El documento describe el periodo Neolítico y la transición de las sociedades de cazadores-recolectores a sociedades de productores basadas en la agricultura y la ganadería, que se desarrolló de forma independiente en diferentes regiones entre el 8500 a.C. y el 7500 a.C. Se menciona el uso de herramientas de piedra pulimentada, la siembra de cereales, la invención de la alfarería y el telar, y el desarrollo de técnicas textiles como el tejido y el trenzado de
2. El Neolítico (del griego νέος, néos: ‘nuevo’, y λίθος, líthos: ‘piedra’), o Edad de Piedra
Nueva o Pulimentada, es uno de los periodos en que se considera dividida la Edad
de Piedra. El término fue acuñado por John Lubbock en su obra Prehistoric
Times (1865).
Inicialmente se le dio este nombre en razón de los hallazgos de herramientas de piedra
pulimentada, en vez de tallada; es decir, en vez de golpeada, que era menos resistente,1 que
parecían acompañar al desarrollo y expansión de la agricultura. Hoy en día se define el
Neolítico precisamente en razón del conocimiento y uso de la agricultura o del pastoreo.
Normalmente, pero no necesariamente, va acompañado por el trabajo de la alfarería.
La agricultura y la ganadería empezaron a practicarse en diferentes lugares del planeta de
manera independiente y en distintas fechas. La primera región donde se encuentran pruebas
de la transición de unas sociedades de cazadores-recolectores a otras de productores fue
Oriente Próximo, hacia el 8500 a. C., desde donde se extendió a Europa,Egipto, Oriente
Medio y, quizás, el sur de Asia. Muy poco después los procesos productores se desarrollaron
de manera totalmente independiente en el norte de China en los valles del río Amarillo y del
Yangtsé (7500 a. C.). En Nueva Guinea también se dio un desarrollo temprano
independiente de la horticultura,ya que algunos indicios sugieren que fue hacia el
7500 a. C., aunque dicha fecha es todavía insegura. En África las primeras regiones donde
se dieron las transformaciones neolíticas fueron el Sáhara Sahel y Etiopía, aunque hay
divergencia de opiniones: unos autores opinan que pudo haber existido algún tipo de
influencia desde Asia y otros consideran que el desarrollo fue independiente dado que se
domesticaron especies de plantas locales.
3. LA VIDA EN EL NEOLÍTICO
El cambio climático provoca una lenta conversión de la economía de subsistencia,
basada en la caza, hacia una economía más estable de base pastoril y apoyada en
los cultivos agricultura. Se aprecia que el hombre deja las montañas para
desplazarse hacia los llanos en persecución de sus presas de caza. El hombre
vuelve a las cuevas aunque en algunos puntos pudo conservar la utilización de
chozas en las cercanías de ríos.
El desarrollo del pastoreo da lugar a la trashumancia y a los contactos
relativamente frecuentes con gente de otras tierras, existiendo una mayor
intercomunicación entre las diversas tribus.
Para las hachas y otros instrumentos se utiliza la piedra pulida y los útiles y
algunas herramientas se fabrican frecuentemente con hueso. Aparecen también
útiles de obsidiana.
5. Trenzados de fibras y telar
Empiezan a usarse los primeros trenzados de fibras, en especial en mimbre.
Seguramente los primeros se hicieron toscamente con ramas. La técnica fue evolucionando
hasta llegarse a cestos muy bien logrados en el Neolítico, producto de la necesidad de
recolección de frutos, que existía hacia cientos o miles de años. Los cestos se hacían de
mimbre.
El huso y el telar (pueden verse en la imagen adjunta) son unos de los más revolucionarios
inventos del neolítico.5 Los humanos se dieron cuenta, por causas desconocidas, quizás por
casualidad, de que algunos productos, como la lana y el lino (y luego otros, como el
cáñamo) podían estirarse mediante un tosco huso o una barra de madera redonda. A modo
de imitación de los tejidos de los cestos, podían tejerse estos hilos y fabricar telas (las de
lana para el invierno y las de lino para el verano). Seguramente al principio se pensó utilizar
el invento para hacer cestas más ligeras, antes de destinarlos a telas de vestidos. Otra prenda
muy difundida es el saco, tejido con otro material, el esparto.
6. Trenzados de fibras y telar
Empiezan a usarse los primeros trenzados de fibras, en especial en mimbre.
Seguramente los primeros se hicieron toscamente con ramas. La técnica fue evolucionando
hasta llegarse a cestos muy bien logrados en el Neolítico, producto de la necesidad de
recolección de frutos, que existía hacia cientos o miles de años. Los cestos se hacían de
mimbre.
El huso y el telar (pueden verse en la imagen adjunta) son unos de los más revolucionarios
inventos del neolítico.5 Los humanos se dieron cuenta, por causas desconocidas, quizás por
casualidad, de que algunos productos, como la lana y el lino (y luego otros, como el
cáñamo) podían estirarse mediante un tosco huso o una barra de madera redonda. A modo
de imitación de los tejidos de los cestos, podían tejerse estos hilos y fabricar telas (las de
lana para el invierno y las de lino para el verano). Seguramente al principio se pensó utilizar
el invento para hacer cestas más ligeras, antes de destinarlos a telas de vestidos. Otra prenda
muy difundida es el saco, tejido con otro material, el esparto.