5. Todos los movimientos que haga debenser
lentos y acompañados de una respiraciónsuave.
6. Intente que los movimientos y la respiración vayan a un mismo
compás. Sienta internamente que está dirigiendo una orquesta, que
sus hombros son un instrumento y su respiración otro, pero que ambos
deben armonizar.
7. Cierre los ojos y sienta esa música que toca sus hombros
y su respiración.
Debe seruna sensación placentera...
8. Ahora extienda sus brazos
hacia ambos lados,
lateralmente, y siga rotando
los hombros…
Incorpore los brazos sin
descuidar la respiración,
como si a su orquesta se
hubiese agregado un
instrumento más…
9. Estos movimientos de rotación deben
ser suaves y relajados. Si encuentra que
hay tensión, sacuda sus brazos y vuelva a
empezar de cero.
11. Hasta ahora su
cabeza estuvo
derecha, de
frente, mirando
en línea recta o
con los ojos
cerrados…
12. Empiece a mover la cabeza a un lado y a otro, rotándola como si fuese una
cámara lenta…
…piense, que el ejercicio marea si lo hace con prisa…
13. Vuelva al frente y baje el mentón. Apóyelo contra su pecho. Suba de nuevo la
cabeza, gírela a la derecha y baje el mentón sobre su hombro derecho.
14. Vuelva a subir su cabeza, gírela
hacia el centro y baje el
mentón sobre su pecho
nuevamente…
…luego, repita este
movimiento sobre su lado
izquierdo y su hombro
izquierdo. Así hasta tres
veces.
15. Ahora, combine los dos ejercicios: extienda los brazos, rote los hombros
y gire la cabeza con movimientos ascendentes y descendentes sobre
hombros y pecho.
16. Después de este ejercicio, se sentirá muy relajado y descontracturado…