Este documento define el autismo y describe su historia, síntomas y posibles causas. Define el autismo como un trastorno del desarrollo que afecta la interacción social y la comunicación y causa intereses restringidos. Explica que Leo Kanner fue el primero en describir el autismo en 1943 y desde entonces ha habido varias teorías sobre sus orígenes, incluyendo factores biológicos, genéticos y déficits cognitivos. Finalmente, señala que tener un hijo con autismo puede causar estrés a la familia debido
1. TRATAMIETO EN EDUCACIÓN ESPECIAL
´´AUTISMO´´
Marielena Smith Gómez
Profesora: Alma Doris Hernández Jiménez
Lic. Psicología 7°
Septiembre 2014
Instituto de Ciencias y Estudios Superiores de Tamaulipas A.C.
2. DEFINICION
Las personas con retraso autista típicamente muestran un patrón inusual del desarrollo social y cognitivo en la niñez, que se caracteriza por dificultades marcadas en la interacción social y la comunicación. Un repertorio bastante restringido de intereses y actividades también son típicas de trastorno autista. Este trastorno afecta en promedio de dos a cinco niños de cada 10 000. Originalmente el trastorno autista se consideraba bastante extraño, pero los estudios epidemiológicos más recientes señalan que su porcentaje ha aumentado.
Alrededor de 70% de las personas con trastorno autista también padecen retraso mental, esto es, el resultado de su CI es de 70 o menor. Sin embargo, el otro 30% de los resultados de CI se clasifican dentro de cualquiera de los rangos de inteligencia de normal a brillante. El trastorno autista no afecta a hombres y mujeres de la misma manera. El porcentaje de retraso autista es de cuatro a cinco veces más alto en los niños que en las niñas, aunque si éstas son afectadas por el trastorno es posible que tengan un retraso mental más grave.
No resulta sencillo establecer una definición ajustada del autismo. De una parte, coexisten diversos criterios que pueden utilizarse con la finalidad: criterio sintomatológico, criterio clínico, criterio psicopatológico y criterio conductual o terapéutico. Por otra parte, dentro del grupo de niños autistas hay una gran diversidad: no hay dos niños autistas que presenten trastornos idénticos. Y finalmente hay diversas hipótesis explicativas acerca de la etiología del autismo.
Sin embargo muchas personas y organizaciones han intentado definir el autismo; la Organización Mundial de la Salud (OMS) define el autismo como: ‘’Síndrome que se presenta desde el nacimiento, o se inicia durante los treinta primeros meses de vida. Las respuestas a los estímulos auditivos y visuales son anormales, y hay dificultades en la compresión del lenguaje hablado. Existe deterioro del uso social del lenguaje y de los gestos. Son muy graves las perturbaciones relacionales, incluyéndose dificultad para mantener la mirada directa a los ojos. Es frecuente la existencia de un comportamiento ritualista en las relaciones sociales, apego a objetos extravagantes, patrones de estereotipias, etc. La inteligencia puede hallarse severamente disminuida, ser normal. O estar por encima de los niveles ordinarios. ’’
Y por último el DSM-IV se refiere a él como: El trastorno autista es la presencia de un desarrollo marcadamente anormal o deficiente de la interacción y comunicación sociales y un repertorio sumamente restringido de actividades e intereses. Las manifestaciones del trastorno varían mucho en función del nivel de desarrollo y de la edad cronológica del sujeto. A veces el trastorno autista es denominado ‘’autismo infantil temprano’’, ‘’autismo infantil o ‘’autismo de Kanner’’.
Las deficiencias de la interacción social son importantes y duraderas. Puede darse una notable afectación de la práctica de comportamientos no verbales múltiples en orden a regular la interacción y comunicación sociales.
3. Historia
El primero en describir el trastorno autista fue Leo Kanner, un psiquiatra infantil, en 1943. Kanner estudió casos de niños que presentaban un patrón único de comportamiento, debido al cual eran incapaces de relacionarse de manera ordinaria con personas y situaciones desde los primeros años de vida. Además, de esta ‘’extrema soledad autista’’, destaco el ‘’deseo obsesivo de los niños por la conversación de su monotonía’’. Kanner consideró el trastorno autista como un tipo de psicosis infantil y creía que la mayoría de los niños autistas eran inteligentes.
Sin embargo, desde hace más de cien años se han venido describiendo casos de niños con trastornos y déficits mentales severos, que implican una profunda distorsión y alejamiento de los patrones normales del desarrollo, aunque el reconocimiento general sobre esta condición de autismo es mucho más reciente.
Generalmente se admite que los primeros casos de alteraciones en el desarrollo que podríamos considerar como autismo se publicaron en 1799. El primero de ellos, fue el caso de un niño de 5 años ingresado por un fuerte sarampión al año, que no fue capaz de andar hasta los 2,5 años, y no hablo hasta los 4 años. Parece ser que jugaba siempre solo y de manera absorta y hablaba de sí mismo en tercera persona. El Segundo de los casos, mucho más conocido, es el estudiado por Itard, y que se le conoce como el ‘’caso del niño salvaje’’ de los bosques de Aveyron, en Francia. Nunca jugaba con juguetes, ni señalaba. Parecía insensible al frio o al calor. Pero el dato más significativo era la aportación del Psiquiatra Leo Kanner por ser la primera persona que definió al autismo como el síndrome que hoy conocemos.
La evidencia y gravedad de estos síntomas desde la primera infancia, hacían que este trastorno fuera distinto a todas las demás variedades que se habían descrito anteriormente de esquizofrenia o de psicosis infantil. En las décadas siguientes, la opinión generalizada entre la comunidad psiquiátrica era la de considerar el autismo como la forma inusual de esquizofrenia que se producía a edades muy tempranas.
En la década de los ochenta, Rutter define el autismo como un trastorno de conducta, y destaca tres grandes grupos de síntomas que aparecen en la mayoría de los sujetos diagnosticados como autistas: 1) Incapacidad profunda y general para establecer relaciones sociales. 2) Alteraciones del lenguaje y las pautas prelingüísticas. 3) Fenómenos ritualistas o compulsivos.
Además los movimientos repetitivos y estereotipados, la poca capacidad de atención, las conductas autolesivas y el retraso en el control de esfínteres son también comunes en los niños autistas. Rutter también confirmó que la edad de comienzo es anterior a los 30 meses. De alguna manera estas observaciones vinieron a corroborar y ampliar los síntomas descritos por Kanner.
4. Sin embargo, otros aspectos de la definición han tenido que ser revisados posteriormente, como el caso del ‘’buen potencial cognitivo’’’ que defendía a Kanner y que no siempre se cumple. Llegando a este punto, es preciso aclarar algunas cuestiones básicas: Funcionamiento intelectual, Edad de comienzo y trastornos neurológicos.
Hay pocos acuerdos entre los investigadores cuando se trata de buscar las causas que expliquen por qué se produce el autismo infantil. Hobson (1989) siguiendo a Kanner (1943), cree que el origen del trastorno autista es principalmente socioafectivo. Considera que en los autistas existe una carencia innata de las capacidades para interactuar emocionalmente con los otros, necesarias para construir un mundo propio y común con los demás. Por lo que no puede conocer a los demás como personas con sentimientos, pensamientos, deseos, intenciones propias etc., al tiempo que les genera una alteración en la capacidad para abstraer, sentir y pensar simbólicamente.
Las hipotesis conductistas coinciden en explicar el autismo desde los principios de la teoría del aprendizaje. La interpretación de Ferster (1961) destaca en este sentido: se señala que el contexto temprano de aprendizaje del niño no proporciona reforzamiento positivo frecuente para las conductas comunicativas y sociales y sí para las conductas negaticas como las rabietas. Es decir, detrás del autismo se encuentra una inadecuada historia de condicionamientos.
Un tema en el que se han interesado los investigadores de la teoría de la mente es sí los niños comprenden que las personas tienen creencias que no son verdaderas. Para investigar esta hipótesis, Baron-Cohen, Leslie y Frith (1985) plantearon a veinte niños autistas, con edades mentales superiores a los 4 años, una tarea donde se plantea una creencia falsa descrita en 5 viñetas. El 80% de ellos no eran capaces de resolver la tarea, cosa que si hacia el 86% de niños con retraso mental (síndrome de Down). Se desprende entonces, que ‘’los niños con autismo pueden tener un problema específico y único para comprender que las personas tienen estados mentales que pueden ser distintos del estado del mundo real y del estado mental que el propio autista tiene’’ (Happé, 1994, p. 70).
La teoría cognitiva actual parte de que el problema central del autismo es la comprensión de estados mentales de los demás. Aunque difieren de la teoría de Hobson en que los estados mentales no son directamente percibidos por el niño, sino que se infieren gracias al desarrollo de un proceso cognitivo que permite atribuir estados mentales a los demás. Consideran que el autismo está causado por el imperfecto desarrollo de la capacidad metarrepresentacional (Leslie, 1978).
En general, cualquier enfermedad o síndrome se describe a partir de las consecuencias subyacentes, de la causa etiológica y de los mecanismos que dan lugar al trastorno. Sin embargo, en el caso del autismo, las definiciones vienen condicionadas casi exclusivamente por los síntomas que le son característicos, ya que, por el momento, aún no existe respuesta evidente de la causa que lo originan. De igual manera existen teorías que tratan de explicarlo:
5. Teorías psicogenéticas: se presupone que los niños autistas eran normales en el momento de su nacimiento, pero que debido a factores familiares den su desarrollo, desencadenan en un cuadro autista como: Trastorno psiquiátrico parental o características anormales de los padres, CI de los progenitores y clase social bajos, interacción anómala entre padre e hijo, intenso estrés y sucesos traumáticos durante una face temprana de la vida del niño.
En la actualidad poca gente defiende la vigencia de esta hipótesis, que han sido sistemáticamente rechazadas por la comunidad científica internacional.
Teorías biológicas: se acepta que existe un notable déficit cognitivo, y que este déficit tiene un papel crucial, aunque tampoco se sabe si se debe a un agente etiolófico o a la combinación de ambos elementos.
6. Autismo
Hobson (1989)
Niño
Salvaje
Ferster
(1961)
Leo Kanner (1943)
Rutter
Historia
Leslie
(1968)
Niño de 5 años
Teorías Biológicas
Teoría Psicogenética
Teoría Cognitiva
7. Factores Biopsicosociales
Factores Biológicos
La perspectiva biológica del autismo ha sido investigada de diferentes maneras. Entre éstas, los dos tipos de estudio más relevantes son los que se enfocan en la estructura y el funcionamiento cerebral, y los que investigan sus aspectos genéticos.
Estructura y función cerebral.
Los estudios de los cerebros de individuos autistas, tanto los que utilizaron técnicas de imageneología para examina cerebros vivos y los estudios de laboratorio del tejido cerebral y su estructura realizados después de la muerte muestran diversas anomalías. El problema es que no se encontró consistencia entre uno y otro. Un área en la que estuvieron de acuerdo sobre los estudios de imagen es que los cerebros de quienes padecen autismo tienden a ser más grandes que los del promedio y que esta anormalidad se debe al mayor tamaño de los lóbulos temporales, peritales y occipitales. El inicio clínico del autismo parece seguir dos etapas del crecimiento cerebral anormal: un tamaño reducido de la cabeza al nacer y un repentino y excesivo aumento de sus dimensiones entre el primero y el segundo mes y nuevamente a los seis y catorce meses de edad. Este crecimiento anormalmente acelerado puede servir como una señal de alerta de autismo.
Investigación genética del autismo.
Aunque no se ha identificado un gen o combinación de genes asociados con el autismo, diversos estudios sugieren que los factores genéticos pueden ser importantes. Sin embargo, la herencia genética no puede ser el único factor que produzca autismo. Los investigadores también descubrieron una correlación entre el autismo y una lesión cerebral producida durante o después del nacimiento. Entre los gemelos idénticos donde solo uno era autista, es más probable que éste experimentara algún tipo de daño cerebral en o poco después del nacimiento (Folstein y Rutter, 1977).
Factores Sociales.
En los primeros años de vida, los niños autistas muestran dificultades para interactuar con otras personas. En su infancia, los niños que más adelante son diagnosticados con autismo pueden no estar interesados en juegos que la mayoría de los niños disfrutan, como canciones y juegos de cuna. Por lo general, parece que los niños les gustan estos juegos por su naturaleza interactiva. Los juegos requieren conducta de atención compartida, que involucran la coordinación de la atención entre el niño, otra persona y un objeto o evento. Por lo general, estas conductas se desarrollan antes del lenguaje y son de dos tipos, ya sea seguir la conducta de otra persona o iniciar la conducta. Es probable que lo niños autistas tengan deficiencia en ambos tipos de conductas de atención compartida.
La falta de intereses interactivos normales y de capacidades en los bebes y niños pequeños con autismo puede ser una pista valiosa para el rápido diagnóstico y tratamiento de este trastorno.
8. El simple hecho de ser una persona con trastorno autista afecta de manera general al desenvolvimiento con la sociedad, ya que la mayor parte del tiempo éste preferirá estar solo o sin entender a las demás personas.
Factores Familiares.
Es un hecho universalmente aceptado, que la presencia en las familias de un hijo con algún tipo de discapacidad física o psíquica graves, como lo es el autismo, constituye un factor potencial que, de forma relevante, perturba la dinámica familiar. Esto es debido a que la convivencia con una persona con este tipo de problemas puede provocar cambios importantes en la vida personal de los demás miembros, fundamentalmente de los padres, y las relaciones entre ellos. Uno de los procedimientos más frecuentemente empleados para profundizar en el estudio del impacto del niño autista en las familias es evaluar el estrés de los miembros de la familia.
Cuando se presenta este tipo de minusvalía de carácter crónico, el estrés que provoca en la familia tiende a cronificarse. Sobre todo sí este tipo de autismo es acompañado con algún tipo de retraso mental, la deficiencia mental está considerada como un importante factor provocador de estrés en los familiares de la persona afectada. Los numerosos estudios empíricos disponibles sobre el efecto de un hijo deficiente mental en la familia han demostrado que las dimensiones del estrés familiar varían en función de las características del hijo afectado, de los miembros de la familia, de la propia familia como grupo y del entorno social.
Aunque una dependencia casi absoluta de los niños con respecto a los adultos es algo consustancial en los primeros períodos evolutivos, y por consiguiente algo normal, también lo es su progresiva autonomía, a medida que aquellas crecen. De aquí que, cuanto mayor sea la diferencia entre los niveles de autonomía real en el hijo y los esperados por sus padres, en función de su edad cronológica, mayor será también el trabajo sobreañadido de los padres o tutores y, en consecuencia, su grado de estrés.
Los padres deben planear con el hermano o hermana lo que haya que hacer cuando el niño o niña con autismo muestre un comportamiento agresivo o destructivo cuando estén juntos o solos, así mismo los padres deben explicar a los hermanos del niño con autismo la condición que éste presenta, explicándoles de una manera detallada el significado de la enfermedad que su hermano o hermana padece, y todas las cosas que podría hacer por consecuencia del trastorno, sin embargo sigue afectando más a los padres que a los demás miembros de la familia.
9. Criterios (DSM-IV)
A. Existe un total de 6 (o más) ítems de 1, 2 y 3, con por lo menos dos de 1, y uno de 2 y de 3:
1. alteración cualitativa de la interacción social, manifestada al menos por dos de las siguientes características:
a. importante alteración del uso de múltiples comportamientos no verbales, como son contacto ocular, expresión facial, posturas corporales y gestos reguladores de la interacción social.
b. incapacidad para desarrollar relaciones con compañeros adecuadas al nivel de desarrollo.
c. ausencia de la tendencia espontánea para compartir con otras personas disfrutes, intereses y objetivos (p. ej., no mostrar, traer o señalar objetos de interés).
d. d falta de reciprocidad social o emocional.
2. alteración cualitativa de la comunicación manifestada al menos por dos de las siguientes características:
a) retraso o ausencia total del desarrollo del lenguaje oral (no acompañado de intentos para compensarlo mediante modos alternativos de comunicación, tales como gestos o mímica).
b) en sujetos con un habla adecuada, alteración importante de la capacidad para iniciar o mantener una conversación con otros.
c) utilización estereotipada y repetitiva del lenguaje o lenguaje idiosincrásico.
d) ausencia de juego realista espontáneo, variado, o de juego imitativo social propio del nivel de desarrollo.
3. patrones de comportamiento, intereses y actividades restringidos, repetitivos y estereotipados, manifestados por lo menos mediante una de las siguientes características:
a) preocupación absorbente por uno o más patrones estereotipados y restrictivos de interés que resulta anormal, sea en su intensidad, sea en su objetivo
b) adhesión aparentemente inflexible a rutinas o rituales específicos, no funcionales
c) manierismos motores estereotipados y repetitivos (p. ej., sacudir o girar las manos o dedos, o movimientos complejos de todo el cuerpo)
d) preocupación persistente por partes de objetos
B. Retraso o funcionamiento anormal en por lo menos una de las siguientes áreas, que aparece antes de los 3 años de edad: 1 interacción social, 2 lenguaje utilizado en la comunicación social o 3 juego simbólico o imaginativo.
C. El trastorno no se explica mejor por la presencia de un trastorno de Rett o de un trastorno desintegrativo infantil.
10. Entrevista al niño
Nombre: _______________________________________________ Edad: ___________
Fecha: ___________________ Lugar: _______________________
1. ¿Cómo se llaman tus papás?
2. ¿Cómo te llevas con tus padres?
3. ¿Quiénes más viven en tu casa?
4. ¿Cómo te llevas con los demás miembros de casa?
5. ¿Te gusta salir a pasear con tu familia?
6. ¿Te gusta ir a la escuela?
7. ¿Cómo te llevas con tus compañeros?
8. ¿Te gusta jugar con tus compañeros?
9. ¿Cuántos amigos tienes?
10. ¿Qué haces cuando estás en tu casa?
11. ¿Dónde te gusta estar?
12. ¿Prefieres jugar solo o con otras personas?
13. ¿Te has sentido solo alguna vez?
14. ¿A qué te gusta jugar normalmente?
15. ¿Te has peleado con otra persona alguna vez?
16. Cuando tus padres te piden que recojas tus juguetes ¿lo haces sin disgusto?
17. ¿Haces la tarea que te encargan tus maestros?
18. Sí otros niños quieren jugar con tus cosas, ¿se los prestas?
19. Sí tus padres no te compran algo que quieres ¿Qué haces?
20. ¿Has escuchado hablar del autismo?
11. Entrevista a Padres
Nombre del padre: _____________________________________________ Edad: ________
Nombre de la madre: ___________________________________________ Edad: ________
Fecha: ______________________________ Lugar: _________________________
1. ¿Cuándo fue diagnosticado su hijo con trastorno autista?
2. ¿Sabe el significado del trastorno autista?
3. ¿Cómo cambio su vida personal después de que su hijo fuera diagnosticado?
4. ¿Cómo cambio su vida Marital después de que su hijo fuera diagnosticado?
5. ¿De qué manera cambio la dinámica familiar después de que un miembro fuera diagnosticado con trastorno autista?
6. ¿Cuál es la relación que tiene con su hijo?
7. ¿Cómo era la relación con su hijo antes de ser diagnosticado?
8. ¿Cómo se ve en 10 años?
9. ¿Considera necesario la ayuda profesional para el resto de la familia?
10. ¿Cree que es necesario la ayuda profesional para usted?
11. ¿Cuál cree que sea la desventaja de tener un hijo autista?
12. ¿Cuál cree que sea el lado positivo de tener un hijo autista?
13. ¿Considera que necesita más atención por parte de los padres un hijo con trastorno autista que otro miembro de la familia?
14. ¿Cómo afectaría ésta situación a los demás miembros de la familia?
15. ¿cree que la responsabilidad de cuidar a un niño con autismo cae solamente en los padres?
16. ¿Ha explicado con detalle a los demás miembros de la familia la situación?
17. ¿Cuál es su rutina diaria?
18. ¿Quién toma las decisiones sobre qué hacer con su hijo con autismo?
19. ¿Se toma tiempo especial para pasar con usted misma?
20. ¿Cómo pasa un día en familia?
12. Videos
Canción.- Mi hijo Dice: https://www.youtube.com/watch?v=HRdp8MeRuMc
Canción del niño Autista: https://www.youtube.com/watch?v=-hw0n7nOVBc
El Viaje de María: https://www.youtube.com/watch?v=qxLeb5y6p7s
AFANYA - El trabajo con niños con Trastorno del Espectro Autista: https://www.youtube.com/watch?v=eoyY6MPOZS8
13. Bibliografía
Juan J. López-Ibor Aliño, Pierre Pichot. Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-IV).
Irwin G. Sarason, Bárbara R. Sarason. Psicopatología anormal: el problema de la conducta inadaptada. Edit. Pearson, Prentice Hall. Undécima edición. 2006.
Diversos autores. Técnicos Superiores de Integración Social. Edit. MAD. Primera edición. Julio 2006
Juan Luis Castejón, Leandro Navas. Unas bases psicológicas de la educación especial. Edit. ECU editorial club universitario.
Sandra L. Harris. Los hermanos de niños con autismo, su rol específico en las relaciones familiares. Edit. Narcea S.A. 2001.
Aquilino Polaino Lorente,, Edelmira Doménech Llebería, Francesc Cuxart. 1997