La historia es investigada por historiadores que analizan fuentes primarias y secundarias para responder preguntas e interpretar los eventos del pasado. Las fuentes primarias son documentos originales de un evento, mientras que las fuentes secundarias se basan en hechos reales. El estudio de la historia puede ayudar a las personas a comprender los eventos más importantes que han ocurrido en el mundo y las fechas clave que marcaron momentos significativos en la vida humana.