1. Mateo 14, 13-21 “Denles ustedes de comer” 31 Julio,2011 Decimo octavo domingo T.O.
2. Ambientación: Al centro el cáliz y la patena con pan, cartel con la frase: Denles ustedes de comer Denles ustedes de comer Cantos sugeridos: No podemos caminar; Hambre de Dios
3. AMBIENTACIÓN: Compasión y clemencia de Dios es lo que Jesús manifiesta a todos los que llegan a él necesitados. Él sabe bien que no sólo alimenta el pan que multiplica, sino también la Palabra que comparte. Con este, gesto educa a los discípulos de todos los tiempos en la actitud de compartir.
4. Oración inicial Señor, tú te has manifestado primero por medio de tu palabra, En tus palabras, Jesús, encuentro el alimento que llena mi alma, Te presento mis panes y mis peces Señor, para que me ayudes a multiplicarlos, quiero compartirlos con los demás,
5. Gracias Jesús por los dones que he recibido de tu generosidad, gracias por que nos alimentas hasta quedar saciados. Quiero confiar en ti Jesús, quiero guiar mi vida según tu espíritu,
6. Señor ayúdame a confiar solo en ti, para poder servir a los demás, para ser parte de los discípulos que has elegido para dar de comer a tu pueblo. Señor en ti confío. Amén.
7. I. LECTIO ¿Qué dice el texto? Mateo 14, 13-21 Motivación: Aunque Dios quiera ocultarse, como a veces puede parecernos, los seres humanos lo necesitamos y vamos buscándolo con insistencia. Tiene que hacer el milagro de cambiarnos y cambiar nuestra suerte. Pero Él nos pide colaboración, ser sensibles ante los demás y compartir con los necesitados, es decir, con todos. Escuchemos.
8. Lectura del Santo Evangelio según San Mateo 14, 13-21 En aquel tiempo, al enterarse Jesús de la muerte de Juan, el Bautista, se marchó de allí en barca, a un sitio tranquilo y apartado.
9. Al saberlo la gente, lo siguió por tierra desde los pueblos.
11. Como se hizo tarde, se acercaron los discípulos a decirle: "Estamos en despoblado y es muy tarde, despide a la multitud para que vayan a las aldeas y se compren de comer."
13. Ellos le replicaron: "Si aquí no tenemos más que cinco panes y dos peces." Les dijo: "Tráiganmelos."
14. Mandó a la gente que se recostara en la hierba
15. y, tomando los cinco panes y los dos peces, alzó la mirada al cielo, pronunció la bendición, partió los panes y se los dio a los discípulos; los discípulos se los dieron a la gente.
17. y recogieron doce cestos llenos de sobras. Comieron unos cinco mil hombres, sin contar mujeres y niños. Palabra de Dios
18. Cada uno puede leer en voz alta el versículo que más le llamó la atención ( Del evangelio según san Mateo ) Mt 14: 13-2113Jesús, al enterarse de lo sucedido, se retiró de allí en una barca a un lugar tranquilo para estar a solas. La gente se dio cuenta y lo siguió a pie desde los pueblos. 14Cuando Jesús desembarcó y vio aquel gran gentío, sintió compasión de ellos y curó a los enfermos que traían. 15Al anochecer, sus discípulos se acercaron a decirle:-El lugar está despoblado y es ya tarde; despide a la gente para que vayan a las aldeas y se compren comida.16Pero Jesús les dijo:-No necesitan marcharse; dadles vosotros de comer.17Le dijeron:-No tenemos aquí más que cinco panes y dos peces.18Él les dijo:-Traédmelos aquí. 19Y después de mandar que la gente se sentase en la hierba, tomó los cinco panes y los dos peces, levantó los ojos al cielo, pronunció la bendición, partió los panes, se los dio a los discípulos y éstos a la gente. 20Comieron todos hasta hartarse, y recogieron doce canastos llenos de los trozos sobrantes. 21Los que comieron eran unos cinco mil hombres, sin contar mujeres y niños. Mosaico de la iglesia de la Multiplicación de los panes, donde Jesús hace el milagro, según latradición.
19. Preguntas para la lectura: ¿Cómo reacciona Jesús cuando desembarca y ve a todo ese gentío que lo sigue?
25. II. MEDITATIO ¿Qué me dice? ¿Qué nos dice el Texto? Motivación: A nuestro alrededor sigue habiendo mucha gente hambrienta y Jesús continúa siendo el único pan que sacia. Pero necesita de nosotros, discípulos suyos, como servidores e intermediarios. Meditemos para descubrir el verdadero sentido de la Eucaristía.
26. ¿Cómo es mi mirada hacia la gente que muestra cualquier tipo de necesidad a mi alrededor?
27. ¿Soy capaz de desprenderme de mis panes y mis peces, para compartirlos con los demás?
28. ¿Soy capaz de multiplicar los dones que Dios me ha dado, para ponerlos al servicio de los demás?
29. ¿Es la palabra de Dios el alimento que deja satisfecha mi alma?
31. Luego de un tiempo de meditación personal, compartimos con sencillez nuestra reflexión, lo que el texto ME dice a mi propia realidad y situación personal.
32. III. ORATIO ¿Qué le digo al Señor motivado por su Palabra? Motivación: Jesús sabe que es Dios quien garantiza el éxito de su misión, aun en medio del rechazo y a pesar de la insignificancia de cinco panes y dos peces. Y a nosotros nos hace colaboradores en esta gran tarea. Levantemos nuestros ojos a Dios y pidámosle que nos haga capaces de ser fieles servidores suyos.
33. Luego de un tiempo de oración personal, podemos compartir en voz alta nuestra oración, siempre dirigiéndonos a Dios mediante la alabanza, la acción de gracias o la súplica confiada. Se puede, también, recitar el salmo responsorial que corresponde a este domingo (salmo 144).
34. Salmo144 El Señor es clemente y compasivo,paciente y rico en amor.El Señor es bondadoso con todos,a todas sus obras alcanza su ternura. Abres tu mano y sacias de favores a todo ser viviente.
35. Todos esperan, puestos los ojos en ti,y tú les das la comida a su tiempo;abres tu mano y sacias de favores a todo ser viviente. Abres tu mano y sacias de favores a todo ser viviente.
36. El Señor es fiel en todo lo que hace,leal en todas sus acciones.El Señor está cerca de los que lo invocan,de todos los que lo invocan sinceramente. Abres tu mano y sacias de favoresa todo ser viviente.
37. Señor, mueve nuestros corazones a COMPARTIR lo que somos y lo que tenemos, para que juntos seamos EUCARISTÍA
38. ¿Qué me lleva a hacer el texto? IV. CONTEMPLATIO #42. Entre dichos temas quiero señalar aquí la opción o amor preferencial por los pobres. Esta es una opción o una forma especial de primacía en el ejercicio de la caridad cristiana, de la cual da testimonio toda la tradición de la Iglesia. Se refiere a la vida de cada cristiano, en cuanto imitador de la vida de Cristo, pero se aplica igualmente a nuestras responsabilidades sociales y, consiguientemente, a nuestro modo de vivir y a las decisiones que se deben tomar coherentemente sobre la propiedad y el uso de los bienes. Pero hoy, vista la dimensión mundial que ha adquirido la cuestión social, este amor preferencial, con las decisiones que nos inspira, no puede dejar de abarcar a las inmensas muchedumbres de hambrientos, mendigos, sin techo, sin cuidados médicos y, sobre todo, sin esperanza de un futuro mejor: no se puede olvidar la existencia de esta realidad. Ignorarlo significaría parecernos al « rico epulón » que fingía no conocer al mendigo Lázaro, postrado a su puerta (cf. Lc 16, 19-31). Motivación: SollicitudoReiSocialis ! ¿
39. #42 Es necesario recordar una vez más aquel principio peculiar de la doctrina cristiana: los bienes de este mundo están originariamente destinados a todos. El derecho a la propiedad privada es válido y necesario, pero no anula el valor de tal principio. En efecto, sobre ella grava « una hipoteca social », es decir, posee, como cualidad intrínseca, una función social fundada y justificada precisamente sobre el principio del destino universal de los bienes. En este empeño por los pobres, no ha de olvidarse aquella forma especial de pobreza que es la privación de los derechos fundamentales de la persona, en concreto el derecho a la libertad religiosa y el derecho, también, a la iniciativa económica.
40. Compromiso: Durante la semana, busca algunas personas que tengan necesidad de ser alimentadas y ayúdales a saciar su hambre corporal.
41. Te bendecimos, Dios de los pobres y hambrientos del mundo, porque Jesús se compadeció de la gente extenuada y hambrienta, y repartió en abundancia el pan del reino a los pobres.
42. Él invita también a su mesa eucarística a todos tus hijos, como hermanos que participan del mismo pan familiar. Nosotros queremos celebrar dignamente la cena del Señor, con un corazón abierto al amor y la fraternidad universal, compartiendo la fe, el pan y la vida con nuestros hermanos, especialmente con los más pobres de bienes y derechos.
43. Danos, Señor, hambre del pan de vida que eres tú, y sáciala definitivamente en el banquete de tu reino. Amén
44. Viva el Perú Misionero Comparte este montaje con tus contactos cibernéticos