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2. El superagente 86
En el mundo de la Guerra Fría, cuando la posibilidad de una
conflagración nuclear era una espada de Damocles suspendida
sobre las cabezas de las personas comunes, era lógico que
tuviera mucho éxito el género de los agentes secretos y las
intrigas internacionales.

3. El superagente 86
Pero aún más lógico era el éxito de su parodia, pues si bien el
recurso de conver tir el peligro en aventura y épica es eficaz para
aplacar la angustia, aún lo es más el de conver tirlo en broma y
sátira.

4. El superagente 86
Sátira despiadada de las por aquellos tiempos enormemente
exitosas aventuras de James Bond, El superagente 86 se emitió
entre 1965 y 1970, convir tiéndose desde entonces en un clásico
innumerables veces repuesto.

5. El superagente 86
Narra las aventuras y desventuras de Maxwell Smar t, superagente
86 (Don Adams), a quien acompañan la agente 99 (Barbara
Feldon) y el Jefe (Edward Platt). La serie contó con los guiones
del gran Mel Brooks y significó su consagración definitiva.

6. El superagente 86
Sátira de un mundo absurdo y desquiciado. Max y sus amigos
protegen al “mundo libre” a través de una organización
denominada, paradójicamente, CONTROL.

7. El superagente 86
Una organización tan secreta que ni siquiera el propio gobierno de
los Estados Unidos la conoce. Su Némesis, KAOS, la
“Organización Internacional del Mal”, no le va a la zaga en
cuanto a incompetencia y chapucerismo.

8. El superagente 86
Así resulta que ellos protegen al “mundo civilizado” (“y a los
Estados Unidos también” como dice Max) de una amenaza que
tampoco queda claro en qué consiste.

9. El superagente 86
Finalmente, siempre triunfa el bien, que resulta vencedor gracias a
la proverbial buena suer te de Max, a las opor tunas
inter venciones del Jefe o de la 99 o a alguna sorpresiva y audaz
maniobra del propio Max, que así nos sorprende, pues no
siempre es tan bobo como parece.