Los conventos, frescos, obras históricas y códices fueron importantes formas de arte y cultura durante los años formativos de México. Los conventos utilizaron una arquitectura especial para enseñar la religión a los indígenas, y los frescos y obras históricas trataban de convencerlos de la nueva religión cristiana. El arte plumario también tuvo mucha influencia durante este periodo. Códices notables como el Códice Mendocino y el Códice Florentino documentaron esta época.