2. Origen
• Nacida en los primeros siglos de la iglesia,
la Lectio divina despierta hoy un verdadero
entusiasmo entre los cristianos
3. Una nueva primavera espiritual
«Si se promueve la lectio divina con eficacia,
estoy convencido de que producirá una
nueva primavera espiritual en la Iglesia…»
Benedicto XVI, 16 septiembre 2005
4. Del camino de Emaús al de Gaza
Emaús: Los discípulos son conducidos por Cristo a un
cierto número de conversaciones: de la muerte a la vida,
de la tristeza a la alegría, de la ausencia a la presencia, de
la nostalgia a la memoria, de palabras estériles a palabras
ardientes. Esto es el desafío de la Lectio divina. «Le
pedimos quédate con mostros»
5. Del camino de Emaús al de Gaza
Gaza: El mismo encuentro en el camino, la misma
importancia de las escrituras, los mismos frutos, la alegría
del don recibido. La pedagogía de Emaús se convierte en
pedagogía de la misión Cristiana
6. ¿Que es?
La Lectio divina es una forma de tener un
encuentro con Dios a través de la Sagrada
Escritura, y se hace normalmente tomando un
pasaje determinado de la Biblia para hacer la
oración. Hay diversos métodos para la Lectio
divina
9. Primero: Lectura
1. Se comienza con la lectura (lectio) del texto,
que suscita la cuestión sobre el conocimiento de
su contenido auténtico: ¿Qué dice el texto bíblico
en sí mismo? Sin este momento, se corre el riesgo
de que el texto se convierta sólo en un pretexto
para no salir nunca de nuestros pensamientos.
10. Primero: Lectura
Nos hace falta volver a aprender a leer:
redescubrir la lectura prolongada, apacible,
gratuita, hecha con atención y disponibilidad.
11. Que hace Dios y que hace el hombre
Lectura
Dios: Habla
El Hombre: Escucha, acoge,
Rumia
12. Segundo Meditar
2. Sigue después la meditación (meditatio) en la
que la cuestión es: ¿Qué nos dice el texto bíblico
a nosotros? Aquí, cada uno personalmente, pero
también comunitariamente, debe dejarse interpelar
y examinar, pues no se trata ya de considerar
palabras pronunciadas en el pasado, sino en el
presente.
13. Segundo Meditar
La meditación en el CEC: La meditación es una
búsqueda orante, que hace intervenir al
pensamiento, la imaginación, la emoción, el
deseo. Tiene por objeto la apropiación creyente de
la realidad considerada, que es confrontada con la
realidad de nuestra vida n. 2723
14. Que hace Dios y que hace el hombre
Meditar
Dios: Ilumina
El Hombre: Medita, busca, digiere
15. Tercero Orar
3. Se llega sucesivamente al momento de la
oración (oratio), que supone la pregunta: ¿Qué
decimos nosotros al Señor como respuesta a su
Palabra? La oración como petición, intercesión,
agradecimiento y alabanza, es el primer modo con
el que la Palabra nos cambia.
16. Orar
En la tradición viva de la oración, cada Iglesia
propone a sus fieles, según el contexto histórico,
social y cultural, el lenguaje de su oración:
palabras, melodías, gestos, iconografía.
Corresponde CEC 2663
17. Que hace Dios y que hace el hombre
Orar
Dios: Escucha
El Hombre: Habla, pregunta, gusta
18. Cuarto Contemplar
4. Por último, la Lectio divina concluye con la
contemplación (contemplatio), durante la cual
aceptamos como don de Dios su propia mirada al
juzgar la realidad, y nos preguntamos: ¿Qué
conversión de la mente, del corazón y de la vida
nos pide el Señor?
19. Contemplar
En el camino de la perfección, el Espíritu y la
Esposa llaman a quienes les escuchan (cf. Ap
22,17), a la comunión perfecta con Dios: CEC
2550
20. Que hace Dios y que hace el hombre
Contemplar
Dios: Ofrece su comunión
El Hombre: silencio de adoración,
se deleita
21. Ejemplo de María
La tradición siempre ha visto como modelo de la
Lectio divina a María.
22. La Lectio divina y la acción
5. Conviene recordar, además, que la lectio
divina no termina su proceso hasta que no se llega
a la acción (actio), que mueve la vida del creyente
a convertirse en don para los demás por la
caridad. Verbum Domini n. 87
La lectura asidua de la Sagrada Escritura acompañada por la oración permite ese íntimo diálogo en el que, a través de la lectura, se escucha a Dios que habla, y a través de la oración, se le responde con una confiada apertura del corazón… No hay que olvidar nunca que la Palabra de Dios es lámpara para nuestros pasos y luz en nuestro camino»
Solamente que aquí ya no es Jesús resucitado el que camina y abre el corazón del peregrino a la inteligencia de las escrituras. Es el discípulo enviado por el Espíritu Santo
¿Qué es la “lectio divina” o lectura orante de la Palabra? La Lectio Divina es la lectura de la Sagrada Escritura de un modo no académico, sino espiritual, lo que nos permitirá “conocer a Jesús de un modo cada vez más personal, escuchándolo, viviendo con él, estando con él, siendo sus amigos, en una comunión de pensamiento que “no es algo meramente intelectual, sino también una comunión de sentimientos y de voluntad, y por tanto también del obrar”.
1. Leer: ¿Qué dice el texto? En primer lugar, se lee el texto. Al nivel más básico, uno se pregunta: ¿Qué sucede en este pasaje del Evangelio? A veces, conviene usar un comentario bíblico o leer la explicación de la propia Biblia para entender mejor el contexto.
Pero debeos de saber que al leer aguardamos una voz, no tener conocimientos….
Paso 2. Meditar: ¿Qué me dice Dios a mí en este texto? En este punto, uno ve si hay algo que Dios quiere darle a conocer en este pasaje. Casi siempre uno puede relacionarlo con algún suceso o experiencia de su vida.
3. Rezar: ¿Qué le quiero decir yo a Dios sobre el texto? Después de meditar en este pasaje, tal vez uno sienta temor por lo que cree que el Señor le pide hacer.
2654 Los Padres espirituales parafraseando Mt 7, 7, resumen así las disposiciones del corazón alimentado por la palabra de Dios en la oración: "Buscad leyendo, y encontraréis meditando ; llamad orando, y se os abrirá por la contemplación" (cf El Cartujano, scala: PL 184, 476C).
Manifiesta su disponibilidad y su acogida de la palabra trasmitida por el angel, medita la palabra que guarda en su corazón