Plan de aula productiva historia y desarrollo de los ritos
1. PLAN DE AULA PRODUCTIVA
I.- DATOS REFERENCIALES
Unida Educativa: E.S.F.M. “Warisata”
Director: Andrés Mamani
Profesora guía: Rogelio Arequipa
Nivel :Superior
Contenido :historia y descripción de los ritos, el desarrollo histórico de los ritos
Años de escolaridad: Tercer Año
Área de saber: Valores, Espiritualidad y Religiones
Números de estudiante:24 estudiantes
Sesiones: Una Sesión
Fecha: 19 /11 /12
II.- OBJETIVO HOLISTICO
Conocemos sobre la historia y desarrollo de los ritos, analizando la influencia que tiene,
que nos permite reflexionar y tomar en cuenta el desarrollo para una producción de
conocimientos.
III.- ESTRUCTURA DEL PLAN
Ejes
articuladores
Contenido
Orientación
metodológica
Material Producto
Educación en
convivencia
con la madre
tierra
* Historia y descripción de
los ritos
*El desarrollo histórico de los
ritos
a) Actividades
iníciales:
-Actividades previas
(dinámica)
- repaso del tema
anterior
- Exploración de
saberes y
conocimientos previos
- Textos de
-Papelógrafos
- Gráficos
- Trípode
- Puntero
- material de
escritorio
Tangibles:
Textos
escritos
Intangibles
Conocimien
to sobre la
historia y
desarrollo
de los ritos
2. b) Desarrollo de
clases:
- Presentación de
contenidos
- Explicación y
análisis del contenido
- Organización de
grupos de trabajo
- Producción de
conocimiento
c) Producto
- Textos descriptivos
por grupos
IV.- METODOLOGIA PRODUCTIVA
Métodos de investigación
Formas de organización: grupos de trabajos
V.- EVALUACION
Socialización del tema y producción de conocimientos.
3. 1. Unidad y Paridad
Palabra Unidad caracteriza a Occidente y Paridad a la Indianidad Occidente y la
Indianidad se diferencian entre sí, porque Occidente apuesta por el Uno: la
unidad: lo homogéneo, lo impar y la Indianidad por el Par: la Paridad: la
heterogeneidad. De lado semita: un solo Dios:el monoteísmo; de lado griego, la
monarquía: todo el poder al Uno. De lado indígena: el par, la pareja: jaqi.
Unidad es lo impar y se dice en quechua Ch'ulla. Paridad se dice en quechua
Yanantin que significa dos energías antagónicas complementarias. El mundo
acaece en par. Par no es igual a uno más uno: 1+1; eso nos llevaría al Dualismo
que es la forma cómo el monoteísmo profundiza la separación, dando lugar al
Maniqueísmo: el "Imperio del Bien lucha contra el imperio del Mal" y sólo uno debe
prevalecer.
El Principio de Identidad
Este Principio se escribe A es A. Esta fórmula expresa muy bien la negativa de
este modelo a reconocer la existencia de la otra energía,B, y que, además, es una
energía diferente y antagónica. Sin embargo,no puede menos que aceptar que
hay un Otro, pero se hace la ilusión de que ese Otro es idéntico a él mismo. A,
pues sólo puede haber Uno y éste Uno, obviamente, es él y es universal.
Con otras palabras, el Principio de identidad, que sostiene que cualquier ente es
necesariamente idéntico consigo mismo, enfatiza, por tanto, la diferencia con
cualquier otro ente distinto. Leibniz sostiene que este principio de identidad es
idéntico al principium individualitatis. Es decir, que es el asiento lógico del
individualismo moderno de los estados de derecho basados en la democracia
representativa.
El ejemplo máximo de esta manera de pensar es el monoteísmo patriarcal de la
tradición abrahámica. Postula un Dios varón. Desconoce lo femenino, B, (la otra
energía contradictoria). Ello, obviamente, no ha implicado, ¡Ni mucho menos!, que
las mujeres desapareciesen de la faz de la tierra. Siguen existiendo, fácticamente,
pero a la sombra: no existen simbólicamente. La debilidad de este Principio es que
4. no expresa la realidad empírica tal como todo el mundo la experimenta y sin la
cual la Vida no se reproduciría.
A esta discontinuidad, separación, respecto de la experiencia es a lo que se llama
ideología.
Este es el principio lógico de las políticas coloniales de evangelización, extirpación
de idolatrías, progreso y cooperación al desarrollo. Es decir, la pulsión de
homogeneizar el mundo al modelo occidental. A = A. La pulsión actual por
imponer un Pensamiento Único proviene de esta matriz lógica. La Globalización es
la forma contemporánea de imponer, política y económicamente, a todo el mundo
el Principio de Identidad aristotélico. La Indianinad y el Altermundismo son las
formas de recordarle que no, que Otro mundo coexiste al lado suyo: los Andes o el
Tercer Mundo anti capitalista, del cual la Indianidad es el mejor exponente
El Principio de No Contradicción
Este Principio lógico dice que A no es no-A. Es decir, que A y B no pueden ser
verdad al mismo tiempo y bajo el mismo punto de vista; porque, o bien A es
verdad y entonces B es falso o, al revés, B es verdad y entonces A tiene que ser
falso. Dicho de otro modo, si yo tengo la razón, entonces tú no la tienes. Si
Occidente tiene la verdad, entonces la Indianidad no la tiene. Expresado con otras
palabras, una cosa no puede ser, en un mismo tiempo y lugar, otra cosa que la
que es; no puede estar, al mismo tiempo, en dos lugares diferentes.
El Principio de Tercero Excluido
Este principio sostiene que no existe un tercer término, T (T de"Tercero incluido"),
que sea, a la vez, A y no-A. Es decir, este Principio se deriva del anterior: una
proposición es o bien verdadera o bien falsa y, por consiguiente, no existe una
tercera posibilidad, es decir, tanto verdadera como falsa, ni verdadera ni falsa. Con
otras palabras, este principio afirma la exclusión mutua de los valores lógicos
(verdad y falsedad). Con otras palabras, si yo tengo la razón, entonces tú no
puedes tener razón. Dicho de otro modo, una tercera posibilidad (que tu y yo la
5. tengamos al mismo tiempo: lo contradictorio, justamente) queda excluida. Este es
el Principio de Tercero excluido que está en la base del racismo y la xenofobia: de
la Exclusión, precisamente.
Así, pues, este es el software lógico de la postulación de la Unidad que, en
teología, es el monoteísmo; en política, la monarquía: todo el poder al Uno; en
economía, el intercambio; en sociología, el individualismo; en derecho, la
propiedad privada, etcétera. Y que, fundamentalmente, parte de una comprensión
estática de la realidad.
Son fijados en un soporte: papiro, papel... El flujo de la conversación, de la
oralidad, es detenido en un instante que se hace eterno. No hay pues,
monoteísmo sin escritura; no hay propiedad privada, sin escritura, no hay Estado
(lo estático) sin ley escrita.
Bien, estos son los principios lógicos que han modelado el alma de Occidente,
hasta el día de hoy. Una racionalidad de exclusión, basada en una lógica binaria
que valora sólo dos valores lógicos y elige uno contra el otro. Dicho en una
palabra: el Monoteísmo necesita y reproduce un modelo de no relacionalidad y,
por tanto, de unidireccionalidad: del sujeto al objeto. A esto se llama Gracia en
teología católica.
Del lado de la Indianidad
Al revés, la Indianidad se basa en el principio de Relacionalita Ahora bien, los
principios que han configurado a la civilización amerindia y están empezando a
conformar la civilización del siglo XXI son los siguientes:
El Principio de relacionalidad
Al revés, la Indianidad se basa en el principio de Relacionalidad: en el Principio
era el Ayni. Este principio afirma que todo está relacionado, vinculado, conectado
con todo. Por consiguiente, la entidad básica es la relación; no el ente, como en la
metafísica occidental. Ahora bien, el Principio de Relacionalidad no tiene nada que
ver con el Monismo neoplatónico. La relacionalidad universal no es el resultado de
una emanación a partir de un solo ente, principio o substancia. El todo de la
6. relacionalidad amerindia es un todo explícito y concreto. En Occidente, lo concreto
es un producto secundario de lo abstracto y universal, que tiene la primacía. En
los Andes, lo concreto tiene la primacía y es la epifanía de la realidad entendida
como una red. Por ello, para un amerindio, un ente totalmente separado y aislado,
como el Dios monoteísta, es sencillamente inimaginable; sería el máximo grado de
abstracción; es decir, un no-ente.
El Principio de relacionalidad no es sólo lógico, sino que implica variables
afectivas, ecológicas, éticas, estéticas y productivas. La relacionalidad deriva de la
experiencia de saberse parte de la totalidad; proviene de una convivencia holista
con el cosmos. Ahora bien, el principio de relacionalidad tampoco es de naturaleza
causal. La causalidad es un modo más de relacionalidad; pero he aquí que la
mayoría de los tipos de relacionalidad indígena son, más bien, de índole no
causal: correspondencia, reciprocidad, polaridad, proporcionalidad.
El Principio de Correspondencia
Este principio afirma que los distintos aspectos, regiones o componentes de la
realidad se corresponden: corresponden, contestan la pro-vocación de su opuesto
de una manera armoniosa; relación que implica, por consiguiente,
bidireccionalidad mutua. Para el pensamiento amerindio, los nexos relaciónales
son, básicamente, de índole cualitativa, simbólica, celebrativa, ritual: afectiva, sin
que ello excluya lo intelectual, pero, ciertamente, no tiene la primacía que sí tiene
en Occidente.
Por consiguiente, Correspondencia no es lo mismo que equivalencia o identidad.
El pensamiento occidental clásico concibe la relacionalidad de la realidad como un
rasgo secundario de la sustancialidad, mediante categorías de semejanza,
adecuación, identidad y diferencia. El pensamiento amerindio no postula una
substancia abstracta, absoluta, para desde allí colegir lógicamente todo lo demás;
postula que la realidad es una red de relaciones. Para el pensamiento amerindio
hay una correspondencia entre macrocosmos y microcosmos; entre el ayllu de los
jac¡ 'i, el ayllu de la sallqa y el ayllu de los wak'as; entre la fabricación de la chicha
y el fluido de los líquidos por el cosmos; entre la casa y el universo; entre lo
humano y lo orgánico. Entre estas polaridades hay bidireccionalidad: hay toma
7. y daca: hay reciprocidad.
El Principio de Complementariedad
Este principio afirma que ningún ente, acción o acontecimiento existe aislado,
solitario, por sí mismo. Por el contrario, todo ente coexiste con su complementario;
ambos hacen la plenitud. Ahora bien, el principio de Complementariedad no es
algo Objetivo en el sentido newtoniano y escolástico: "entes existentes en y por sí
mismos". El pensamiento occidental clásico tiende a identificar lo particular con lo
completo: pars pro toto. El pensamiento amerindio insiste en el significado literal:
se trata de una "parte", necesaria y complementaria, que se integra junto con otra
"p a r te " en una entidad completa, es decir, complementada.
El Principio de Reciprocidad
El Principio de Reciprocidad brota de la búsqueda de un equilibrio contradictorio
entre las fuerzas antagónicas de homogeneización y heterogeneización, de
inclusión y exclusión, de alianza y hostilidad, de amor y odio.
Estos principios cosmológicos se pueden decir, desde el punto de vista lógico, de
la siguiente manera:
Principio de complementariedad de opuestos:
A y B son opuestos, pero se complementan en una relación contradictoria que los
completa al modo como jaqi integra a chacha y zvarmi que son opuestos. Dicho
cuánticamente, la materia-energía es continua y discontinua a la vez: la energía es
emitida y absorbida a pequeños trozos, quanta, y saltos (Constante de Plank); un
fotón es, simultáneamente, onda (Thomas Young) y partícula (Einstein). Este
principio formulado por Niels Bohr como complementariedad ondapartícula para el
mundo subatómico, Louis de Broglie lo extiende a todo el universo.
El principio de complementariedad enlaza dos mediciones, la una que actualiza el
acontecimiento en una homogeneidad: continuidad: onda, que Dominique Temple,
llama Palabra de Unión, y la otra, al contrario lo actualiza bajo la forma de una
8. heterogeneidad de singularidades: discontinuidad: partícula, que Temple llama
Palabra de Oposición. La complementariedad de ambos principios se realiza en
un Tercero contradictorio que los incluye como A y B sin hacerlos desaparecer en
un C, como hace la lógica hegeliana: Aufhebung.
Principio de Tercero incluido.
Existe una tercera posibilidad más allá de la relación contradictoria: la relación
complementaria, justamente, que es un estado particular de potencialidades
coexistentes simétricas y contradictorias en sí mismas (el "estado T" de Lupasco).
El estado T corresponde a una situación particular en la que dos polaridades
antagónicas de un acontecimiento, son de intensidad igual y dan nacimiento a una
tercera potencia, en sí misma contradictoria: el Tercero incluido. Lupasco
considera las potencias como "conciencias elementales", con lo cual crea una
interfase conceptual para ir del mundo subatómico al de los sistema vivos e
incluso psíquicos. Temple valora esta proposición de Lupasco "ya que una
conciencia elemental que se relativiza por su conciencia elemental antagónica,
deja de ser una cuestión ciega respecto de sí misma, mientras que adquiere una
luz sobre sí misma a partir de la conciencia que le hace frente, la cual adquiere
una luz sobre sí misma, luz que puede describirse, luego, como luz de luz, una
conciencia de conciencias". Desde esta perspactiva lee Temple la civilización
amerindia en su Teoría de la reciprocidad y la muestra constituida, justamente,
sobre el principio contradictorio. Toda la oposición entre Occidente y la Indianidad,
entre el cristianismo y el animismo, puede vislumbrarse en este hecho. Para el
Occidente cristiano, la verdad es el lugar de la no contradicción; por eso para
Tomás de Aquino, la verdad es la adecuación de cosa y pensamiento. Para la
indianidad animista y el nuevo paradigma científco la realidad (y, a fortiori, la
verdad) es, justamente, el lugar de lo contradictorio.
La civilización oriental considera la contra-dicción como una contra-posición de
dos posiciones incluidas e integradas en un todo que las contiene. Josef
Estermann sostiene, con razón, que el pensamiento andino no niega por completo
el principio de no- contradicción; lo que sucede es que en Occidente, "la
9. contradicción formal es concebida como absoluta o excluyeme, de tal manera que
el uno (A) excluye al otro (B) y viceversa: [(A > -B) & (B > -A)]" En cambio el
pensamiento andino "interpreta la contradicción formal como contrariedad material:
A es distinto de B, y B es distinto de A, pero A y B pueden coexistir como partes
complementarias de una tercera entidad que es recién un todo en sentido estricto".
10. INTRODUCCION
Este estudio que se elabra al texto Las dos matrices de civilización que
constituyen a Bolivia, es para saber y darnos de cuenta cuales son el desarrll que
existió desde tiempos atrás ya que todo esta en constante movimiento
La importancia de este análisis a realizarse es para saber los intereses de los
bolivianos; unos de las grandes mayorías excluidas y otros de los nuevos
excluidos, a sabiendas que prevalecen más los intereses partidarios y
particulares sobre los colectivos.
Pero esta actitud personalista ase que en el país solo unos cuantos puedan llegar
al progreso solo de unos cuantos.
Como también existe la pelea entre occidente y oriente hasta ahora no existe
ninguna solución viable, capaz de reducir de manera efectiva la situación entre
occidente y oriente, expresada en los odios racistas, xenofóbicos y
discriminatorios que podrían desembocar en un enfrentamiento y egocentrismo.
La proposición de Medina, parte de la reflexión y constatación, de que
no existe una sola Bolivia, sino dos, dos de uno; o sea, en la cosmovisión andina
no existen ch'ullas (impares), sino pares, en quechua Yanantin, en la que se
expresan explícitamente, las dos energías antagónicas complementarias. En el
caso nuestro, las dos matrices de civilización que constituyen a Bolivia. Por un
lado los habitantes de Tierras Altas y por el otro los pobladores de Tierras Bajas.
Sobre esta lectura, el autor nos plantea Un estado: dos sistemas equivalente a
una Diarquía basada en el Ayllu, que puede eliminar el fantasma de la guerra
civil y los problemas que hoy enfrentamos. Esta proposición conlleva,
principalmente a un cambio de mentalidad capaz de encarar los problemas, ya
que se busca el buen vivir entre los pueblos de Bolivia .
OBJETIVOS
11. Objetivo General
Desarrollar el conocimiento de quienes y como fue Las dos matrices de
civilización que constituyen a Bolivia
Objetivos específicos