montaña,
vi sentada en el carro a una prostituta desen-
vuelta,
paseando sus miradas en torno suyo.
Y como para impedir que se la quitaran,
vi un gigante colocado en pie junto a ella,
y ambos se besaban de vez en cuando;"[74]
Finalmente, Dante bebe del río Eunoë, recuperando la
memoria, y preparándose para su ascenso al Paraíso (des-
crito en el Paradiso). Al igual que en las otras dos partes
de la Divina Comedia, el Purgatorio acaba con la palabra
“estrellas” (Canto XXXIII):
“Volví a aquellas sacrosantas ondas
tan reanimado como las plantas nuevas
renovadas con nuevas hojas,
purificado y dispuesto a subir a las estrellas.”[75]
5 El Purgatorio en las artes
La Divina Comedia fue una fuente de inspiración para
incontables artistas por casi siete siglos. Mientras las re-
ferencias al Inferno son las más comunes, también hay
muchas al Purgatorio. La Sinfonía de la Divina Comedia
de Dante (Dresden - noviembre de 1857) de Franz Liszt
tiene un movimiento del “Purgatorio”, como lo hace La
Divina Comedia de Robert W. Smith. Chaucer y otros
hicieron referencia al Purgatorio en sus escritos. Muchos
artistas visuales representaron escenas del Purgatorio, in-
cluyendo Gustave Doré, John Flaxman, Dante Gabriel
Rossetti, John William Waterhouse, y William Blake.
6 Véase también
• Anexo: Personajes del Purgatorio
7 Referencias
[1] Infierno, Canto 34.
“EL que nació y viviera sin pecado:
/ tienes los pies sobre la estrecha esfera /
que la Judeca forma al otro lado; / “aquí,
amanece; allá, la sombra impera; / y éste que
por escala nos dio el pelo, / está lo mismo
que antes estuviera. / “A esta parte cayó del
alto cielo, / y la tierra, al principio dilatada, /
con espanto tendió del mar el velo, / y a este
hemisferio arrebatada; / y dejando vacío al
centro roto / aquí formó montaña levantada;
Traducción de Bartolomé Mitre
[2] Purgatorio, Canto I, lines 4–8, Longfellow translation.
[3] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notes on Canto VII.
[4] Psalm 114 (Psalm 113 in the Latin Vulgate): “When Israel
came out of Egypt” (NIV).
[5] “The Letter to Can Grande,” in Literary Criticism of Dante
Alighieri, Traducida y editada por Robert S. Haller (Lin-
coln: University of Nebraska Press, 1973), 99.
[6] Robin Kirkpatrick, Purgatorio, Notas en el Canto I: “Thus
behind all the references that the canto makes to regene-
ration y rebirth there is the realization that all life y all
redemption depends upon Christ’s Resurrection from the
dead.”
[7] Richard H. Lansing y Teodolinda Barolini, The Dan-
te Encyclopedia, Taylor & Francis, 2000, ISBN 0-8153-
1659-3, pp. 328–330 (EARTH, GLOBE).
[8] John Brian Harley y David Woodward, The History of
Cartography, Humana Press, ISBN 0-226-31633-5, p.
321.
11. 11
[9] Purgatorio, Canto II, líneas 1–9, traducción de Mandel-
baum .
[10] Purgatorio, Canto IV, lines 123–124, Mandelbaum trans-
lation.
[11] Purgatorio, Canto V, líneas 133–136, traducción de Man-
delbaum .
[12] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notas en el Canto VIII.
[13] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notes on Canto IX.
[14] Robin Kirkpatrick, Purgatorio, notas en el Canto IX.
[15] Purgatorio, Canto IX, líneas 113–114, Longfellow trans-
lation.
[16] Lucas 1:38, KJV.
[17] Purgatorio, Canto XI, líneas 1–21, La Divina Comedia
desde Wikisource.
[18] Purgatorio, Canto XI, línea 58–59, traducción de Mandel-
baum.
[19] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notas en el Canto XI.
[20] Purgatorio, Canto XI, línea 59–60, traducción Mandel-
baum.
[21] Guy P. Raffa, The Complete Danteworlds: A Reader’s Gui-
de to the Divine Comedy, University of Chicago Press,
2009, ISBN 0-226-70270-7, p. 164.
[22] Purgatorio, Canto XIII, líneas 136–138, traducción de
Mandelbaum.
[23] Matthew 5:3 NIV.
[24] (en contraste a la codicia, que es el deseo excesivo de tener
más dinero
[25] Purgatorio, Canto XIV, líneas 82–84, traducción de Man-
delbaum.
[26] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notas el el Canto XIII.
[27] Matt 5:44, NIV.
[28] Purgatorio, Canto XIV, líneas 43–54, Wikisource.
[29] Purgatorio, Canto XIV, línea 133, traducción de Man-
delbaum: “Whoever captures me will slaughter me,” cf
Genesis 4:14 (NIV): “whoever finds me will kill me.”
[30] Robin Kirkpatrick, Purgatorio, notas en el Canto XV.
[31] Purgatorio, Canto XV, línea 21, traducción de Dorothy L.
Sayers, 1955.
[32] Purgatorio, Canto XV, líneas 104–105, traducción de
Mandelbaum.
[33] Acts 7:54–60, NIV.
[34] Purgatorio, Canto XV, líneas 106–114, Wikisource.
[35] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notas en el Canto XVI.
[36] 'Purgatorio, Canto XVI, líneas 1–7, Wikisource.
[37] Purgatorio, Canto XVII, líneas 115–116, traducción de
Mandelbaum.
[38] Purgatorio, Canto XVII, líneas 118–120, traducción de
Mandelbaum.
[39] Purgatorio, Canto XVII, líneas 121–123, traducción de
Mandelbaum.
[40] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notas en el Cantos XVIII y
XIX.
[41] Mateo 5:4 NIV.
[42] Salmos 119:25, KJV. En la Vulgata, Esta es el Salmo
118:25.
[43] Robin Kirkpatrick, Purgatorio, notas en el Canto XX: “En
el canto 20 es común identificar cómo la avaricia es la
fuerza motora de la ambición de la Dinastía de los Cape-
tos.”
[44] Purgatorio, Canto XX, líneas 79–93, Wikisource.
[45] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notas en el Canto XX.
[46] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notas en el Canto XXI.
[47] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notas en el Canto XXII.
[48] Mateo 3:4, NIV.
[49] La Vita Nuova, Section XIX, lines 1–8, translated by
Charles Eliot Norton.
[50] Purgatorio, Canto XXVI, líneas 31–36, Wikisource.
[51] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notas en el Canto XXVII.
[52] Purgatorio, Canto XXVII, líneas 97–108, Wikisource.
[53] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notes on Canto XXVIII.
[54] Dorothy L. Sayers, Hell, notes on Canto II.
[55] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notes on Canto XXX.
[56] Purgatorio, Canto XXIX, line 83, Mandelbaum transla-
tion.
[57] Revelation 4:4, NIV.
[58] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notes on Canto XXIX.
[59] Purgatorio, Canto XXIX, lines 92–105, Mandelbaum
translation.
[60] Revelation 4:4:6–8, NIV.
[61] Purgatorio, Canto XXIX, line 107, Mandelbaum transla-
tion.
[62] Purgatorio, Canto XXIX, lines 108–114, Mandelbaum
translation.
[63] Purgatorio, Canto XXIX, lines 121–129, Mandelbaum
translation.
[64] Purgatorio, Canto XXIX, line 130, Mandelbaum transla-
tion.
12. 12 8 ENLACES EXTERNOS
[65] Purgatorio, Canto XXIX, line 131, Longfellow transla-
tion.
[66] Purgatorio, Canto XXIX, lines 134–141, Mandelbaum
translation.
[67] Purgatorio, Canto XXIX, line 142, Mandelbaum transla-
tion.
[68] Purgatorio, Canto XXIX, lines 143–144, Mandelbaum
translation.
[69] John Laskin, The Entrance of Beatrice in Dante’s Purgato-
rio: Revelation, Duality and Identity, Carte Italiane, 1(14),
1994, p. 120: “Virgilio slips unnoticed offstage while our
attention is cleverly desviando el esplendor visual del efec-
to de la 'nube de flores’.”
[70] Robin Kirkpatrick, Purgatorio, notes on Canto XXX and
XXXI.
[71] Purgatorio, Canto XXX, lines 49–54, Mandelbaum trans-
lation.
[72] Dorothy L. Sayers, Purgatory, Introduction, p. 68 (Pen-
guin, 1955).
[73] Dorothy L. Sayers, Purgatory, notes on Canto XXXII.
[74] Purgatorio, Canto XXXII, lineas 148–153, Mandelbaum
translation.
[75] Purgatorio, Canto XXXIII, lineas 142–145, Mandelbaum
translation.
8 Enlaces externos
• C. de Fonzo, La leggenda del Purgatorio de S. Pa-
trizio nella tradizione de commento trecentesca. (En
italiano).
• Lectura y comentarios de Vittorio. (En italiano).
• Wikisource contiene obras originales de o sobre
Divine Comedy/Purgatorio.Wikisource
• World of Dante Multimedia website that offers Ita-
lian text of Divine Comedy, Allen Mandelbaum’s
translation, gallery, interactive maps, timeline, mu-
sical recordings, and searchable database for stu-
dents and teachers by Deborah Parker and IATH
(Institute for Advanced Technologies in the Huma-
nities) of the University of Virginia
• Princeton Dante Project Website that offers the
complete text of the Divine Comedy (and Dante’s ot-
her works) in Italian and English along with audio
accompaniment in both languages. Includes histori-
cal and interpretive annotation.
• Dante Dartmouth Project: Full text of more than
70 Italian, Latin, and English commentaries on the
Commedia, ranging in date from 1322 (Iacopo Alig-
hieri) to the 2000s (Robert Hollander)
• Dante’s Divine Comedy presented by the Electronic
Literature Foundation. Multiple editions, with Ita-
lian and English facing page and interpolated ver-
sions.
• The Comedy in English: trans. Cary (with Do-
ré's illustrations) (HTML), trans. Cary (with Doré's
illustrations) (zipped HTML downloadable from
Project Gutenberg), Cary/Longfellow/Mandelbaum
parallel edition
• On-line Concordance to the Divine Comedy
• Audiobooks: Public domain recordings from Libri-
Vox (in Italian, Longfellow translation); some addi-
tional recordings
• Danteworlds, multimedia presentation of the Divine
Comedy for students by Guy Raffa of the University
of Texas
• Dante’s Places: a map (still a prototype) of the pla-
ces named by Dante in the Commedia, created with
GoogleMaps. An explanatory PDF is available for
download at the same page
• Gustave Dore - Purgatorio Complete 42 hi-res pics
album
13. 13
9 Text and image sources, contributors, and licenses
9.1 Text
• Purgatorio (Divina Comedia) Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Purgatorio%20(Divina%20Comedia)?oldid=80356962 Colaborado-
res: Oblongo, Rosarino, Ketamino, CEM-bot, Ggenellina, Srengel, Xabier, Botones, CommonsDelinker, TXiKiBoT, Dcoetzee, Muro Bot,
Macarrones, Bigsus-bot, Pedro Felipe, NicolasAlejandro, Dr Jorgen, FariBOT, LyingB, FrescoBot, TiriBOT, PatruBOT, ZéroBot, Filtra-
tor, WeirdLarry, TrOOnies-PCF, JhonLoz12, Cordwainer, Miguel.zoom, Nayara es, Gerson3030, KLBot2, Invadibot, Lizzyxiqita, Richard
Lyon, Addbot, Stee 16, Carlitosh2 y Anónimos: 33
9.2 Images
• Archivo:Beatrice_Addressing_Dante_(by_William_Blake).jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/8/84/
Beatrice_Addressing_Dante_%28by_William_Blake%29.jpg Licencia: Public domain Colaboradores: selbst gescannt Artista original:
William Blake
• Archivo:Blake_Dante_Purgatory_9.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/5/55/Blake_Dante_Purgatory_9.jpg
Licencia: Public domain Colaboradores: Desconocido Artista original: William Blake
• Archivo:Cain_leadeth_abel_to_death_tissot.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/8/82/Cain_leadeth_abel_
to_death_tissot.jpg Licencia: Public domain Colaboradores: http://www.cts.edu/ImageLibrary/tissot.cfm Artista original: James Tissot
• Archivo:Cairoli,_Dante_incontra_Matelda_(1889).jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/0/0d/Maignan%2C_
Le_Dante_rencontre_Matilda_%281881%29.jpg Licencia: Public domain Colaboradores: Transferred from en.wikipedia; transfer was sta-
ted to be made by User:TheDJ. Artista original: Original uploader was Wareh at en.wikipedia
• Archivo:Cathédrale_d'Auch_12.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/9/94/Cath%C3%A9drale_d%27Auch_
12.jpg Licencia: Public domain Colaboradores: Trabajo propio Artista original: Vassil
• Archivo:Dante_and_Virgilio_(Trento).JPG Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/2/21/Dante_and_Virgilio_
%28Trento%29.JPG Licencia: CC BY-SA 3.0 Colaboradores: Trabajo propio Artista original: Jaqen
• Archivo:Orestes_Elektra_Pylades_Louvre_K428.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/6/65/Orestes_
Elektra_Pylades_Louvre_K428.jpg Licencia: Public domain Colaboradores: User:Bibi Saint-Pol, Trabajo propio, 15 de junio de 2007
Artista original: Painter of Louvre K 428 (name vase)
• Archivo:Piero_di_Cosimo_015.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/a/af/Piero_di_Cosimo_015.jpg Licencia:
Public domain Colaboradores: The Yorck Project: 10.000 Meisterwerke der Malerei. DVD-ROM, 2002. ISBN 3936122202. Distributed by
DIRECTMEDIA Publishing GmbH. Artista original: Piero di Cosimo
• Archivo:Pieter_Bruegel_the_Elder_-_The_Tower_of_Babel_(Vienna)_-_Google_Art_Project_-_edited.jpg Fuente:
http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/f/fc/Pieter_Bruegel_the_Elder_-_The_Tower_of_Babel_%28Vienna%29_-_Google_
Art_Project_-_edited.jpg Licencia: Public domain Colaboradores: Levels adjusted from File:Pieter_Bruegel_the_Elder_-_The_
Tower_of_Babel_(Vienna)_-_Google_Art_Project.jpg, originally from Google Art Project. Artista original: Pieter Brueghel el Viejo
(1526/1530–1569)
• Archivo:Pur_02_dore.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/5/55/Pur_02_dore.jpg Licencia: Public domain Co-
laboradores: ? Artista original: ?
• Archivo:Pur_19_avari.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/5/59/Pur_19_avari.jpg Licencia: Public domain
Colaboradores: ? Artista original: Gustave Doré (1832-1883)
• Archivo:Pur_25.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/b/b7/Pur_25.jpg Licencia: Public domain Colaboradores:
? Artista original: ?
• Archivo:Pur_27.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/6/67/Pur_27.jpg Licencia: Public domain Colaboradores:
? Artista original: ?
• Archivo:Pur_31.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/2/2b/Pur_31.jpg Licencia: Public domain Colaboradores:
? Artista original: ?
• Archivo:Rembrandt_Harmensz._van_Rijn_150.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/0/0b/Rembrandt_
Harmensz._van_Rijn_150.jpg Licencia: Public domain Colaboradores: The Yorck Project: 10.000 Meisterwerke der Malerei. DVD-ROM,
2002. ISBN 3936122202. Distributed by DIRECTMEDIA Publishing GmbH. Artista original: Rembrandt
• Archivo:Stefano_Ussi,_La_Pia_de'_Tolomei.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/1/1d/Stefano_Ussi%2C_
La_Pia_de%27_Tolomei.jpg Licencia: Public domain Colaboradores: http://www.comune.parma.it Artista original: Stefano Ussi
• Archivo:Templars_on_Stake.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/9/91/Templars_on_Stake.jpg Licencia: Pu-
blic domain Colaboradores:
Bibliothèque Municipale, Besançon, France. Erich Lessing/Art Resource, NY.
http://de.wikipedia.org/wiki/Bild:Templars_on_Stake.jpg
de:Benutzer:Lysis
Artista original: Anónimo
• Archivo:The_Avaricious;_Pugatorio.jpg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/b/bd/The_Avaricious%3B_
Pugatorio.jpg Licencia: Public domain Colaboradores: ? Artista original: ?
• Archivo:Wikisource-logo.svg Fuente: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/4/4c/Wikisource-logo.svg Licencia: CC BY-SA
3.0 Colaboradores: Rei-artur Artista original: Nicholas Moreau
9.3 Content license
• Creative Commons Attribution-Share Alike 3.0