Pasión, aprendizaje y creación en la sociedad del conocimiento (42)

Pasión, Aprendizaje y
Creación en la Sociedad
del Conocimiento

Lic. Pablo Aristizabal
Presidente de Competir.com
Docente (catedrático de la U.B.A.)

Derechos de Autor reservados Prof. Pablo Aristizabal 1

Introducción

En los temas que trataré a continuación; aprender
a hacer, enseñar, aprender, pensar, emprender y a
tener, voy al encuentro de un hilo conductor entre
la pasión, el aprendizaje y la creación dentro de
la emergente sociedad del conocimiento, que
todo lo envuelve sin excluir lógicamente a los
nuevos modelos de negocios en red. Ya nadie
discute que tenemos que aprender a aprender,
todos vivimos en mayor o menor medida el
proceso de re-aprendizaje producto de la
revolución digital.

Este cambio que nos impacta y me impacta en lo
personal, producto de la interacción entre mi rol
empresarial1 y académico2, generan en mí cierta

1
Presidente de Competir.com
2
Profesor de las Cátedras de Marketing y Emprendedor 21
de la FCE-UBA


inquietud que quise plasmar en este texto. Este
ensayo busca generar disparadores que nos
inviten a pensar, acto que nos eleva, y a
sabiendas que las reflexiones aquí vertidas no
pretenden darle al lector un conjunto de
soluciones o respuestas, si les genera como a mí
nuevas preguntas, habrá superado toda
expectativa.

En principio, me interesa destacar algunas ideas
fuerzas que rigen este ensayo. La primera
consiste en diferenciar qué significado posee la
letra “e” que caracteriza nuestra nueva era.
Habitualmente nos referimos a la misma como
“e” de electrónico. Sin embargo, lo que tenemos
que destacar no es el significado referido al
medio sino al fin; y desde esta perspectiva la “e”
nos remite al término anglosajón “enable”
traducido como “facilitar”. Llevado a los
términos más frecuentes que utilizamos como es
el caso del e-learning, no se refiere a aprendizaje
electrónico, sino a que el e-learning es


“facilitador del aprendizaje”, así como el e-
government es un facilitador de la gobernabilidad
y el e-business es un facilitador de los negocios.

La segunda idea, es que cuando nos referimos al
mundo “e” estamos hablando de un medio no de
un fin en sí mismo, por ejemplo en la lógica
virtual , el e-learning representa a la escuela de la
lógica analógica, ninguno de los dos conceptos
(e-learning y escuela) son un fin en sí mismos, si
no que ofician de un medio “para”, medio que
como decía Marshall McLuhan hace al mensaje;
ergo es un medio que además de las
competencias y conceptos que transfiere, ayuda a
sensibilizar y concientizar para la construcción de
una cultura digital. Todo lo que las instituciones
hagan para promover el e-government, e-
business, e-preocurment, etc. “contrabandeara” el
pensamiento en red.

La tercera idea es que el e-learning no es
educación a distancia (concepto que nos remite al


lenguaje de la lógica analógica), ya que en la
Web tanto tiempo como espacio (dos
dimensiones que refieren a alejamiento)
adquieren un sentido totalmente opuesto.
Estamos hablando de facilitar el aprendizaje en
línea y cuando menciono en línea, justamente
hablo de tiempo y distancia; pues antes, lo que
estaba en un lado no estaba en el otro en el
mismo momento y llevarlo de acá para allá
implicaba un delta de tiempo, pero que ahora en
la lógica virtual lo que esta allá también esta acá,
en el mismo momento.


Profundizando este último aspecto encontramos
el sentido de la ubicuidad como uno de los
principios rectores del nuevo medio. Hoy en día,
y por primera vez en la historia del hombre, dos
conceptos que en términos cartesianos marcan
nuestro lugar y tiempo no pueden ser definidos
como tales.

Es decir, que no importa dónde estemos y en qué
momento del tiempo, podemos vincularnos con
otros, acceder a información, aprender sobre los
temas que nos interesa, e incluso podemos estar
en varias conversaciones a la vez y en varios
lugares a la vez.

Es por ello, que cada día se hace más necesario
entrenarnos para estar más plásticos
mentalmente. Tradicionalmente en la lógica
analógica en la que fuimos formados estábamos
sesgados a horarios y lugares preestablecidos
(bibliotecas, casa, trabajo, clubes, colegios, etc.).


En mi opinión, la ubicuidad no significa que
ahora el hombre esté en todas partes, que
algunas personas quieren hacer parecer como
algo bíblico; sino que, todas partes (las
instituciones, las personas, etc.) se acercan a
uno. Y esa es la “gran revolución” que está
generando Internet en nuestra vida.

El estado, la escuela, el trabajo, la información,
se acercan a uno. En términos tecnológicos a esta
“venir a mi” se lo denomina “mush up” hoy
varios sitios Web utilizan dicha tecnología
sustentados en la re-volución de la Web 2.0

Ahora todos estos cambios debemos abordarlos
con pasión y decisión, Ud. puede preguntarse
¿por qué? Porque el cambio da miedo y la pasión
es salir en busca del riesgo. El “ser en pasión”
significa compromiso, riesgo sin búsqueda
predeterminada. Paradójicamente la fuerza de la
pasión tiene garantía de encuentro a pesar de no
tener una búsqueda pre-definida. A diferencia del


deseo que va en búsqueda de un algo, la pasión es
una ausencia, más volátil, efectista, circulante;
ella es un faltante, un algo que encontrar donde
el deseo actúa como motor e impulsor de la
pasión.

Este nuevo paradigma digital potenciado hoy por
la Web 2.0 nos permite acceder a un espacio
donde se nos “facilita” co-construir el
conocimiento, contextualizarlo, enriquecerlo,
compartir las mejores prácticas. En definitiva,
pensar en red, poner en acción la inteligencia
colaborativa.

No tenemos que impresionarnos por decir que en
este nuevo medio se pueden vivir experiencias
ligadas al mundo vital de todos nosotros,
satisfaciendo necesidades entre otros de relación,
enseñanza o entretenimiento. Esta es la lectura
del medio que tenemos que profundizar, para
desde allí poder construir valor a partir de él.


Para hacernos cargo con pasión primero tenemos
que darnos cuenta, darnos cuenta que acontece un
mundo con una nueva lógica virtual, sustentado
en el mundo vital de cada uno de nosotros, donde
suceden cosas que no se puede tocar ni ver, pero
donde si podemos acceder a él, hoy vía la
PC…mañana a través de nuevos medios.

Los fenómenos que están aconteciendo
producto de la aparición de la Web y su
versión potenciada “Web 2.0”3, es disruptivo
(rompe con el paradigma analógico) porque
cambia la manera en la que se construye o des-
construye el conocimiento y su relación con el
poder, pasamos de un conocimiento vertical
definido por los libros, diarios, escuela, etc.,
que son producidos bajo un único eje a una
construcción del saber horizontal “mente a
mente”, basado en múltiples ejes donde todos
somos parte de la construcción del

3 WEB 2.0 El término fue acuñado por Dale Dougherty de O'Reilly Media


conocimiento, en consecuencia, el poder del
“saber” pasa de unos pocos a miles de mentes
que de manera ubicua co-construyen el
conocimiento a partir del pensamiento en red
de los miembros participantes, siendo la
plataforma la Web, y el procesador el
conocimiento generado a partir de ella.


Atrevámonos a soñar

Todo emprendimiento -no importa su dimensión-
tiene sueños importantes que lo sustentan, la
fuerza de voluntad y la convicción se forjan en
grandes sueños. El gran desafío es que los
emprendimientos educativos tengan en sus
cimientos grandes sueños y éstos se amalgamen
en la fuerza de la imaginación.

El estado tiene que ver este medio como una de
las claves para la reducción de brecha digital y
para la alfabetización digital, pero sin olvidarnos
las preguntas para qué y por qué? La respuesta
es, para lograr tener una cultura digital que nos
permita ser partícipes activos en la hoy llamada
globalización 3.04. ¿Qué es lo que la
globalización significa? reducir el espacio, el
tiempo y la desaparición de fronteras, el medio

4 Globalización 3.0 - The World Is Flat: A Brief History of the Twenty-
first Century (Thomas L. Friedman)


está exacerbando esta situación a lo inimaginable,
la Web, que a pesar de ser un medio en sí mismo
es un mundo.

El Foro 2006 del Sector Privado de las Américas
reunido en el marco de la XXXVI Asamblea
General de la Organización de los Estados
Americanos (OEA) cuyo objetivo es la creación
de alianzas público-privadas destinadas a
promover el crecimiento económico a través del
empleo, la educación y la competitividad sostuvo
que "los Estados deben facilitar la adopción de
políticas públicas para que las nuevas tecnologías
lleguen a toda la sociedad y el sector privado
tiene que profundizar la expansión tanto en el
campo laboral como en la vida cotidiana de los
ciudadanos". En sus conclusiones recomendaron
a los gobiernos que adopten políticas e incentivos
para crear un ambiente conducente para la
promoción de mayores inversiones en educación
y capacitación como, por ejemplo, el crédito
fiscal o la eliminación de aranceles aplicados a la


tecnología, promover el e-aprendizaje
concentrándose en aquellas áreas en las que la
brecha digital es más pronunciada, aprovechando
los estudios e índices de medición más recientes.
La competitividad de nuestros países debería
sustentarse en una fuerte acción tendiente al uso
intensivo de la tecnología en las administraciones
públicas, sector privado y sociedad civil.

Pero en este ultimo párrafo quiero dejar una
posición, la brecha digital es entre países, dentro
de los países, entre las organizaciones y dentro de
las organizaciones, existe brecha digital dentro de
un mismo grupo familiar, en cada célula de la
sociedad, ergo no se trata de creer que por tener
una computadora tenemos resuelto la
disminución de la brecha digital y menos que
aquel que la tiene esta alfabetizado digitalmente,
permítanme que se los represente en un grafico.


De esto podemos deducir que la alfabetización
digital no sólo se trata de brindar a aquellos
analfabetos digitales la infraestructura
tecnológica y el acceso a la Web más algunos
cursos. Se trata de construir valor y
sustentabilidad a partir de la utilización de las
tecnologías y la creación de contenidos, servicios
y aplicativos apropiables por la comunidad, ya
veremos mas adelante que esto refiere no tan solo
a temas de alfabetización sino a resolver un tema
cultural.


Promover que la pirámide se invierta no sólo es
un problema de los estratos marginados, el mayor
problema está en aquellos que sólo usan la Web
sin poder generar a partir de ella crecimiento
económico a través de mas empleo, mejor
educación y mas competitividad. El impulsor
estratégico del crecimiento de las naciones es el
desarrollo del Capital Humano y del
Conocimiento pero esto para lograrse debe estar
en la agenda social del estado a nivel ministerial,
ya que es una tarea estratégica y de largo plazo,
que incluso lograrlo puede superar nuestra propia
generación.

Durante siglos, los grandes pensadores han
analizado el comportamiento del hombre, hemos
tratado de dilucidar cómo aprende la gente y qué
es lo que realmente aprehende, incluso tenemos
que preguntarnos ¿para qué aprende? Volviendo
al principio del capítulo, se trata de aprender a
pensar más y mejor, para ser más dueños de
nosotros mismos, para poder construir en


conjunto ya no sólo como países sino como una
gran aldea global.

Por eso es que invito a imaginar, imaginar es más
que pensar, más que proyectar, más que una
ambición; imaginar es pensar en grande, ser
audaz, crear nuevos mundos, con fé en nosotros
mismos, en lo que creemos, en lo que soñamos.
El sueño es el que nos hará creer, el que nos dará
la fuerza de voluntad, el que hará la diferencia....

De niño se me ocurría pensar que en realidad,
valga la paradoja, un sueño es como tocar las
ideas con las manos. Cuando hablamos de soñar,
hablamos de pasión y cuando hablamos de pasión
como ya lo expresé en la introducción, tenemos
garantía de encuentro, se encendió la chispa del
motor, es la fuerza creadora, la que hará realidad
nuestros sueños.


En palabras de José Ingenieros “Cuando pones la
proa visionaria hacia una estrella y tiendes el ala
hacia tal excelsitud inasible, afanoso de
perfección y rebelde a la mediocridad, llevas en ti
el resorte misterioso de un ideal. Es ascua
sagrada capaz de templarte para grandes
acciones. Custódiala, si la dejas apagar, no se
reenciende jamás”


Aprendamos a aprender

Es importante destacar, que cuando hablo de
aprender no me refiero a acumular, sino a
entender o a tratar de entender las reglas de juego
del paradigma reinante. En palabras de Fernando
Savater “Estoy seguro de que fue en ese
momento cuando por fin empecé a pensar. Es
decir, cuando comprendí la diferencia entre
aprender o repetir pensamientos ajenos y tener un
pensamiento verdaderamente mío, un
pensamiento que me comprometiera
personalmente, no un pensamiento alquilado o
prestado como la bicicleta que te dejan para dar
un paseo”.

Aprendamos a aprender como individuos y como
organizaciones, cuando hablamos de aprender
nuevamente no me refiero a acumulación, a una
suma algebraica acumulativa, sino a entender o a
tratar de entender las reglas del juego del
paradigma reinante, aprender respetando las


diferencias con los otros y además aprender a
convivir respetando las diferencias con los
múltiples sujetos que conviven en nosotros
mismos. El paradigma actual nos conduce de un
ejercicio de pensar individualmente a un ejercicio
de pensar en red, el paso de hablar a conversar e
ir construyendo desde lo que acontece, en tiempo
real. Como nos decía el filósofo Jaime Barylko
“Vivimos de memoria. Ese es el problema de que
tengamos tantos problemas. Los médicos curan
de memoria, los abogados dictan de memoria y
los gobernantes gobiernan de memoria; ya saben
y si saben no piensan y si no piensan nada
profundo se modifica profundamente”.

Para construir organizaciones inteligentes es
necesario que entendamos, comprendamos,
relacionemos, pensemos a la empresa como la
sumatoria de todos sus componentes; en el
entendimiento de que lo que hoy compite es la
resultante de una organización contra la
resultante de la competencia. Una condición


necesaria para alinear la resultante es que frente a
mismos eventos, entendamos los mismos
significados, o por lo menos lo más parecidos
posibles. Debemos dirigir nuestras acciones en
una misma dirección bajo un mismo objetivo;
deleitar a los clientes. Este continuo aprender a
cómo aprender juntos nos obligará no sólo a bajar
nuestro nivel de egocentrismo, ese que nos hace
creer que somos el eje de las cosas, que existe
sólo una verdad y un campo de verdades, sino
que también nos permitirá homogeneizar los
conceptos que se barajan dentro de la
organización.

Es aquí donde se está produciendo una
revolución en los sistemas de aprendizaje de las
organizaciones, hasta la aparición de este nuevo
medio, sólo una elite era la que tenía claro la
visión, la misión, los objetivos, el resto de la
organización muchas veces no tenía ninguna
participación, pero ahora esta red se puede
extender muchos más allá de las fronteras de las


organizaciones para llegar a toda la cadena de
valor, aprendiendo con los empleados, los
proveedores, los clientes, etc.

Este ejercicio nos hace poner en el lugar del otro
invirtiendo la pirámide organizacional, ahora no
sólo bajamos línea a los que están en la trinchera
sino que los que están en el frente, junto a los
clientes e inclusos ellos mismos, ahora también
hablan y si nos permitimos escucharlos podemos
construir en ese devenir una conversación, un
dialogo, en términos Socráticos, nos referimos a
la "dialéctica", en el que a través del
razonamiento inductivo se puede esperar alcanzar
la definición que mutuamente nos contenga en
términos de objeto de investigación. El objeto
fundamental es que a través del análisis práctico
de definiciones concretas, reconociendo nuestra
ignorancia, nuestro desconocimiento de la
definición que estamos buscando. Reconocida
nuestra ignorancia estamos en condiciones de
buscar una verdad superadora que nos contenga


y nos haga crecer. Como dice el poeta Antonio
Machado “Tu verdad, no: la verdad. Y ven
conmigo a buscarla. La tuya, guárdatela”

Departamentos orientados desde el adentro,
deben esforzarse en comprender el afuera. El
afuera, son nuestros clientes y no siempre tienen
la razón, son la razón de nuestra existencia. Y a
la inversa, los guiados por el afuera deben
comprender la perspectiva del adentro, necesaria
para la construcción de satisfactores que cubran
las necesidades y deseos de los clientes.
Aprender a aprender no sólo es cuestión de
capacidad, sino también de actitud de esfuerzo y
voluntad.

No es un proceso a través del cual el que sabe
(enciclopédicamente hablando) llena el recipiente
del que no sabe, como decía Jean Piaget: “Saber
no es acumular, sino construir”. El aprender
conlleva dos actos: la asimilación y la
acomodación, primero tomo, asimilo, y después


lo acomodo, lo relaciono con mi propia
problemática con algún saber ya aprendido. Nos
decía Aristóteles “No hay nada en nuestro
intelecto que no haya pasado antes por nuestros
sentidos”

El aprendizaje contextualizado bajo el modelo de
“aprender haciendo” y co-construyendo los
contenidos para ir enriqueciéndolos día a día
generan un círculo virtuoso en el aprendizaje
organizacional basado en la experiencia, hoy esto
se logra gracias a las nuevas tecnologías de la
información y las comunicaciones, pero eso sin
entrar en las discusiones de qué es mejor o peor,
sí esta claro que este medio y sus herramientas
van a elevar la manera en que la gente y las
organizaciones aprenden.

A un jugador de fútbol no le alcanza con saber
parar la pelota; la clave está en mirar en
velocidad y en el lugar en el cual la re-ubica, esto
es lo que lo hace diferente. Día a día observamos


que los niños de hoy no aprenden como los de
antes, saltan de acá para allá, parece que no
profundizaran, da la sensación de que no saben
porque cuando se les pregunta si saben tal o cual
cosa, no conocen la respuesta de memoria.

Probablemente los jóvenes no estudien ni
aprendan como antes, pero también es probable
que esta nueva manera de estudiar y aprender les
sirva para comprender los nuevos paradigmas
que reinan en el mundo en el que viven. Los
jóvenes deben poder llegar a la información,
bucear, navegar; no sólo guardar todo en su
memoria. Lo importante es que sepan
contextualizar dichos datos, que sepan
procesarlos para convertirlos en información
aplicada, en conocimiento, y esto les aseguro que
no significa un esfuerzo menor para los que
estamos en el sector educativo.

Íntimamente creo que la revolución de la lógica
virtual enmarcado en la nueva economía en red,


bien dosificada, actuará como una gimnasia para
el cerebro. El paradigma del mundo en el que
viven es distinto y exige de ellos cosas distintas
que el de sus mayores. Como nos dice el filósofo
Michael Serres “El gran cambio estará dado
porque, a diferencia del pasado, en vez de la
gente ir a la educación, la educación irá a la
gente, esta es la verdadera revolución”

Lo que era un valor en La Segunda Ola (la era
industrial), no lo es en La Tercera Ola (era del
conocimiento) es en ésta última donde el hombre
se independiza de la naturaleza para la creación
de valor, por supuesto no en todas las industrias,
pero sí muchas de manera transversal se ven
impactadas en su competitividad con la aparición
de las TICs, muchas de ellas evolucionan así de
“brick and mortar” a un formato “click and
mortar” para mantener su productividad y su
consecuente propuesta de valor hacia el cliente.


En un mundo dinámico, hipercompetitivo, no
alcanza con respuestas preconcebidas, son
necesarias buenas preguntas para entender las
reglas del juego. Por todo esto es que debemos
aprender a aprender, abandonar la creencia de
que aprender es llenarnos como a un saco vacío.
Es necesario tratar lo singular, trabajar sobre el
individuo; que cada cual construya y diseñe su
propio conocimiento, al igual que un atleta
desarrolla sus músculos es necesario entrenar
nuestros sentidos, educando la facultad de
observación, liderazgo, toma de decisiones y
construcción.


Aprendamos a enseñar

Todos nosotros nos enfrentamos a un mundo
radicalmente nuevo, poblado de innovaciones
tecnológicas que afectan directamente la forma
de entrenar nuestras mentes, entrenamiento
necesario para enfrentar los nuevos paradigmas
que a la vez se refundan a velocidades
cibernéticas, es por ello que a los profesores de
hoy, se nos exige un nuevo rol. Walter Donan
expresa de esta manera el dilema “el problema es
que todavía no existen institutos de formación
para maestros y la realidad es que los docentes
tampoco tienen tiempo para capacitarse.

Enseñarle a un maestro que revea su postura en la
clase, su manera de relacionarse con los chicos,
es algo que requiere tiempo y un gran esfuerzo”.
Hoy sabemos que debemos priorizar la
problemática del alumno, para que éste logre un


aprendizaje contextualizado, bajo toma de
decisiones y sostenido.

Los que enseñamos actuamos como facilitadores,
actuamos de nexo para que los alumnos creen su
propio aprender, su propio conocimiento,
tenemos que privilegiar una manera
multidisciplinaria de captar la realidad, pensar en
perspectiva, sistémica-mente, no en forma lineal.

Tenemos que aprender a diferenciar la sociedad
de la información de la sociedad del
conocimiento, con la información no alcanza para
generar un diferencial, es necesario el uso
inteligente de la misma para producir
conocimiento, una mayor comprensión que nos
va permitir una mejor toma de decisiones, el
pensamiento crítico nos va permitir alocar y
tomar la información que nos sirva, pero va ser el
pensamiento creativo el que me va permitir
producir, crear, elaborar, hacer la diferencia, el
peligro para nuestros países en vía de desarrollo


radica en que la oposición al conocimiento está
dado por la ignorancia, con sus consabidas
consecuencias.

También es importante diferenciar entre
alfabetización digital y cultura digital. Lo que se
ha dado en llamar la WEB 2.0 brindan
herramientas que definen al nuevo medio, no es
precisamente una tecnología, sino es la actitud
con la que debemos trabajar para desarrollar en
Internet, la WEB ya no se comporta como un
medio tradicional unidireccional, la
bidireccionalidad del medio permite a los
usuarios construir y compartir mejores prácticas
de manera nunca vista a la actual, pero esto es
una actitud y la misma es producto de un cambio
cultural.

Si me pidieran una definición sucinta de qué es
conocimiento, diría que es información aplicada,
no información “per se” (dato) sino
contextualizada bajo la lente de la problemática


de cada cual, pero quienes pueden contextualizar
mas sino que los mismos usuarios y nuevamente
giramos entorno a temas culturales. Como dice
Werner Ketelhon “los procesos para aprender de
una acción comienzan con la incorporación de
información nueva a un conocimiento ya
adquirido” pero si con la información no
logramos transformar nuestra circunstancia no
lograremos tener una sociedad del conocimiento,
ser sólo usuarios “pasivos” de la Web, nos dará
como resultado eso, una sociedad pasiva, una
sociedad dormida.

En el ámbito del e-learning, también debemos
reflexionar sobre la forma en la que entendemos
que podemos contribuir a la creación de valor en
la sociedad del conocimiento, sin dudas no lo
lograremos poniendo solamente nuestros
esfuerzos únicamente en cómo fabricar mejores
objetos de aprendizaje desde la visión técnica o
desarrollando modelos de enseñanza que mejoren
conocimientos, habilidades y destrezas en forma


unidireccional. No se trata ni de contenidos ni de
continentes, se trata de aprender a pensar mejor.
Tenemos que aprender a pensar en red, a diseñar
entornos tal que se incorporen los conceptos de
ubicuidad y comunidad favoreciendo que las
personas compartan un espacio virtual y mental
común de reflexión, intercambien ideas y
experiencias, y donde el e-learning se convierte
en el facilitador para reunirlos y permitir la
generación de un aprendizaje sostenido en la
organización. Los desarrollos de aplicaciones
virtuales deben mantener la Lógica Vital de las
costumbres propias de cada sociedad.

Hoy las organizaciones pueden comprar un
software, pero es un error creer que eso es lo que
compran verdaderamente, están adquiriendo un
fin y ese fin es que la gente aprenda, y cuando
hablamos de cómo aprende la gente, entramos en
temas de alta complejidad.


En un mundo donde los cambios de paradigmas
se producen a velocidades inusitadas para el
modelo mental en el que fuimos formados, es
muy importante entrenarnos para la flexibilidad.
Cuando algo cambia, se produce una ruptura, y
entramos en crisis. Si podemos adaptarnos a la
velocidad requerida nos invade el miedo, miedo
que nos paraliza y nos hace inflexibles, y por
ende, no nos permite adaptarnos al cambio.

Ahora para aplicar y transformar es necesario
introducir lo que los científicos llaman
“plasticidad neuronal”, la capacidad de las
neuronas de moldearse de acuerdo a distintos
estímulos del afuera, en los negocios por ejemplo
serian, el mercado, los clientes, como diría el
filosofo francés Gilles Deleuze “el no lugar”.


Para aquellos que aprendan a caminar sobre la
cubierta de un barco va a ser natural su oscilar,
para aquellos que aprendan a caminar en tierra
firme, el oscilar los paralizará. Es probable que
ya no tengamos más que enseñar a caminar en
tierra firme sino que tengamos que aprender a
enseñar a caminar sobre la cubierta de un barco
que en mayor o menor medida está en una
continua oscilación.

Contemporáneamente a la frase de José Ortega y
Gasset “Yo soy yo y mi circunstancia y si no la
salvo a ella no me salvo yo”, vivimos momentos
donde debemos aprender a surfear la
circunstancia. Intuyo que vivimos tiempos en
donde si soy un profesional, viviré como un
surfista esperando la ola correcta con sus
consecuente oscilaciones, si soy una PyMe,
capearé en un velero la tormenta y la calma y si
pertenezco a una corporación deberé aprender a
moverme como un equipo de rafting. En todos
los casos habrá momentos de calma y momentos


de turbulencia, momentos donde hacer esfuerzos
y momentos donde habrá que dejarse llevar,
aprendiendo a tomar decisiones en el continuo
oscilar.

Respecto a la enseñanza en materia de negocios
los profesores deben aprender nuevas
metodologías de enseñanza, creando espacios de
reflexión que permitan invocar el porqué de las
cosas que estimulen el pensamiento crítico es una
obviedad pero lo más complejo es estimular el
pensamiento creativo; de creación. Tenemos que
vencer la tentación de dar fórmulas o recetas para
la toma de decisiones, aunque los alumnos nos
las pidan. Aquellos que hayan participado de la
resolución de casos, tan en boga en la actualidad,
habrán observado que frente a enunciados
estáticos con variables acotadas jamás podrán
reproducir la dinámica de la realidad.

Todo sirve, pero es una falacia decir que eso es
práctico; sigue siendo teoría, teoría ejemplificada.


El fundador de Internacional Management Group
Mark Mccormack lo expresaba de la siguiente
manera; “Un MBA a veces puede bloquear una
capacidad para dominar la experiencia. Muchos
de los titulados que contratamos eran
congénitamente ingenuos o víctimas de su propia
capacidad intelectual. El resultado fue una
especie de discapacidad de aprendizaje real, una
deficiencia para leer a las personas
adecuadamente o para percibir situaciones y una
manía para formular las percepciones
incorrectas”

Pero para aprender a enseñar también tenemos
que tener líneas rectoras que guíen a los
maestros, por ejemplo; cuando se entiende que la
solución a la problemática de brecha digital es
poner PCs en las escuelas no se dimensiona que
con las mismas se introduce en aula el primer
elemento donde la fuente de saber se invierte
entre el alumno y el profesor, un elemento
invasivo para la mayoría de los maestros,


entonces para arreglar este desequilibrio, se
recurre a enseñarle a los maestros el uso de la PC
con cursos de conocimientos informáticos y el
problema continua.

Les digo a los maestros que no entren en pánico,
no se trata de competir con los alumnos en el
manejo de PC, se trata que en la materia de Uds.
sepan lo que mejora la fijación del concepto a
enseñar, y así como les digo que nunca van a
poder jugar un juego como ellos, también les
digo que lo importante para Uds. es saber mas
sobre matemática, historia, geografía, lengua, lo
que sea que estén enseñando, si están enseñando
sobre prehistoria, ellos se verán maravillados de
los recursos que les facilite para que ellos puedan
saber mas sobre ese tema, y nuevamente vamos a
estabilizar la jerarquizacion y el respeto, para con
uno mismo y de los alumnos para con los
maestros.


Siempre que pensemos la educación y lo digital
tenemos que pensar en la importancia de la
escuela en la educación cívica ésto y sólo ésto ya
es un gran aporte a la sociedad toda de parte de la
escuela, pero, tenemos que pasar de la formación
cívica a la forjación cívica Que es forjar lo
cívico? Hacer cosas por los demás, respetar al
otro, solidarizarme con el otro, aprender a
conversar con el otro.
Conversar no es el arte de hablar sino el arte de
escuchar, justamente desde lo cívico nos
instalamos como una sociedad parlamentaria,
algunos pensadores la definirían como una
sociedad que habla y de ahí la importancia del
lenguaje. Lo parlamentario proviene del francés
antiguo parlement, que inicialmente significó
‘consulta’ o ‘conferencia’, y luego pasó a ser
‘cuerpo consultivo’ y más tarde, ‘órgano
legislativo’.
Parlement provenía de parler ‘hablar’, que a su
vez se derivaba del latín parabolare ‘conversar’,
vocablo del cual proviene también la palabra. Es


esta última la que quiero rescatar, su derivación
del latín, la conversación.
El lenguaje y la palabra que valga la paradoja con
la tecnología parece desaparecer dentro de los
140 caracteres es un lado de la luna, pero también
tenemos que ver el lado oculto, lo digital, lo 2.0
trae la procedencia del latín parabolare
“conversar”, sí tenemos que tener lenguaje, sí
tenemos que tener palabras, pero lo más
importante es que tengamos conversaciones y eso
es la forjación de lo cívico, eso es el ser
ciudadano, no tan solo el que habla, el que
conversa.
Martin Heidegger nos iluminaba el camino
diciéndonos “El lenguaje es la morada del ser”
hermosa expresión y muy cercana a lo
ontológicamente cierto, sabemos que tenemos
que en la escuela que cuidar el lenguaje, crearlo,
recrearlo, porque sin lenguaje nos alejamos del
“ser” humano. Ahora si el lenguaje la morada del
ser individual son las conversaciones la morada
del ser social.


Que la escuela nos enseñe a conversar a
problematizar, que nos forje como ciudadanos
que crean, comparten, participan, con eso, solo
eso..... estará contribuyendo a un mundo más
bello para ser vivido.

(Puedo seguir un poco mas este tema desde la
hermenéutica
http://cibernous.com/glosario/alaz/hermeneutica.
html )


Aprendamos a pensar

Aristóteles en Ética a Nicómaco le decía a su
hijo: “Rezando hijo mió se aprende a rezar” yo
diría: “pensando, hijo mío se aprende a pensar”.
Estoy convencido de que ejercitar el pensamiento
en red es el camino para que nuestros pueblos
puedan entrar al mundo desarrollado.

La pregunta es pensar para que? para
transformar, crear, innovar, es que esta es la
única manera de generar valor agregado, riqueza
y en consecuencia mejorar el bienestar. No
tenemos otra solución, la cultura del “parecer”
repitiendo 10 frases de memoria no sirve, solo
creceremos bajo el hacer mas y mejor, para eso
tenemos que pensar para crear.

Una de las características de la economía en red
es que el que está conectado existe y el que no
quedó afuera, haciendo un correlato en las


PyMEs es eso, una empresa conectada existirá
sólo si está conectada, ahora la pregunta es que es
estar conectada, es que los equipos de trabajo
piensen, construyan y trabajen en red, no tan solo
tener conectividad.

Tenemos que entrenarnos para la complejidad, la
incertidumbre, para comprender el nuevo
paradigma. No sólo trabajar en la infraestructura,
sino también en lo que “se da”, en lo que aparece,
en lo superficial, en lo que cambia, en la
superestructura, en los bordes.
Profundizar, reflotar el “por qué”, mantener esa
curiosidad insaciable que nos caracterizaba de
niños.

Debemos estar atentos, bucear en lo
aparentemente evidente, debemos asociar,
disociar, hacer, deshacer, rehacer, desviarnos,
encausarnos, cambiar, innovar, romper.


En este mundo sistémico es importante estar más
despiertos, más inteligentes que nunca, debemos
entrenarnos para poder establecer relaciones entre
cosas que son aparentemente distintas como
decía Albert Einsten “La mente es como un
paracaídas, sólo funciona si se abre”

Mientras tanto no caigamos permanentemente en
la tentación dualista de que si pensamos (ocio),
no actuamos (neg-ocio), si somos estructuralistas
(como), no podemos ser historicistas (porque). La
velocidad y la turbulencia del cambio nos obliga
a hacer/pensar en simultaneidad. Asistimos a la
paradoja de que no alcanza ni con un porqué ni
con un cómo. Se trata más bien de un “co-que”,
aunque no resulte cacofónicamente agradable,
busca fusionar dos supuestos opuestos que en el
transcurrir del tiempo han viajado por caminos
paralelos pero que representan el pensar para
hacer que hablábamos en el primer párrafo.


El filósofo Gilles Deleuze en un reportaje
concedido a la revista Magazine Littéraire decía:
“los intelectuales tienen una cultura formidable,
tienen una opinión sobre todo, yo no soy
intelectual porque no tengo una cultura
disponible, ninguna reserva. Lo que sé, lo sé por
las necesidades de un trabajo actual, y si lo
retomo muchos años después, tengo que
reaprender todo de nuevo”. La filosofía de
Deleuze es la filosofía de la paradoja. El
aprendizaje esta más vinculado al olvido que al
recuerdo, la creación más a la desmemoria que a
la conciencia.

Deleuze fue un vanguardista que imaginaba a la
filosofía como un saber creativo, un crear y
recrear en constante circulación. Recrearnos
diariamente, practicar con nuestra mente,
vaciarnos, aprender, olvidar y volver a aprender
incluso sobre lo mismo, entrenar nuestra mente
para poder competir bajo las reglas del nuevo
paradigma.


Día a día, década a década, la idea de la verdad
única se está debilitando así como también las
dualidades sean de la escuela filosófica que
fueren; vivimos en un estado de recreación
permanente. Las respuestas pre-armadas o pre-
fijadas jamás nos permitirán tomar las decisiones
en los que nos vemos enfrentados día a día. Decía
Edward De Bono “El pensamiento tradicional se
preocupa por la búsqueda y el descubrimiento, al
pensamiento paralelo le interesa el diseño y la
creación” esta lateralidad no es un tema trivial, si
la hacemos desde nosotros sin soltar anclas de
prejuicios, con todas nuestras ataduras diría que
es casi imposible. “Analizamos bien y decimos
mal” insistía sabiamente Jean Paul Sallenave en
La Gerencia Integral. Analizar involucra un
proceso ordenado de utilización de herramientas
y técnicas, cosa fácil de enseñar.

De hecho en los colegios y en las universidades
se enseña a analizar, pero no se enseña a tomar


decisiones, a decidir con criterio, decidimos mal
porque pensamos mal. Es distinto entrenar para el
hacer que para el pensar haciendo.

El filósofo Luis Jalfen en Globalización y lógica
virtual nos decía “Aprender a pensar implica:
Aprender a renunciar a viejos requerimientos,
aprender a pensar con criterio”. Tenemos que
cambiar nuestro tan remanido concepto de brecha
digital para ponerlo desde un espacio positivo,
oportunidad digital, de esto se trata el desafió
para poder tomar esta oportunidad tenemos que
hacernos fuertes primero alfabetizando
digitalmente para que emerja en su consecuencia
una cultura digital en nuestros pueblos.


Aprendamos a emprender

Porque hago este apartado a los emprendedores,
porque solo un espíritu emprendedor va poder
hacer realidad el cambio y en estas oraciones
busco despegar a lo que entendemos por
emprendedor a tener un espíritu emprendedor.
Bill Gates es un emprendedor, Domingo Faustino
Sarmiento tenía un poderoso espíritu
emprendedor. Vamos a necesitar de muchos
empresarios emprendedores pero tan igual que
vamos a necesitar tener funcionarios con un
fuerte espíritu emprendedor, en los colegios, en
las facultades, en el gobierno, en todos los
espacios que hagan a la construcción de una
sociedad más justa y equitativa.

Es difícil definir en pocas palabras el vocablo
emprendedor. Su existencia se remonta a tiempos
lejanos, pudiéndolo encontrar incluso en las
sagradas escrituras: “….y Saúl dijo a David:


bendito eres tú, hijo mío David; sin duda
emprenderás tú cosas grandes, y prevalecerás…”.
Encontramos numerosas y variadas definiciones
del término Emprendedor. Si recurrimos a la Real
Academia Española, nos dirá: “Que emprende
con resolución acciones dificultosas”.
Entrepreneur proviene del latín Inter Prendere; es
una de sus traducciones “el que se mete y hace la
tarea”. Vemos que estamos cerca de una
definición, pero cualquiera que impongamos sólo
será una más. Por eso les propongo que viajemos
juntos detrás de algunas ideas que no tienen
mayor intención que la de ayudar a re-valorizar
un vocablo que en nuestro presente ha tomado
una trascendencia vital para las sociedades.

Parece en la actualidad, y bosquejando un
escenario futuro, que la única salida para la
creación genuina del desarrollo laboral del siglo
XXI estará fundada en el andamiaje de miles de
emprendedores que actúen de agentes de cambio
y sustenten la competitividad de nuestra


sociedad, se procuren trabajo a sí mismos y sean
multiplicadores de empleos. Ser un agente de
cambio es una virtud, es el que hace que las cosas
sucedan, en nuestro caso serán aquellos que
tendrán la virtud de originar la re-fundación del
país.

Cuando hablamos de multiplicadores de empleo,
nos referimos a emplear, originario del latín
Implicare: “introducir”. Esta es la manera de
eliminar la exclusión con la que se ve amenazada
toda la humanidad. Vivimos momentos en los
que las grandes empresas, en nombre de la
globalización, la competitividad, la tecnología,
expulsan empleados día a día.

Dicho de otra manera, gente que queda afuera de
la economía en red. Si queremos incluirlos es
justamente creando empleos: hoy las PyMEs
ocupan el principal lugar de generación de
empleos del mundo, por lo tanto es necesario
incluir en la agenda de todos los sectores


(empresario, gubernamental, tercer sector,
universidad) el especial desarrollo de una
sociedad culturalmente emprendedora.

Ahora esto si no es acompañado por políticas de
estado dirigidas por estadistas que piensen en el
corto, mediano y largo plazo, que tengan la llama
de la creación de valor, tanto como un
emprendedor forja la creación de valor
representada en un producto, el funcionario forja
un espacio proclive para la multiplicación de
emprendedores.

Entiendo que una primera distinción para lograr
una definición del espíritu emprendedor es que
hablemos del “estar emprendedor” (de
existencia), en lugar de “ser emprendedor” (de
esencia). El estar emprendedor es transitar por el
fascinante estado de hacer que las cosas sucedan,
y es obra de una causalidad: nos pertenece y,
tratándose de un estado, podemos aprender a
crearlo y re-crearlo.


Estos últimos párrafos infieren que un
emprendedor se hace y no nace. Significa que -si
hiciéramos una analogía con el fútbol- en un país
que valora y tiene cada pocas cuadras una plaza,
una cancha, un potrero, las probabilidades de que
surjan buenos jugadores se multiplica. También
donde no las hay, pueden surgir buenos
jugadores, pero claramente en distinta
proporción. En nuestra región surgen
emprendedores mayormente fruto de la
adversidad, y no debería ser esta el único
disparador, deberían surgir fruto de la siembra de
espacios que impulsen este movimiento
emprendedor.

Una persona que está en estado de emprender es
una persona que tiene voluntad de crear, re-crear,
accionar, re-accionar, iniciar, re-iniciar, intentar,
re-intentar, hacer y re-hacer para que la rueda de
la creación de valor comience a girar, exponía el
poeta romano Horacio Flaco en el teatro de la


vida “empezar es haber recorrido la mitad del
camino”.

Repito, el emprendedor no sólo tiene correlato
con la creación de empresas, también
encontramos emprendedores que trabajan dentro
de una corporación, en una ONG, en el gobierno,
en un hospital, en forma individual… Y cada uno
de estos entornos trasciende las fronteras de los
negocios, es una manera de abordar el día a día
con una mezcla de innovación, transformación,
creatividad y optimismo.

Emprender es un barco que parte, que siempre
llega, casi nunca al puerto que uno soñó; algunas
veces llega a uno muy semejante, otras veces a
uno muy distinto, pero es así, los hechos se hacen
forjándolos, así como los negocios se hacen
creándolos, en esto de crear, el llegar a buen
puerto es llegar a algún puerto.


A todos nos ha dado la sensación en algún
momento de que se habla de los emprendedores
con un ligero misterio como si poseyeran un
talento especial, un don que les viene dado…
primero no lo creo, y si así lo fuese, entonces
empecemos a pensar algo para que así no sea. Si
creo que es un producto de una circunstancia,
rodeado de valores que incentivan el estar
emprendedor, tendremos más emprendedores y
serán exitosos mientras más se dejen guiar por su
voz interior, en lo que creen, por eso hablamos de
crear mundos y no de copiar, porque si uno deja
surgir lo que siente, lo que cree, eso sólo es de
uno y si emerge, será una creación.

Un discurso coherente para un emprendedor no
es hacer lo que dice, sino hacer lo que piensa,
intuye, siente. Lo que se dice está habitualmente
sesgado por lo que creemos que el otro quiere
escuchar. La autenticidad es una de las claves de
la fuerza, la energía, el espíritu del que hablamos
que poseen los emprendedores. Los


emprendedores son protagonistas del hacer, no
protagonistas del pare-cer; hacer es generar la
luz, iluminándose e iluminando a otro, el que no
hace es aquel que sólo transporta la luz
impropia.

Un emprendedor crea espacios donde en algún
momento de la vida de los otros valga la pena
compartir, por eso lidera y no gestiona, ese
templo tampoco será un lugar atractivo para
todos, esa mística sólo está reservada para los
jóvenes de espíritu, y no me refiero a edad, sino a
aquellos que abordan la vida con una mayor dosis
de audacia.


Aprendamos a hacer

Aprender a hacer es funcional, es el día a día, es
el “cómo”: cómo hago lo que sueño, lo que
pienso, cómo lo implemento, es un continuo
experimentar, probar, entender lo que pasó,
retener lo que funcionó, para así poder reformular
lo que no funcionó “Uno puede soñar, crear y
diseñar el mejor lugar del mundo; pero se
requieren personas capaces de hacer realidad esos
sueños” decía Walt Disney.

Cuando inicio un curso nunca dejo de contarles a
los alumnos una frase, que fruto de la experiencia
he madurado. “La mejor manera de hacer
negocios es haciéndolos”, dijimos anteriormente,
empezar es haber recorrido la mitad del camino y
esto tiene más que ver con convicción, con
pasiones. Suena obvio, pero en la práctica no lo
es, hacer a pesar de las debilidades y de las
amenazas, es en el mundo de hoy una verdadera


proeza sólo accesible a gente con una
perseverancia a prueba de torceduras, tropiezos,
caídas y todo lo que solemos encontrar en el
camino de la construcción.

Tanto en las organizaciones, y en nosotros
mismos debe existir un equilibrio entre el cómo y
el porqué, entre el entender y el hacer. Si uno
exagera el proceso de razonamiento se corre el
riesgo de llevar a la empresa a una parálisis de
análisis. Si nos apresuramos en la acción,
promoveríamos una cultura de velocidad sin
dirección, que en tiempos de volatilidad como los
actuales, asumen innecesariamente los riesgos.

Lamentablemente hay jóvenes ejecutivos que
desarrollan la cultura del querer tener hoy, todo
hoy, sin hacer, sin aprender, sin soñar. Esta forma
de tener, sin sacrificios, los lleva a una gran
insatisfacción: “me va bárbaro, tengo, pero no
estoy contento”. Sin el esfuerzo, a veces saben
mucho pero no pueden saborear la vida.


Es necesario un equilibrio entre el hacer y el
pensar, hay momentos en que se debe privilegiar
el hacer y en otros momentos el pensar. Inclusive
es probable que hasta “el hágalo rápido aunque lo
haga mal” a la postre produzca un mejor
resultado, pero dudo que en todas las acciones y
decisiones este aforismo dé buenos resultados.
Ahora en un mundo virtual donde todo se está
construyendo es una buena idea ir construyendo
con los clientes, pasando del productor al
consumidor a un formato de prosumidor

Ahora tenemos que hacer que las cosas sucedan
pero no podemos dejar de tener en cuenta que la
lógica analógica es un emergente de una lógica
vital del día a día de la vida, la lógica virtual no
crea una nueva vida sino que recrea de una
manera distinta esa lógica vital, por eso tenemos
que construir teniendo en cuenta la habitualidad
de nuestras cosas, de nuestra vida diaria. Para
desplegar una campaña de sensibilización y


concientización sus cimientos no deben alejarse
del mundo vital de la gente, porque en ese caso
no se lo apropia, ergo no lo aprende, lo muestro
en un ejemplo:

Sensibilizar y concientizar construyendo a
partir del mundo VITAL


Finalmente se trata de educar alfabetizando
digitalmente, es una combinación de desafíos
concentrados en una dirección, tenemos que
educar, tenemos que alfabetizar, tenemos que
evolucionar hacia una cultura digital, la
tecnología, el entretenimiento y la educación día
a día van a ir entrecruzándose hasta que no
podamos ya distinguir fronteras, en las empresas
ya se está dando así podemos verlo en el gráfico,
pero esto se va dar en todos los ámbitos,
fundamentalmente el educativo, donde todas
estas variables van a ser falta para la construcción
de un modelo sustentable


Aprendamos a tener

Finalmente el ciclo se cumplió: lo soñamos, lo
pensamos, lo hicimos y lo tenemos. Pero también
tenemos que saber que, aprender a tener es
aprender a dar, y esto conlleva una gran
responsabilidad. Aprender a tener es entender que
nuestro éxito no se debe a que somos unos
elegidos, sino que es producto de una
circunstancia, de un lugar, de un tiempo que no
sólo es nuestro, sino que también le pertenece a
los otros contemporáneos, y a los hombres del
pasado que forjaron la circunstancia actual,
aquellos que nos dejaron el campo fértil para
tener.

Por consecuencia transitiva, tanto como personas
forjaron caminos para que nosotros recorramos,
nosotros tenemos que crear nuevos caminos para
que nuestros hijos y los hijos de ellos puedan
recorrer, esa es nuestra ineludible responsabilidad


y hoy construir los cimientos en serio de una
Sociedad de Conocimiento, es la autopista que
les permitirá construir países desarrollados con su
consecuente fin de mejorar el bienestar de todos.

Y solo les doy un ejemplo en cuanto impactaba la
falta de educación en el interior, pueblos sin las
competencias necesarias, hijos desarraigados,
pueblos de ancianos faltos de gente joven, países
desbalanceados con concentración en las grandes
urbes, pobreza por la alta oferta y baja demanda,
creciente delincuencia….

Y hoy gracias a las TICs ya no necesitan irse de
sus pueblos para estudiar una carrera, ergo los
pueblos van a tener las competencias para ser
mas productivos, los jóvenes van a conservar sus
raíces, sus amigos, sus afectos, los pueblos
volverán a tener gente joven con alta capacidad
de creación de valor, la gente no va tener que
concentrarse en las grandes urbes y se
descentralizara en ciudades pujantes, bajando la


desocupación y el desempleo, no estamos
hablando ya ni de e-learning ni de e-government,
estamos hablando de modelos de países donde
nos sentimos orgullosos de vivir y ser vividos,

Por ello también debemos aprender a elegir.
Cuando nos ofuscamos porque sentimos que
otras personas están manejando cosas que se
suponen nuestras –heredadas o no-recuerdo y os
recuerdo que en definitiva “de uno es, lo que uno
hace por ese uno” sea un trabajo, una empresa, un
hombre, una mujer.

En el estado mucha gente vive prendido un clavel
del aire, son parásitos que no solo no hacen
tampoco dejan hacer, entienden todo en términos
de amigos enemigos, son profesionales del
“quedarbiensionismo”, siempre ponen la mejor
cara a todos y a todos le dan la espalda, lobos con
piel de cordero.


Sócrates, versión del mito (paráfrasis de 102d)
nos decía; “Por consiguiente, quienes actúan así,
creerán que saben mucho cuando, en realidad, en
la mayoría de los casos no podrán llegar a la
verdad. También será difícil tratar con ellos, ya
que tendrán la arrogancia de la sabiduría pero no
la sabiduría misma”.

Debemos intentar poner los problemas dentro de
la vida y no la vida dentro de los problemas.
Ubiquémonos frente al trabajo entendiéndolo
como un medio y no como un fin en sí mismo.

Mi última reflexión acerca del sentido ético de
los profesionales, funcionarios y empresarios, no
tan sólo desde la perspectiva de lo instrumental,
del hacer bien nuestro trabajo, dirigir con
responsabilidad y convicción, actuar
sostenidamente en el tiempo conforme a valores
de grandeza, honestidad, equidad y justicia que a
la larga crearán un mayor valor y bienestar a
nuestros pueblos.


Prof. Pablo Aristizabal
paristizabal@competir.com

Pablo Aristizabal es Licenciado en
Administración en la FCE/UBA. Posteriormente
prosiguió sus estudios en la escuela de
pensamiento contemporáneo que liderada por el
Filósofo Luis Jalfen. El Consejo Iberoamericano
de la Educación le otorgo un Magíster en
Educación y un Doctor Honoris Causa.

Conferencista Internacional, ha dado ponencias,
entre otros países, en España, Colombia,
México, Uruguay, Panamá, Republica
Dominicana, EEUU, Chile. Varios artículos le
fueron publicados, en distintos medios y como
co-autor, entre ellos “Pasión por Aprender”, “Por
qué Emprender?”, “De Platon a Facebook”, “Que
paso la noche que toco Roger Waters”, “Sociedad
de la Información o del Conocimiento?”, “RSE
ha Muerto”, “Producto Inteligente”, “El Sueño


Emprendedor el Futuro de un País”, “Riqueza
como sustantivo, no es Riqueza”.

Es Profesor Adjunto -concursado primero en
orden de mérito- en la Cátedra de Marketing de
la FCE en la Universidad de Buenos Aires y
Profesor Asociado en la Cátedra Emprendedor 21
la cual la ha creado dentro de la curricula
universitaria de la FCE-UBA, profesor invitado
en distintas universidades sobre temáticas TICs.
Actualmente ha sido nombrado Director del
Centro Emprendedor “Génesis 21” de la
FCE/UBA.

Emprendedor reconocido con una vasta
experiencia empresaria en el área de
telecomunicaciones y tecnología de la
información de más de 20 años de actividad en la
industria. Fundamentalmente, sus aportes se han
concentrado en el diseño de modelos de
negocios, la tecnología del software y los factores
que influyen en el aprendizaje. Actualmente es


Presidente de E-Marketing S.A., un
emprendimiento donde confluyen la tecnología,
el saber académico y la capacitación. Fundador
de Competir (www.competir.com), compañía de
e-learning que provee soluciones integrales para
el mercado iberoamericano, con casos líderes en
Argentina, Chile, España, México, Estados
Unidos, República Dominicana, Uruguay y
Paraguay, entre otros. Sólo en Latinoamérica
más de 350 mil personas se están capacitando en
sus diferentes soluciones, y al presente Competir
posee el catálogo de capacitación más extenso de
Latinoamérica, con mas de 2400 horas de
capacitación online.


Galardonado con el World Summit Award
otorgado por la Cumbre Mundial de la Sociedad
de la Información en la ciudad de Túnez como
mejor iniciativa mundial de capacitación en línea,
por su desarrollo del “Programa de Actualización
y Alfabetización Digital (PAD)”.
www.infopad.competir.com . En el 2006 fue
galardonado con el Premio Sadosky a la
Inteligencia Argentina otorgado por la CESSI y
el Senado de la Nación Argentina y en el 2007 en
la categoría innovación tecnológica por la
creación del primer mash up educativo, con el
Mega Sitio de Apoyo escolar www.aula365.com,
transformándose en la red social educativa mas
importante de Hispanoamérica. En el 2007 fue
galardonado con el Premio a la Excelencia
Educativa Iberoamericana por su desarrollo
para la reducción de brecha digital e inclusión
social.


Su faceta de emprendedor social lo ha llevado a
desarrollar distintos proyectos que conectan el
mundo empresario con los gobiernos y el tercer
sector, impulsando en toda Latinoamérica
iniciativas que promueven el cambio social
sistemático y el desarrollo sustentable, utilizando
como medio las TICs.

Entre otros cargos también fue Director Ejecutivo
de Tevycom, empresa de Telecomunicaciones,
además se desempeñó en el mercado del turismo
y el entretenimiento, como Gerente General del
Centro de Ski Chapelco, para luego asumir como
Director de Pluna Líneas Aéreas Uruguayas.
Construyó también, el multiespacio temático
“Sahara Continent” ubicado en Recoleta, una de
las zonas más exclusivas de Buenos Aires.


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