El águila vive hasta 70 años, pero alrededor de los 50 años sus garras, pico y plumas se vuelven demasiado viejos para cazar, por lo que debe enfrentar un doloroso proceso de 150 días de renovación donde arranca su pico, desprende sus garras y plumas viejas para que crezcan nuevas y pueda volar de nuevo y vivir otros 20 años.