El documento describe las características clave para evaluar el estado de la membrana timpánica durante un examen otoscópico. Se debe identificar la integridad, posición, coloración, traslucencia y movilidad de la membrana para determinar si es normal o alterada. La integridad se refiere a si la membrana está completa o tiene perforaciones, las cuales se clasifican según su localización, actividad y duración.
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El objetivo primordial del examen otoscópico es diferen-
ciar una membrana timpánica normal de otra alterada.
Para ello hemos de tratar de identificar las referencias anató-
micas habituales (fig. 1) y después valorar 5 características
(integridad, posición, coloración, traslucencia y movilidad).
Correlacionando los síntomas recogidos en la anamnesis con
estos signos, se llegará a un diagnóstico clínico. En este nú-
mero trataremos de la integridad.
Integridad
La membrana timpánica normal debe estar íntegra. Una
perforación es una alteración de la integridad de la membra-
na timpánica en la que existe una solución de continuidad
que afecta a las 3 capas que conforman el tímpano.
Las perforaciones timpánicas se clasifican atendiendo a
varios criterios que tienen importantes implicaciones clí-
nicas.
Por su localización
1. Perforación central. Se sitúa en la pars tensa, aunque
respetando el anillo fibroso o annulus (fig. 2a).
Perforaciones timpánicas
R. Castillo Castilloa y J.M. Espinosa Sánchezb
aMédico de Familia. Distrito Sanitario Jaén-Norte. Linares. Jaén. bEspecialista en Otorrinolaringología. Hospital San Agustín. Linares. Jaén. España.
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a b c
Figura 1. Referencias anatómicas (oído derecho). Se señalan en
rojo las referencias habituales y en azul las que sólo se aprecian
ocasionalmente. 1) pars flaccida; 2) pars tensa; 3) apófisis corta del
martillo; 4) mango del martillo; 5) ombligo o umbo; 6) anillo fibroso
o annulus; 7) triángulo luminoso; 8) rama larga del yunque; 9)
cuerda del tímpano; 10) ligamento maleolar posterior; 11) ligamen-
to maleolar anterior; 12) nicho de la ventana redonda, y 13) orificio
timpánico de la trompa de Eustaquio.
Figuras 2a-c. Tipos de perforaciones según su localización (oído derecho): a) perforación central; b) perforación marginal en la pars flaccida,
y c) perforación marginal en la pars tensa.
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2. 2. Perforación marginal. Tanto la que se sitúa en la pars
flaccida (fig. 2b), como la que, localizándose en la pars tensa,
afecta al annulus (fig. 2c). Este tipo de perforación es peligro-
sa, ya que con frecuencia se relaciona con el colesteatoma.
Según su actividad
1. Perforación activa o húmeda: se asocia a procesos in-
fectivo-inflamatorios, y es característico el flujo de secrecio-
nes (otorrea) que drenan desde el oído medio a través de la
perforación (fig. 3a).
2. Perforación inactiva o seca: sin otorrea (fig. 3b).
Según su duración o tiempo de evolución
1. Perforación antigua. Habitualmente tienen forma re-
dondeada, con bordes engrosados, más o menos hiperémi-
cos, aunque sin sangrar. Son las propias de las otitis medias
crónicas simples.
2. Perforación reciente. Tienen una forma más irregular,
con bordes finos, muchas veces hiperémicos, y con frecuen-
cia se advierten restos hemáticos en la perforación o en su
vecindad. Aparecen en la fase supurativa de la otitis media
aguda o inmediatamente después de un traumatismo.
Castillo Castillo R, et al. Perforaciones timpánicas
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Figuras 3a y b. Tipos de perforaciones según su actividad: a) perforación activa (oído derecho), y b) perforación inactiva (oído izquierdo).
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