El documento discute el potencial del teletrabajo para facilitar una reincorporación gradual de las mujeres al trabajo después del posnatal. El teletrabajo, mediante el uso de tecnologías de la información y comunicación, permite a las mujeres continuar con ciertos aspectos de su trabajo desde el hogar mientras cuidan a sus hijos. Sin embargo, para que esta opción sea viable en Chile se necesita aumentar la penetración e infraestructura de Internet en el país.
Uso y apropiación de las tic en las empresas del siglo xxi
Noticia nº 1
1. Teletrabajo, otra visión para el posnatal
Mar. 11, 2011
El debate generado por el proyecto de ley que entrega un beneficio de
seis meses de posnatal para las madres, ha oscilado entre los riesgos
que podrían significar este modelo para la mujer y su inclusión en el
mundo laboral, así como los grandes beneficios que tendría para los
niños que se favorezcan de esta iniciativa. Sin embargo, hemos olvidado
en este debate la gran oportunidad que podrían significar las TIC
(Tecnologías de la Información y Comunicación) como una opción
concreta de reintegración gradual de las mujeres a sus trabajos,
estableciendo incluso una redefinición de la discusión sobre el
incremento del costo que tendría para las empresas, el citado proyecto.
El teletrabajo es una oportunidad clave que ofrece la tecnología,
concepto relativamente nuevo en Chile. Recién en agosto de 2010 fue
definido en nuestro Código del Trabajo como “aquellos que prestan sus
servicios preferentemente fuera del lugar o sitio de funcionamiento de la
empresa, mediante la utilización de medios informáticos o
telecomunicacionales”, existiendo aún pocos casos aplicados
generalmente por grandes empresas multinacionales en Chile.
Esta forma de trabajo a distancia, es ampliamente utilizada en países
como Dinamarca, Irlanda, Australia y Estados Unidos, y puede ser una
oportunidad real y sustentable de integrar de forma gradual la
maternidad, con las responsabilidades laborales de la mujer, pues le
permitiría continuar con ciertos aspectos de su trabajo desde el hogar.
Se ha comprobado que el teletrabajo tiene importantes beneficios para
las empresas y los trabajadores que implementan el modelo, ya que
ahorra tiempo al evitar traslados, reduce costos de oficinas y aumenta la
productividad (según el Employers Organization Report " por término
2. medio, la productividad de un empleado se incrementa entre un 10 y un
20 por ciento como consecuencia del teletrabajo") y sus trabajadores
están más contentos (¿quién no?).
Para implementar el teletrabajo en Chile, es urgente aumentar la
penetración de Internet en nuestro país, que el 2010 llegó a cerca de
10,6 conexiones totales fijas por cada 100 habitantes, año en que
además se registró uno de los crecimientos más bajos de la década
pasada en ese ítem: tan sólo un 7,3%. A pocos meses de cumplir el
primer año de la incorporación de Chile a la OCDE, nuestro país está
lejos del promedio de los países miembros en penetración de Internet:
24,2 conexiones fijas por cada 100 habitantes. Hay mucho que avanzar.
Las TIC pueden ser fundamentales en la aceptación e implementación de
un proyecto de ley sobre posnatal como el que conocemos, siempre que
la infraestructura de acceso y de uso de Internet tenga un nivel
adecuado, como los estándares de los países OECD, para que el acceso
a la tecnología no sea la piedra de tope de quienes quieran y puedan
optar por esta modalidad de trabajo.
Usar el teletrabajo como medida de inserción gradual al posnatal,
entrega libertad y nuevas oportunidades laborales a las mujeres, ya que
les permite desempeñar sus labores sin importar donde se encuentren.
Esto, no sólo podría ayudar a las madres durante el posnatal, sino que a
toda la sociedad, pues las TIC al final, ofrecen una ventana a nuevas
ofertas laborales en un mercado sin límites: el mundo.
(http://www.paisdigital.org/?p=5001)