ACRÓNIMO DE PARÍS PARA SU OLIMPIADA 2024. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
Tema 1. El relieve español y su diversidad
1. 1
TEMA 1. EL RELIEVE DE ESPAÑA Y SU DIVERSIDAD.
1. LA SITUACIÓN GEOGRÁFICAS DE ESPAÑA.
España ocupa un territorio de 504.750 km², sobre la Península ibérica (492.463) y el
archipiélago balear (5.014) y canario (7.273).
Ha sido considerado un país de encrucijada entre Europa y África, entre el Atlántico y el
Mediterráneo. Pero, aunque la separan de Europa los Pirineos y de África el estrecho de
Gibraltar, lo cierto es que son obstáculos fáciles de superar, como lo demuestra la historia.
Sobresale en Europa por su situación periférica en un extremo, continentalidad
dominante, costas rectilíneas y por ser un mosaico de piezas geográficas, lo que ha
determinado la particular trayectoria histórica de las actuales regiones españolas. Hay
diferencia entre la Iberia interior (extensa, elevada y continental) y la Iberia periférica
(marítima y accesible).
Su geomorfología es la de un país alpino y su bioclima dominante es mediterráneo, con
dos grandes zonas: húmeda y seca.
2. CARACTERÍSTICAS DE RELIEVE ESPAÑOL.
Tres son las características básicas del relieve español:
a) El predominio de las formas macizas, la elevada altitud media en donde sólo un 11 %
del territorio español está por debajo de los 200 metros y la ubicación periférica de
las unidades de relieve. Con respecto a la primera característica indicar que las formas
macizas de la península se aprecian en dos puntos concretos: la anchura de la
península que de Oeste a Este se extienden por 1.094 Km y las costas poco recortadas
y rectilíneas, sin accidentes litorales.
b) La segunda característica se centraba en la elevada altitud media. La altitud media en
España es de 660 metros y sólo es superada por Suiza. Las causas se encuentran en el
alto número de cordilleras y sobre todo en la presencia de la Meseta en el núcleo
central de la Península.
2. 2
c) Disposición periférica del relieve español tiene dos importantes consecuencias como
son que los relieves frenan la influencia del mar en el interior y que esto genera
diferencias entre el interior y el litoral.
3. LA EVOLUCIÓN GEOLÓGICA DEL TERRITORIO ESPAÑOL.
Durante el precámbrico, entre 4000 y 600 millones antes del presente, el territorio de la
Península Ibérica se encontraba sumergido bajo el mar de Tetis, entre las placas africana
y paleoeuropea.
▪ Durante la era Paleozoica o Primaria (600-225 millones años). Los cambios más
importantes serán durante el Carbonífero, momento en cual sucede la orogenia
herciniana, la cual afectó de manera importante al núcleo primitivo de la península.
De los mares que cubrían dicho núcleo emergieron montañas que formaron una
cordillera: el Macizo Hespérico. Este macizo resultó muy afectado por la erosión y
basculó hacia el este. Estaba formado sobre todo por pizarra, granito y cuarcita.
▪ La era Mesozoica o Secundaria (225-68 millones años). Es de calma orogénica.
Durante el Cretácico la placa ibérica se individualiza al separarse de América y abrirse
el golfo de Vizcaya.
▪ En la era Cenozoica o Terciaria (66 millones de años-actualidad). Sucede el
movimiento alpino, responsable de los principales rasgos estructurales de la
península. Levantó los sedimentos de las fosas pirenaica y bética y formó los rebordes
3. 3
montañosos de la meseta, cordillera cantábrica, sistema ibérico, sierra morena. Los
valles del Ebro y Guadalquivir son brazos marinos que se van a ir cubriendo de
sedimentos. Es en esta era, a partir del Mioceno, cuando se van a ir formando las islas
Canarias, debido a la fractura producida en la placa oceánica atlántica por la orogenia
alpina, cuyas emisiones de magma forman estas islas. En la era Cuaternaria, la meseta
va a bascular hacia el oeste, orientando los cursos fluviales en esa dirección. El
glaciarismo del cuaternario afectó menos a la península que al resto de Europa,
remodelando las zonas de alta montaña.
4. 4
4. LITOLOGÍA PENINSULAR E INSULAR Y FORMAS DEL MODELADO.
El resultado de la evolución geológica son tres grandes unidades morfoestructurales en la
península ibérica:
- Macizos antiguos o paleozoicos, que ocupa la mayor parte de la mitad occidental
peninsular.
- Cordilleras alpinas, los Pirineos, sistema Ibérico, cordillera Cantábrica y las Béticas.
- Depresiones sedimentarias, las cuencas exteriores a la meseta del Ebro y Guadalquivir
y las cuencas mesetarias de Duero, Tajo y Guadiana.
De acuerdo con la división litológica de España de Hernández Pacheco, hay tres tipos de
suelo: Silíceo, calcáreo y arcilloso
▪ Las áreas silíceas o hercinianas. Se corresponde con las zonas del macizo paleozoico,
contando con afloramientos en sistema Ibérico, Pirineos, cordilleras catalanas y
penibético.
▪ Las áreas calizas. Originada fundamentalmente en el mesozoico, es abundante la
sedimentación marina. En la península se dispone en forma de zeta invertida, desde
la cordillera costero-catalana, prepirineo y sistema Cantábrico hasta Asturias, el
sistema Ibérico hasta las Bética, y siguiendo estas hasta Gibraltar.
▪ Las áreas arcillosas. Sedimentos de finales del Terciario y del Cuaternario, no
afectados por movimientos orogénicos. Se extiende por las llanuras castellanas y los
valles de Ebro y Guadalquivir.
▪ Las áreas volcánicas. Se localizan en el norte de Gerona (Olot), en el SE de la
Submeseta sur (Campo de Calatrava) y en SE peninsular (áreas costeras de Murcia y
Almería), además de en las Islas Canarias. En las áreas peninsulares sólo se
encuentran restos del modelado volcánico y las rocas volcánicas, mientras que, en el
archipiélago canario, de origen volcánico, se localizan numerosas formas de relieve.
5. 5
5. LAS GRANDES UNIDADES DEL RELIEVE PENINSULAR E INSULAR:
IDENTIFICACIÓN Y RASGOS PRINCIPALES.
5.1. LA MESETA.
Altiplanicie situada a 600-700 metros sobre el nivel del mar. Es un gran zócalo paleozoico
arrasado e inclinado hacia el Atlántico, cubierto con materiales del Terciario, rodeado por
estribaciones montañosas y atravesadas por dos relieves serranos en sentido este-oeste.
▪ Submesetas. Hay dos submesetas, la norte y la sur, estando la primera más elevada
que la segunda. Las separa el Sistema Central. La submeseta norte está surcada por el
cauce del río Duero que produce en la penillanura zamorano-salmantina profundas
gargantas y afloramientos de granitos y pizarras del antiguo zócalo. La submeseta sur
está dividida por los Montes de Toledo, separando la depresión del río Tajo, de la del
Guadiana.
▪ Montañas interiores. El Sistema Central es la espina dorsal de la meseta, dividiéndola
en dos. Está formada por bloques hercinianos fallados y desnivelados por el
6. 6
movimiento alpino. Entre las sierras hay correderas que comunican ambas
submesetas. Las mayores elevaciones se encuentran en su lado occidental en la sierra
de Gredos (Pico Almanzor 2592 metros).
Los Montes de Toledo son un conjunto de alineaciones serranas aisladas de escasa
altura, sin continuidad y formadas por rocas antiguas.
5.2. REBORDES MONTAÑOS DE LA MESETA.
Rodean la meseta por todos sus lados excepto por el oeste.
▪ Macizo Galaico, formado por materiales antiguos, quebrados en la orogenia alpina,
configurando el característico relieve germánico.
▪ La Cordillera Cantábrica es una verdadera muralla que separa todo el flanco norte de
la meseta del mar Cantábrico. La parte occidental (Asturias), donde se formó un
relieve germánico por fracturación del material antiguo con abundante carbón
mineral; la zona central o cántabra con depósitos secundarios de poco espesor sobre
el zócalo paleozoico, dando lugar a un relieve sajónico; la zona oriental, tocando con
los montes vascos, con abundantes sedimentos mesozoicos que se plegaron en la
orogenia alpina creando un relieve jurásico.
▪ El Sistema Ibérico, cadena montañosa en sentido noroeste-sureste, formada su parte
norte por materiales del Paleozoico y Mesozoico, con restos de relieve glaciar en el
Moncayo o la Laguna Negra. Desde Teruel hacia el sur se bifurca en dos ramas, una
paralela a la depresión del Ebro y otra castellana. En esta última las zonas calcáreas
dan lugar a formaciones cársticas como la Ciudad Encantada de Cuenca.
▪ Sierra Morena es el límite meridional de la meseta, y no es propiamente una cordillera,
sino el peldaño que separa el zócalo paleozoico de la depresión del Guadalquivir.
5.3. DEPRESIONES EXTERIORES A LA MESETA.
Las depresiones exteriores a la Meseta son:
7. 7
▪ La depresión del Ebro forma un triángulo entre los Pirineos, el Sistema Ibérico y las
cordilleras Costero-catalanas. Desde el inicio del Terciario hasta la orogenia alpina
esta zona era un brazo de mar, convertido en lago al cerrarse sus salidas. Se depositan
por tanto sedimentos marinos primero y después continentales. Abundan los
materiales blandos.
▪ La depresión del Guadalquivir tiene también forma triangular, entre Sierra Morena
y las subbéticas, estando abierto al mar. El levantamiento de las béticas convierte la
zona en un brazo de mar, que se cubre de sedimentos marinos, se eleva y retira el
agua. En su desembocadura se forma un paisaje de marismas.
5.4. CORDILLERAS EXTERIORES A LA MESETA.
Las cordilleras exteriores a la meseta son:
▪ Los Montes Vascos formados por materiales mesozoicos, enlazan los Pirineos con la
cordillera cantábrica.
▪ La cordillera de los Pirineos está formada por montañas jóvenes muy plegadas en
la orogenia alpina, tiene su mayor altura en la zona central (Aneto 3404 metros) y una
considerable anchura. Los accesos son por los extremos. Se puede distinguir
geomorfológicamente el Pirineo Axial, que ocupa el eje central de la cordillera, y es
un antiguo zócalo herciniano elevado y plegado, del Prepirineo, de menor altura y que
bordea al anterior, siendo una cobertera sedimentaria.
▪ La cadena costero-catalana formada por dos alineaciones montañosas paralelas al
mar mediterráneo: cadena prelitoral, con sierras de distintas génesis, como Montserrat
y Montseny; la cadena litoral, de escasa altitud con macizos graníticos y macizos
cársticos.
▪ El Sistema Bético se extiende desde Tarifa hasta el cabo de la Nao, son montañas
jóvenes y las mayores alturas de la península. Se distinguen dos conjuntos de sierras
separadas por una depresión. La cordillera penibética formada principalmente por
materiales del paleozoico, destaca en ella Sierra Nevada (Mulhacén 3482 metros). La
cordillera subbética formada por materiales del Secundario y principio del Terciario,
sobre todo margas y calizas. Destacan las sierras de Ubrique, Grazalema, Cazorla,
Segura y La Sagra. La depresión Intrabética separa las dos alineaciones, con material
blando que produce profundos barrancos.
8. 8
5.5. EL RELIEVE COSTERO PENINSULAR.
Como ya se ha indicado, la península se caracteriza por el predominio de unas costas de
trazado predominantemente rectilíneo. Sus características dependen de diversos factores
como el relieve cercano, la litología, la acción erosiva del oleaje y las oscilaciones del
nivel del mar. Como consecuencia de ello, podemos distinguir los siguientes litorales.
▪ Litoral Atlántico: viene condicionado por la fuerza del oleaje y de las mareas en el
Océano Atlántico, por lo que los procesos erosivos son intensos. Se puede distinguir
entre los litorales Cantábrico y Atlántico Gallego, en los que la litología silícea y la
cercanía de las cordilleras al mar explica el predominio de los acantilados, y el
Atlántico Andaluz, en el que la litología arcillosa y el relieve llano de la Depresión
del Guadalquivir explican el predominio de las grandes playas. En las islas Canarias,
la diversidad en dureza y consistencia de las rocas volcánicas hace que alternen las
playas con los acantilados. Un caso singular en el Litoral Atlántico son las Rías
Gallegas, antiguos valles fluviales inundados por las aguas marinas al bascularse el
Macizo Hespérico en la Orogenia Herciniana.
▪ Litoral Mediterráneo: al ser un mar prácticamente cerrado, la fuerza erosiva del
Mediterráneo es mucho menor. Sin embargo, el carácter soluble de las calizas y la
poca resistencia de las arcillas, predominantes en esta zona, junto con el relieve
accidentado del Este peninsular, explican el carácter accidentado de este litoral,
especialmente del Litoral Mediterráneo Andaluz, Balear y del Catalán en su sector
norte, predominando los acantilados y la existencia de pequeñas calas. En el Litoral
Mediterráneo Valenciano y en el Catalán del Sur predominan las grandes playas,
coincidiendo con las llanuras litorales.
5.6. EL RELIEVE INSULAR.
El territorio insular español se distribuye en dos archipiélagos principales: balear y
canario.
▪ Las Islas Baleares, localizadas en el Mediterráneo, están integradas por Mallorca,
Menorca, Ibiza, Formentera, Cabrera y algunos otros islotes menores. Todas las islas,
salvo Menorca (un testigo del viejo escudo paleozoico), son la prolongación natural
de los Sistemas Béticos, sumergidos en el Mediterráneo y reaparecidos en las
9. 9
Baleares. La Sierra de la Tramontana, en Mallorca, es la serranía más destacada de
este archipiélago. Aquí se sitúa el Puig Mayor (1.455 m).
▪ El archipiélago de Canarias se halla en el Océano Atlántico. Las islas que lo
integran, de origen mayoritariamente volcánico, son Tenerife, La Palma, La Gomera,
El Hierro, Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote. La máxima altitud se localiza en
El Teide, a su vez, techo de España (3.718 m).