El documento describe la relación entre los centros educativos y su entorno. Señala que las administraciones educativas estimulan una mayor interacción entre las escuelas y sus comunidades locales. Esto incluye mantener las instalaciones escolares abiertas más allá del horario lectivo y adecuar la planificación organizativa a las necesidades del entorno. También expone cómo la cultura del centro educativo refleja la cultura externa y cómo la escuela puede expandir su rol para abarcar dimensiones familiares, laborales y de ocio.