Poema dedicado al amor

1. Poema: M ilagro de Amor Amor sublime que me reviste el alma de fuerza y libertad ríos de estrellas caídas eres tus ojos son rayos de cobre fulgente tu mirada relámpago de fuego abrasador tu manto consolador de lágrimas escarlatas tu pecho refugio de piedra preciosa tu palabra espada de dos filos tu voz sonido de océanos y tus manos terapia de cuna.

2. Oh santo, sobre tu pecho escribiré mi nombre caminaré por tu palabra de vida tocaré a tu puerta con esperanza de luna y te amaré hasta lo eterno. Ojos de fuego consumidor hazme presa con tu mirada quémame con tu lumbre y márcame para ti redargúyeme en tu pecho de cúprico rojizo hazme volar en tu estrella en tu nube de espuma celestial conviérteme y derrámame tu misericordia bendita y róbame para tu cielo en alas de humildad te serviré.

3. ¡Oh señor! ¿Porqué me ahogas y no me das respiro, estando siempre conmigo? Has robado mi alma mi espíritu y mi templo. Ladrón de mis dudas. Ladrón de mi espacio frío. Oh santo, me cobijas con tu beso tibio y soy tu reina, tu virgen y tu causa y me amas en noches de cristal y me invades el sueño y me amas y te siento pero no me tocas.

4. ¡Oh padre mío! haz de mis palabras mares de alabanzas para tu cielo haz de mis pensamientos espacios infinitos saturados de amor para tu espíritu haz de mi pecho esperanza y templo de navidad eterna haz de mi aliento flecha de pasión para apresarte siempre haz de mis ojos fuente de lágrimas para lavar tus manos haz de mi corazón manantial veloz para enjugar tus pies haz de mi sangre aceite perfumado para regar tu cabello blanco y haz de mi tacto terapia liviana para tu piel.

5. ¡Oh santo, actúa ya! para que tu palabra penetre en cada mente y corazón para que las tormentas se transformen en brisas suaves para que los huesos secos recuperen ligamentos para que cada corazón roto célula a célula se abrace para que el hijo de mundo tire del revólver y coja la Biblia y dispare al cielo ríos de alabanzas para que el adicto inhale polvo del suelo y respire aliento de vida para que la ramera te posea te abrace y se goce para colocar tu nombre sobre todo nombre y para que a mi huerto no entren serpientes sino mariposas que se han posado sobre tus heridas.

6. ¡Oh señor! elévame en tus brazos y rosa mi piel con tu manto de luz con tu palabra de espada con tus pies de cobre blanco y con tu poder eleva mi cuerpo y paséalo entre arcángeles que cargan suspiros de esperanza y peticiones gemidas destruidas a su paso por el humo negro del lago de fuego. ¡Oh padre mío! hazme portadora de ese calor tuyo que restaura, consuela y liberta que divide el mar y junta la paloma y la serpiente.

7. ...y aquel día no habrá sol no habrá luna tus ojos alumbrarán sobre toda vida ese día no habrá abrigo tus brazos cobijarán toda alma desnuda ese día no habrá lluvia tu aliento humedecerá las flores marchitas ese día no habrá templo tu presencia es TEMPLO VIVO. http://compartireducativo.blogspot.com