BIOMETANO SÍ, PERO NO ASÍ. LA NUEVA BURBUJA ENERGÉTICA
Premio Cervantes 2017
1. DÍA DEL
LIBRO
La idea original de la celebración del Día del
Libro partió de Cataluña, del escritor
valenciano Vicente Clavel Andrés, proponiéndola
a la Cámara Oficial del Libro de Barcelona en
1923 y aprobada por el rey Alfonso XIII de
España en 1926. El 7 de Octubre de 1926 fue el
primer Día del Libro, poco después, en 1930, se
instaura definitivamente la fecha del 23 de
abril como Día del Libro, donde este día coincide
con San Jorge.
En 1995 el día del libro se convierte en una
FIESTA MUNDIAL. El Día del Libro fue
propuesto por la Unión Internacional de
Editores (UTE), y presentada por el gobierno
español a la Organización de las Naciones
Unidas para la Educación, la Ciencia y la
Cultura (UNESCO). En 1995, se aprobó
proclamar el 23 de abril de cada año el "Día
Mundial del Libro y del Derecho de Autor".
El origen del día del libro se remonta a 1926. El 23 de abril de 1616 fallecían Cervantes,
Shakespeare e Inca Garcilaso de la Vega.
5. PREMIO
CERVANTES
EDUARDO MENDOZA,
BARCELONA, 1943
PREMIO CERVANTES
2016
• LAVERDAD SOBRE EL CASO SAVOLTA,
• LA CIUDAD DE LOS PRODIGIOS,
• EL LABERINTO DE LAS ACEITUNAS,
• UNA COMEDIA LIGERA,
• SIN NOTICIAS DE GURB,
• LA AVENTURA DELTOCADOR DE
SEÑORAS.
7. El jurado presidido por el director de la
Real Academia Española (RAE), Darío
Villanueva, ha decidido otorgar al autor
nicaragüense uno de los galardones más
importantes en lengua castellana por su
capacidad de reflejar “la viveza de la vida
cotidiana convirtiendo la realidad en una
obra de arte”.
Autor total a sus 75 años: novelista, ensayista,
memorialista, periodista. Pero también
político. Hombre de rectos principios,
comprometido con la Revolución Sandinista
hasta el punto de haber sido nombrado
vicepresidente –cargo que ejerció entre 1985
y 1990-
Ramírez pertenece a esa generación que creció con
los hermanos mayores del Boom en el podio. "Nunca
quisimos 'matarlos', era fácil convivir con ellos.Yo
siempre sentí gratitud porque nos dieron un lenguaje
nuevo, nuevas estructuras, experimentaciones...
Además, eran muy diversos entre ellos, de todos
podíamos sacar algo. "La libertad de Cortázar, lo
matemático de Vargas Llosa, el encanto y el veneno
de García Márquez, el interés por la historia de
Carlos Fuentes...".
8. MARGARITA, ESTÁ LINDA LA MAR
Premio Alfaguara, 1998.
La obra se desarrolla en dos tiempos
diferentes: por un lado, el regreso de
Rubén Darío a Nicaragua em 1907, y, por
otro lado, la muerte del dictador Anastasio
SomozaGarcía, en 1956.
ADIÓS MUCHACHOS, 1999
El autor fue testigo de la revolución
sandinista. Llegó a ser vicepresidente con
DanielOrtega. En este libro recopila la
memoria de una generación que luchó por
la democracia y la libertad en Nicaragua.
9. El cielo llora por mí,
2008
Novela policíaca: crímenes,
corrupciones y abusos de
poder.
La fugitiva,
2011
Historia de una mujer, Amanda
Solano (Costa Rica), que sólo había
publicado una obra, y que nunca
obtuvo reconocimiento público.
10. Un libro es como una casa de muchas habitaciones, cada una con un decorado diferente, y uno puede asomarse,
primero desde fuera, a través de las múltiples ventanas, y, así seducido, entra a vivir en esas estancias cordiales y
acogedoras, porque siempre hallará abiertas sus puertas. Y como estamos en abril, el mes de Cervantes, quiero recordar al
libro de los libros, el que más ventanas, puertas, pasadizos y corredores tiene, El Quijote.
Si alguien pregunta por qué debe leerlo, y le respondemos que es imprescindible porque contiene una filosofía de la
vida, o porque nos revela un mundo de enseñanzas morales, habremos perdido de seguro un lector de ese libro
imprescindible sin el cual viviremos una vida disminuida.
Por el contrario, debemos tener el valor de responder que se trata de un libro divertido, lleno de risa y disparates,
acerca de un loco que anda por los caminos en busca de enfrentarse con los fantasmas de su imaginación, y ha
convencido a un vecino suyo, simple, ambicioso y crédulo, que lo acompañe en sus aventuras de las que le promete va a
sacar ventajas, entre otras nada menos que la gobernación de un país de mentira llamado Barataria.
En el camino el loco se dispone al combate contra molinos que cree un ejército de gigantes desaforados y espantables,
y al atacar valeroso a uno de ellos ensarta su lanza en las aspas movidas por el fuerte viento que sopla, que para su
imaginación descalabrada son los brazos del poderosísimo gigante, con lo que se hace "la lanza pedazos, llevándose tras
sí al caballo y al caballero, que fue rodando muy maltrecho por el campo".
Se topa con un carro donde llevan en unas jaulas dos leones africanos, hembra y macho, enviados de regalo al rey por
el general de Orán, y se empeña en abrir la puerta de la jaula diciendo: "¿Leoncitos a mí? ¿A mí leoncitos, y a tales horas?
Pues ¡por Dios que han de ver esos señores que acá los envían si soy yo hombre que se espanta de leones!".
No menos risible, descabeza a los títeres de un retablo donde se representa la huida de un caballero que rescata a su
dama de entre los moros que salen en su persecución, y, de pronto, decidido a acudir en auxilio de los amantes, "con
acelerada y nunca vista furia, comenzó a llover cuchilladas sobre la titerera morisma, derribando a unos, descabezando a
otros, estropeando a éste, destrozando a aquél..."
11. Lo importante es que ese candidato a lector ande por el libro con pies ligeros, y se convenza de que no se le caerá entre
las manos, la cabeza pesada de sueño. Hay que proponerle la lectura como un paseo ameno en una mañana soleada, no
como una penitencia.
Solamente después, cuando haya terminado de leer, después que aquel triste hidalgo, de regreso a la cordura, muera
en su cama, ya tendrá tiempo de lamentarse junto con Sancho: "no se muera vuestra merced, señor mío, sino tome mi
consejo y viva muchos años, porque la mayor locura que puede hacer un hombre en esta vida es dejarse morir, sin más ni
más, sin que nadie le mate, ni otras manos le acaben que las de la melancolía...". Porque para entonces su deseo
encandilado será que el libro debió seguir, que debió haber más aventuras de aquellas donde el caballero andante que don
Quijote cree ser, se queda haciendo la penitencia de fingirse loco, él, que ya está loco, puesto cabeza arriba, con las nalgas
al aire, mientras envía a Sancho con una carta para su dama, que es analfabeta, y siendo tan hermosa se ve reducida a criar
cerdos por obra de malvados encantadores.
Y la nostalgia por lo leído llevará entonces a ese lector, así ganado, a emprender dos o tres relecturas, y luego muchas
otras, porque aquel libro se le habrá vuelto infinito, en el sentido de que siempre estará recomenzando, y esas nuevas
lecturas llegará a hacerlas ya no en el orden en que están puestos los capítulos, sino entrando por cualquier de ellos, que
son sus múltiples puertas y no tienen cerrojo.
Un paseo ameno en una mañana soleada
Por Sergio Ramírez. 11/4/2018 en El Boomeran(g),Blog literario en español