2. En este libro podemos ver que la paternidad siempre
tendrá sus desafíos, pero con la base de comprensión y
el amor, y con la disposición para satisfacer las
necesidades básicas de nuestros hijos, podemos aplicar
las técnicas de Obediencia fácil y vivir el placer de
criar a un niño que generalmente estará dispuesto a
obedecer. Este es realmente un libro acerca de la
importancia de la autodisciplina y de cómo lograr que
nuestros hijos sean obedientes, no por temor al castigo
sino porque la obediencia sea para ellos algo tan fácil
como respirar.
3. • Lección I: El respeto es la base de la obediencia fácil. El respeto mutuo es un
prerrequisito para la obediencia fácil. Uno puede obtener obediencia sin
respeto, pero la obediencia se basará en el temor al castigo. Pero si se quita el
castigo se derrumbará la obediencia. Es mucho mejor tener una obediencia basada
en el amor y el respeto mutuo.
• Lección II: el ejemplo es un poderoso maestro. Tratar a nuestros hijos como
queremos que ellos nos traten a nosotros, porque ellos terminaran imitándonos.
• Lección III: el estímulo hace fácil obedecer. Cuánto mejor nos concentremos en
alentar a nuestros hijos, en vez de marcar sus errores, esto le enseñará a los niños a
comportarse de forma adecuada.
• Lección IV: enseñar obediencia puede ser divertido. La vida es más agradable si
ocasionalmente la conviertes en un juego. Puedes enseñar de manera original y
divertida y verás cuan fácil es la obediencia.
4. Existen tres metas para lograr que nuestros hijos puedan pensar por sí mismo y tomar
sus propias decisiones:
1era. Autodisciplina: enseñarle a tomar sus propias decisiones y a cosechar la
srecompensas de esas decisiones positivas o negativas.
2da. Prevenir o resolver conflictos: algunas técnicas efectivas para prevenir c
onflictos. Control por medio de toque. Un toque evitará que los niños se vuelvan
agresivos. El toque es una herramienta poderosa para prevenir problemas de
conductas. Distracción: cuando tu hijo se sienta frustrado puede manejar la situación
distrayéndolo su atención para evitar conflictos.
Señala la realidad: Debemos explicarle y hablarle a nuestros hijos y explicar la realidad
de la situación. Hablándole claro y lo que se desea del niño.
Involúcrate: conocer a tus hijos de manera que sepas antes que él te diga lo que paso,
involucrarnos los suficiente para darnos cuenta cuando han hecho algo malo.
3ero. Edificar la autoestima de tus hijos. Debemos decirle cosas agradables a nuestros
hijos de manera que ellos se sientan apreciados y especiales. Necesitamos criar a
nuestros hijos de manera que tengan confianza propia para tomar buenas decisiones.
5. • Según Martin y Lois existen cuatro estilos de paternidad: el amoroso
restrictivo, autoritativo, amoroso-permisivo, el hostil-restrictivo o
padre autoritario y el hostil permisivo o padre negligente.
• Por otra parte existen las cualidades de los buenos disciplinadores
como son: ser abierto y accesible es decir estar abiertos a nuevas
ideas y escuchar y considerar sugerencias, críticas, deseos entre
otras cosas. Mantener una temperatura emocional pareja delante de
sus hijos: no ser demasiado fríos o demasiados calientes, debemos
ser equilibrado en el amor que damos a nuestros hijos. Ser
consecuente: esto quiere decir que cuando le decimos a nuestros
hijos que tienen que hacer alguna tarea debemos ser consistente
hasta que la terminen así de esta manera ellos verán que deben
hacerlo. Y por último esta mantener un frente unido con todos tanto
padre como madre tienen que estar de acuerdo cuando se va a
disciplinar para lograr mejores resultados.
6. • En este capítulo muestra que cada niño tiene una
copa vacía que necesita ser llenada con amor para
así lograr que la inconducta se desaparezca, que
cuando nuestros hijos a veces son rebelde solo
están tratando de llamar nuestra atención,
necesitan sea positiva o negativamente llamar la
atención por tanto buscan de manera desesperada
hacerlo para llenar su copa. Para tener hijos
obedientes tratemos de llenar su copa vacía con el
amor que ellos necesitan y así tendremos una
obediencia fácil de parte de ellos.
7. • Para establecer límites con nuestros hijos tenemos
que tener las cosas bien claras, no solo nosotros sino
también hacerlo entender a nuestros hijos. Los niños
reaccionan a los límites de la misma manera que los
adultos. Si la consecuencia es lo suficientemente
seria como para ser significativa, serán obedientes.
Estos son los parámetros que hacen que los limites
puedan obedecerse: captar la atención de los niños,
que los límites sean claros, determinar un límite de
tiempo, que sean razonables, determinar una
consecuencia significativa, haya influencia social
positiva, y sobre todo asegurarse de que los límites
sean claro.
8. • Este capítulo es muy claro cuando nos habla de dejar que
nuestros hijos asuman las consecuencias de sus actos, pero
consecuencia lógica que ellos puedan entenderla y que dure
para toda la vida. Cada vez que un niño actué de mala forma,
a menos que la consecuencia no vaya a dañarle físicamente.
Ellos puedan entender que lo que hicieron estuvo mal y que
deben cambiar su actitud, o la próxima vez le ira peor. Otras
de las cosas que podemos hacer es ponerlo a elegir que
consecuencia desean por sus inconducta. Así como los
adultos aprendemos cuando Dios permite que nos pase algo
para aprender una lección de esa manera podemos
enseñarles a nuestros hijos y de esa manera podrán cambiar
para mejor
9. • Estos problemas pueden ser: conductas
molestas, los insultos, el temor, rivalidad con sus
hermanos contro de enfínteres, morder, ser muy
inquieto, estan llorando con gimoteo, limpieza de
habitaciones entre otras. Este capitulo nos
muestras maneras rapidas y sencillas de como
tratar estos y otros problemas de los niños que
son propios de su edad me resulto sumamente
interesante la verdad. De como puedo ayudar a
mis propios hijos con estos utiles consejos
10. • La palabra de la autora son: ”Muchos padres piensan que la paternidad
es hacer que los niños obedezcan. En lugar de eso, nuestra tarea debería
ser animar a los niños a ser autodisciplinados”.
•
• Disciplinar significa enseñar. He sido docente de niños pequeños, así
como también de estudiantes secundarios durante muchos años, y las
mismas técnicas que son exitosas en el aula pueden ser utilizadas en el
hogar.
• Al leer este libro pude encontrar varios métodos ,junto a la práctica
educacional, unidos a la experiencia práctica de la autora de criar a sus
tres hijos, los métodos mostrados que han superado la prueba del
tiempo. Excelente métodos que ayudarán tanto a padres inexpertos
como a padres que ya tienen sus hijos a lograr una obediencia fácil. Y
hacer de la obediencia algo sencillo para tener una mejor relación con
nuestros hijos.