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1. LA LÍRICA PETRARQUISTA EN EL
RENACIMIENTO Y EL BARROCO
Introducción general
Antes de centrarnos en los dos movimientos que nos ocupan, es necesario hacer mención
de los sucesos más relevantes de esa época, como son la Reforma Protestante o el
Humanismo, dos movimientos que conmocionaron la Europa de principios del siglo XVI.
En cuanto a la Reforma, esta rompió con el cristianismo presente durante la Edad Media.
Además, el protestantismo estableció que el hombre no podía influir con sus actos en las
decisiones del Creador, lo cual quiere decir que el ser humano estaba destinado a
condenarse o salvarse desde su nacimiento. Por ultimo, el cristianismo inicia la
Contrarreforma. Se busca una realidad nueva que lo devuelva a la pureza, defendiéndolo
de la herejía. En este sentido, cabe destacar a Juan de la Cruz y Santa Teresa de Jesús.
En cuanto al Humanismo, instaura una actitud que, sin cuestionar lo religioso, impone al
ser humano como centro del universo, y propugna la restauración de los antiguos ideales
clásicos, volviendo a la recuperación de textos griegos y latinos.
RENACIMIENTO
El Renacimiento se define como un movimiento europeo que, durante todo el siglo XVI,
aplica los ideales difundidos por los humanistas a todas las actividades culturales. Sus
características principales son las siguientes:
• Se adoptan modelos clásicos, adaptándolos a los nuevos tiempos. El ejemplo
de dichos modelos impulsa también una fuerte creatividad original. Son
también muy estimados y apreciados los grandes humanistas y escritores
italianos.
• La devoción por el latín es tanta que se impulsa en cultivo de las lenguas propias
de cada país, como afirmación del ser nacional, buscando que las lenguas
nacionales alcancen su elegancia y dignidad. Así, en todas las literaturas, ejercen
una gran influencia los principales autores latinos: Horacio y Virgilio, e italianos:
Petrarca.
En la lírica, se produce la primera manifestación del Renacimiento a través de nuevos
metros que Boscan y Garcilaso toman de los anteriores italianos: el endecasílabo y
combinaciones del endecasílabo y del heptasílabo, así como diversas estrofas entre las
que cabe destacar el soneto, la lira, la estancia, los tercetos encadenados y la octava.
2. El petrarquismo renacentista
Se denomina petrarquismo, dentro del género poético lírico, a la corriente estética que
imita el estilo, las estructuras de composición, los tópicos y la imaginaría del poeta lírico
del Humanismo toscazo Francesco Petrarca. Fue una poderosa corriente de inspiración
lírica que se esparció por toda Europa durante el Renacimiento, sucediendo como fuente
de inspiración en la lírica al amor cortes de los trovadores provenzales. Su influjo se
extendió hasta comienzos del siglo XVIII, y solamente escaparon de el poetas como
Shakespeare, que creó un cancionero dedicado a un hombre.
Fundamentalmente los poetas del Petrarquismo se dedican a cultivar el soneto amoroso y
a reunirlo en colecciones estructuradas como cancioneros petrarquistas, en forma de
serie de poemas que documentan la historia sentimental de su amor por la dama en
evolución desde lo sensual a lo espiritual, por influjo de las teorías amorosas del
platonismo, que considera el amor como algo abstracto.
La influencia de Petrarca incluye tanto aspectos formales como temáticos. En los temas,
destaca el culto a la belleza, el protagonismo de la naturaleza (bucolismo) y del amor, de
la mano del cual está la mujer como eje en torno al que gira la filosofía del amor
petrarquista, a la manera del amor cortés. Así, al igual que ocurría en el amor cortes, se
llega al amor por la contemplación de la amada, que volverá a ser concebida como un ser
angelical, en la que la belleza y la pureza serán los rasgos principales que admirara el
amado. Tan característica como la descripción de la amada es la del paisaje, que
trasciende todos los modelos ya desgastados del locus amoenusmedieval, y consigue
transmitir un poderoso sentimiento de evocación melancólica impregnado de elevadas
dosis de estética renacentista.
Entre los recursos estilísticos del petrarquismo, destacan: metáforas de los daños del
amor (herida, fuego, prisión), definiciones por contrarios, alusiones eruditas y mitológicas,
versos plurimembres y poemas correlativos, fórmulas antitéticas, cultivo frecuente del
concepto, etc.
En relación a los autores más característicos, distinguimos los siguientes:
-España: Garcilaso de la Vega y Juan Boscan, quienes introducen el Petrarquismo y dan
vida al soneto y, en métrica, al endecasílabo. Lo continuaron Fernando de Herrara, y ya
en el siglo XVII Lope de Vega y Fco. De Quevedo.
-Italia: Pietro Bembo.
-Portugal: Luis de Camoens.
-Francia: el movimiento es conocido como La pleyade, y destaca Pierre Ronsard.
-Inglaterra: Henry Howard.
BARROCO
3. El Barroco fue un movimiento cultural y artístico, nacido en el siglo XVI, y se desarrolla y
muere en el XVII. Representa una actitud muy actitud compleja, que se expresa como
pesimismo ante un mundo en crisis y que se manifiesta en una huida de la realidad
inmediata, y una búsqueda de nuevos caminos y valores.
En España, a diferencia del resto de Europa, el Barroco no representa un rechazo del
Renacimiento, sino un apogeo y combinación de este.
Con dicho movimiento, la literatura perdió la serenidad que caracterizaba al Renacimiento,
haciéndose artificiosa, ornamental y muy realista en unos casos o muy idealizada en
otros.
Cabe destacar dos corrientes: el Conceptismo y Culteranismo.
El Conceptismo se dirigió más a la inteligencia que a los sentidos. Sus recursos
expresivos se apoyan principalmente en el contraste, el humor y la concisión formal.
Recurren con frecuencia a las figuras literarias como la elipsis,la antitesis, las paradojas,
entre otras. En esta corriente destaca Góngora.
Por su parte, el Culteranismo procuró el preciosismo y la oscuridad en el lenguaje poético.
A través de la musicalidad persiguió el halago de los sentidos. Se preocupa, sobre todo,
por la expresión. Sus características más destacables son:
- Latinización del lenguaje.
- Empleo intensivo de metáforas e imágenes.
- Acentuación del aspecto mitológico de la lírica del XVI.
Lírica del Barroco
El testimonio de la compleja fusión establecida entre tradición y originalidad en el Barroco
es, no solo la variedad de temas y recursos formales, sino la dificultad a la hora de
separar de modo tajante los ingredientes de un poema barroco. Una de las claves de esta
variedad es la doble influencia tradicional y renacentista, y la doble corriente de tradición e
innovación. Los poetas barrocos se imponen como premisa la novedad, la sorpresa
mediante la creatividad y el ingenio; pero, para ello, acuden a los moldes y recursos de la
lírica tradicional y los modelos métricos italianos a un mismo tiempo.
Los temas de la poesía renacentista (amor, naturaleza, mitología, religión) se siguen
abordando en el Barroco, pero desde una nueva perspectiva: la naturaleza ya no es
bucólica, sino decadente; los mitos se ridiculizan; el carpe diem no resalta el goce, sino la
disolución final; la dama no aparece siempre idealizada, puede ser fea o grotesca. La
conciencia de crisis se generaliza la preocupación por temas morales y religiosos y por la
temática del desengaño: la vanidad de las cosas terrenales, el engaño de las apariencias,
el tiempo como elemento destructor de la belleza y de la vida... Por otro lado, la
corrupción de la corte abre el camino a la sátira contra la sociedad y sus costumbres.
4. En cuanto al estilo, lo que realmente hace diferente a la poesía barroca es el lenguaje. El
escritor del barroco quiere distinguirse de los demás: busca la originalidad. La falta de
equilibrio de un mundo en crisis se refleja en un estilo artificioso y rebuscado, cuyo
objetivo es la sorpresa, la agudeza y el ingenio.
De entre los distintos tipos de poesía, podemos destacar los siguientes: la lírica tradicional
y popular; poesía épica y narrativa; la burlesca, política y de circunstancias; y la lírica
amorosa de carácter petrarquista, en la que vamos a centrarnos.
Lírica amorosa de carácter petrarquista
Uno de los rasgos determinantes del Barroco es la admiración y agotamiento del legado
renacentista: Petrarca y el petrarquismo es el gran legado de la poesía amorosa anterior.
Poetas como Lope y Góngora iniciarán su carrera con poemas muy cercanos al tópico
petrarquista, pero pronto, bajo el signo de la renovación, los poetas harán uso de dicho
tópico.
Por otro lado, la poesía amorosa también estará enriquecida por el especial punto de vista
de algunos de sus autores. Así, Lope de Vega destaca por su apasionado
autobiografismo, y Góngora por su ansia ante un amor inalcanzable.
Pero la lírica amorosa barroca, cuyas cimas se encuentran en los sonetos amorosos, se
debe poner también en relación con el resto de géneros, impregnados del tópico
petrarquista en descripciones y recursos.
Hay que citar, asimismo, las parodias del propio petrarquismo, con poemas dirigidos a
mujeres poco agraciadas, prostitutas, etc. No tan en broma eran muchos sonetos
petrarquistas motivados por los más banales detalles o anécdotas. En este último caso,
parece que la única misión del poeta, es la de lucirse y mostrar su dominio de metáforas e
imágenes petrarquistas más que la expresión de su sentimiento amoroso.