2. Objetivo específico
Actualizar nuestras ideas sobre el arte
en sus diversos planos (reajuste
categorial), a través de la reconstrucción
de cómo llegaron a plantearse y de su
configuración presente (método
genealógico).
4. LA CRÍTICA DE ARTE
Es resultado de la cristalización del sistema de las bellas artes.
Las primera exposiciones artísticas regulares se organizaron en
Francia, por la Academia, a partir de 1673 con el nombre de
salones. En ella podían exponer solo los miembros de la Academia.
En el siglo XVIII, se permitirá la entrada libre a todo el mundo,
apareciendo de forma paralela una institución de gran importancia
por su papel de mediación entre los productos artísticos y su
recepción social: la critica de arte.
Es en este contexto en el que se a generalizado el uso teórico del
concepto de critica como la formulación de un juicio de valor,
aplicado a obras literarias, artísticas y musicales, sostenido con
argumentos intelectuales. Y por tanto como un elemento clave en la
clasificación y jerarquización de obras, así como en la formación del
gusto del publico.
5. LA CRÍTICA DE ARTE: DIDEROT
Con Diderot se abre una forma nueva de enjuiciamiento del hecho
artístico. Una forma consistente en la aplicación de principios
filosóficos generales a obras o productos artísticos, que resultan por
consiguiente jerarquizados y valorados, según tales principios.
La existencia de los salones constituye el impulso primordial de su
dedicación a la crítica. Lo que implica que esta se despliega en
paralelo a una actividad expositiva, de presentación publica de
obras singulares, que vienen a solicitar un principio de
ordenamiento por el que el publico naciente pueda situarse ante
ellas sin quedar a la deriva. Este fenómeno permite constatar una
evidencia de gran alcance para una fundamentación teórica de la
crítica de arte: el juicio critico es ante todo un juicio del presente
artístico.
6. LA CRÍTICA DE ARTE: BAUDELAIRE
Baudelaire dará un impulso renovado a la crítica de arte. En
continuidad con Diderot, considera la actividad del critico como una
actividad de incidencia filosófica, pero mientras en Diderot la crítica
se concebía como filosofía aplicada, en Baudelaire el curso del
pensamiento se invierte: es el estudio de la literatura y las artes en
su particularidad, el trabajo crítico sobre al presente, lo que permite
elaborar una autentica filosofía del arte. De lo concreto a lo general,
y no de lo general a lo concreto.
Las consecuencias teóricas de este planteamiento son sumamente
relevantes: a partir de Baudelaire al crítica de arte se amplia hasta
ser considerada teoría de la actualidad, filosofía de la cultura.
7. LA CRÍTICA DE ARTE: HORIZONTE DE LAS VANGUARDIAS
Se abrirá una transformación de la crítica de arte tan profunda
respecto a su estatus inicial, como la que e forma paralela se
estaban produciendo en los otros componentes del arte.
A la crítica le había correspondido en exclusiva la dimensión
conceptual y axiológica, inaccesible al artista que produce sus
obras en la onda irracional del entusiasmo y la inspiración. Pero el
panorama entra en crisis sobretodo cuando con el desarrollo de las
vanguardias históricas los propios artistas plantean los supuestos
conceptuales y axiológicos de su actividad por medio de
manifiestos, programas y declaraciones de poética.
La crítica resulta así profundamente problematizada, como si de
improviso hubieran quedado inservibles los antiguos fundamentos y
desarrollos metodológicos.
La actividad crítica empezara a experimentar un proceso de
desplazamiento que no ha ido sino agudizándose con el paso del
tiempo. Ese proceso iría originando toda una serie de reajustes e
intentos de redefinición.
8. LA CRÍTICA DE ARTE: EL ARTE DE LA CRITICA
Uno de los intentos de redefinición es el que tiende a subrayar los
aspectos creativos de la critica en formulas como la del crítico como
artista, o arte de la crítica, tienden a proclamar la agudeza e ingenio
del critico, su capacidad interpretativa, así como la voluntad
estilística de su discurso, que queda en pie de igualdad con los
hechos artísticos que enjuicia y valora.
El problema es que por esa vertiente la crítica a derivado en ciertos
casos hacia meras elucubraciones pseudoretóricas, que en lugar de
enjuiciar y valorar las obras toman a las obras como pretexto para
la elaboración de un lenguaje vacío. La crítica se ve así
reducida( con mayor frecuencia en aquella que utiliza los medios de
masas) a mero comentario.
9. LA CRÍTICA DE ARTE: LLAMADA A LAS OBRAS MISMAS
Los excesos comentarísticos, la utilización indiscriminada de
paráfrasis que pretenderían proporcionar la traducción de los
contenidos reales de las obras, habrían llevado incluso a la
desconfianza abierta hacia la interpretación crítica. Desconfianza
que alcanzó su expresión más radical en el polémico libro de Susan
Sontag Contra la interpretación (1964), en la que se rechaza en
absoluto una concepción de la crítica como interpretación, haciendo
una llamada a situarse ante las obras mismas, y a dejarse hablar
por su transparencia estética.
Esta especie de llamada a las obras mismas, no puede dejar de
verse como un síntoma de la necesidad de un replanteamiento
riguroso del estatus teórico de la disciplina, eliminando toda retórica
vacía, pseudoartística, que un reflejo de defensa institucional había
ido acumulando desde el momento de aparición del arte de
vanguardia.
10. LA CRÍTICA DE ARTE: PLURALISMO CRÍTICO
El replanteamiento del estatus teórico de la crítica de arte se ve
favorecido por las nuevas perspectivas metodológicas que las
ciencias humanas han ido crecientemente proporcionando, para la
fundamentación rigurosa de la actividad crítica. La lingüística, el
psicoanálisis, la sociología, la semiótica, la antropología, han ido
posibilitando una amplia proliferación de metodologías críticas, con
lo que el proceso crítico de interpretación y valoración se ha visto
indudablemente enriquecido.
El pluralismo crítico nos habla de la diversidad de niveles y
problemáticas que presenta toda propuesta artística, y nos pone en
guardia contra la pretensión de un juicio crítico único y definitivo,
cuando el carácter de proceso de las obras conlleva un despliegue
dinámico continuo de nuevos sentidos estéticos. El trabajo de
interpretación esta abierto a las reconstrucciones y a las nuevas
formulaciones como las obras mismas.
11. LA CRÍTICA DE ARTE: LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN
Hoy día las funciones tradicionales de la crítica de arte:
jerarquización de las obras, mediación, y orientación del publico son
ejercidas de un modo directo por los diversos filtros de los medios
de comunicación social, los que sedimentan y segregan una serie
de elementos de valoración que encuadran, jerarquizan y orientan
el gusto del publico.
De la misma forma la figura del crítico de arte va siendo sustituida
por la presencia persuasiva en los medios de un trasiego de
opiniones que cuando menos sujetas a los dictados del concepto de
forma más represiva y totalitaria se imponen al publico receptor.
El grado de superficialidad y banalidad que suele presentar la mal
llamada crítica artística en los medios de comunicación,
habitualmente reducida a una mera y vaga descripción de la
propuesta artística que se debería encuadrar y valorar, formulada
en términos vacíos e hiperbólicos, con la intención de ir dejando en
los lectores no solo el elogio de las obras o los artistas, sino la idea
de la importancia de la crítica y del propio crítico que la firma.
12. COMPONENTES INSTITUCIONALES QUE CONFIGURAN EL
UNIVERSO DE LAS ARTES.
MUSEOS
FERIAS DE ARTE
EXPOSICIONES
FESTIVALES
GALERIAS
DISEÑO
PUBLICIDAD
MEDIOS DE COMUNICACIÓN CRITICA
DE
ARTE
ARTISTA PUBLICO
MEDIOS
DE COMUNICACIÓN
ARTESANIA
OBRA DE ARTE