1. ORACIONES POR NUESTRA MADRE GENERAL MADRE YVONNE REUNGOAT 9na Sucesora de Madre Mazzarello
2. Oh María Auxiliadora, bendice y protege a nuestra Madre Yvonne, sea para todas sus hijas testimonio vivo de contemplación y de fraterna comunión. Amén
3. Señor Jesús que has escogido a nuestra Madre Yvonne para el servicio de la Caridad en nuestro Instituto, guíala con tu Espíritu para que en fidelidad al carisma, el Instituto pueda en todo tiempo y en todo lugar realizar la misión para la cual el Padre lo ha suscitado en la Iglesia. Amén.
4. Oh Dios Misericordioso, que en tu infinita providencia has querido como guía en nuestro Instituto a Madre Yvonne, te pedimos para que tu Espíritu la sostenga en la búsqueda de tu voluntad, en favorecer la unión de corazones y en promover el bien de todo el Instituto y de cada hermana según las constituciones y el espíritu de Don Bosco y Madre Mazzarello. Amén
5. Señor Omnipotente que has donado a nuestro Instituto a Madre Yvonne, te pedimos para que tu Espíritu haga en ella una mujer de comunión, tanto de convertir el Instituto en una Parábola de unidad en el corazón de la Iglesia. Amén.
6. Oh Virgen Santísima custodia a aquella que te representa en el Instituto querido y bendecido por Ti. Haz que pueda guiarlo en fidelidad al carisma salesiano para el bien de la Iglesia y de toda la humanidad. Amén.
7. Padre Santo que en tu infinito amor renuevas todo el universo, infunde sobre nuestra madre tu Espíritu de piedad y de amor, Espíritu de piedad y de amor, Espíritu de fortaleza y de consejo. Amén.
8. ¡Oh María Auxiliadora! Protege a la superiora general de tu Instituto y a todas sus hijas presentes y futuras , a fin de que, enriquecidas por las buenas obras , hechas según el espíritu de Don Bosco, puedan glorificar contigo a Dios eternamente en el cielo. Amén
9. Te damos gracias Señor, por la sencillez la transparencia y el entusiasmo vocacional de nuestra querida Madre Yvonne. Bendícela y concédele la fortaleza y las gracias que más necesita en su misión de Madre y de escucha y atención a la cada persona, por su fe y abandono en tu amor que lo transparenta enguía de nuestro Instituto: Te damos gracias por su capacidad el encuentro con cada hermana y con los jóvenes, por su pasión apostólica y misionera. Gracias Dios mío por regalarnos una Madre según tu corazón de Padre.