El documento describe un incidente en el que una estudiante excelente llamada Josefina se puso nerviosa durante una evaluación oral y no pudo responder correctamente a las preguntas. Después, cuando sus compañeros la molestaron diciendo que sus padres la castigarían, comenzó a llorar fuertemente. El maestro logró calmarla y ella reveló que tenía miedo de que sus padres la castigaran físicamente si no salía bien en los exámenes, como había sucedido antes. El maestro acordó darle una segunda oportunidad