Psicodinámica del trabajo y vínculo social (luciano)
ESI en Laprida: Capacitación a tutores sobre perspectiva de género
1. Proyecto: Educación Sexual Integral en el marco del
Programa Envión de la ciudad de Laprida
2º Etapa: Capacitación a equipos
técnicos de tutores
Herramientas para abordar la Educación Sexual Integral en un
marco transdisciplinar
Responsable: Grupo Interdisciplinario CHESIDA
Secretaría de Extensión.
Facultad Ciencias Sociales. U.N.C.P.B.A.
2012
2. Capacitación a
tutores del
Programa
Envión
Objetivos Generales:
Educación Sexual Brindar contenidos conceptuales y
Integral como herramientas metodológicas que
herramienta para permitan ampliar los saberes para
la construcción de abordar la ESI desde diversas
ciudadanía dimensiones institucionales y
comunitarias; tener en cuenta la
perspectiva de género; el conocimiento
y la reflexión sobre derechos
ciudadanos
Objetivos específicos Contexto de Aplicación del proyecto Alcance del proyecto
-Contemplar a la Aplicación Talleres realizados por el -16 tutores de
persona en todas sus Programa Envión grupo interdisciplinario grupos de jóvenes del
dimensiones (física, de la ciudad de CHESIDA. Programa Envión
psíquica, social) Laprida articulado Los talleres serán cada 15 (tradicional y
-Comprender la por el Ministerio días, de 2 horas aprox. educativo) de la
educación sexual y la de Desarrollo cada uno. Duración 4 ciudad de Laprida.
salud sexual como Social de la pcia. meses. -Equipo técnico del
derechos ciudadanos de Buenos Aires El proyecto se desarrollará programa (5
-Promover el respeto de en 8 encuentros en esta 2º personas)
sí mismo y el respeto etapa. Los encuentros se
por la diversidad darán en el primer
-Garantizar el acceso a cuatrimestre de 2012.
información clara sobre Se proyecta continuar con
salud sexual los talleres más allá de
-Tener en cuenta y estos encuentros.
visualizar los procesos y
las personas que forman
parte de la construcción
de distintos
conocimientos sobre
salud sexual
3. Propuesta
Este proyecto se enmarca en las acciones de articulación entre el Programa Envión de la
ciudad de Laprida y el Programa de Extensión Chesida de la Facultad de Ciencias Sociales de
Olavarría, que tiene como finalidad fortalecer una dimensión sustantiva del mencionado
Programa: la implementación de la Educación Sexual Integral (ESI) en los/as jóvenes y abordar
cuestiones que relacionan las adolescencias/juventudes con la sexualidad, las relaciones de
género y los derechos.
El concepto de sexualidad que proponemos – en consonancia con la Ley de Educación Sexual
integral excede ampliamente las nociones de “genitalidad” y de “relación sexual”.
Consideramos a la sexualidad como una de las dimensiones constitutivas de las personas,
relevante para su despliegue y bienestar durante toda la vida, que abarca tanto aspectos
biológicos, como psicológicos, sociales, afectivos y éticos. En concordancia con lo que
sostiene la OMS: “El término sexualidad se refiere a una dimensión fundamental del hecho de
ser humano…Se expresa en forma de pensamientos, fantasías, deseos, creencias, actitudes,
valores, actividades, prácticas, roles y relaciones. La sexualidad es el resultado de la interacción
de factores biológicos, psicológicos, socioeconómicos, culturales, éticos y religiosos espirituales.
En resumen, la sexualidad se expresa en todo lo que somos, sentimos, pensamos y hacemos”.
Desde una perspectiva integral demanda un trabajo interdisciplinario dirigido a promover
aprendizajes desde el punto de vista cognitivo, afectivo y en prácticas concretas vinculadas a
vivir en sociedad.
1º Etapa del Proyecto
En esta etapa que se realizó en el primer semestre de 2011 se intervino en dos
sentidos:
Con Adultos: La formación de los adultos que acompañan a los jóvenes desde
diferentes campos y programas adquiere un valor estratégico como
interlocutores que pueden abordar las temáticas mencionadas. En este
sentido, se pretende generar espacios a partir de los cuales todos los adultos
que tienen relación con los jóvenes puedan reflexionar y pensar juntos sobre
su rol frente a las nuevas generaciones. Poner en diálogo las diferentes
miradas y perspectivas que los adultos tienen con relación a los niños y los
jóvenes permitirá fortalecer su rol desde un lugar de cuidado y protección.
Con los jóvenes destinatarios del Programa Envión: Entendemos que los
jóvenes son sujetos-ciudadanos activos de derecho. La apuesta teórica es
pensar las juventudes como pluralidad y en sentido relacional, al joven como
posibilidad, en todas las dimensiones de su identidad étnicas, de clase, de
género, generacional. Entendemos a los jóvenes: no como "problema" a ser
resuelto sino como impulso renovador que busca expresarse y experimentar
4. sus propios caminos; no como receptor pasivo de las políticas públicas o
privadas sino como reactor y constructor de ciudadanía.
2º Etapa del proyecto
Esta etapa, los talleres se orientarán a los tutores y los integrantes del equipo técnico
del Programa. Esta orientación fue pensada luego de la evaluación del trabajo
realizado en la primera etapa.
Consideramos pertinente capacitar a quienes están en contacto cotidiano con las
chicas y los chicos y pueden hacer un seguimiento y acompañamiento en diferente
situaciones.
El proyecto busca que los talleres se desarrollen desde una concepción transdiciplinar,
que propicien la interacción con los participantes, que se enmarque la educación
sexual integral dentro de los derechos de los ciudadanos y se asocie con ciertos
conocimientos científicos y con los saberes y experiencias de los participantes.
Contenidos
-Violencia de género: 2 encuentros.
En la sociedad se suelen depositar expectativas distintas en los varones y en las mujeres. Según
las mismas, algunas conductas serían esperables “sólo” para los varones y otras serían
“exclusividad” de las mujeres. Estas expectativas pasan a formar parte de los llamados
estereotipos de género que asignan de manera diferente, para mujeres y varones, tareas y
roles, valoraciones, cuidados del cuerpo, formas de afectividad y vínculos. En nuestra sociedad,
estos estereotipos no sólo implican diferencias de género sino también relaciones de
desigualdad entre varones y mujeres, que generalmente se naturalizan, es decir, se perciben
como atributos “normales” e incuestionables. Un ejemplo de esto es el inicio sexual, que suele
ser en la adolescencia un suceso de afirmación de la identidad particularmente para los
varones, como se pone de manifiesto en el trabajo educativo y asistencial con adolescentes y
en gran parte de la bibliografía al respecto. Una publicación de la Organización Mundial de la
Salud refiere: “Muchos varones jóvenes de todo el mundo consideran la experiencia sexual
heterosexual un rito de tránsito a la hombría y un logro o éxito, más que una oportunidad de
vivir una situación íntima. A menudo se comparten las ‘conquistas’ heterosexuales con orgullo
dentro del grupo de pares varones; por el contrario, las dudas o la inexperiencia se disimula
frente al grupo”.1
Con las mujeres, las presiones también existen, pero quizás se ponen en juego de otro modo y
con otros fines. Para hacer más clara la idea de “presión” que se ejerce sobre el otro, Hernán
Manzelli2 utiliza el término coerción sexual; este da cuenta del “…acto de forzar (o intentar
1
¿Qué ocurre con los muchachos? Una revisión bibliográfica sobre la salud y el desarrollo de los muchachos
adolescentes. Ginebra, OMS, 200
2
MANZELLI, HERNÁN:“Como un juego: la coerción sexual vista por varones adolescentes”; en: PANTELIDES, EDITH
ALEJANDRA y ELSA LÓPEZ (Comps.): Varones latinoamericanos. Estudios sobre sexualidad y reproducción. Buenos
Aires, Paidós, 2005
5. forzar) a otro individuo, por medio de violencia, amenazas, insistencia verbal, engaño,
expectativas culturales o circunstancias económicas, a tener relaciones sexuales en contra de
su voluntad”.
En el trabajo con los estudiantes, es interesante poner el foco en aquellas formas menos
visibles de la violencia, sobre todo en aquello que entra en una “zona gris” (Manzelli, 2005) y
que no tienen la sanción social que sí despiertan el maltrato físico o la violación. Esta zona gris
incluiría “…aquellas situaciones en las que las adolescentes explicaban el motivo de su inicio
sexual con afirmaciones como ‘él me convenció y tuve vergüenza de decir que no’, pero
también cuando citaban el amplio ‘por amor’”3. El común denominador es que estas
afirmaciones no expresan un claro deseo y decisión de arribar a la intimidad sexual.
Se hará hincapié en la función preventiva de la educación cuando puede poner luz a
situaciones que vulneran derechos de niños, niñas y adolescentes, y que a veces pasan
inadvertidas para una mirada que se acostumbró a que “las cosas siempre fueron así”.
Este programa recibe a chicos y chicas en edades diversas, en una variedad que va desde los y
las púberes y adolescentes de los primeros años a los y las jóvenes de los últimos años del
secundario.
Momento de encuentro con otros varones, con otras mujeres, con el otro género; también, de
amistades que probablemente perduren en el tiempo, de los “primeros amores”, de inicio de
relaciones sexuales; de encuentros y desencuentros generacionales; de paternidades y
maternidades; de constitución de identidades y de nuevas modalidades vinculares. Esto
complejiza la tarea y el rol de las personas responsables (tutores, equipos técnicos), que deben
flexibilizarse para poder acompañar aun aquellas situaciones que no vivieron. Un ejemplo de
esto son las nuevas formas de interacción que se han generalizado a partir de la masificación
de las tecnologías. En este sentido, algunas situaciones nos interpelan y obligan a repensar los
alcances de nociones como privacidad e intimidad, y a redefinir las fronteras borrosas de
algunos de estos términos cuando son puestos en riesgo y vulnerados a través de
trasgresiones, malos tratos y desconocimiento del derecho del otro.
Durante los encuentros se trabajará con propuestas de vivir la masculinidad y la femineidad
que incorporen la renuncia de la violencia y la integración de la equidad en las relaciones entre
mujeres y hombres.
-Embarazo y adolescencias: 3 encuentros.
A partir del reconocimiento de la complejidad del tema del embarazo en la adolescencia y la
juventud, no podemos continuar con enfoques reduccionistas que lo abordan tomando
únicamente, y como punto de partida y llegada, la prevención del primer embarazo a través
del conocimiento de la fisioanatomía y los métodos anticonceptivos. Esta perspectiva viene
mostrando sus limitaciones y fracasos.
3
MANZELLI, H., obra citada
6. Una mirada que admita la complejidad de la problemática nos posibilitará reconocer la
diversidad de situaciones vitales, de experiencias, de trayectorias, de modelos de
identificación; cuestionar mandatos de género y revisar la idea de una adolescencia única.
La propuesta de este taller sobre embarazo y adolescencias consiste en encuentros sucesivos
en los que intentaremos pensar algunas situaciones y vicisitudes que atraviesan los
adolescentes y jóvenes, los vínculos que establecen entre ellos y las decisiones de
autocuidado; también nos centraremos en la información que se requiere poner a disposición
de los jóvenes para que puedan canalizar sus necesidades y hacer efectivos sus derechos a la
educación y a la salud.
Abordaremos las temáticas a través de tres encuentros en los que proponemos, en primer
lugar, problematizar aquellas cuestiones que pueden estar en juego a la hora de la toma de
decisiones en torno a la salud sexual y reproductiva en la adolescencia y juventud. Luego,
revisaremos diferentes tipos de situaciones y vínculos que establecen los jóvenes y que
estarían condicionando la toma de decisiones de cuidado sobre su salud sexual y reproductiva.
Por último, ofrecemos algunas estrategias de apropiación de información sobre métodos
anticonceptivos y fisioanatomía femenina y masculina para que puedan decidir con más
información y con referencias concretas sobre efectores/as de salud, a la hora de prevenir
embarazos, espaciar los nacimientos, prevenir el VIH/sida y otras ITS.
-Infecciones de transmisión sexual: VIH/Sida. 3 Encuentros
La utilización del preservativo es un elemento crucial para un enfoque
integral, eficaz y sostenible de la prevención del VIH, y conviene
acelerar su promoción. Se estima que en 2007 alrededor de 2,7
millones de personas se infectaron por el VIH. Cerca del 45% de ellas
eran jóvenes de 15 a 24 años de edad, y las muchachas estaban más
expuestas a la infección que los muchachos.
El preservativo masculino de látex es la tecnología individual disponible
más eficaz para reducir la transmisión sexual del VIH y otras
infecciones de transmisión genital.
Actualmente persiste —particularmente, en América Latina— una elevada subnotificación de
casos de personas infectadas de VIH, barreras en el acceso a los servicios de salud para una
elevada proporción de la población (para la oportuna detección y tratamiento) y, además,
pautas culturales que se traducen en inequidades de género y dificultan en muchos contextos
el desarrollo de estrategias y acciones efectivas. Un ejemplo de esto lo vemos en que, en los
últimos años, la forma más habitual de contraer el VIH/sida en la Argentina ha sido a través de
las relaciones heterosexuales sin uso de preservativo, aumentando el número de mujeres
jóvenes y adolescentes que se infectaron por esta vía. Esto obedece, entre otras condiciones, a
que las mujeres jóvenes no se animan a plantear con firmeza el uso del preservativo a los
varones, lo cual pone en evidencia la necesidad de abordar estos temas en la escuela y otras
instituciones de socialización.
7. En este taller, proponemos realizar un recorrido que comienza por revisar los saberes previos
sobre el VIH/sida: sus vías de transmisión y formas de prevención. También nos detendremos
en el uso correcto del preservativo y los estereotipos de género vinculados a su uso. Por
último, discutiremos creencias erróneas y prejuicios sobre el VIH/sida y el impacto social que
tuvo y puede tener el VIH/sida en la escuela.
Metodología
Dinámica de Taller
El proyecto se llevará a cabo a partir de la dinámica de talleres, planificados y desarrollados
por talleristas con formación en perspectiva de género y con antecedentes en dinámicas de
grupo.
Esta modalidad habilita a tomar la palabra y a hacer oír su voz a todos los participantes.
Seguramente en todos los encuentros todos tendrán algo para aportar a partir de las
asociaciones que se van produciendo con la propia experiencia.
Los talleristas tendrán que articular las diversas voces, favorecer las intervenciones, valorar los
aportes, respetar los silencios que muchas veces remiten a la reflexión.
También es responsabilidad de los talleristas resignificar el sentido del encuentro a partir de
los cruces e interpretaciones que se generan y que como sabemos, son siempre valiosas y
provisorias.
Las propuestas de cada encuentro no presentan un orden secuencial, cada propuesta presenta
una lógica propia para desarrollar y profundizar y puede o no articularse con las siguientes.
Además se consideraran las problemáticas e intereses de los/as participantes que surjan de los
diferentes encuentros. Estas y las consideradas por el equipo de trabajo pueden entrecruzarse
con facilidad y enriquecerse mutuamente debido al carácter integrador de la propuesta.