Las células intercambian sustancias a través de su membrana celular mediante dos mecanismos: la difusión pasiva, por la cual las moléculas se mueven de zonas de alta a baja concentración; y el transporte activo mediado por proteínas, que mueve sustancias contra gradientes de concentración utilizando energía. La osmosis permite el paso de agua a través de membranas para mantener la presión interna en las células.