Apostasia la iglesia de los mercaderes

Mission Israel Mehanaim
Apostasía: La Iglesia Mercado
“Y dijo a los que vendían palomas: Quitad de aquí esto, y no hagáis
de la casa de mi Padre casa de mercado” (Juan 2:16)
El Espíritu Santo reveló al apóstol Pablo el orden de los acontecimientos para la
segunda venida de nuestro Señor Jesucristo. Paradójicamente, se habla y se escribe
hasta en las paredes de las calles sobre la venida de nuestro Señor Jesucristo, pero poco
o casi nada se habla del paso previo que dará la iglesia, antes de que esto ocurra: La
Apostasía de la Iglesia que dará paso al gobierno religioso mundial del Anticristo.
En tiempos de Pablo ya este fenómeno de retroceso de la iglesia, había dado sus inicios,
y es por esta razón que él le escribe una segunda carta (Epístola) a la iglesia en
Tesalónica, donde les aclara:

“Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo, y
nuestra reunión con él, os rogamos, hermanos, que no os dejéis
mover fácilmente de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni
por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, en el
sentido de que el día del Señor está cerca. Nadie os engañe en
ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la
apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de
perdición” (2 Tesalonicenses 2:1-3)
Pablo tenía la revelación de que dos acontecimientos ocurrirían antes de que el Señor
Jesús regrese a buscar a su iglesia:
-

Primero, la iglesia entraría en un proceso de deterioro espiritual, tal como ocurrió
con Israel, antes de que fuera dispersada por Dios por todo el mundo.

-

Segundo, el mundo y la iglesia, deberán experimentar la tragedia de un
gobernante mundial religioso (pues intentará unir todas las religiones del
mundo): hombre sagaz, hombre de pecado, inicuo, poseído por el mismo Satanás, que se hará

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pasar por nuestro Señor Jesucristo, pero que sólo será creído por los impíos y los pecadores,
pues Dios librará a los Escogidos de esta mentira:

“Inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran
poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de
iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el
amor de la verdad para ser salvos” (2 Tesalonicenses 2:9-10)
También el apóstol Juan recibió en la Isla de Patmos, un mensaje para enviar a la
iglesia en Laodicea, iglesia que había entrado en un gran proceso de deterioro
espiritual y pérdida de fe:

“Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses
frío, o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te
vomitaré de mi boca.” (Apocalipsis 3:15-16)
Ciertamente, Laodicea representa el estado de la iglesia de los últimos días. Por
medio de ella, y viendo la situación de oscuridad en que ha ido entrando la casa del
Señor, es que sabemos que este es el último tiempo:

“Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna
cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado,
miserable, pobre, ciego y desnudo” (Apocalipsis 3:17)
Jesús mismo dijo acerca de su iglesia para este tiempo:

“¿Cuándo el Hijo del Hombre venga, encontrará fe en la tierra?
(Lucas 18:8)
Pero algún hermano preguntará:
¿Pero Pastor, porque si la apostasía inicia desde los tiempos de Pablo, cuando la
iglesia primitiva, porque no se escucha en los púlpitos aclararle al pueblo cuales
son las señales de que la iglesia entra en apostasía?



Para que se cumplan las Escrituras. Pero para ilustrar mejor esta respuesta, vamos a
las Sagradas Escrituras y veamos que nos dice el Espíritu de Dios:

- Introducción: Definición Bíblica de Apostasía
“Pero se les ha informado en cuanto a ti, que enseñas a todos
los judíos que están entre los gentiles a Apostatar de Moisés,
diciéndoles que no circunciden a sus hijos, ni observen las
costumbres”(Hechos 21:21)
Cuando los apóstoles predicaban a Cristo, los Judíos no conversos le llamaban
Apóstatas, pues los apóstoles predicaban la circuncisión del corazón y no del prepucio
del hombre, lo que contradecía a la ley de Moisés.

o

-

Apostatar = Volver atrás, recaer, extraviarse

Capítulo 1: El camino Hacia la Apostasía
o

Pérdida de Fe en el Pueblo. La fe para los tiempos señalados como
postreros o últimos, se iría perdiendo en la iglesia de Jesucristo:

“Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la
tierra?” (Lucas 18:8)
La iglesia primitiva, la que fundó nuestro Señor Jesús, era una iglesia
de poder en la fe de Dios. Los líderes cristianos mostraban que Dios
andaba con ellos, pues era notable el cumplimiento de las señales que
Jesús dijo seguirían a los que en el creen, lo que difícilmente ocurre
hoy:



“Y estas señales seguirán a los que creen: en mi nombre
echarán fuera demonios, hablarán nuevas lenguas;
tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa
mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán
sus manos, y sanarán” (Marcos 17:18)
Es fácil saber si la iglesia está en apostasía, pues no habrá forma de ver la
operación del Espíritu Santo en medio del pueblo: habrá muchos
enfermos, hasta los mismos líderes pudieran estar enfermos y nadie orará
con fe para que se sanen y se salven:
“¿Está alguno enfermo entre vosotros? llame a los ancianos de la
iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del
Señor. Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo
levantará; y si hubiere cometido pecados, le serán perdonados”
(Santiago 5:14-15)

La Oración de Fe Salvará al Enfermo
o Falsas Enseñanzas o Doctrinas de Demonios:

“Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros
tiempos algunos apostaran de la fe, escuchando a espíritus
engañadores y a doctrinas de demonios” (1 Timoteo 4:1)
Sobre este particular, el mismo Pablo (quien representa al Espíritu
Santo) advierte a Timoteo (quien representa a la iglesia):

“También debes saber esto: que en los postreros días
vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres


amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos,
soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres,
ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables,
calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores
de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados,
amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán
apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a
éstos evita”(2 Timoteo 3:1-5)

“Amadores de los Deleites más que de Dios”
El Espíritu Santo no se refiere a los hombres del mundo, pues esa es su
naturaleza, se refiere a los que toman la Gracia del Señor como libertinaje:
los que se consideran “Salvos siempre Salvos”.
Este es un síntoma que no perciben los niños espirituales, pues no han
alcanzado discernimiento del bien y del mal (Hebreos capítulo 5), no
pueden entender si están recibiendo la sana doctrina de nuestro Señor
Jesucristo, o doctrina de hombres guiados por demonios. Es probable que
nunca se les haya instruido en los Primeros Rudimentos de la Palabra de
Dios:

“Por tanto, dejando ya los rudimentos de la doctrina de
Cristo, vamos adelante a la perfección; no echando otra
vez el fundamento del arrepentimiento de obras
muertas, de la fe en Dios, de la doctrina de bautismos,
de la imposición de manos, de la resurrección delos
muertos y del juicio eterno”(Hebreos 6:1-2)



Aquí vamos a detenernos para hacer una revisión de los Rudimentos
de la doctrina de Cristo:


El Arrepentimiento de Obras Muertas. El Señor, desde el inicio de su
ministerio, hasta luego de su resurrección, instruyó que se predicase en su
nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados (Lucas 24:47). Por lo que les
dijo:

“Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un
pecador que se arrepiente, que por noventa y
nueve justos que no necesitan de
arrepentimiento” (Lucas 15:7)


La Fe en Dios. Es por Gracia que somos salvos por medio de la fe (Efesios
2:8); pero, es la fe que obra por justicia. Esta es la fe que Judas Iscariote no
pudo comprender, por lo que su alma se perdió, pues él, siendo el Tesorero del
Ministerio de Jesús, no entendió que “es mejor dar que recibir”, por lo que la
Palabra de Dios dice que “el justo por la fe vivirá”:

“Porque en el evangelio la justicia de Dios se
revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el
justo por la fe vivirá” (Romanos 1:17)
Todo el que es injusto, camina por vista y no por fe: porque solo quiere y puede
ver los bienes materiales, como lo es el dinero. El injusto, tiene su corazón atado
a sus bienes, más el que es justo, da sin esperar nada a cambio, pues tiene fe; su
confianza está puesta en Dios.
Es por esto que la Iglesia apostata, tipo Laodicea, entiende que “El dinero es la
rueda del evangelio”, y no, la fe en Dios, manifestada por medio del Espíritu
Santo.
Observe si donde usted se congrega oran constantemente pidiendo a Dios que
le muestre quienes están necesitados, y dan ofrendas a los menesterosos que
allí van (dondequiera podemos encontrar hermanos con necesidad). La iglesia
de Jesucristo está basada en la piedad, no lo olvidemos.




La Doctrina de Bautismos. Jesús instituyó dos bautismos: el agua por
arrepentimiento, y el del Espíritu por la Fe en él. Y dijo, antes de ir al cielo:

“El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas
el que no creyere, será condenado” (Marcos 16:16)
Jesús mismo estableció que al hombre le era necesario nacer de nuevo para
poder entrar al Reino de los Cielos (Juan 3:3), esto es, ser bautizado en agua por
los hombres (bautismo de arrepentimiento, como lo hizo Jesús, no de niños
inocentes), y en fuego, por el Espíritu Santo:

“De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere
de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino
de Dios” (Juan 3:5)


La Imposición de Manos. En su doctrina, Jesús estableció lo siguiente para
TODOS los que en él crean:

“Y estas señales seguirán a los que creen: En mi
nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas
lenguas; tomarán en las manos serpientes, y si
bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre
los enfermos pondrán sus manos, y sanarán”
(Marcos 16:17-18)
Sobre los Enfermos Pondrán SUS Manos, y Sanarán
De igual forma, parte de la prerrogativa que tenían los verdaderos apóstoles,
era que por la imposición de sus manos, ocurría lo siguiente:
Se daba el Espíritu Santo a los creyentes:



“Cuando vio Simón que por la imposición de las
manos de los apóstoles se daba el Espíritu Santo,
les ofreció dinero” (Hechos 8:18)
“Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino
sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en
lenguas, y profetizaban” (Hechos 6:6)
Se sanaban los enfermos:

“Y aconteció que el padre de Publio estaba en
cama, enfermo de fiebre y de disentería; y entró
Pablo a verle, y después de haber orado, le impuso
las manos, y le sanó” (Hechos 28:8)
Se encomendaban los ministerios:

“Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones
de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de
sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo….a los
cuales presentaron ante los apóstoles, quienes, orando, les
impusieron las manos” (Hechos 6:3,6)



La Resurrección de los Muertos. Durante su ministerio, Jesús le insistía a
sus discípulos que él debía de ser muerto, pero que resucitaría al tercer día.
Ellos no lo entendieron hasta que lo vieron, como ocurrió con los dos discípulos
que Jesús resucitado encontró en el camino a la aldea llamada Emaús (Lucas
24:13).
La resurrección de los muertos, la vida eterna al lado de Dios, debe ser el Norte
de todo creyente, pues es la única forma que el mundo no nos arrastrará al
amor a los bienes materiales. Es la convicción de que ya la muerte no puede



enseñorearse del hombre, es lo que da sentido a la vida del creyente, pues
somos forasteros y peregrinos en esta tierra: Somos Ciudadanos del Reino de
Dios. Pero Jehová Dios dijo por medio del profeta Oseas:

“Mi pueblo fue destruido, porque le faltó sabiduría.
Porque tú desechaste la sabiduría, yo te echaré del
sacerdocio: y pues que olvidaste la ley de tu Dios,
también yo me olvidaré de tus hijos” (Oseas 4:6)


El Juicio eterno

Amadores de los Deleites más que de Dios
o

La iglesia Enferma, sin Poder. Pastores y Líderes religiosos sin poder en
la palabra, tibios por amor al mundo y a las cosas que están en el mundo: han perdido
la fe, no pueden imponerle las manos a los enfermos como lo establecen las Sagradas
Escrituras.
Dicen ser apóstoles, de palabra, pero no pueden demostrarlo con prodigios y señales,
como los verdaderos y únicos apóstoles (Pablo demostró con revelaciones de los
misterios del reino de los cielos, y mediante prodigios y señales, que él era el último
apóstol, como abortivo). Pablo demostró que era apóstol, pues él tenía la autoridad
dada a los doce apóstoles de resucitar a los muertos, como lo fue el caso de Eutico.
Dorcas fue resucitada por el apóstol Pedro:

“Y yendo, predicad, diciendo: el reino de los cielos se ha
acercado. Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad
muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis,
dad de gracia” (Mateo 10:7-8)
Solo son apóstoles de título, sin poder, pues creen que se es apóstol por fundar una
iglesia, no sabiendo que los apóstoles de Jerusalén, no fundaron iglesias, sino que
fueron testigos de que Jesús era el mesías esperado, el verdadero Hijo de Dios. Estos
apostatas, falsos profetas, ni pueden imponer las manos para activar los dones de los
que serán ministros en la congregación, son amadores de los deleites del mundo, más
que de Dios:


“No descuides el don que hay en ti, que te fue dado
mediante profecía con la imposición de las manos del
presbiterio” (1 Timoteo 4:14)

“Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del
don de Dios que está en ti por la imposición de
mis manos” (2 Timoteo 1:6)

Amadores de los Deleites más que de Dios
o

Confusión Religiosa. La iglesia de los últimos tiempos, es una iglesia en gran
confusión religiosa. A falta del Espíritu Santo, las diferentes denominaciones y sectas,
junto a los líderes de la religión tradicional, buscan la unidad “cristiana”, pero sin Dios,
pues la palabra establece claramente que solamente por medio del Espíritu Santo puede
haber unidad en el pueblo de Dios (Efesios 4:3).
Buscando la Unidad sin el Espíritu Santo será la estrategia del anticristo. Como en los
tiempos de los Jueces de Israel, el caso de Micaía y los ídolos (Jueces capítulo 17); la
iglesia apostata es la Israel confundida, llena de ídolos e invocando el nombre de Dios al
mismo tiempo. Y la Palabra es clara en torno a eso:

“¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y
los ídolos?” (2 Corintios 6:16)

- Capítulo 2: Mercaderes en la Iglesia
En los últimos días, la iglesia volverá a ser como el templo de Herodes en los tiempos de Jesús:

“Y entró Jesús en el templo de Dios, y echó fuera a todos los que
vendían y compraban en el templo, y volcó las mesas de los


cambistas, y las sillas de los que vendían palomas; y les dijo:
Escrito está: Mi casa, casa de oración será llamada; mas vosotros
la habéis hecho cueva de ladrones” (Mat 21:12-13)
Y echó fuera a todos los que vendían y compraban en el templo
o

El Mercado del Disco:
En muchas iglesias de hoy, podemos encontrar un verdadero mercado de discos,
compitiendo con el mundo:


Los Billboards Cristianos. Tenemos cantantes “cristianos” que se
han hecho ricos, mientras que otros, por su fama, participan de los
BillBoards del mundo. Pero la Palabra de Dios es condenatoria:

“No os unáis en yugo desigual con los incrédulos;
porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la
injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las
tinieblas?” (2 Corintios 6:14)
Estamos hablando de una nueva generación de “adoradores”, que son
ignorantes del conocimiento de Dios, y tienen toda una generación de
cristianos, por cierto la última, que los sigue como sigue el mundo sus
famosas estrellas que brillan en la oscuridad.
La introducción de estos mercaderes, negociantes de la Palabra, en la casa de
Dios, la apostasía de la iglesia en sentido general, como un medio de preparar la
entrada del Anticristo, ha sido posible por dos medios: Primero, la eliminación
gradual del uso de las biblias en las iglesias, tal cual hace la iglesia tradicional, y
segundo, la trampa de la falsa adoración.


Eliminación del uso de la Biblia en el Templo. La misión de
Martin Lutero, de parte de Dios, fue primeramente, facilitar al pueblo el
acceso a las Sagradas Escrituras. Antes de él, las biblias eran del uso
exclusivo de los sacerdotes, y estaban escritas en latín, que era la lengua



antigua del imperio romano (los que mataron a Cristo, a la mayoría de los
apóstoles, como fue el caso de Pedro y de Pablo, y destruyeron a
Jerusalén, la ciudad santificada por Dios, de acuerdo a las Sagradas
Escrituras).
Con Lutero, la Palabra de Dios llega al pueblo, pues él la traduce al
alemán, y la regala a los que verdaderamente buscan de Dios, a los
creyentes, que luego fueron conocidos como los protestantes. Por esta
razón, Martin Lutero fue perseguido por la Iglesia fundada en Roma, no
en Jerusalén, pero no pudo ser asesinado, pues Dios lo guardó. No ocurrió
lo mismo con el mártir William Tyndale, quien murió luchando contra la
apostasía romana, pues tradujo al inglés la biblia.
Pero la apostasía de ayer, ha resurgido con fuerzas en este último tiempo,
para que se cumplan las escrituras proféticas de que antes de que Cristo
venga, la iglesia entraría en deterioro espiritual, volviéndose al mundo, y
más adelante vendría el Anticristo, y por último, vendría la ira de Dios
sobre el mundo por sus pecados.
Hoy, en una estrategia dirigida por doctrinas de demonios (1 Timoteo
4:1), instalan grandes pantallas en las llamadas iglesias de Cristo, para
predicar el sermón, no dejan espacio al Espíritu Santo para que se
manifieste en el templo. Las predicas ahora vienen enlatadas, y hasta se
venden al finalizar el culto. A falta del espíritu Santo, ha proliferado el uso
del PowerPoint de Microsoft, que les permite usar recursos de
entretención, así como información y figuras tomadas del Internet, de
Animal Planet, del History Channel, Wikipedia, National Geographic, de
Discovery Channel, o de cualquier recurso online o de canales de TV del
cable. Jesús dijo que el comiere de su carne y de su sangre, él lo vivificará.
La carne de Jesús es la Palabra de Dios revelada, no interpretada, y su
sangre, el Espíritu Santo quien revela los misterios del reino de Dios en su
Palabra. Cuando predicamos en la presencia de Dios, solo necesitamos la
Biblia en el púlpito, y el Espíritu Santo se encargará de compungir los
corazones y dar convicción de pecado, de justicia y de juicio. En lugar de
reír, es probable que muchos lloren, reconociendo sus pecados ante la
presencia de la Shekinah de Jehová, como ocurrió cuando Salomón oró
para dedicarle el templo a Dios (2 Crónicas 7:1-3).
En otros casos, y aun no tengan pantallas en el templo, es fácil observar
diferentes personas haciendo, supuestamente, uso de los teléfonos


celulares y de las Tablets para leer la biblia; cuando observamos de cerca,
por lo regular, están jugando un entretenido video juego.
Los pastores que son temerosos de Dios, no aceptan dispositivos
tecnológicos, sino que promueven el uso de la Biblia, en el templo y en el
hogar. Es posible que muchos de esos cristianos, ni siquiera estudien la
Palabra de Dios en familia, amando más los deleites del mundo, y
pensando por ignorancia, que irán al cielo siendo pecadores.
Por otro lado, los falsos pastores o apóstoles, que hacen negocio con la
Verdad de Cristo, quieren agradar al hombre y no a Dios, permiten el uso
de estos dispositivos electrónicos, para que no se vayan de la congregación
esos buenos clientes. Le preparan un verdadero espectáculo de luz,
imágenes y sonido que los hace reír a carcajadas, pero el Espíritu de Dios
no está ahí para redargüirlos, y mostrarles el pecado en que están
involucrados. Los falsos pastores los estimulan a que continúen en la vida
de error en que se encuentran, y si mueren, le dicen al pueblo que el
hermano partió con Cristo. No saben que Dios es Santo, y sin Santidad,
NADIE verá al Señor.


La Trampa de la Falsa adoración. Todo esto ha sido posible, debido
al desconocimiento de la Palabra que dijo Jesús:

“Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y
en verdad es necesario que adoren” (Juan 4:24)
Es fácil darse cuenta si la música que se toca es santa o mundana: Si el
ritmo es igual al que tocan en las discotecas, cabarets y clubes nocturnos,
o donde el nombre de Jehová no es invocado, entonces, uno de los dos
está equivocado, o el mundo o la iglesia, y de acuerdo a las Sagradas
Escrituras, el mundo aborrece todo lo que proviene de Dios, por lo tanto
esa música o ritmo musical no proviene de Dios, pues agrada a las
tinieblas. Y la Palabra de Dios estable que se alabe a Dios con el corazón,
que es la verdadera adoración, pues Dios es Espíritu, estableció Jesús
(Juan 4:24):

“Hablando entre vosotros con Salmos, con himnos
y cánticos espirituales, cantando y alabando al
Señor en vuestros corazones” (Efesios 5:19)


“La palabra de Cristo more en abundancia en
vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a
otros en toda sabiduría, cantando con gracia en
vuestros corazones al Señor con Salmos e himnos
y cánticos espirituales” (Colosenses 3:16)
La mayoría de las nuevas “alabanzas y/o adoraciones”, ni si quiera
incluyen en las letras, el nombre de Dios, pues Jehová es un nombre
temido por los espíritus de las tinieblas, así como el nombre de Jesús, el
Señor.


Los Conciertos Cristianos. Escuchen bien esas letras y esos ritmos
herejes, y podrán sentir un sabor contagioso, un deleite tipo mundo. Esto
solo es posible detectarlo cuando se tiene el Espíritu Santo. Si para
muestra falta un botón, refiéranse a los videos en www.youtube.com de
los conciertos mundanos de artistas famosos, y compárelos a los de las
nuevas “estrellas” de la canción supuestamente cristiana. Baje el volumen
del video y mire a ver si el decorado, las luces y el andamiaje glorifican a
Dios, sino, más bien, es una imitación y/o competencia de los del mundo.
Por último, observe si alguien cae bajo la unción del Espíritu Santo, bajo
convicción de pecado, de justicia o de juicio, mire a ver si no es pura
emoción, como si estuviera viendo a un pecador cantando.
Aún más, si quiere ver la influencia del mundo en estos conciertos
“cristianos”, le puedo enumerar la similitud que hay entre muchos de los
artistas nuestros, con los artistas pecadores:



Primero: la Palabra de Dios establece:

“Compra la verdad, y no la vendas” (Proverbios 23:23)



Para entrar a un concierto se compra una taquilla, no se pide una ofrenda:
es dinero lo que se busca, no se obra en fe, no se quiere glorificar el
nombre de Dios, se prepara un espectáculo para entretener al público
“cristiano”. Pero a esos espectáculos va toda clase de público, y los
pecadores no salen arrepentidos, ni muchos menos convertidos. En casos
que hemos visto, el arrepentimiento no les dura mucho, o nunca se
convierten verdaderamente a Cristo. Pero poderoso es Dios para sacar de
esos lugares a los que con humildad y mansedumbre le buscan y le aman.
Es más fácil ir a un concierto que ir a ver a los presos a la cárcel, o ir de
noche a llevarles el evangelio de Cristo a las prostitutas, lesbianas y
homosexuales que deambulan por el mundo, que es la verdadera
voluntad de Dios.


Segundo: En el mundo, los pecadores pagan los CDs de los conciertos, en
muchas ocasiones porque no tenían dinero para entrar al espectáculo.
Mire a ver si regalan la música grabada de los conciertos de estos artistas
“nuestros”: si no paga no tiene el CD o el DVD “bendecido”. En las
iglesias apostatas, todo gira en torno al dinero, no en torno a la fe de
Cristo.

o Rifas y Loterías - Juegos de Azar en el templo:
No hay discernimiento en el pueblo. Aun peor, algunas iglesias fomentan el juego de
azar, poniendo al pueblo en riesgo de ser alcanzado por ese espíritu de las tinieblas
llamado adivinación (espíritu

de adivinación). Cuando el hombre juega un

número (rifas, loterías, etc.), está tratando de adivinar cuál número saldrá, y la
adivinación es hechicería, y está penada con muerte porque es pecado:

“No os volváis a los encantadores y ni a los adivinos; no los
consultéis, contaminándoos con ellos. Yo Jehová vuestro
Dios” (Levítico 19:31)



“Y el hombre o la mujer que evocare espíritus de muertos o se
entregare a la adivinación, ha de morir; serán apedreados; su
sangre será sobre ellos” (Levítico 20:27)
“Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y
homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos
los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego
y azufre, que es la muerte segunda” (Apocalipsis 21:8)
Es por esto que podemos ver al pueblo confundido en pecado, involucrado en estas
prácticas de las tinieblas.

-

Capítulo 3: Señales de Apostasía en la Iglesia
¿Cómo detectar que la Iglesia tiene Síntomas de Apostasía?

El principal síntoma es, que el Espíritu de Dios no dirige la iglesia, sino
la doctrina de hombres: Los Servicios o los cultos son dirigidos con
agendas donde no se le da participación al Espíritu Santo.
Pero usted se podría preguntar:

¿Cómo yo sé, cuándo la iglesia la dirige el Espíritu Santo
y cuando es el hombre que la dirige?
Buena pregunta, y debe ser contestada por la Palabra de Dios:
o

El Ejemplo de la Iglesia Laodicea. El Señor nos dejó las Escrituras para
enseñanza y revelación por medio de su Santo Espíritu, para que entendiéramos los
misterios de su reino.
Como ya hemos visto, el apóstol Juan le escribió por orden de Nuestro Señor Jesucristo,
a la iglesia Laodicea lo siguiente:



“Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de
ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un
desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo.”
(Apocalipsis 3:17)
Pero, ¿cuál es la revelación del Señor a esta iglesia: Desventurada, Miserable, Ciega
y Desnuda?

Veamos:


Desventurada: Se creía una iglesia bienaventurada, dichosa, bendecida,
prospera, y era todo lo contrario. Por el hecho de que aparente tener unción,
que haya enriquecido usando los dones que recibieron, que se predique la
prosperidad como el evangelio de Cristo, eso no significa que esté bendecida,
sino, miremos que dice el Señor Jesús:

“No todo el que me dice Señor, Señor, entrará en el reino de los
cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los
cielos. Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no
profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera
demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces
les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de
maldad” (Mateo 7:21-23)

Apartaos de mí, hacedores de maldad


Pobre y Miserable: Por los prodigios y milagros en la iglesia, se creían
que eran ricos espiritualmente, eso ocurre con las iglesias Apóstatas: aparentan
estar llenas del Espíritu Santo, pues caen muchos al piso como un verdadero
espectáculo, pero no vemos a nadie ser quebrantado por recibir convicción de
pecado de justicia o de juicio por parte del Espíritu Santo. Son verdaderos
pobres espiritualmente:



“En el postrer tiempo habrá burladores, que andarán según sus
malvados deseos. Estos son los que causan divisiones; los
sensuales, que no tienen al Espíritu” (Judas 18-19)

Los sensuales, que no tienen al Espíritu


Ciega: Laodicea, como ocurre con la iglesia Apóstata de hoy, no tiene
discernimiento del bien y del mal, pues es impía, no profesa la doctrina de la
piedad, son niños espirituales, no preparados para recibir alimento sólido
espiritual, sino leche:

“Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la
palabra de justicia, porque es niño; pero el alimento sólido
es para los que han alcanzado madurez, para los que por el
uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del
bien y del mal”(Hebreos 5:13-14)

Inexperto en la palabra de justicia, porque es niño
El peligro de mantenerse el creyente sin madurar, es que puede caer en
condenación y en lazos del diablo, por falta de crecimiento espiritual. Los que
se quedaron siendo niños espirituales son:

Los tibios: los que el Señor vomitará de su boca; viven
en la iglesia y se deleitan con los pasatiempos mundanos,

Las cinco vírgenes insensatas: los que no se

pudieron ir con el esposo pues se les acabó el aceite; no
son sal de la tierra donde viven, trabajan o estudian, se
avergüenzan de Cristo,

Los árboles otoñales sin fruto:

los que serán

cortados y echados en el fuego; no ganan almas para el
reino de Dios,


Los impíos: los que no sienten amor ni misericordia

por su prójimo, y en especial por los hermanos de la fe,

Los Egoístas: los que tienen el corazón endurecido,

no se dejan contristar por el Espíritu Santo, no gimen por
la maldad del mundo, no les importa si miles de niños en
África o en el mundo mueren de hambre a diario; no sale
una sola lagrima de sus ojos, y se hacen llamar la sal de
la tierra, no entienden lo que predican, no tienen al
Espíritu Santo morando en ellos.

Veamos que nos dice el Espíritu Santo de este síntoma visible, que es la
Ceguera espiritual:

“¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque
diezmáis la menta y el comino, y dejáis lo más
importantes de la ley: la justicia, la misericordia y la fe.
Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello.
¡Guías ciegos, que coláis el mosquito, y tragáis el
camello!
¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque
limpias lo de fuera del vaso y del plato, pero por dentro
estáis llenos de robo y de injusticias. ¡Fariseo ciego!
Limpia primero lo de dentro del vaso y del plato, para
que también lo de fuera sea limpio” (Mateo 23:25-26)
o

Desnuda: La iglesia de la apostasía, es aquella donde abunda el pecado, pues no
está el Espíritu Santo para darles convicción. El Nuevo Pacto no está en los ciegos que la
dirigen. Las predicas están diseñadas para agradar al hombre.
Un ejemplo fácil de cómo detectarlos es el siguiente:





Abunda la codicia en el pueblo, esto viola el décimo mandamiento. Viven en la
corriente del mundo. Por ejemplo:
Si anuncian la venta de un nuevo dispositivo electrónico: Televisor, celular,
computadora personal, reloj, etc. o de alguna marca o modelo de automóvil,
quieren adquirirlo como los que tienen el espíritu del mundo, que aborrecen a
Dios, y quieren justificar la compra, pues no quieren el juicio de Dios sobre lo
que hacen. Sencillamente, lo quieren tener para estar a la moda, y no sienten
cuando el Espíritu Santo los está redarguyendo:

“Pero gran ganancia es la piedad acompañada de
contentamiento; porque nada hemos traído a este mundo, y
sin duda nada podremos sacar. Así que, teniendo sustento
y abrigo, estemos contentos con esto” (1 Timoteo 6:6-8)

o En Síntesis, la Iglesia Apóstata, Tipo Laodicea:

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
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

-

No guarda la Santidad
Es impía, no practica el amor al prójimo
No tiene Discernimiento porque es injusta, sin misericordia
Está en pecado, ama los deleites y distracciones del mundo, es enemiga de Dios
No tiene Temor de Dios, no hay sabiduría en ella
Profesa enseñanzas de hombres, Doctrinas de Demonios
No lleva fruto en sí misma, fruto de justicia
No tiene Conocimiento de Dios, ni entendimiento
No predica el evangelio completo
Hay “Simones el Mago” por Pastores en esas iglesias (Hechos capítulo 8)

Conclusión:
El Señor establece en su palabra que su pueblo fue destruido porque le faltó
conocimiento (Oseas 4:6). Hoy, en cumplimiento de las profecías, la iglesia ha
entrado en un estado de deterioro espiritual, que sus líderes no lo pueden
percibir, pues no tienen discernimiento. Esta condición de apostasía global del
pueblo de Dios, nos anuncia la entrada de un gobernante mundial llamado el
Anticristo. Esta figura, tratará de unir las iglesias por medio de artimañas, no por


medio del Espíritu Santo. Luego, cuando el mundo y los falsos cristianos
escuchen que su líder religioso diga que hay seguridad y paz, entonces vendrá
sobre ellos destrucción repentina (1 Tesalonicenses 5:3).



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