El documento describe los estudios necesarios para formular y evaluar un proyecto. Explica que los estudios se desarrollan de forma superpuesta y se retroalimentan entre sí, modificando sus parámetros a medida que se generan nuevos datos. Proporciona un ejemplo de cómo un proyecto de alarmas domiciliarias fue modificando su alcance y cobertura a través de la interacción de los distintos estudios. Resalta la importancia de definir la "Idea General" de manera clara, concisa y concreta desde el inicio
PROYECTO FINAL. Tutorial para publicar en SlideShare.pptx
Guiaideageneral
1. IDEA GENERAL
Los estudios que debemos realizar para la Formulación y Evaluación de
un Proyecto, podemos exponerlos en forma de gráfico o bien sobre un eje
de tiempo, no es menester suponer que un estudio va detrás del otro,
básicamente cada uno de ellos genera datos e información tanto para si
mismo como para los otros estudios, así es que, por ejemplo, el estudio del
mercado, en su acápite “Demanda”, al ir determinando ésta, va proveyendo
al estudio económico de lo que podríamos llamar la “Línea de Ventas”, a
su vez el estudio técnico en su parte de “Localización” va generando los
datos sobre costos de fletes operacionales; Es decir que si bien los estudios
pueden suponerse como uno después del otro, en realidad tienen gran parte
de su desarrollo en forma superpuesta además existe una especie de
retroalimen- tación (o feed back), es decir los datos generados en un
estudio después de procesarlos en otro estudio pueden hacer que se
modifiquen algunas de las pautas del primer estudio, asimismo cada uno de
los estudios va generando una pauta de “factibilidad” sobre si mismo y
sobre la idea general, daremos un ejemplo sobre lo dicho aquí.
Digamos que establecemos que nuestro negocio es la
provisión de alarmas domiciliarias (Seguridad) con
monitoreo centralizado. El ámbito de aplicación es la
ciudad de Buenos Aires y Alrededores, población total de
alrededor de once millones de habitantes. (Idea General)
Cuando realizamos el estudio técnico determinamos las
necesidades de Cámaras, Conexiones, Vehículos, Personal,
etc. (estudio Técnico)
A su vez con estos elementos se va determinando el
volumen de la inversión (Estudio Económico)
Pronto vemos que la inversión a realizar es muy cuantiosa,
si se cuenta con los fondos suficientes se sigue adelante,
pero si no es así, hay que revisar el proyecto (la idea
básica). Asimismo al realizar el estudio técnico vemos que
las necesidades de Técnicos, de materiales y otros
elementos, hacen que el proyecto no sea viable, por lo que
volvemos a la idea general para modificarla, y así se hace
2. un proceso iterativo, hasta encontrar que la evaluación
propia de cada estudio permite continuar el desarrollo del
proyecto al vencer las restricciones propias de cada
segmento analizado.
Este proyecto (real) se revisó varias veces en poco tiempo
y se lanzó un proyecto técnica y económicamente factible
y con muchas probabilidades de éxito a nivel comercial en
un barrio privado, alrededor de trescientos hogares con un
total de mil habitantes, ya está en proceso la segunda etapa,
que abarca tres barrios privados que superan en conjunto
las siete mil personas.
Se puede extractar de este ejemplo, que la demanda
potencial existe para toda la población, pero que al ir
revisando las pautas de cada estudio cada uno de estos iba
presentando diferentes aristas que producían la
modificación de la pauta inicial, hasta hacer que el
proyecto se encarara de una forma que tuviera amplias
posibilidades de éxito.
Desarrollo de la “Idea General”.
Como el nombre lo indica en esta sección se analiza, describe y expone el
concepto básico del proyecto. Aquí se describe “El Qué” del proyecto.
Aquí la “idea” que puede ser un bien, o un servicio, o la aplicación de
una tecnología diferente, o el lanzamiento (o relanzamiento) de un
producto en un lugar geográfico igual o distinto, resumiendo, puede ser
“cualquier cosa”; se define en forma precisa y concisa dejando de ser
“abstracto” y convertirse en algo definido, preciso y con posibilidades de
generar utilidades, es decir comienza a convertirse en “Algo Palpable”.
La generación de la “Idea Básica” es dable por diversos métodos,
• puede existir una cierta cantidad de dinero disponible y se
“busca” una idea potable para invertir dicho dinero,
3. • o bien puede haber una máquina o un bien o un servicio
disponible y a partir de allí surge la posibilidad de generar un
proyecto,
• también puede existir una necesidad insatisfecha y hay que
“buscar el medio de satisfacerla”;
se puede aseverar que existe una amplísima gama de generadores de “ideas
básicas”.
Existen a su vez algunos métodos “técnicamente probados” para generar
estas ideas básicas, uno de ellos es la conocida “tormenta de ideas” del
término inglés “brain storm”, otros pueden ser los “buscadores
focalizados” (focus search).
En general podemos decir que el trabajo del Analista de Proyectos
comienza en este punto, a partir del cual aplica sus técnicas y con ellas
determina la probabilidad de realización y éxito del proyecto. Muchas de
las veces se trata de una idea que “nos bajan”, es decir la idea ya está
generada y nos piden que apliquemos nuestro conocimiento en la materia
para formalizar el proyecto y determinar si el mismo es viable desde los
distintos puntos de vista: Operativo, Comercial, Económico, Financiero,
etc., en cambio otras veces nos solicitarán que desarrollemos inclusive la
idea básica, por ejemplo nos dicen “contamos con un monto de dinero de
tal magnitud y deseamos nos presente(n) proyectos de distintas índole para
invertir en el(ellos)”, o también “deseamos invertir en turismo, dennos tres
proyectos con tres montos de inversión diferentes cada uno”, nótese que en
este caso son varios proyectos a la vez que pueden ser alternativos o
complementarios ó inclusive mutuamente excluyentes.
A partir de aquí comienza la definición precisa de la idea, deben dejarse
de lado las denominaciones generales y ser precisos, podríamos decir que
4. cada palabra tiene un costo y que por lo tanto debemos definir el proyecto
con la menor cantidad posible de palabras, aunque por supuesto, sin omitir
ningún elemento del proyecto.
Lo del costo de las palabras no es solo para el enunciado sino que sirve
principalmente para el receptor (lector) del proyecto, que puede ser un
analista, o un inversor, o un agente de financiación, etc. y éste “ahorro de
palabras” (léase definición precisa), ya impondrá una idea de eficiencia y
lo más importante es que introducirá al lector de lleno en la materia. Se
debe evitar, como ya dijimos, el palabrerío inútil o equívoco e ir
directamente a la definición más clara y precisa posible, evitar el
“gongorismo”. Si el lector le gusta la idea del proyecto puede seguir
leyéndolo, pero si no le gusta, puede dejar que este proyecto lo lea otra
persona y dedicarse a leer otro que está dentro de sus “apetencias”, en
general todas las personas tienen una preferencia mayor por algún tema en
especial y otros los satisfacen en menor medida, puede suceder que un
potencial inversor lea tres o cuatro hojas del proyecto y aún no se entere de
que se trata, ante esto decide directamente tirarlo a la basura, recordemos
que la gente que dispone de dinero esta normalmente recibiendo ofertas
para la colocación de sus fondos en distintas formas de inversión, entre
ellos diversidad de proyectos, por lo que su tiempo de lectura y análisis
está acotado y muchas veces agotado, entonces para evitar un mal uso del
tiempo del analista o inversor y del nuestro propio se debe definir la idea
en forma precisa y concisa, ya que una demora en la aprobación o rechazo
del proyecto puede hacer que dejemos de presentarlo en otros lugares, y
esto hace que perdamos oportunidades de financiación o inversión y por
supuesto de obtener utilidades. Esta es una de las razones fundamentales
del presentar una “Idea General” precisa, en términos más contundentes en
las tres “C”, en forma “Clara Concisa Concreta”.
5. Es menester lograr que el proyecto este bien definido y expuesto en este
acápite, ya que en base a ello se comenzarán y realizarán los restantes
estudios, y si se parte de una definición equivocada es muy probable que se
arribe a una decisión errónea, y lo que es peor se producirá una errónea
apropiación de fondos que producirá una menor rentabilidad o inclusive el
rechazo del proyecto.
Obtener una idea básica definitiva desde el mismo momento de inicio de
análisis del proyecto es realmente difícil, lo que si hay que hacer es que la
exposición final de la misma tenga esas condiciones, entonces surge la
pregunta ¿cómo se logra esto?
Si bien no es sencillo tampoco es tan complejo, mas bien es una cuestión
de “depuración”, se parte de la idea básica, si se quiere “rústica” y se va
acotando y enriqueciendo a la vez, paso a paso, habíamos comentado
anteriormente sobre el proyecto de instalación de alarmas, si bien se
comenzó con una definición bastante precisa del producto, no era
precisamente exacta en cuanto a su volumen y consideraciones
(necesidades) técnicas, se comenzó el proceso de relevamiento de la
demanda y pronto se vio que no todos los habitantes del área estarían
dispuestos a colocar una alarma en su domicilio, esto generaba una
dispersión de “clientes”, que haría necesario la instalación de un gran
número de “Centros Operativos” en distintas localidades para atender
quizás a muy pocos clientes en esa área, y también se veía que en otros
lugares se producía una gran demanda concentrada pero que no iba a poder
ser satisfecha por razones de disponibilidad presupuestaria, por eso hubo
que redefinir la cobertura geográfica e inclusive “el producto”, esto último
debido a una imposibilidad técnica. Así que el proyecto se fue agrandando
en el nombre aunque achicando en su cobertura, pero básicamente se iba
logrando, a través de su definición, en un proyecto viable, tanto desde lo
6. comercial, como desde lo técnico, como así también desde el punto de
vista económico financiero.
Dentro de lo que denominamos “Idea General”, se agregan al final de la
evaluación, los resultados de los estudios realizados, es decir se incluyen
en este acápite, además de lo que denominamos “los grandes números”, el
resumen de cada uno de los estudios, así por ejemplo, se expone que el
proyecto
“Provisión del servicio de alarma electrónica con apoyo de
rondas de vigilantes y central de monitoreo remota para la
zona del barrio privado ZZ, ubicado en el noroeste del Gran
Buenos Aires”.
Esta “definición” del producto nos va dando pautas bastante claras del
alcance del proyecto.
La exposición continúa con algunos datos “detallados” del proyecto:
“se prevé cubrir durante el primer año de actividades el 50%
de los hogares y la casa club del barrio, que significan ventas
por un monto aproximado de xxx pesos, con un crecimiento
anual del 10% de la coberturas hasta alcanzar el 90% del
total del barrio con todos los productos”, una vez alcanzado el
nivel operativo máximo estimamos mantener el mismo por un
lapso de seis años adicionales, sin grandes cambios ni
necesidades de inversión adicional. La inversión inicial
prevista asciende a xxx pesos y la financiación está prevista
realizarse en una proporción de 70% con fondos propios y el
30% restante con los fondos generados por el proyecto en los
dos primeros años de operaciones. La inversión inicial
asciende a xxx pesos y el 50% de ella se realizará antes del
lanzamiento del proyecto, el 50% restante durante el primer
semestre de operaciones. Esta segunda porción es la
correspondiente al capital de trabajo necesario para el primer
semestre de operaciones, momento en el cual se llega al punto
de equilibrio.
El horizonte temporal de análisis del proyecto es de siete años,
en este periodo se estima que la rentabilidad total ascenderá a
xxx pesos que representa un xx % de rentabilidad sobre la
7. inversión, asimismo los flujos de fondos generados en ese
periodo suman xxx pesos y el flujo neto de fondos descontado
a la tasa del xx % asciende a xxx pesos. El nivel de ventas
alcanza los xxx pesos mensuales y el total anual es de xxx
pesos.
Como se puede observar, en el texto anterior no solo se incluye la “Idea
General” sino que se agregan datos sobre el proyecto, esto es lo que
llamamos “Resumen Ejecutivo”, este es el resumen de todo lo elaborado
en la formulación del proyecto, por lo que necesariamente se termina de
preparar como último ítem, pero aparece en primer término debido a que
es de más fácil lectura y permite que el lector conozca de antemano, y
pueda decidir, si le interesa el proyecto o no; suele suceder que en algunos
entes de financiación o de promoción de proyectos, cuando no están
presentados de esta manera (resumen ejecutivo al inicio) suele perderse
mucho tiempo, porque normalmente los analistas están asignados, por
ejemplo, por tipos de industria, otras veces por volumen, otras lo están por
su grado de riesgo, y la consecuente rentabilidad asociada al mismo,
entonces en caso de no tener este resumen “bien visible” no se tiene claro a
quien asignarle el proyecto (el análisis del mismo) y a veces queda un
largo tiempo pendiente, inclusive ha ocurrido que se han aprobado otros
proyectos posteriores y algunos han quedado sin cupo, pendientes, debido
a esta confusión.