Una niña de 6 años desafía la afirmación de su maestra de que Dios no existe porque no se puede ver. La niña le pregunta a un compañero si puede ver cosas como árboles, pasto y el cielo que no pueden verse directamente. Cuando el niño dice que no puede ver el cerebro de la maestra, la niña concluye que según la lógica de la maestra, ella no tiene cerebro. La niña sugiere que la fe es más importante que lo que se puede ver.
2. ¡¡¡Te vas a sorprender!!! Si un niño puede entender esto, ¿por qué nosotros no? Un día, una niña de 6 años estaba en su salón de clases. La maestra iba a explicar la evolución a los niños.
3. Entonces le pregunta a un niño: Tommy, ¿ves ese árbol allá fuera? Sí, Maestra. Tommy, ¿ves el pasto allá afuera? Sí, lo veo maestra
4. Tommy, ve asómate, mira hacia arriba y dime si puedes ver el cielo. Muy bien maestra (Volvió al cabo de unos minutos). Sí, vi el cielo. Tommy ¿Viste a Dios? No, maestra
5. Y dice la maestra: Ese es mi punto. No podemos ver a Dios porque no está ahí. Él no existe. Entonces una pequeña niña interrumpe y pidió permiso para hacerle unas preguntas al niño.
6. La maestra aceptó y la niñita preguntó: - Tommy, ¿ves ese árbol allá fuera? - Sí, dijo Tommy - Tommy, ¿ves el pasto allá afuera? - Síííííííííí... dijo Tommy (Cansado de todas esas preguntas) - ¿Ves el cielo? - Síííííííííí... dijo Tommy de nuevo.
7. - Tommy, ¿ves a la maestra? - Sí... - ¿Ves su cerebro? - No… dijo Tommy VACÍO
8. Dijo la Niña: Entonces, según lo que hemos aprendido hoy con la maestra, ¡¡¡ella no tiene cerebro!!!