El documento describe cómo durante la Segunda Guerra Mundial, los gobiernos de ambos bandos usaron carteles de propaganda para influir en la moral de sus ciudadanos, continuando una práctica que se remonta a la Primera Guerra Mundial. La propaganda de guerra a menudo se basa en información falsa con el fin de manipular las percepciones del enemigo y mantener alta la moral de las propias tropas.
2. Durante la Segunda Guerra Mundial, a ambos
lados del conflicto los gobiernos utilizaron
carteles de propaganda con el fin de influir en
los sentimientos y la moral de sus ciudadanos.
3. La propaganda de guerra contemporánea
comenzó a usarse durante la Primera Guerra
Mundial.
A lo largo de la historia siempre se usaron
métodos para engrandecer las fuerzas y
extender información falsa. Estos métodos
tenían como objetivos principales mantener la
confianza de las tropas propias e intimidar a
las fuerzas opositoras.
4. La propaganda de guerra normalmente está basada en
información falsa, ya que uno de los propósitos de este
tipo de comunicación persuasiva es evitar que los
ciudadanos conozcan la verdad.
La propaganda de guerra lleva a la población de un país a
sentir que el enemigo sólo comete injusticias y esto puede
conseguirse con pura ficción. La propaganda tiene una
gran responsabilidad en los conflictos, pues no es sólo la
supremacía militar la que gana una guerra. Cuando la
propaganda es transmitida eficazmente, puede volverse
más peligrosa que el propio armamento bélico.