El documento describe la evolución de la evaluación del sistema educativo vasco. Hasta 2001 no se realizaron evaluaciones externas del sistema. Las primeras evaluaciones mostraron que el mito de que un sistema bilingüe tendría peores resultados era falso. Las evaluaciones posteriores revelaron fortalezas como altas tasas de escolarización y graduación, pero también debilidades como porcentajes bajos de alumnos de alto rendimiento y eficiencia menor que sistemas vecinos. Las evaluaciones también mostraron que el dominio del vasco entre los estudiantes no era tan