Este documento resume las principales tendencias pictóricas del Barroco en Italia: el naturalismo de Caravaggio, que llevó el realismo a los extremos; el clasicismo de los Carracci y Guido Reni, que se inspiraron en los maestros renacentistas; y el Barroco decorativo o ilusionista, representado por Cortona y Pozzo, cuyas pinturas teatrales y escenográficas pretendían confundir los sentidos del espectador.
Las grandes tendencias pictóricas del Barroco italiano
1. DISTINGUE Y CARACTERIZA LAS GRANDES TENDENCIAS
DE LA PINTURA BARROCA EN ITALIA Y SUS PRINCIPALES
REPRESENTANTES
2. La pintura Italiana del siglo XVII sentó las bases de una serie de corrientes pictóricas
claves que se extenderán por toda Europa:
Naturalismo Clasicismo Barroco decorativo
4. Lleva al extremo el realismo,
sin idealización alguna:
• Representa los rostros,
anatomías y vestidos con
descarnado realismo, en su
belleza o fealdad.
• Suele emplear tipos
vulgares, de la calle:
mendigos, pícaros… vestidos
al estilo de la época.
• Las escenas se
contextualizan en ambientes
cotidianos de la vida del
pueblo.
• Muchas escenas religiosas
llegan a parecer escenas
comunes de la vida diaria,
con personajes y entornos
habituales en la época.
5. De este modo consigue acercar el asunto
de la pintura al espectador y despertar su
piedad, pero fue rechazado por la Iglesia
oficial por representar a los personajes
religiosos de un modo poco digno.
6. El interés por el realismo y el naturalismo,
le llevará en ocasiones a pintar lo feo,
incluso los pies ordinarios y sucios de los
personajes vulgares de la época.
Ese mismo naturalismo conducirá a tratar las
escenas como una instantánea, un momento
fugaz, el clímax de la escena, que provoca las
reacciones emocionales de los personajes.
7. Para estimular el sentimiento del espectador, la
teatralidad de la escena y resaltar sus aspectos
más importantes y recrear la sensación espacial,
emplea una iluminación tenebrista:
• Hay grandes contrastes entre zonas iluminadas
y en sombra: llegan incluso a percibirse líneas
claras entre unas y otras zonas
• Es una luz expresiva: resalta las partes del
cuadro que interesan al pintor y oculta otras.
Suele ser una luz monofocal, dirigida y
concentrada, no cenital y uniforme, que crea
contrastes rotundos entre luces y sombras. En
sus cuadros religiosos parece una alusión a la
luz divina.
• Acentúa la teatralidad de la escena en
ambientes lúgubres, misteriosos, que insinúa
la sensación de profundidad. En ocasiones
llegan a desaparecer los fondos.
8. • Sus personajes populares
adquieren muchas veces una
monumentalidad casi escultórica,
resaltando los volúmenes por la luz.
• Las expresiones, los gestos de los
personajes, sus posturas y,
especialmente, sus manos, tratan
de captar la atención del
espectador y mostrar los affeti, los
sentimientos y las reacciones
expresivas de los personajes (moti).
Consigue escenas muy teatrales, con no
demasiadas figuras, habitualmente
poderosas y con gestos muchas veces
declamatorios, expresivos, de una
teatralidad a veces excesiva:
9. Para lograr la sensación de profundidad,
suele emplear diferentes recursos:
• Emplea una luz potente y focalizada,
normalmente proyectada sólo por
uno de los ángulos de la escena,
dejándola caer diagonalmente.
• Realiza composiciones que sugieren la
disposición de diferentes planos, así
como picados, contrapicados…
• Ubica personajes en posiciones
torsionadas, escorzos, que acentúan
la sensación de profundidad.
• Este contraste luminoso , esas
composiciones y la composición de la
escena se emplean también para
exagerar los gestos y la escena y dar
teatralidad al cuadro.
• Los fondos muchas veces casi
desaparecen: es la luz sobre los
objetos la que recrea el volumen.
11. El colorido varía mucho en función de la luz expresiva que emplea:
• Brillante en las zonas iluminadas.
• Ocres y marrones van dando paso al negro en las zonas de mayor
oscuridad.
12. El dibujo es claro,
definido, resaltado o
disimulado por la luz o la
sombra.
13. Sus escenas con
personajes naturalistas, la
iluminación efectista, el
dramatismo y teatralidad
que transmiten, apelan
directamente al
sentimiento del
espectador.
Su pintura acerca lo
sagrado a lo popular,
acerca los personajes
sagrados al espectador,
fomentando su piedad, a
través de lo cercano, lo
efectista, lo teatral: atrae
a la fe a través de la
piedad y consigue los
efectos de propaganda
del arte que desea la
Iglesia Contrarreformista.
14. Sus obras, como La Vocación de San Mateo, El Santo Entierro, La crucifixión de San Pedro,
La muerte de la Virgen, Cristo y los discípulos de Emaús o La Conversión de San Pablo
reflejan bien esta vertiente de la pintura barroca.
15. Este estilo de pintura tendrá enorme repercusión en la pintura europea: Francia,
Rembrandt, la escuela española…
16. EL CLASICISMO: representado sobre todo por la familia Carracci (destaca Anniballe) y
Guido Reni
Fundan una Academia en Bolonia en la que enseñan que la pintura debe seguir unas
normas, que deben seguir las de los grandes pintores renacentistas: Miguel Ángel,
Rafael, Leonardo, Correggio, la pintura veneciana ….
17. Algunos de los aspectos que
retoman de los grandes
pintores renacentistas
serán:
• La terribilitá y la fuerza
muscular de las
anatomías de Miguel
Ángel.
• El sobrio dibujo, el
equilibrio y la simetría
compositiva de Rafael.
• La luz, el color y el
desnudo de Tiziano y de
la escuela veneciana.
• La elegancia y la
sensualidad
de Correggio y
de Parmigianino.
18. Es una pintura ecléctica, que
continúa la tradición pictórica del
pasado y serán los
representantes del arte más
oficial y académico, de gran
éxito.
Continuando con esa tradición
siguen persiguiendo la búsqueda
de la belleza ideal y rechazan el
naturalismo.
Les interesa una representación
de la naturaleza bella, colorista,
ordenada, serena… y eliminar
todo lo que tenga de feo,
desagradable.
Muestran una visión de la pintura
agradable, elegante, colorida
frente al dramatismo y
tenebrismo de Caravaggio.
19. Suelen pintar escenas religiosas, mitológicas y alegóricas, paisajes…. Todo ello tendiendo a
escenas monumentales.
20. • Las composiciones y figuras son
monumentales, buscan la belleza
ideal, siguen los modelos clásicos o
de los grandes pintores
renacentistas, muchas veces de
Miguel Ángel, Tiziano o Rafael.
• Suelen aparecer anatomías
poderosas, de herencia
miguelangelesca.
• Luz clara, matizada, que resalta la
riqueza de colores empleados, de
gran influencia veneciana.
• Rehúyen de cualquier tentación
tenebrista.
• Emplean un dibujo preciso, nítido y
una pincelada pequeña y detallada
21. • En cualquier caso, muestran numerosos
aspectos típicos del barroco como el
movimiento, la expresividad contenida,
el empleo frecuente de escorzos,
composiciones complejas, líneas
diagonales, teatralidad..
22. Son muy características las
grandes composiciones
pictóricas al fresco en
techos o paredes,
habitualmente
encuadrados en
quadratturas (como había
hecho Miguel Ángel en el
techo de la capilla Sixtina),
como si fueran auténticos
cuadros con sus marcos
dorados.
Los frescos del Palacio
Farnese en Roma de
temática mitológica y
alegórica es la obra más
conocida de Annibale
Carracci.
23. En esta bóveda describe, con un sentido moralizante, los amores de los dioses
clásicos en diferentes escenas, tratando de mostrar el triunfo del amor divino
sobre el profano.
La parte central está ocupado por el "Triunfo de Baco", quien sentado en el
trono en compañía de Ariadna y rodeado de amorcillos, trae la felicidad a la
Tierra.
24. Guido Reni sigue esta
corriente clasicista, si
bien con un estilo muy
personal, a veces frío, a
veces más expresivo…
25. El BARROCO DECORATIVO O
ILUSIONISTA, representado por
Pietro da Cortona, Giovanni Battista
Gaulli (Il Baciccia) o Andrea Pozzo.
Se desarrolla sobre todo en la
segunda mitad del siglo XVII con
pinturas en grandes bóvedas y muros
de iglesias y palacios.
Es una pintura especialmente
ilusionista y escenográfica, teatral.
Llama la atención al espectador por
su rico colorido, su dinamismo, por
las enormes perspectivas que
sugiere, engañando los sentidos.
Giovanni Battista Gaulli (Il Baciccia). Triunfo del
Nombre de Jesús. Iglesia del Gesú. Roma
26. Crean grandes conjuntos ilusionistas que pretenden confundir los sentidos del espectador,
pinturas efectistas que pretenden romper los límites entre la arquitectura, la escultura y la
pintura: no se sabe dónde acaba la arquitectura, dónde la pintura…
El espectador asiste a una ficción teatral, artificiosa, que le impresiona, le maravilla, le
sorprende…
Pietro da Cortona, Triumfo de la Divina Providencia, Palazzo Barberini, Roma
27. Las bóvedas se abren a
través de la ficción
arquitectónica hacia
grandes cielos,
perspectivas
interminables, que se
consiguen mediante
impresionantes escorzos
de los elementos
arquitectónicos y los
personajes….
El colorido es rico, la luz
clara del cielo ilumina el
conjunto y marca las
diferencias entre los
espacios celestiales y los
terrenales: la luz divina
deslumbra e ilumina el
resto de la escena en un
claro sentido de arte al
servicio del poder de la
Contrarreforma.
A. Pozzo: Alegoría de la obra misionera de los jesuitas
28. En esos marcos ficticios interactúan (parecen flotar) la divinidad, personajes celestiales,
los santos, alegorías de las virtudes, personajes mitológicos, esculturas fingidas y
personajes terrenales en un espectáculo teatral que impacta e impresiona al espectador.
Andrea Pozzo: Apoteosis de San Ignacio o La gloria de san Ignacio. Iglesia de San Ignacio. Roma
29. Andrea Pozzo : Hazañas de Hércules y su apoteosis.
Palacio de Liechtenstein
Andrea Pozzo: Falsa cúpula de Sant'Ignazio en Roma.
Pintura sobre lona, de 17 m de ancho
Esta pintura es un ejemplo claro de ese arte
ilusionista y teatral al servicio del poder de la
religión o del poder político, típicamente
barroco, que trata de sorprender, emocionar y
persuadir al espectador: esas aberturas de
gloria celestial son alegorías del poder del
Papa, de la religión católica o de los reyes de
las monarquías católicas.