1. La escuela no fue siempre así
Autores:
Pablo Pineau y Carla Baredes
Ilustraciones: Javier Basile
En las primeras épocas de la humanidad, los niños no iban a la
escuela. Pero esto no significa que no aprendieran nada:
participando de las actividades de los adultos, aprendían a cazar, a
fabricar herramientas, a encender el fuego, a venerar a los dioses, a
reconocer los peligros…
2. Tuvieron que pasar muchos siglos para que los niños empezaran a ser
educados “a propósito” por los mayores.
Cada pueblo eligió la manera de hacerlo según sus creencias y costumbres:
dónde y a quienes, qué y cómo, cuánto y cuando. Así que hubo modelos para
todos los gustos…
Por ejemplo…
Para los ANTIGUOS EGIPCIOS la educación
era una cuestión de suma importancia. Los
niños empezaban yendo a la “casa de
instrucción” donde aprendían los dones:
lengua, escritura y religión. Copiaban y
recitaban de memoria los textos que les daba
su maestro, que hablaban de moralidad, y
daban recomendaciones y consejos.
3. Los MEXICAS pertenecientes a la nobleza
estudiaban en el Calmecac, donde practicaban
deportes y aprendían rituales, interpretación
del calendario, canto, poesía y artes militares.
Los hijos de los funcionarios aprendían
administración y gobierno, y los hijos de los
sacerdotes seguían los pasos de sus padres
estudiando religión. Los hijos de las familias
comunes iban al Tepochcalli a aprender a usar
las armas, además de formarse en los oficios de
agricultor, pastor, artesano…
A la escuela INDIA sólo podían ir los niños
pertenecientes a las castas superiores. Allí
aprendían religión, lectura, escritura y aritmética.
Las clases se daban al aire libre. El maestro se
ocupaba de todos y cada uno de sus alumnos
como si fueran sus propios hijos. Se creía que era
un dios hecho hombre y su vida estaba muy
reglada.
4. Escuelas para algunos…Escuelas para algunos…
Aunque parezca una historia contada al revés, la escuela se creó mucho después
que la Universidad y que la escuela secundaria. Es decir, que el sistema educativo
se formó “de arriba para abajo”.
No sólo eso: durante muchos siglos la educación no fue para todos: los pobres, los
esclavos, las mujeres, los que eran de otra religión y los que tenían otro color de
piel, entre muchos otros, raramente gozaban del privilegio de estudiar.
5. Entre los GRIEGOS los niños que recibían
educación iban a la casa de distintos maestros
acompañados de un esclavo que se llamaba
“pedagogo”. Había maestros de música, de
gimnasia, de lectura, y de escritura. A los 18
años entraban en la efebía, una especie de
escuela militar a la que tenían que ir todos los
que eran ciudadanos.
Los hijos de los nobles de la EDAD MEDIA
eran enviados a los 6 o 7 años al palacio de
un caballero. El aprendiz de caballero
acompañaba y servía a su señor durante
varios años, mientras su señor le enseñaba el
uso de la espada y el arco, equitación, caza y
lucha. También aprendía modales, música,
canto y poesía, que recitaba de memoria
porque no sabía leer (ni escribir)
6. Hacia fines del siglo XVII LAS COSAS en Francia EMPEZARON A
CAMBIAR, y mucho.
Juan Bautista de La Salle, un sacerdote preocupado por los niños pobres, abrió
una escuela completamente revolucionaria: era gratuita, se organizaba en clases para
grupos de unos 30 niños y se enseñaba a leer en francés (que era el idioma de la
gente) y no en latín (que era el idioma de los libros cultos).
La cosa anduvo tan bien que en muy poco tiempo
hubo escuelas lasallanas en toda Francia. Iban sólo
varones, que ingresaban a los 8 o 9 años y permanecía
alrededor de 4 años. Para que todas funcionaran de la
misma manera, La Salle escribió la “Guía de las
escuelas cristianas”, un libro muy detallado en el que
indicaba punto por punto cómo debían organizarse.
7. ¡Todos a la escuela!
A fines del siglo XVIII hubo dos revoluciones que cambiaron
drásticamente la historia del mundo.
Por un lado, la REVOLUCIÓN FRANCESA que estableció que
todas las personas eran iguales ante la ley, y por tanto tenían los
mismos derechos .
Por otro lado, la REVOLUCIÓN
INDUSTRIAL convirtió a los
trabajadores en personas muy necesarias
para hacer funcionar las industrias.
8. Por supuesto, la educación no estuvo alejada de estos asuntos.
Desde hacía tiempo se venía discutiendo la idea de que todos pudieran
ir a la escuela… y estos cambios dieron el golpe de gracia para que la
educación para todos fuera una realidad.
Un poco porque las ideas de igualdad y libertad así lo exigían, y otro
poco porque era indispensable organizar, dar órdenes y hacer cumplir
reglamentos.
La pregunta ahora es…
¿Cómo hacemos con tantos niños?
9. En INGLATERRA, Joseph LANCASTER fundó
una escuela a la que podían concurrir cientos de
niños. Era un enorme cobertizo, sin divisiones,
donde había un único maestro. El maestro sólo les
enseñaba a los monitores, que eran los mejores
alumnos, y los más grandes, de la escuela. Los
monitores eran los encargados de enseñar a los
otros niños, que se dividían en grupos de a diez,
sin importar la edad.
La escuela de Lancaster fue un éxito.
10. Del cobertizo al palacioDel cobertizo al palacio
Si bien las escuelas
lancasterianas se multiplicaron por
todos lados, rápidamente se puso
en duda si esos enormes
cobertizos eran los más
adecuados para albergar niños.
Así que se empezaron a poner
divisiones y tabiques para generar
aulas y espacios diversos, y
también se preocuparon por que
esos espacios fueran luminosos,
limpios y ventilados.
En pocos tiempo, la “arquitectura escolar” cambió por completo. Comenzaron a
construirse escuelas a todo lujo: edificios enormes y monumentales, con
mármoles, estatuas y escalinatas, más parecidos a palacios que a fábricas.
11. A los debates sobre cómo debían ser las escuelas, pronto se sumó la
discusión sobre dónde construirlas. Y todos estuvieron de acuerdo en que
debían estar lejos de las “malas influencias”, como las callejuelas oscuras,
las fábricas, las tabernas… PINOCHO, una novela de 1880 que narra la
historia de un muñeco que cobra vida y al que le ocurren todo tipo de
desventura por confiar en dos personajes que conoce camino a la escuela,
es un claro reflejo de los miedos que sentían los adultos en aquella época.
12. Pronto se sumó otro problema: cómo debían ser
los lugares donde se sentarían los niños. Un
libro francés sobre Higiene Escolar (1909) decía
que: “el maestro precisa que el niño no pueda
moverse, hacer ruido o molestar en clase…” En
estos debates participaban maestros, arquitectos y
médicos. ¿Y quién ganó? Un pupitre fijo y duro,
atornillado al piso, tanto en la silla como en la
mesita.
En 1907 María Montessori fundó en Roma
una escuela llamada “La casa de los niños”
donde los muebles estaban hechos a la
medida de los alumnos.
13. ¿De qué trabaja tu maestro?¿De qué trabaja tu maestro?
Durante mucho tiempo, los maestros no eran profesionales de la enseñanza ni nada por el
estilo: eran personas sin ninguna preparación especial, que sabían algún tema y lo
enseñaban.
Para el siglo XVI algunos entendidos empezaron a decir que los maestros debían tener
alguna idea sobre cómo enseñar, cómo eran los chicos, y de qué forma evaluar los
resultados.
Fue en 1794, en París, que se fundó la primera Escuela Normal, donde se podía estudiar
para ser maestro. 50 años más tarde ya había escuelas de ese tipo por todo el mundo, y la
situación había cambiado completamente: para ser maestro había que tener, primero, el
título de maestro.
Pero el verdadero cambio llegó a comienzos del siglo XX…
…cuando enseñar pasó a ser casi en su totalidad una tarea de mujeres.
14. Contrato de Maestras – 1923 – Ciudad de PAYSON (EEUU)
Esto es un acuerdo entre la señorita ………………………., maestra, y el Consejo de Educación y de la Escuela
……………………………………………., por el cual la señorita ………………….. acuerda impartir clases durante el período de
ocho meses, a partir del primero de septiembre de 1923. El Consejo de Educación acuerda pagar a la señorita
……………………. la cantidad de ($75) mensuales.
La señorita………………………….acuerda:
1) No casarse. Este contrato quedará automáticamente anulado y sin efecto si la maestra se casa.
2) No andar en compañía de hombres.
3) Estar en su casa entre las 8:00 de la tarde y las 6:00 de la mañana, a menos que sea para atender una función
escolar.
4) No pasearse por las heladerías del centro de la ciudad.
5) No abandonar la ciudad bajo ningún concepto sin permiso del presidente del Consejo de Delegados.
6) No fumar cigarrillos. Este contrato quedará automáticamente anulado y sin efecto si se encontrara a la maestra
fumando.
7) No beber cerveza, vino ni whisky. Este contrato quedará automáticamente anulado y sin efecto si se encuentra a
la maestra bebiendo cerveza, vino o whisky
8 ) No viajar en coche o en automóvil con ningún hombre, excepto su hermano o su padre.
9) No vestir ropas de colores brillantes.
10) No teñirse el pelo.
11) Usar al menos dos enaguas.
12) No usar vestidos que queden a más de cinco centímetros por encima de los tobillos.
13) Mantener limpia el aula:
a) Barrer el suelo del aula al menos una vez al día.
b) Fregar el suelo del aula al menos una vez por semana con agua caliente y jabón.
c) Limpiar la pizarra una vez al día.
d) Encender el fuego a las 7:00 de modo que la habitación esté caliente a las 8:00 cuando lleguen los niños.
14) No usar polvos faciales, no maquillarse ni pintarse los labios.