La ira es una emoción que se expresa a través del resentimiento o la irritabilidad y causa efectos físicos como aumento del ritmo cardíaco y la presión arterial. Existen diferentes tipos de ira como la precipitada, estable e intencionada, y recurrente. Aunque la ira puede motivar la corrección de conductas equivocadas, también puede ser destructiva y causar daño si no se expresa de manera apropiada. El tratamiento de la ira involucra terapias cognitivo-conductuales para crear conciencia sobre los impulsos
3. Definición de la ira
La ira, rabia , enojo o furia es una emoción que se expresa a
través del resentimiento o de la irritabilidad. Los efectos físicos
de la ira incluyen aumento del ritmo cardíaco, de la presión
sanguínea y de los niveles de adrenalina y noradrenalina.
Algunos ven la ira como parte de la respuesta cerebral de
atacar o huir de una amenaza o daño percibidos. La ira se
vuelve el sentimiento predominante en el comportamiento,
cognitivamente, y fisiológicamente cuando una persona hace la
decisión consciente de tomar acción para detener
inmediatamente el comportamiento amenazante de otra fuerza
externa. La ira puede tener muchas consecuencias físicas y
mentales.
4. Tipos de ira
Ira precipitada y repentina:
Está conectada al impulso de
autopreservación. Es compartida por
humanos y animales y ocurre cuando
están atormentados o atrapados.
Ira estable e intencionada:
Es una reacción a una percepción de
daño o trato injusto por otros de
manera malintencionada.
Ira recurrente:
Está relacionada más con los rasgos de
carácter que con los instintos o pensamientos.
Irritabilidad, resentimiento y actitudes de mala
educación son ejemplos.
5. Ira y agresión.
Potencialmente, la ira puede movilizar recursos psicológicos y
determinación para impulsar la corrección de conductas equivocadas,
la promoción de justicia social, la comunicación de los sentimientos
negativos y la reparación de agravios. La ira puede ser destructiva
cuando no encuentra su salida apropiada en la expresión. En su forma
fuerte disminuye la capacidad para procesar información y para ejercer
el control cognitivo de la conducta. Una persona enfadada puede
perder su objetividad, la empatía, la prudencia o la consideración y
puede causar daño a otros. Hay una clara distinción entre la ira y la
agresión (verbal o física, directa o indirecta), incluso a pesar de que se
influyen mutuamente. Mientras que la ira puede activar la agresión o
aumentar su probabilidad o intensidad, no es ni necesaria ni una
condición suficiente para la agresión.
7. Factores que influyen en la ira
Fatiga
Hambre
Sufrimiento
Frustración sexual
Recuperación de una herida
El uso de drogas
Cambios hormonales
8. Localización de la ira a nivel
cerebral Amígdala:
Juega un papel
importante en la
aparición de la ira y de
las reacciones
emocionales violentas.
La serotonina:
Juega un papel
inhibidor en la
agresión. Un bajo
nivel de liberación
de serotonina se
asocia con
agresión y otras
formas de
conducta
antisocial.
Hipotálamo y la Corteza
Orbitofrontal:
Juegan un papel importante en
la supresión de la ira.
9. Cambios fisiológicos que
acompañan la ira
Arousal displacentero
Sentirse “caliente”.
Tensión muscular.
Incremento de la presión
arterial.
Es el estado de activación fisiológica o
psicológica; o de reaccionar a
estímulos. Involucra la activación del
sistema de activación reticular
cerebral, del sistema nervioso
autónomo y del sistema endocrino.
Pone el cuerpo en condición de alerta
y estar listo.
10.
11. Influencia en el aprendizaje
o La ira dificulta la asimilación de conocimientos, en muchas
ocasiones impidiendo totalmente el proceso de aprendizaje.
o La ira desvía la atención y paraliza la memoria activa vital
para aprender.
o Los centros nerviosos y los neurotransmisores que regulan
las emociones y la motivación están involucrados en el
proceso de aprendizaje también.
o Es necesario regular la intensidad de la emoción (ira) para
evitar el bloqueo inconsciente de la información.
12. Trastornos comunes
En el manual diagnóstico y estadístico de los
trastornos mentales (DSM), la ira está presente en
los siguientes trastornos:
Trastorno explosivo intermitente
(TEI)
Trastorno de estrés
postraumáticoDepresión mayor
Trastorno de personalidad
limite
Trastorno de personalidad
antisocial
Enfermedades del eje III
(hipertensión esencial,
enfermedad coronaria)
13. Tratamiento
Para mejorar el manejo de la ira se emplea ampliamente la terapia
congnitivo-conductual, la cual a partir del reconocimiento de los
impulsos de ira pretende:
Crear un nivel de conciencia sobre los impulsos.
Controlar los pensamientos negativos
relacionados.
Gestionar el estrés emocional derivado al
episodio de ira.
Desarrollar estrategias para resolver conflictos
adecuadamente.