Meditaciones para El Alma: Loli Correas Redondo

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Copyright © 2020 Loli Correas Redondo
Edición Nº1 agosto 2020

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Meditaciones
para
El Alma
Loli Correas Redondo

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Dedicatoria
Quiero dedicar mi segundo libro, especialmente a mis
padres que están con el Señor.
Francisco Correas Heredia y Josefa Redondo Bautista.
También quiero dedicar este libro a una persona que
amo muchísimo, mi amada hermana Rosa de
6Barcelona.
Y como no, a todas mis hermanas en la fe y a las
hermanas de la aplicación Zello, pero en especial a mi
Angelines, mi Macarena, mi Rafaela y mi Mª Cruz.
Doy gracias a Dios por esta oportunidad y este nuevo
proyecto, que deseo que os sea de bendición.
Dios os bendiga

5
Introducción
Este libro nace del deseo de compartir diferentes cosas
que he ido escribiendo en diferentes redes sociales,
más lo que Dios vaya añadiéndome al ir escribiendo.
Creo que mis reflexiones cristianas o pensamientos
pueden ser de ayuda para muchas personas y de ahí
nace la ilusión de compartir.
Espero que, de alguna manera, pueda ser de
edificación para tu vida y que puedas darle una
aplicación constructiva en las diferentes áreas que se
vayan a ir tocando.
No soy una gran escritora, ni mucho menos, pero si
cuento con la guía del Espíritu Santo para que vaya
abriendo camino en cada una de estas meditaciones,
que en realidad, son como un pensar en voz alta.
Creo que es bueno compartir aquellas cosas que Dios
pone en el corazón y la mente que pueden ser de
bendición al pueblo.
Quizás que una simple frase cale en lo más hondo de
un corazón necesitado, ofreciendo así, la palabra
oportuna que restaure el alma.
Con este libro pretendo expresar sentimientos y
pensamientos para el alma, para que cualquier
persona que lea estas palabras pueda encontrar
ayuda.

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En cada uno de los apartados se tocan diferentes
temas, donde podremos hacer un balance de lo que
conocemos de la palabra del Señor y sus promesas;
conocernos a nosotros mismos y de lo que somos
realmente capaces.
Se tocan los aspectos de la vida cotidiana, con el
objetivo principal de mantener una educación sana en
valores y desde una mirada, en su aplicación, hacia
valores cristianos.
Estos pensamientos que a continuación expreso, los
dejo para que sean dirigidos por la mano de Dios,
intentando alentar a las vidas por medio de esta
escritura, con el más ferviente deseo de hacerte bien.

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Índice
Capítulos:
1. La voluntad de Dios...........................................................9
2. Todo es proponérselo......................................................13
3. Las olimpiadas de la vida ..............................................18
4. Hablemos sobre la envidia............................................20
5. El peso del pacto...............................................................26
6. Útiles para Dios.................................................................29
7. Cumple tus sueños...........................................................32
8. Atravesando el túnel oscuro.........................................35
9. Caminando en el valle de la muerte .........................41
10. ¿Por qué mi oración no es escuchada? .................45
11. Esperando en Dios.........................................................52
12. Reparadores de almas .................................................55
13. Abandonado por el hermano.....................................60
14. Ser usado por Dios........................................................65
15. Fuimos creados para el Hijo ......................................71
16. Fieles testigos de la verdad .......................................76
17. Tú no caducas .................................................................80
18. ¿Es Dios tu defensor?...................................................84
19. ¿Cómo es tu ofrenda? ..................................................89

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20. Una mirada hacia el futuro.........................................94
Agradecimientos...................................................................100
Bibliografía y fuentes..........................................................101

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1. La voluntad de Dios
Pienso que en la perfecta voluntad de Dios hay paz.
Quizás, cuando Dios mueve nuestro suelo, parezca
que un gran terremoto vaya a destruirnos, pero
simplemente está removiendo los cimientos para
recolocarlos en otro nivel. Puede que no entiendas
mucho el porqué de esa situación, pero desde luego es
con un propósito.
En ese proceso recibiremos heridas, porque hay trozos
que deben caer al suelo para desprenderse de tu
edificio, y al caer pueden rozarte y hacerte herida,
pero debemos tener la suficiente templanza para
mantenernos firmes y esperar la sanidad de Dios.
Esos trozos que caen de tu edificio son cosas de las
que has de desprenderte porque en tu nuevo nivel ya
no los necesitas, e incluso, puede que sean un
tropiezo para tu vida. Es por eso por lo que Dios
permite que caigan.
Es normal que duela el proceso, que no lo entiendas,
hasta que no te conformes, pero es necesario para ti;
y como he dicho al principio, en la voluntad de Dios
hay paz.
Hay veces donde no sabemos ver cuando algo es
voluntad de Dios. Tenemos que echar una mirada a la
paz que pueda haber en nuestro espíritu, porque
dependiendo de si hay paz o no, sabremos si es su
voluntad o no.

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La paz en el alma es como un sistema de alarma
interno, un medidor que nos advierte cuando algo no
anda bien y se nos enciende esa alarma que produce
intranquilidad.
Fil 4:7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento,
guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en
Cristo Jesús.
Si guardamos nuestro pensamiento en la paz que nos
enseña la biblia, viviremos confiadamente en sus
promesas descansando en Cristo Jesús.
En una ocasión de tantas vividas, pasé por una de
esas circunstancias donde necesitaba conocer la
voluntad de Dios. La palabra nos enseña, que también
en el consejo de varios está la sabiduría.
Pro 11:14 Donde no hay dirección sabia, caerá el pueblo;
Mas en la multitud de consejeros hay seguridad.
Como decía, me vi envuelta en una situación donde no
sabía cómo actuar. Preguntaba al Señor, pero no
terminaba de entender que debía hacer y tenía
intranquilidad.
Decidí contarles a algunas hermanas de mi confianza
mi situación, para pedirles consejo. Mi sorpresa fue
que cada una por su lado, porque no les hable juntas,
sino por separado, todas ellas me respondieron lo
mismo. El consejo de todas ellas fue el mismo y pude
entender que la mano de Dios estaba detrás de ese
consejo.

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Una vez que recibí sus consejos sentí una paz
inmensa. Sin embargo, lo que terminó de confirmar
todo lo que estaba sucediendo, fue que busqué en la
biblia y encontré todos esos versículos que he citado
antes.
Muchas veces no le damos demasiada importancia al
consejo de algunas personas, porque lo vemos como
algo natural, pero lo cierto es, que en muchísimas
ocasiones está la mano de Dios detrás de sus
palabras.
Como decía al principio, en tu vida deben caer cosas
que no te son beneficiosas para ti. Quizás esas cosas
que fueron edificadas en tu casa fueran necesarias
durante un tiempo, te sirvieran hasta de bendición,
pero, una vez cumplida su función han quedado
obsoletas y deben ser remplazadas por cosas mejores.
Dios mantiene tu servicio, pero puede cambiar tu
posición y tu instrumento de trabajo.
Podemos ver en Josué, como el llamamiento a su
servicio era para liderar en la batalla, donde le puso
una espada en su mano; pero llegado el tiempo,
cambio esa espada por una vara, donde le fue
entregado el liderazgo de todo el pueblo de Israel.
Subió a un nuevo nivel.
¿Seguía Josué sirviendo a Dios? Por supuesto que sí,
pero la herramienta que Dios le proveyó en un
principio, que le fue útil en la posición que mantenía
entonces, tuvo que ser sustituida por otra, por que

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donde iba a ser situado ya no le servía y necesitaba
otra nueva.
Es por eso, que en los procesos que vayas
atravesando a lo largo de tu vida, tendrás que
despojarte de cosas, para recibir cosas nuevas.
No tengas miedo al cambio, no te amedrantes, porque
lo que viene es mejor. Ten ánimo, y tu mirada siempre
puesta hacia el cielo.

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2. Todo es proponérselo
Este pensamiento invade mi mente desde hace varios
días. “Hoy quiero, deseo, me he propuesto, dar un
cambio. No quiero conformarme con la vida que llevo
hasta ahora en el Señor”.
Creo que muchas veces decidimos en nuestro corazón
realizar cambios importantes, pero solo se quedan en
deseos. La palabra de Dios nos enseña que Él produce
el querer como el hacer.
Filp 2:13. porque Dios es el que en vosotros produce así el
querer como el hacer, por su buena voluntad.
Si creemos en Dios y a su palabra, sabemos que Dios
nunca miente. Por lo tanto, debemos aferrarnos a las
promesas que hay en la biblia para cada uno de
nosotros y usarlas en cada momento apropiado.
2Cor 1:20. porque todas las promesas de Dios son en él Sí, y
en él Amén, por medio de nosotros, para la gloria de Dios.
A veces decimos ignorantemente, “no puedo”, “no
tengo fuerzas” o “no sé”.
Pensamientos errados por completo de alguien que
desconoce la palabra y que ignora que es su
herramienta más poderosa. Todos en Cristo Jesús
hemos sido capacitados.
Para cada una de esas frases la biblia nos da una
respuesta.

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 No puedo: Fil 4:13. Todo lo puedo en Cristo
que me fortalece.
Todo es todo y todo no excluye a nada.
 No tengo fuerzas: Isaías 40:29-31. 29 El da
esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al
que no tiene ningunas. 30 Los muchachos se
fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y
caen; 31 pero los que esperan a Jehová tendrán
nuevas fuerzas; levantarán alas como las
águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán,
y no se fatigarán.
Las fuerzas del cristiano no son suyas,
provienen de Dios, por la tanto no depende de ti
sino de la capacitación que Dios te da.
 No sé: Prov. 2:6-7. 6 Porque Jehová da la
sabiduría, Y de su boca viene el conocimiento y
la inteligencia. 7 El provee de sana sabiduría a
los rectos; Es escudo a los que caminan
rectamente.
Como podemos leer, la biblia nos enseña que es
Dios mismo el que nos provee de todo lo
necesario, cuando caminamos en su palabra
rectamente.
Si me parase a buscar en la biblia sobre cada frase
que expresamos, encontraría un versículo que me
diera la respuesta. Sabemos que la biblia es un mapa
que nos lleva al cielo y donde hay respuesta para
todas las preguntas de esta vida.

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Creo que todo depende de la decisión que tomemos a
diario, del propósito que hagamos cada día, porque la
capacitación sí que está, las promesas también, solo
es cuestión de dar el primer paso y empezar.
“No vayamos ahora a ser ignorantes, ante toda buena
disposición siempre habrá una oposición”
Tu carne se levantará para que no lo hagas, el
enemigo te invadirá con pensamientos negativos, con
problemas y distracciones para que no cumplas lo que
deseas.
Quisiera aclarar que existen muchas personas que
culpan de todo al diablo y no es cierto. Si les pasa algo
ya están diciendo, ¡el diablo ha sido!
Puede ser que en muchas cosas si sea el enemigo el
culpable de tu situación, pero recuerda que también
estamos sujetos a un cuerpo de carne al que hay que
someter cada día al espíritu.
Debe entrar en acción en tu vida, el dominio propio
que nos ha dado el Señor, para doblegar a los deseos
de nuestra carne que solo quieren ir en contra del
espíritu.
2Ped 1:5. vosotros también, poniendo toda diligencia por esto
mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento;
6 al conocimiento, dominio propio; al dominio propio,
paciencia; a la paciencia, piedad;
7 a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor.

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Cuando venimos al Señor recibimos, amor, poder y
dominio propio por el Espíritu Santo que mora en
nosotros.
Dios ha hecho una provisión de recursos, para que la
vida de fe del creyente sea una vida rica, victoriosa y
agradable ante el Señor.
Los cristianos son personas que reciben bienes de
parte del Señor. Los creyentes tienen que ejercitarse
en una responsabilidad humana, en la que administren
diligentemente esos bienes que han recibido.
Hasta llegar a la santificación final el creyente ha
recibido un depósito de fe y debe despojarse del viejo
hombre. Debe revestirse de Cristo para hacer un uso
correcto de ese depósito y debe vivir de forma
agradable al Señor y ser edificados hasta llegar a la
estatura de Cristo.
Efe 4:12 a fin de perfeccionar a los santos para la obra del
ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo,
Efe 4:13 hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del
conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida
de la estatura de la plenitud de Cristo;
Cuando un cristiano anda bien en el Señor y se
ejercita en el dominio propio, ve con antelación por
donde le pueden surgir los problemas. El Espíritu
Santo le avisa de lo que puede sobrevenirle y de esta
forma vive en alerta.
¿Qué quiero decir con todo esto? que si se puede,
que si se debe, que es tiempo de poner en práctica lo
que tu corazón y tu mente te están diciendo.

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No caigamos en la negligencia por creer que existe
incapacidad. Todos hemos sido llamados a trabajar en
algo en la obra de Dios. Unos tendrán más talentos
que otros, pero lo importante es ponerlos al servicio
de Dios y de la iglesia.
¿Quieres un avivamiento en tu iglesia, en tu zona? el
avivamiento empieza por ti mismo. No busques
culpables, ni gente en la que apoyarte, comienza a dar
y Dios añadirá a las personas y todo lo necesario.
Tendemos a señalar a los demás como los culpables
de incontables situaciones, pero si nos parasemos a
mirar nuestra mano cuando estamos señalando,
veríamos que, mientras apuntamos con un solo dedo
al que tenemos enfrente, tres dedos nos están
señalando a nosotros. Es tiempo de cambio, no
esperes en nadie. ¡ACTÚA YA!

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3. Las olimpiadas de la vida
Desde que nacemos iniciamos nuestro caminar en
unas olimpiadas. Las olimpiadas de la vida.
Unos deberán dar saltos impresionantes ayudados x
una pértiga. Otros solo dispondrán de la fuerza de sus
manos para sostenerse en solo dos anillas, echando un
pulso a la vida. Otros se pasarán su vida corriendo
para alcanzar metas con mucho estrés, dando hasta
su último aliento en el esfuerzo.
Algunos por más que salten siempre terminaran con
sus pies hundidos en la tierra. Otros se usarán de un
simple polvo blanco de magnesio para no resbalar,
dependiendo así de el para su seguridad. Otros
pasaran horas y horas de entrenamiento, para luego
hacer su ejercicio con un simple balón, unas mazas o
un lazo, que a la vista de los demás puede resultar
fácil, cuando en realidad hay un trabajo y un esfuerzo
que nadie ve.
Todos están peleando por lo mismo, subir al pódium y
obtener sus ansiadas medallas.
Otros mientras tanto se sientan en banquillos a juzgar
los ejercicios de los demás. Se dedican a puntuar
desde la comodidad de un simple bolígrafo. Con esas
decisiones que toman, pueden encumbrarte o destruir
todo tu trabajo y todo tu esfuerzo con un solo golpe de
bolígrafo.

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Yo quiero ser parte de esos competidores, de esos
luchadores y no me conformo con quedarme en un
banquillo señalando y juzgando.
Quiero mi medalla y mi galardón, pero recuerda que
en estas olimpiadas solo se darán premios a los
ganadores.
Nadie da duros por pesetas, ¿escuchaste este dicho
alguna vez? Pues aplícatelo a tu propia vida.
Mientras estemos aquí esas olimpiadas no terminan,
porque el premio supremo se nos dará al lado del
Padre cuando alcancemos nuestra meta final.

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4. Hablemos sobre la envidia
La envidia es una de las
obras de la carne que se
enumera en gálatas 5:19.
Es la actitud que expresa el
deseo de tener lo que tiene
otro. La raíz de la envidia
es el no estar conforme con
lo que se tiene y que tiende a desear lo que tienen los
demás.
Dios nos llamó y nos amó tal y como somos. El conoce
nuestras incapacidades y debilidades y nos ama
conociéndonos como somos, con todos nuestros
defectos y virtudes.
Debemos tener conocimiento de lo que somos y de
cómo somos. Cuando sabes donde estas situado,
conoces perfectamente tus limitaciones y eso te hace
ser consecuente y digno.
Cuando el hombre pecó en la caída, lo que perdió fue
su dignidad y esa dignidad es restaurada cuando
venimos al Señor y nacemos de nuevo.
Cuando la envidia surge y se le permite vivir y crecer
en nuestros corazones, trae consecuencias
destructoras.
Cuando se cambia la perspectiva de lo carnal a lo
espiritual desaparece la envidia. Cuando alcanzamos la
dignidad, esa dignidad trae paz al cristiano.

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Nuestro tesoro está en el cielo y tener esa esperanza y
conformidad hace que vivamos de forma equilibrada.
Cuando caemos en la necesidad de desear lo que tiene
otro, la solución es estar llenos del Señor y con
nuestra mirada puesta en Él.
En la palabra podemos ver varios ejemplos sobre la
envidia y sus consecuencias: la muerte de Abel. La
envidia de Coré hacia Moisés, donde el juicio de Dios
vino sobre él y la tierra se lo tragó. Saúl también peco
de envidia hacia David y fue asesinado en la batalla.
Nuestro propio Cristo, fue asesinado por los líderes
religiosos por envidia.
Podemos ver que la envidia causa grandes ruinas,
muerte, asesinatos, juicios de Dios, maquinaciones,
malos deseos, divide a las personas, destruye
relaciones, causa discordia, crea espíritu de amargura
y de maldad, etc.
Hace que la gente diga y haga cosas de maneras
venenosas que destruyen todo lo que les rodea. La
envidia desperdicia nuestro tiempo, desgasta a la
persona, quita oportunidades y roba el gozo.
La biblia dice que la envidia es carcoma de los huesos.
La persona que tiene envidia no solo hace sufrir al
destinatario de su envidia, sino que a él mismo se lo
va recomiendo por dentro.
No es malo tener deseos de querer mejorar y de tener
cosas buenas, siempre y cuando, se haga de una
forma sana y no se desee lo malo a aquellos que lo

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poseen. Debemos tener un ejercicio mental y
espiritual muy bueno para no caer en la envidia mala y
siempre, proteger nuestra mente y nuestro corazón
con la palabra de Dios.
La envidia es una carencia de la persona, es tener un
vacío. La envidia lleva al rencor y tiende a guardar en
el corazón.
Tenemos que ser agradecidos con Dios por lo que
tenemos y gozarnos con aquellos que se gozan por los
bienes que han recibido de Dios.
Cuando nos despojamos de lo carnal ya no hay
envidia, porque ya no anhelamos más, tenemos todo y
ese todo nos, hace tener la confianza de que lo
material vendrá en fe, por que tendremos la provisión
de Dios. La envidia se va, desaparece el afán.
Prov 30:8 Vanidad y palabra mentirosa aparta de mí; No me des
pobreza ni riquezas;
Manténme del pan necesario;
Prov 30:9 No sea que me sacie, y te niegue, y diga: ¿Quién es
Jehová?
O que siendo pobre, hurte,
Y blasfeme el nombre de mi Dios.
Ten Conformidad
Dios conoce nuestras necesidades, pero debemos ser
honestos y no pedir ni de más, ni de menos, para
tener conformidad con la voluntad de Dios.
Debemos confiar en la provisión del Señor.

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¿Cómo puedo vencer la envidia?
El primer paso es reconocer que tenemos envidia. No
es fácil decirte a ti mismo que eres un envidioso, pero
si anhelamos ser libres de la envidia, necesitamos
humillarnos a nosotros mismos y reconocer la verdad.
La envidia empieza con un simple pensamiento que
puede causar intranquilidad en nuestra alma, nuestros
sentimientos y nuestro razonamiento, para así
reaccionar y actuar. Algo tan simple como ¿Por qué el
y no yo?
Nuestro propio ego está dolido y lo podemos
experimentar en el trabajo, en la escuela, en nuestro
matrimonio, en la familia, la iglesia, en las relaciones
sociales y en nuestro servicio para servir a Dios.
Muchos diremos que no tenemos ego, pues os voy a
mostrar las 10 clases de ego que existen:
 Ego sabelotodo: opina de todo, tiene
respuestas para todo, aunque no sepa da muy
buenos consejos, pero no los vive.
 Ego insaciable: siempre quiere ser el centro de
atención y hace lo que sea para lograrlo.
 Ego interruptor: persona que no deja hablar a
nadie y siempre está interrumpiendo al otro sin
escuchar.
 Ego envidioso: siempre están compitiendo y
rivalizando, si tú dices algo, ellos siempre van a

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querer agregar algo mejor o peor, para así
quedar por encima del que está exponiendo.
 Ego prestigioso: los que siempre están
buscando el aplauso. Son muy sutiles y usan
mucho la frase ya te lo dije.
 Ego jinete: personas que se suben al caballo
de otros y desde allí operan, toman ideas de
otros y se apropian de ellas.
 Ego sordo: jamás escucha a los demás, todo el
tiempo está metido en su propio pensamiento y
simula escuchar a los demás.
 Ego manipulador: va maquinando por debajo,
a veces incluso se hace pasar por la víctima, es
chismoso y no confiable.
 Ego orgulloso: siempre quieren salir ganando
a costa de lo que sea.
 Ego silencioso: persona que no habla, es
callado, pero por debajo es criticón y
malintencionado. (1)
¿Con que tipo de ego nos reconocemos? ahí lo dejo...
Si vivimos conforme a la fe podemos vencer las
tentaciones y en lugar de tener envidia, la alegría y el
agradecimiento crecen dentro de nosotros.
_______________
(1) You Tube: Los 10 Tipos De Ego: ¿Cuál Es El Tuyo? | Daniel Colombo

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Debemos ser los suficientemente fuertes, para cuando
venga la tentación de la envidia, podamos pedir a Dios
fuerzas para no caer en ella.
El resultado de vencer la envidia
Cuando recibimos conocimiento de que somos el
Cuerpo de Cristo, podemos servir a Cristo y a la
Iglesia sin tener divisiones. Los miembros del Cuerpo
no pueden trabajar unos contra otros, deben vivir en
unidad, de lo contrario, el cuerpo no funcionaría.
La honra de tu hermano es la tuya y también, su dolor
es el tuyo.
Reconozcamos nuestros límites para que encajemos
en el Cuerpo exactamente como debemos, no
tomando más espacio del que hemos recibido de Dios.
Así somos miembros útiles para trabajar en
unidad, junto con los otros en armonía.
Si Dios te ha concedido 3 talentos, sea cuales sean y
en el área que sea, trabájalos, por que serán de
bendición para ti y los que te rodean. No desees los 5
de tu hermano, ni pelees por ocupar puestos que Dios
no te ha dado, porque solo servirás para traer división
y no serás bendecido, ni de bendición.
Honra a tu hermano y gózate con él, porque con sus 5
talentos te bendice a ti y al cuerpo de Cristo.

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5. El peso del pacto
Pensando en la forma en que era transportada el arca
del pacto me surgen muchas ideas.
Cuando Israel quería transportar el arca usaban unas
vacas.
1ª Sam 6:12 Y las vacas se encaminaron por el camino de Bet-
semes, y seguían camino recto, andando y bramando, sin
apartarse ni a derecha ni a izquierda;
Esas vacas soportaban sobre ellas el peso del arca de
la alianza, donde se guardaban señales de pactos de
Dios con los hombres.
Aplicando eso al cristiano de a pie, a nosotros,
podemos decir que el cristiano verdadero lleva sobre si
el peso del arca de la alianza. El pacto que Dios ha
hecho con el hombre por medio del sacrificio de Cristo
en la cruz, el cual nos concede la salvación.
A través de llevar ese peso sobre nosotros, gozamos
de las bendiciones que nos proporciona esa arca que
vive en la presencia de Dios, ese pacto, esa alianza de
Dios con nosotros.
¿Esas vacas se encaminaron hacia dónde? hacia el
pueblo de Dios, pero con el peso de la bendición sobre
sus lomos.
Nosotros, cuando andamos en su camino, lo hacemos
para alcanzar la meta que es llegar al cielo, al Lugar
Santo, donde poder disfrutar de las riquezas de

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nuestro Señor. Tenemos un objetivo y una meta fijada
que alcanzar.
Nuestro caminar debe ser recto, como bien describe la
porción de las escrituras. No podemos ir ni a derechas,
ni a izquierdas, sino en el camino recto.
Esas vacas en su caminar iban bramando, y yo me
pregunto ¿qué es bramar?, veamos el diccionario:
Bramar (Del gótico *bramon.):
Manifestar con voces o gritos a causa de la ira o dolor bramar
de cólera. aullar, gritar, rugir.
Cuando un cristiano tiene sometida su carne, la cual
aplasta y machaca con el peso del evangelio, con el
arca de la alianza y el pacto de salvación de nuestro
Cristo, donde hacemos morir cada día a nuestra carne,
la carne se queja. Brama, porque no le gusta estar
sometida, no quiere llevar el peso, no quiere soportar
ese peso que hace que la carne se humille y que
quede enmudecida y eso le duele.
El cristiano camina con los problemas de este mundo
sobre sus espaldas, con una carga que nos agobia.
Nos cuesta mucho trabajo caminar con eso.
Además, debe soportar el peso de la carga del pacto
con Dios. Es por eso que caminamos muchas veces
bramando, dando bramidos, porque, aunque el arca
trae la bendición del don inmerecido de la salvación y
de su presencia, eso no quita el peso nos asedia y que
cargamos de este mundo.

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Cuando nuestra carne está sujeta a la voluntad de
Dios con esa alianza de salvación sobre nosotros,
nuestra carne está sometida a nuestros deseos
carnales y reina el Espíritu de Dios. De tal modo, que
por mucho que brame, por mucho que se queje, no se
va a apartar ni a derecha, ni a izquierda, porque
nuestra carne la tenemos sometida, doblegada al
Espíritu y a la voluntad de nuestro Señor.

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6. Útiles para Dios
Hay una escritura en Esdras que me ha llamado la
atención.
Esd7:19 Los utensilios que te son entregados para el servicio
de la casa de tu Dios, los restituirás delante de Dios en
Jerusalén.
7:20 Y todo lo que se requiere para la casa de tu Dios, que te
sea necesario dar, lo darás de la casa de los tesoros del rey.
7:21 Y por mí, Artajerjes rey, es dada orden a todos los
tesoreros que están al otro lado del río, que todo lo que os
pida el sacerdote Esdras, escriba de la ley del Dios del cielo,
se le conceda prontamente,
Vemos en las escrituras una serie de mandatos y
ordenes de trabajo dirigidas a su siervo Esdras.
El pueblo de Israel estaba en la deportación en
Babilonia a causa de su desobediencia, pero sin
embargo, el Señor se movió a misericordia y utilizó a
un rey, y al propio Esdras, para ser los utensilios del
cambio.
Si lo aplicamos a nosotros, ¿cuántas veces nos hemos
visto en la disciplina del Señor por desobedientes?
Dios puede utilizar utensilios tanto para honra, como
para disciplina.
En el caso del rey Nabucodonosor, él fue un utensilio
para aplicar la corrección y la disciplina al pueblo de
Dios, que se había apartado del camino correcto.

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Pero, sin embargo, de la misma forma, también utilizó
a otro rey, a Ciro de Persia, para restituir todo aquello
que había sido destruido en Israel. Fue a través de
Zorobabel para la reconstrucción del templo y de
Esdras para reconstruir el estado espiritual de Israel.
El Señor nos dota de ciertos utensilios a cada uno de
nosotros, que bien pueden ser regalos, dones o
facultades, que Dios te ha dado para el servicio en la
casa de Dios.
A veces, por cualquier circunstancia has dejado de
fluir, de funcionar o incluso ya no estás ejercitando
aquello para lo que fuiste llamado.
Puede que esa situación fuera motivada por una
disciplina o por descuido, pero Dios te llama a que
restituyas tu servicio. O sea, que lo que ya no haces o
abandonaste lo vuelvas a ejercer u ocupar, siempre
que siga siendo el lugar en que Dios te quiere.
Si lo aplicamos al trabajo en su obra, también
podemos decir, que Dios puede entregar en tus manos
un grupo de personas con las que vas a trabajar y tu
cometido es restaurarlas a un estado anterior, donde
fluyan en el espíritu y sean de bendición para la iglesia
y para ellos mismos. Dios puede escogerte como un
líder para levantar muros y restaurar el templo de una
vida.
No debes preocuparte por la provisión de parte de
Dios, porque esa provisión está en el cielo, en la casa
del Padre y esos tesoros Dios te los va a dar para que
tú los administres diligentemente.

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Cuando andamos una vida ordenada delante de Dios,
el mismo Dios tiene a esos tesoreros, personas que
administran los bienes del Señor y que son los que
guardan las riquezas del Padre, a los que podemos
asemejar con los pastores de las iglesias.
A ellos Dios los comisiona, para que todo lo que
necesites te sea dado.
La provisión, capacitación y restauración para tu vida
ya está por llegar, porque de parte del Rey ya ha sido
dada la orden. Ponte presto a su servicio y ocupa tu
lugar.

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7. Cumple tus sueños
Quizás el encabezamiento de este párrafo pueda
resultarte un poco increíble o inaccesible.
No es malo tener sueños en Dios, no es malo querer
cumplir deseos buenos, por el contrario, debemos
luchar por aquello que queremos, pero siempre desde
una premisa.
A veces iniciamos cosas en Dios y bien sea por la
inconstancia o porque te frustras, tendemos a
abandonar nuestros proyectos.
Quizás tu sueño sea algo tan simple como querer
servir en la iglesia, pero el diablo y tú mismo, llenas tu
mente de incapacidades para que no lo logres
alcanzar.
Cuando tenemos sueños de cosas pequeñas pensamos
que pueden ser posibles, pero cuando nuestro sueño
es algo grande, nos autoconvencemos de que no
estamos capacitados o que es demasiado difícil, por no
decir que imposible.
Tenemos que poner todos nuestros proyectos delante
de Dios para que sean guiados por Él y nos de la
capacidad de hacerlos; pero la mayoría de las veces
no nos damos cuenta, de que Dios ha depositado en
nosotros unos dones naturales que son amplificados
por el Espíritu para que los ejerzamos.

33
Muchos se quedan esperando una gracia especial de
parte de Dios, una varita mágica imaginaria para
emprender cosas, yo te digo que no, que estas
equivocado.
Dios va a utilizar tus propias capacidades para su
servicio. Dios no va a anular tu persona, porque Él
mismo ha sido el que ha hecho ese deposito en ti para
que puedas trabajarlo y multiplicarlo.
No caigas en el error de esperar la “varita mágica”,
Dios quiere que emprendas por ti mismo, que sueñes,
que hagas cosas, pero siempre contando con Él para
que seas guiado.
Si en tu persona existe un sueño, preséntaselo al
Señor y da un paso de fe. Él te abrirá puertas si es de
su voluntad.
Si os dais cuenta, realmente vivimos con la esperanza
de alcanzar un sueño. Tenemos el sueño de llegar al
cielo, de ver a nuestro Cristo y a los familiares que
partieron antes que nosotros y nos están esperando.
Yo te digo ahora que Dios cuenta contigo.
No dejes que la cortina de la incapacidad o la duda
tape la luz de lo que tú eres en Dios. Eres único y
especial nunca lo olvides, no permitas que nadie te
diga lo contrario.
1 Tes 4:13Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca
de los que duermen, para que no os entristezcáis como los
otros que no tienen esperanza. 14
Porque si creemos que Jesús
murió y resucitó, así también traerá Dios con Jesús a los que

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durmieron en él. 15
Por lo cual os decimos esto en palabra del
Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado
hasta la venida del Señor, no precederemos a los que
durmieron. 16
Porque el Señor mismo con voz de mando, con
voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo;
y los muertos en Cristo resucitarán primero. 17
Luego nosotros
los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos
arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al
Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.18
Por
tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras.

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8. Atravesando el túnel oscuro
Qué difícil es ver luz cuando
estamos sumergidos en un
túnel oscuro.
Muchas veces, nos vemos
metidos en circunstancias,
problemas de diversa índole,
enfermedades, etc.
Cuando queremos darnos cuenta ya estamos metidos
en ese túnel, sin saber ni como, ni por qué. Cuando
alzas tu mirada solo ves oscuridad, temor y la frialdad
de ese espacio en donde no encuentras a nadie.
Es cierto, que esos túneles a veces son provocados por
nosotros mismos, pero no dejan de ser fríos e
inhóspitos, donde se llora y se sufre.
¡En cuantas ocasiones me he visto entre la espada y la
pared, donde no podía avanzar hacia adelante, ni
tampoco retroceder! Todas las puertas estaban
cerradas y solamente podía mirar al cielo y pedir
ayuda.
En esos momentos en donde crees que estas solo,
abatido, sin fuerzas; crees agonizar, pero sin embargo
es donde más cerca de ti está el Señor.
En todo proceso de oscuridad hay una enseñanza. Hay
muchas lecciones que aprendemos en medio de los
túneles. Habrá ocasiones donde veas que repites el

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mismo túnel, es muy simple, no aprendiste la lección
en tu anterior encierro.
Cuando no aprobamos el examen de Dios estamos
obligados a repetirlo, porque mientras no apruebes, no
podrás subir de nivel.
He podido experimentar a lo largo de mi vida, muchas
ocasiones donde me he visto así. En unas, la lección
era aprender a confiar y depender de Dios en todo. En
otras, gustar el sabor de la desobediencia y la
corrección. En otras, simplemente la paciencia, y así
os podría decir muchas más.
¿Le has preguntado al Señor, que lección es la que
debes aprender en el túnel que estas viviendo?
Me dirás que apenas tienes las fuerzas, ni las ganas de
seguir adelante, pero ¿sabes una cosa?, yo siempre le
he dicho esto a las jóvenes que he liderado.
“Si te caes es normal herirte y que sangres, pero no puedes
quedarte en el suelo postrado llorando, diciendo a todo el mundo,
¡me he caído, me duele!
Estarías regodeándote en tu propio dolor sin solucionar nada,
por eso te digo, levántate, pon alcohol en tu herida, porque,
aunque en el momento escueza, también sana y previene
infecciones, así que ponte una tirita y sigue caminado”.
En una ocasión Dios me dio una gran lección. Yo soy
una mujer propensa a confiar demasiado en todo el
mundo y cuando abro mi corazón, lo hago por entero,
pero el Señor me enseño que no debe ser así.

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Me preguntareis ¿Dios no quiere que confiemos en los
demás? Y yo os digo que sí, pero existe una medida
que no podemos atravesar.
Dios me hizo entender a mi corto conocimiento, que es
como si existiese una línea que no podemos atravesar.
Puedes tener amistad con una persona, quererla
muchísimo, tener fidelidad con esa persona, pero
nunca, jamás, puedes darle tu plena confianza porque
eso solo le pertenece al Señor.
Descubrí esto a través de diferentes túneles oscuros
que se repetían.
Yo me entregaba a una amistad y era traicionada,
decepcionada una y otra vez, hasta que un día le
pregunte al Señor ¿Por qué siempre me pasa lo
mismo? Y fue cuando me dijo lo de la línea divisoria
que no podía atravesar.
Me dijo así: “Existe una línea que separa la confianza de la
amistad, de la plena confianza. Esa plena confianza solo me
pertenece a Mí. Cada vez que atravieses esa línea y confíes
totalmente en una persona, como deberías hacerlo en Mí, te
golpearé. Permitiré que te decepciones y que te hagan daño, para
que veas que ese lugar es solo mío”
Recuerda no atravesar esa línea que Dios te marca y
que solo le pertenece a Él.
Hace poco he estado leyendo algo interesante.
En el libro de jueces, leí como Israel conquistó Canaán
y de la forma que Israel no expulsó a los cananeos de

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sus territorios conquistados, haciéndoles tributarios. El
único que expulsó al cananeo fue Caleb, al que le fue
entregada unas tierras, conforme Moisés mandó.
Caleb peleó y expulsó a los 3 hijos de Anac.
Esos cananeos que Israel no expulsó de sus territorios
siempre fueron su azote.
Cuando conquistas áreas en Dios y no hechas fuera a
su anterior inquilino, siempre te traerá problemas. No
debes dejar dentro de ti, ni de tu territorio, cosas que
luego te puedan pasar factura. Si quieres una plenitud
en tu vida, echa a los gigantes, pelea por conquistar tu
territorio para que solo tu puedas ser el dueño.
Por otra parte, Caleb prometió dar su hija por esposa
al que conquistara un territorio. Su propio hermano
Otoniel fue quien la conquistó y Caleb le dio por
esposa a su hija Acsa.
¿Cómo lo aplico yo? No podemos entregar nuestros
mayores tesoros, nuestras cosas más preciadas a
cualquiera. La biblia nos enseña que debemos probar
los espíritus. Caleb no entregó a su hija a su hermano
así porque si, sino que hasta a su propio hermano lo
probó.
No des tu confianza a cualquiera, aquellos que hoy son
oídos mañana serán boca. Prueba los espíritus.
1 Juan 4:1 Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los
espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han
salido por el mundo.

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Antes de dar tu confianza a alguien, asegúrate de que
es de confianza. No te confíes en alguien que conoces
poco, porque te hable con buenas palabras. Se
prudente.
Me podrás preguntar ¿entonces no hay nadie en quien
se pueda confiar? Si que hay personas que son
confiables, pero tu plena confianza solo le pertenece al
Señor.
También hay situaciones, donde por muy escondido
que tengas algunas de tus cosas, Dios enviará a
alguien en el espíritu, donde le descubrirá tu vida. Esa
persona usada por Dios no viene a sonsacarte, no
viene a divulgar, sino que viene a tenderte una mano
desde el mismo ámbito de Dios para restaurarte y
ayudarte.
Hoy en día entiendo, que puedo tener muy buenas
amigas, hermanas, conocidas, y contarles muchas
cosas, pero esa plena confianza le pertenece al Señor
y se la reservo solo para Él.
¿Como enfrento entonces un túnel?
En el momento en que cambies tu actitud ante el
túnel, será cuando comiences a ver una luz a lo lejos.
Tu actitud es la que te aleja de la salida. Mira al cielo,
depende de Dios por entero y sobre todo, aprende tu
lección.
Puedes enfrentar tu túnel de dos formas, o en derrota
y vencida, o en paz de Dios confiando en su provisión.

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Tu túnel puede ser el lugar perfecto para convertirlo
en un retiro con Dios o convertirlo en una cárcel.

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9. Caminando en el valle de la muerte
¿Cuántas personas, han enfrentado en algún momento
de sus vidas, la muerte cara a cara? Todos hemos de
mirarla en algún momento queramos o no.
Recorremos el viaje de nuestras vidas si querer
recordar, ni enfrentar esta realidad, de que todos en
algún momento rendiremos cuentas ante Dios.
Siempre tendemos a mirar ese momento de lejos y
como si fuera para otros, no para nosotros. Nunca
pensamos que nos pueda llegar a suceder.
A todos se nos prepara para vivir, pero nadie nos
prepara para morir.
Se nos ha enseñado sobre una vida de victorias, de
logros y de superación, pero esquivamos ese momento
que a todo ser humano ha de llegarle.
Me imagino cuantas personas se han tenido que
enfrentar cara a cara con la muerte, cuando han
recibido malas noticias. Una enfermedad, un
accidente, etc.
Sé que este tema es delicado y me gustaría tratarlo
con todo el respeto que se merece, pero desde una
perspectiva cristiana.
Sabemos que la muerte entró en el mundo por la
desobediencia del hombre (Adán). El hombre pecó y la
biblia dice que la paga del pecado es la muerte.

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Ese pecado, es el que nos separa del estado inicial
para el cual fuimos creados, que era estar al lado del
Señor.
Dios, en su misericordia, creó un plan de salvación
para el hombre, para que pudiéramos tener de nuevo
una oportunidad de recobrar nuestro primer estado a
través del sacrificio de su Hijo en la cruz del calvario.
Si cambiamos nuestra mentalidad y pensamos como
hijos de Dios, podremos observar que la muerte no es
motivo de tristeza, sino por el contrario motivo de
gozo.
En nuestra carne nos podemos sentir dolidos por la
separación de los seres amados, pero tenemos el
conocimiento de la palabra, que se nos ha dejado
como legado, como mapa, como guía, en donde poder
fundamentarnos en fe y recobrar el ánimo que
necesitamos para continuar.
Debemos vivir una vida ordenada y conforme a su
palabra, dando testimonio de lo que somos, para que
cuando llegue el momento en que Dios nos llame a su
presencia, si antes no viene a por nosotros, podamos
partir en paz.
Quiero daros motivos de gozo, para que mientras
estamos peregrinando en esta tierra, caminemos con
alegría, y que, si en algún momento tenemos que
enfrentar malas noticias, tengamos el conocimiento de
que lo que nos espera es mejor.

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Esta tierra no es la nuestra, esta no es nuestra
ciudadanía, los creyentes somos peregrinos y
extranjeros, porque nuestra ciudadanía está en el
cielo.
Pablo dijo, que para él, el vivir era Cristo y el morir le
era ganancia.
Fil 1:21. Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es
ganancia. 22Mas si el vivir en la carne resulta para mí en
beneficio de la obra, no sé entonces qué escoger. 23Porque de
ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de
partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor;
Si miramos a la palabra del Señor tenemos motivos de
regocijo, al saber que en el cielo estaremos al lado de
nuestro Cristo y que es donde empieza la verdadera
vida.
Rom 14:7. Porque ninguno de nosotros vive para sí, y ninguno
muere para sí. 8Pues si vivimos, para el Señor vivimos; y si
morimos, para el Señor morimos. Así pues, sea que vivamos,
o que muramos, del Señor somos.
Si nosotros vivimos una vida ejercitándonos en el
evangelio, es para alcanzar la promesa de llegar al
cielo, esa es nuestra meta final. Por lo tanto, no
miremos a la muerte como algo triste, aunque sea
doloroso, porque es justamente para lo que vivimos,
para llegar a la meta que está el cielo.
Si te ha tocado mirar de cara a la muerte, hazlo con
una actitud de gozo, mirando a las promesas que
tenemos en la palabra. No permitas que te invada la

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tristeza y hagas sufrir a los demás por tu actitud
cayendo en la depresión.
Haz que puedan ver reflejado en ti a Cristo y esa
esperanza que llena tu corazón por muy difícil que sea
la situación.
Si te ha tocado mirar a la muerte, acepta ese paso en
tu vida como una etapa más, hasta llegar al Padre.
Regocíjate, si, regocíjate, por que llegó el momento de
ver a tu amado, a tu deseado, donde ya no tendrás
más dolor, ni más llanto, ni más tristeza, ni más
enfermedad, sino que vivirás en un gozo eterno al lado
del Maestro.
Eres un privilegiado que te adelantaste, llegarás antes
que muchos a tu destino final y vendrás con Cristo en
las nubes a recoger a la iglesia. Ten paz en tu corazón.
2Tim 4:7He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he
guardado la fe. 8Por lo demás, me está guardada la corona de
justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no
sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida.

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10. ¿Por qué mi oración no es escuchada?
A veces pasamos por etapas
donde por mucho que oremos,
ayunemos y nos esforcemos, es
como si el cielo se hubiese vuelto
de bronce.
Puede que tu seas una persona afortunada, la cual
estudias la palabra o te lo hayan enseñado, pero la
mayoría de las personas que conozco ignoran lo que
os voy a compartir ahora.
Nuestras oraciones pueden tener estorbo por varias
cosas:
 Enemistades entre los hermanos en
general, tanto en la fe, como en la propia
familia.
Mat 5:23 Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te
acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti,
Mat 18:19 Otra vez os digo, que si dos de vosotros se
pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa
que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los
cielos.
Cuando tenemos algo en contra de alguien, o al
revés y no se soluciona, es de estorbo a
nuestras oraciones.
Si te fijas bien en el primer verso nos dice, que tu
hermano tiene algo contra ti. No puedes esperar a
que tu tengas algo en contra, a lo que nos

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amonesta es, a que si sabes que alguien tiene
algo contra ti, vayas tu a él. La solución a tu
problema está en orar junto con ese hermano,
porque es el instrumento escogido por Dios para
solucionar tu problema.
Entonces será cuando Dios atenderá tu oración,
cuando te arregles con la persona con la que
estas mal.
 No soportar a los insoportables. La palabra
nos enseña que el insoportable es como un
examen que Dios nos está haciendo.
Al insoportable hay que verlo desde la fe, no en
lo carnal.
Si no actuamos conforme a la regla de Dios en
esto, todo se volverá en nuestra contra.
1Pe 2:18 Criados, estad sujetos con todo respeto a vuestros
amos; no solamente a los buenos y afables, sino también a
los difíciles de soportar.
1Pe 2:19 Porque esto merece aprobación, si alguno a causa
de la conciencia delante de Dios, sufre molestias padeciendo
injustamente.
Tenemos dos alternativas:
- Salir victorioso, aprobado por Dios y honrado
por medio de esta persona.
- Provoco un fuego en mí mismo, que acabará
consumiéndome. Dios no te sacará de la
situación, y si te revelas será peor aún.

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 Estar mal en el matrimonio. Pedro hace 3
exhortaciones al matrimonio.
- Ser comprensivos
- Demostrar respeto
- Que no tengan impedimentos en la oración
1Pe 3:7 Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas
sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil,
y como a coherederas de la gracia de la vida, para que
vuestras oraciones no tengan estorbo.
Esto es para todos los matrimonios, sean los
dos creyentes o solo lo sea uno de los cónyuges.
En este versículo, Pedro da por sentado que
todas las esposas son creyentes.
Se marca en la palabra que las hermanas deben
estar sujetas, para atraer al marido que no es
creyente.
Pero al marido también se le marca un
propósito. Si el marido no cuida, ni honra a la
mujer, no suple sus necesidades y es insensato
con ella, Dios no oye su oración. Además,
pierde la comunión con Dios.
Si estas enfadado en tu matrimonio y no lo
solucionas, tu oración tiene estorbo ante Dios.
 Tener una mala actitud. Se debe orar dentro
de una buena actitud y conducta. No se debe
orar sin estar velando.

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1Pe 4:7 Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed, pues,
sobrios, y velad en oración.
Velar es estar despierto, atento y en guardia,
para reconocer y ver los ataques del enemigo.
Es como un vigía cuando está en su torre, en
alerta a lo que pueda venir.
También quiere decir, que estamos
constantemente en contacto con Dios y que
oramos a Él por fuerza, para vencer al pecado.
Cuando no se ora en una buena actitud hay
estorbo a tu oración.
La oración se realiza de forma vertical: desde
la tierra hacia el cielo.
La comunión a la inversa, desde el cielo a la
tierra, se realizó cuando Cristo vino a morir por
los pecados del mundo y así, fue como abrió un
nuevo camino.
Cielo Cielo
Tierra Tierra
Heb 10:19 Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar
en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo,
Heb 10:20 por el camino nuevo y vivo que él nos abrió a
través del velo, esto es, de su carne,
Heb 10:21 y teniendo un gran sacerdote sobre la casa de
Dios,
Cristo

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Heb 10:22 acerquémonos con corazón sincero, en plena
certidumbre de fe, purificados los corazones de mala
conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura.
A través de Jesús tenemos acceso al Lugar
Santísimo. Todos los creyentes tenemos acceso.
Heb 4:16 Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la
gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el
oportuno socorro.
Existe un requisito para entrar en la oración. No
podemos orar de cualquier manera. Para que
haya una relación fluida entre el creyente y
Dios, tiene que haber una relación horizontal
aceptada por Dios. Se refiere a tener buena
relación con los hermanos.
La oración debe tener ambas partes, la vertical
y la horizontal.
Cielo Cielo
Tierra Tierra
El primer requisito es entrar en alabanza, tener
una mente ocupada en otras cosas es un
impedimento para la oración. Tampoco podemos
dedicar todo nuestro a estar en oración, leer,
ayunar, etc. Porque sería un desorden. Debe
haber un equilibrio.
Entre
hermanos

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 El pecado de omisión.
PECADO = ERRAR AL BLANCO, NO DAR EN LA
DIANA
Es una actitud, no son cosas, es una intención
interna y su fruto es cuando es consumado.
No orar es un pecado de omisión, dejar de hacer
lo que debo hacer. Cuando no intercedemos por
los demás estamos pecando.
1Sa 12:23 Así que, lejos sea de mí que peque yo contra
Jehová cesando de rogar por vosotros; antes os instruiré en
el camino bueno y recto.
Nos pensamos muchas veces, que interceder
por los demás solo es para un cierto tipo de
personas y hemos visto en las escrituras que no
es así, que es algo que todos los creyentes
debemos hacer.
 El pecado no confesado. Cuando cometemos
pecado y no lo confesamos delante de Dios,
nuestras oraciones no son escuchadas.
Isa 59:2 pero vuestras iniquidades han hecho división entre
vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho
ocultar de vosotros su rostro para no oír.
Sal 66:18 Si en mi corazón hubiese yo mirado a la iniquidad,
El Señor no me habría escuchado.
Es muy importante venir ante el Señor con una
actitud de arrepentimiento y confesarle nuestro

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pecado, para que este pueda ser perdonado y
no nos sea de estorbo.
 Orar por egoísmo de la carne. Siempre
tenemos que orar sin el egoísmo personal.
Cuando pidamos algo que sea conforme a la
voluntad de Dios. No podemos ser unos
inconscientes pidiendo cosas vanas para nuestro
propio beneficio, sino más bien, cuando pidamos
algo al Señor sea con un fundamento.
1Jn 5:14 Y esta es la confianza que tenemos en él, que si
pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye.
 Orar sin fe, en duda e incredulidad.
Imaginaos por un momento que estáis
enfermos. Os dicen que la solución está en
tomar cierta medicina pero no la tomáis, ¿puede
hacer su efecto? No. Pues lo mismo pasa si
actuamos en duda o incredulidad. Si la solución
a tu enfermedad está en tomarte cierta
medicación, pero no crees que pueda curarte y
no la tomas, seguirás enfermo.
Heb 11:6 Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque
es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y
que es galardonador de los que le buscan.
Espero que esta muestra te haya abierto los ojos, la
mente y el corazón, para ver cuando podemos tener
estorbos a nuestras oraciones.
Mantengamos dentro de lo posible, una buena higiene
espiritual, para que nuestra relación con Dios pueda
ser de forma fluida y sin estorbos.

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11. Esperando en Dios
¿Sabemos la forma en la que debemos esperar en
Dios? Puede que muchos si sepan hacerlo, pero otros
no tanto.
Para poder esperar en el tiempo de Dios es necesaria
la paciencia y una plena confianza en Dios. Cuando se
confía en la provisión de Dios, sabes que, si lo que
estas esperando es de su voluntad, vendrá a tu vida,
en el tiempo estipulado por Dios.
Muchas veces oramos y decimos al Señor:
– ¡Padre toma mi carga!
Pero de la misma forma que se la damos, volvemos a
cogerla cuando salimos de nuestro cuarto de oración.
Saber descansar en Dios, no todo el mundo sabe
hacerlo. Para descansar en Dios, hay que tener una
plena confianza en Él.
Podemos enfrentar la espera a una petición de dos
formas:
1. En una actitud de confianza y descanso,
sabiendo que el problema o la petición no
depende de nosotros y que lo hemos dejado en
las manos del que puede solucionarlo y creemos
que así lo hará.
2. En una actitud de angustia y desespero por ser
desconfiados.

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Debemos aprender a esperar en el tiempo de Dios.
Ecl 3:1 Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del
cielo tiene su hora.
Gál 6:9 No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su
tiempo segaremos, si no desmayamos.
No impacientándonos.
Sal 40:1
Al músico principal. Salmo de David.
Pacientemente esperé a Jehová,
Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor.
No debemos mantenernos ociosos mientras
esperamos, sino por el contrario, esforzarnos y
trabajar para el Señor.
Sal 27:14 Aguarda a Jehová;
Esfuérzate, y aliéntese tu corazón;
Sí, espera a Jehová.
Esperemos con esperanza.
Tit 2:13 aguardando la esperanza bienaventurada y la
manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador
Jesucristo,
Esperar confiando en sus promesas, en su palabra.
Sal 130:5 Esperé yo a Jehová, esperó mi alma;
En su palabra he esperado.
Miq 7:7 Mas yo a Jehová miraré, esperaré al Dios de mi
salvación; el Dios mío me oirá.
Esperar sin mirar lo que nos rodea y en silencio.

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Sal 37:7 Guarda silencio ante Jehová, y espera en él.
No te alteres con motivo del que prospera en su camino,
Por el hombre que hace maldades.
Como podemos ver, cuando tenemos conocimiento de
la palabra todo nos resulta más fácil de aplicar.
Si quieres esperar por medio de tus propios medios
terminarás agotado y sin fuerzas.
La posición más acertada y la actitud más sabia, está,
en la palabra del Señor.
Cuando tienes un conocimiento real de lo que Dios ha
dejado provisto para tu vida, es cuando vives confiado
y descansas plenamente en Él y en sus promesas.

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12. Reparadores de almas
Puedes pensar que este título es algo fácil, que
cualquiera puede restaurar un alma.
Conozco un grupo de hermanas en Cristo, con las
cuales comparto y aprendo mucho de cada una de
ellas (sois especiales).
En este grupo, todas y cada una de nosotras tenemos
esa buena disposición para ayudar a los demás a
restaurar su alma y actuamos unidas para detener ese
mal en la persona. Actuamos como un símil de la
sangre, formamos un coagulo espiritual que se lanza
al rescate.
Veamos que hace nuestro cuerpo cuando sufre una
herida.
¿Cómo se forma un coágulo de sangre?
La coagulación de la sangre (llamada coagulación) es el proceso
químico complejo que controla la hemorragia. Este proceso usa
hasta 10 diferentes proteínas (llamadas factores de coagulación de
la sangre o factores de coagulación) que se encuentran en el
plasma sanguíneo. Dicho de manera simple: este proceso de
varios pasos cambia la sangre de líquida a sólida en el sitio de
la herida.
La sangre está compuesta de varias células diferentes,
especialmente: glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas, así
como factores de coagulación. Estos y otros elementos flotan a
través de los vasos sanguíneos en un líquido de color pajizo
conocido como plasma.

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Normalmente, cuando un vaso sanguíneo se daña (por ejemplo,
debido a una cortada en la piel o una herida interna), empieza a
fluir sangre. El primer paso para controlar la pérdida de
sangre es que el vaso sanguíneo se estreche
(llamado constricción) de modo el flujo sanguíneo disminuya. En
segundos, las pequeñas plaquetas llegan de prisa al sitio de la
lesión y se agrupan alrededor de la herida. Atraen a otras
plaquetas y ayudan a formar un tapón para cerrar la fisura en el
sitio.
Cuando un vaso sanguíneo se daña, otros elementos llamados
factores de tejidos se unen al proceso para ayudar a detener la
hemorragia. Inician una reacción química que hace que los
factores de coagulación produzcan fibrina, una substancia fuerte
como una hebra que rodea el tapón plaquetario.
Por último, el coágulo de fibrina toma la forma de una malla, la
cual mantiene el tapón firme y estable. En los próximos días a
semanas, el coágulo se hace más fuerte y luego se disuelve a
medida que la herida sana. (2)
Menuda enseñanza ¿no?, apliquemos ahora este
conocimiento a lo que hace un reparador de almas.
Cuando las personas reparadoras acuden a controlar
una herida, forman un coagulo espiritual con un
propósito fijo, que es detener esa herida.
Al igual que en la sangre hay diferentes grupos de
proteínas para la coagulación. También en la sangre
de Jesucristo a la cual pertenecemos.
_______________
(2) https://stepsforliving.hemophilia.org/es/informacion-basica-sobre-trastornos-
hemorragicos/que-sucede-cuando-una-persona-
sangra#:~:text=Cuando%20el%20cuerpo%20sufre%20una,el%20sitio%20de%20la%20herida

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Existen diferentes factores (personas con una labor
determinada) que están dentro del cuerpo de Cristo,
que deben unirse para hacer su trabajo.
Cuando se inicia en el cuerpo un proceso de
coagulación, transforma la sangre de liquida a sólida.
De la misma forma ocurre cuando este proceso se
inicia en el cuerpo de Cristo por medio de los
reparadores. Esos factores de coagulación (personas
con una labor determinada) forman una pared sólida,
donde no dejan que nada se pueda escapar, para que
no pueda afectar a la vida de la persona herida.
También podemos observar que un vaso sanguíneo
que se daña se estrecha, se contrae para evitar mayor
pérdida de sangre. De la misma forma, aquellos que
son reparadores se unen, porque en la unidad es
donde está la fuerza para levantar ese muro.
Las primeras que llegan al lugar de la herida son las
plaquetas que van corriendo. Siempre hay personas
que están vigilantes, alerta y listas, para ir corriendo
al socorro de las vidas. Ven lo que otros no ven,
perciben el dolor y la herida porque Dios les ha
capacitado para eso. Son como vigías del dolor.
Estas plaquetas acuden al rescate las primeras como
ya he dicho, pero hacen un efecto llamada, para que
corriendo lleguen más y formen un tapón que cierre la
fisura. Un grupo fuerte de reparadores.
Los diferentes factores de la coagulación, cuando
están unidos forman una sustancia llamada fibrina.

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Pues los factores de coagulación de la sangre de Cristo
forman la Cristomicina, que envuelve la herida, el
corazón dañado, y rodea a todas esas plaquetas
(reparadores).
Ese grupo de reparadores son rodeados por el cordón
de la protección que produce la Cristomicina y la
unción de Dios. Forman una malla protectora, que
hace que ese tapón este firme y estable mientras dura
el proceso de curación y una vez terminada su labor se
disuelve.
Esos reparadores se mantienen unidos y firmes
haciendo su trabajo mientras dura su labor y una vez
terminado, se apartan para que esa vida fluya por sí
misma.
No pensemos ahora que todos podemos ser
reparadores, porque para serlo se necesita una serie
de requisitos.
 Estar en la sangre de Cristo es primordial.
 Ser plaquetas o factores de coagulación.
Debes tener la capacitación para hacer ese
trabajo y ser designado por Dios.
 Estar siempre preparado. Unas plaquetas
débiles o con anemia no pueden cumplir su
función. De la misma forma, una vida que no
esté activa en su posición no puede estar alerta,
ni ejercer su labor.
 Mantenerte sano espiritualmente. Para
mantenerte sano debes alimentarte bien con la
palabra del Señor, en oración y ayuno, cuidando

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tu vida espiritual para estar fuerte y dar una
palabra oportuna según la biblia.
 Debes ser una persona altruista, que no
mires por tu interés sino por el de los demás
y hacerlo todo por amor a Dios y a su obra.
 En tu función nadie va a mirar tu estado, tienes
que estar disponible siempre, estés como
estés. Tu eres llamado a restaurar, no puedes
mezclar tus cosas, ni tu estado mientras
ejerces. Un herido no quiere saber tus
problemas, quiere sanidad.
Como hemos podido ver se requiere una serie de
aptitudes, actitudes y cualidades. Dentro del cuerpo de
Cristo cada uno tenemos una función y no todos
podemos ser reparadores, pero aquellos que los son,
tienen toda mi admiración y respeto.
Quiero decirles a esos reparadores, gracias. Gracias
por vuestra labor, gracias por vuestro trabajo que a
veces es invisible, gracias por vuestra disposición,
gracias por estar vigilantes y en definitiva muchas
gracias.

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13. Abandonado por el hermano
Qué difícil es pasar por esta
situación. Se me estremece el
alma.
Cuando has llevado toda una vida
entregado al servicio del Señor,
trabajando y estando para todo el
mundo dentro de tus posibilidades,
es muy duro enfrentar el abandono del hermano.
Puede que ahora estés atravesando por ese momento
en el que estas necesitado y todos te han dado la
espalda.
Hay mucha gente que tiende a vernos como si
fuésemos superhéroes de capa roja y superpoderes.
Tú no puedes permitirte el lujo de sentirte necesitado,
porque a ojos de los demás, “tú eres fuerte”.
No puedes explicarte como habiendo estado tu ahí
para todo el mundo, nadie se dé cuenta ahora de que
tu estas necesitado. Tu eres una persona que en
cuanto has visto la necesidad, allí has estado. Tu
mano siempre ha estado extendida, tu hombro
siempre presto a recibir las lágrimas del otro, tu
persona siempre dispuesta para la necesidad del otro,
pero....
.... Ha llegado el momento en el que tú lo estas
pasando mal, donde necesitas una mano amiga, una
palabra de aliento, una sonrisa, o simplemente que te

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acompañen, pero te has visto totalmente
desprotegido, traicionado y solo. Donde van pasando
los días y ni se acuerdan de que existes.
Aquellos por los que tú has dado tu tiempo y tu vida,
pasan por tu lado indolentes, como si no les importase
nada, ¡es que ni siquiera te miran!
Puede que estés atravesando una enfermedad, una
mala situación matrimonial, una situación económica
deficiente, viviendo en el maltrato, o lo peor de todo,
la pérdida de un ser querido.
Puedo aconsejarte desde mi propia experiencia, donde
me vi totalmente abandonada en todos los ámbitos y
muy decepcionada. Nadie estuvo conmigo. Solo tuve a
mi Cristo. Pero te voy a decir una cosa.
Nuestro Dios nunca te abandona y siempre tiene
dispuesto un plan para tu vida. Dios siempre tiene un
buen equipo de reserva, como hacen los buenos
entrenadores, dispuestos a salir al campo en cuanto
sea necesario.
La palabra nos dice que, aunque una madre se olvide
de lo que dio a luz, Dios no te olvidará.
Isa 49:15 ¿Se olvidará la mujer de lo que dio a luz, para dejar de
compadecerse del hijo de su vientre? Aunque olvide ella, yo
nunca me olvidaré de ti.
Tu posición en Dios es tan grande, tan preciosa, tan
perfecta, que llena todo tu espacio. Ocupa cada rincón
de tu corazón llenándolo de todo lo que necesitas.

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El Señor te da un “no temas” para cada día del año.
Está escrito en la biblia 365 veces esa frase, para que
puedas entender que Dios está contigo.
Muchas veces te habrán dicho, que cuando más lejos
crees estar de Dios, es cuando más cerda de ti está. Y
es cierto, no es un tópico.
Él nunca te abandona, Él nunca te va a dejar solo,
para Él no hay lista de espera, ni un luego te llamo. Él
siempre es fiel y va a estar a tu lado cuidándote, aun
cuando tú no le veas por ningún lado.
Guarda esta promesa como un tesoro en lo más
profundo de tu corazón, atesórala y cuídala.
Mateo 28:20 enseñándoles que guarden todas las cosas que os he
mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el
fin del mundo. Amén.
¿Sabes algo? Cuando yo creí que ya estaba todo
perdido, cuando pensaba que de ese hoyo no iba a
salir, que estaba completamente sola y hundida, el
Señor me sorprendió con ese equipo de reserva. De
donde menos esperaba la ayuda surgió.
Mucha gente con desconocimiento tiende a hablar mal
de internet, por que han escuchado malas
experiencias de otras personas. Yo quiero hacer aquí
un stop para explicar algo.
Haceros por un momento una imagen mental. Mirar en
una habitación donde hay una persona enferma que
necesita que la operen. Dos posibles candidatos que

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tienen que intervenirla, porque si no lo hacen esa
persona muere.
Los dos son hombres con una profesión y muy
experimentados. Los dos saben utilizar sus
herramientas a la perfección para el fin al que ellos
están acostumbrados. Pues bien, uno es un carnicero
y el otro es un cirujano.
Pongamos un cuchillo imaginario encima de la mesa y
démosles ese cuchillo a esos dos profesionales. ¿Cuál
sería el resultado?
El carnicero es experimentado en matar, mutilar y
descuartizar su material en su trabajo. Mientras que el
cirujano está especializado en trabajar para dar vida, a
aquellos que pueden morir en un momento dado.
Tiene la precisión de saber dónde cortar, para sanar.
Los dos tienen un cuchillo ¿verdad? Pero dependiendo
de cómo se use, así actuará ese cuchillo. O bien
sanando, o bien matando.
Pues bien, internet es una herramienta, que
dependiendo de cómo se use así te va a resultar. Si la
usas para bendición, te será de bendición. Pero si la
usas con maldad, recogerás maldades. La prudencia
está en ti, no en internet.
Una vez explicado esto voy al tema.
Dios, en ese momento donde lo pasé tan mal, a través
de internet me dio una serie de hermanas
maravillosas. Dios me proveyó por un medio que yo ni
imaginaba. Hermanas de diferentes puntos de España,

64
que han estado conmigo hasta altas horas de la
madrugada sin importarles el tiempo, dispuestas a
ayudarme.
El Señor lleno el vacío de mi alma con estás
hermanas, a las cual me faltaría vida para
agradecerles su ayuda. Él tenía ese equipo de reserva,
para ocupar el lugar de aquellas que desaparecieron.
¿Qué te quiero decir con esto? que, aunque hayan
desaparecido aquellos a los que tu creías tus
hermanos, tus amigos, tu familia, Dios tiene
preparado ese equipo de reserva para ti. Dios pondrá
a las personas que tu necesites en tu vida. Quizás solo
sea una persona, pero suficiente para lo que tú lo
necesitas.
Si durante un tiempo ves que Dios calla, que es como
si no llegase esa ayuda, ten paciencia, porque Él está
trabajando en ti y en los que han de venir a ti. No te
cierres al cambio que Dios quiere traerte a tu vida, no
te aferres a aquello que te hace daño, suelta lo que no
te hace bien y recibe lo nuevo que está por llegar.
Dios quiere dibujar una nueva sonrisa en tu rostro ¿le
dejas?

65
14. Ser usado por Dios
Recientemente he pasado por
una experiencia, donde he
recibido una gran enseñanza.
Dios trata con cada uno de
nosotros de una forma diferente.
Según sea tu persona, así
tratará Dios contigo.
Solemos pensar que ser usado por Dios es una gran
bendición y lo es. Pero esa bendición tiene un precio
(no me refiero a comprar la bendición con tus obras).
El precio no es nada material, sino por el contrario
algo más bien espiritual y de tu propia persona, de tu
propio yo. Está relacionado con la obediencia y una
santificación progresiva en la vida del creyente. No
hablo de la santificación posicional, ya que esa es
instantánea cuando venimos a Cristo.
- La santificación posicional
La santificación posicional se adquiere en el momento
en el que venimos a Cristo y nacemos de nuevo. Es un
acto único, donde se recibe la santidad que Dios nos
da en la posición de hijos de Dios.
Somos santos, porque Él es Santo. La santificación
posicional, como la progresiva, se tienen que
complementar.

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La santificación progresiva depende de la
posicional, ya que para que se dé la progresiva se
necesita ser un nacido de nuevo.
La perfección del santo (el creyente) es para siempre.
Dios nos ve a través de Cristo.
Heb 10:14 porque con una sola ofrenda hizo perfectos para
siempre a los santificados.
Somos perfectos. La posición que recibimos de Cristo
no depende de la santificación progresiva.
Si queremos mantener la gracia por medio de obras,
ya deja de ser gracia (pelagianismo). No se puede
añadir nada a la obra de Cristo por medio del esfuerzo
humano.
Doctrina de Pelagio (siglos IV -V), quien negaba el pecado
original y afirmaba que la gracia divina no era necesaria, ni
gratuita, sino merecida por un esfuerzo en la práctica de la
misma; es considerada herética por la iglesia católica y
protestante.
Posicionalmente, Dios nos ha dado todo lo necesario
para ejercitar una vida de fe en plenitud, pero el
creyente debe trabajar y desarrollar lo recibido. Todo
el depósito de las cosas que Dios nos ha dado debe
practicarse progresivamente.
Clases de santificación:
- Posicional (la recibimos cuando venimos a Cristo)
- Progresiva (se obtiene en el peregrinar de este mundo)

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- Privilegio (no quiere decir que sea para ser salvo, pero por el
testimonio puede ganarse este tipo de santificación)
- Final (cuando estemos en el cielo)
Continuemos con el tema con el que he iniciado.
El que Dios nos tome para ser usados no depende de
nosotros en cuanto a su elección, pero si en cuanto a
su ejecución. Dios puede tener un plan contigo para
ser usado, pero tú puedes retrasarlo o estorbarlo
porque no cumples con lo que se te demanda. Quiero
explicar, que ningún momento tú vas a poder parar el
plan de Dios, por que él es Soberano y cumplirá su
propósito en ti.
Tenemos el ejemplo de Jonás, él no quería ir a Nínive,
retraso los planes de Dios. Sin embargo, tuvo que
doblegarse a su voluntad.
Jon 3:1 Vino palabra de Jehová por segunda vez a Jonás,
diciendo:
2Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y proclama en ella
el mensaje que yo te diré.
3Y se levantó Jonás, y fue a Nínive conforme a la palabra de
Jehová.
Otro gran hombre, Moisés. Fue un hombre criado en
palacio rodeado de riquezas, grandeza y gente a su
servicio. Estaba acostumbrado a mandar y que se le
obedeciera. Contaba con el apoyo del Faraón y tenía
toda la corte a sus pies.
Sin embargo, Dios tenía otro plan para él.

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Cuando Moisés descubrió su procedencia, quiso ayudar
a su pueblo desde su humanidad. Tomó de lo que en
la carne había estado ejercitando durante su vida de
príncipe y mató al egipcio.
Sin embargo, para Dios ese Moisés no servía. Tuvo
que llevarlo al desierto, donde tuvo que tratar con su
carácter, y de ser un asesino, pasó a ser el hombre
más manso de la tierra.
¿Qué quiero decirte con esto? Que para que Dios
pueda usarte tendrá que trabajar tu carácter.
Esa era la enseñanza que Dios me estaba dando en
estos días. Que si Dios quería utilizarme para su obra,
había cosas de mi carácter que le estorbaban y debía
tratarlas y quitarlas porque me serían un estorbo.
Este texto fue clave en mi enseñanza.
Eclesiastés 10:1 Las moscas muertas hacen heder y dar mal olor
al perfume del perfumista; así una pequeña locura, al que es
estimado como sabio y honorable.
Si tú eres una persona con reputación como cristiano,
de buen testimonio, si estas considerado entre los
hermanos como una persona de conocimiento y sabia,
NO puedes permitirte el lujo de tener ciertas
expresiones o comportamientos en forma pública,
porque estropean tu imagen, tu testimonio y restan
credibilidad a la obra de Dios en ti.
A veces no nos damos cuenta de la repercusión que
puede tener un simple post en unas redes sociales.

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Debemos ser de ejemplo y de bendición para los
demás y aprender a amar a todo el mundo y cuidar
hasta el último detalle de nuestras vidas.
Puede que te suceda como me pasó a mí. Las
injusticias de este mundo, las cosas mal hechas de
otras personas, los acontecimientos que están
sucediendo, llegaron a enojarme de tal modo, que un
momento dado, me expresé públicamente de una
forma que no debía y que Dios no me permitía.
No que yo le faltase el respeto a nadie, ni que dijese
ninguna palabra fea, pero hay expresiones que sin
decir nada, lo dicen todo. Eso sonó mal en mi persona,
no iba en consonancia con lo que yo profeso y creo.
Ignoramos que hay muchos ojos, muchas miradas
puestas en cada uno de nosotros esperando ver que
hacemos o decimos.
Si nos toca vivir en tiempos o circunstancias difíciles,
miremos a nuestros hermanos en la fe de la iglesia
primitiva, que pasaron por sufrimientos y dificultades
hasta la misma muerte y se alentaban unos a otros
con la palabra del Señor.
Dios me pegó un tirón de orejas y me hizo ver que no
debo actuar así. Que debo amar a aquellos que hacen
mal, a aquellos que cometen injusticias, a aquellos
que pueden hasta tener el poder de quitarnos la vida.
Como cristianos nos toca vivir en tiempos donde
tenemos que dar la talla siempre, hasta las últimas

70
consecuencias. Con esto no quiero decir que te hagas
un mártir por voluntad propia, no seamos ingenuos.
Podréis decir que soy una exagerada, que no importa,
porque Dios sabe que estamos sujetos en un cuerpo
de carne y que no pasa nada. Puede que hasta me
acuses de religiosidad, pero yo solo os cuento lo que a
mi Dios me ha demandado.
“Siempre que expongas públicamente tus palabras quedarás
expuesto al juicio y a la crítica, tú decides que haces con ello”
Yo por mi parte voy a intentar dentro de lo posible, no
defraudar al Señor y voy a intentar controlar cada
frase que exprese públicamente. Intentaré controlar
mis emociones, porque pueden dañar la imagen que
hay de mi en aquellos que me miran como una hija de
Dios.
Fallaré muchas veces, seguro que sí, pero de mi parte
estará el esfuerzo de intentarlo una y otra vez. Me
ejercitaré, tendré un cambio de actitud y por medio de
la oración pediré al Señor las fuerzas para que se
posibilite el cambio en mí.
Todo es dar un paso adelante, es una toma de
decisión que nadie puede hacer por ti. Tú decides
hacer el cambio.
Cuando quites lo que estorba en ti para ser usado,
podrás hasta liderar una nación, cruzar un océano y
quien sabe que más, el límite le pertenece a Dios.

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15. Fuimos creados para el Hijo
Nosotros solemos llamar a este mundo como un lugar
nuestro. Sin embargo, en la palabra podemos
descubrir que no es así.
Heb 1:2 en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a
quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el
universo;
Cuando Dios decidió que se hiciera la creación, esta
fue hecha por medio del Hijo y para el Hijo, como
heredero de todo.
Veamos que dice David F. Burt en su libro de Hebreos
Tomo I, pág. 91-92:
De hecho con esta característica y la siguiente (que
fue por el Hijo que Dos creó el universo) el autor nos
remite al principio de todo y al fin de todo. No solamente
en términos temporales sino también en términos causales.
Aquí el Hijo es contemplado como la meta de todo, por
cuanto Él es su heredero. Él es la Omega de la creación.
En otras palabras, cuando Dios creó el universo
¿para quién lo creó? ¿para nosotros? No. Nosotros somos
los mayordomos de la creación y, como siervos de la casa,
comemos de la mesa de nuestro amo. Pero nosotros no
somos los dueños y herederos (o mejor dicho, solo somos
en virtud de estar <<en el Hijo>>. Cuando Dios creó el
mundo por medio del Hijo, lo creó también para el Hijo.
Lo que llamamos <<nuestro>> país, fue creado para el
Hijo. Tú y yo fuimos creados pare el Hijo, y jamás

72
descubriremos el verdadero sentido de la vida mientras lo
ignoremos o nos resistamos a asumir sus implicaciones. (3)
Todos nosotros fuimos creados por y para el Hijo y
mientras no sepamos esta gran verdad y la
asumamos, no tendremos una visión panorámica de
todo el escenario.
Nosotros fuimos llamados a ser los cuidadores de la
creación, los servidores, pero nunca sus dueños. No
nos pertenece.
Si aceptamos que realmente solo somos peregrinos y
extranjeros en esta tierra, que estamos de paso, que
somos servidores, se nos hará más fácil el camino.
Aceptar esto supone un cambio en todo lo que siempre
hemos pensado y un cambio en nosotros mismos.
Siempre hemos creído que el centro de todo somos
nosotros, el “YO”.
Al descubrir esta verdad podemos ver que el Hijo tiene
unos derechos sobre nosotros, puesto que le
pertenecemos a Él.
Nuestra existencia y nuestra vida en general son para
el Hijo, tú ya no vives por ti, ni para ti, sino que vives
por Él y para Él.
Rom 14:8 Pues si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos,
para el Señor morimos. Así pues, sea que vivamos, o que
muramos, del Señor somos.
_______________
(3) Comentario Nuevo Testamento David F. Burt Hebreos Tomo I

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Gál 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo
yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo
en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo
por mí.
Una vez que entendamos nuestro papel en esta vida,
podremos caminar firmemente sabiendo que debemos
hacer. Que diferente se ve todo cuando se tiene una
visión amplia.
Imagina que vas a ver una película a un cine. Entras,
compras tu entrada y ves la película desde principio a
fin. Te has empapado del argumento, conoces los
actores principales y sabes el principio y el fin,
¿verdad?
Pues pongamos la misma situación, pero en vez de
quedarte todo el tiempo viendo la película, sales al
baño, sales por palomitas, de repente te hacen una
llamada y tienes que salir.... tu ya no tienes todos los
elementos para conocer la sustancia de la película, ni
el contenido, ni que mensaje tiene.
Si ponemos los dos casos citados de la persona juntos,
veremos dos versiones totalmente diferentes de una a
otra.
Pues lo mismo sucede cuando nosotros no tenemos
todo el conocimiento del panorama general.
Ignoramos cosas, las confundimos, erramos y
podemos hasta crearnos nuestro propio evangelio.
La cosa no está en lo que yo crea que es, sino en lo
que verdaderamente es.

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Yo entiendo que he sido creada por el Hijo y para el
Hijo para rendirle servicio y adoración. Mi trabajo en
esta tierra siempre debe ir enfocado a que estoy
sirviendo al Maestro.
Col 3:23 Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para
el Señor y no para los hombres;
Col 3:24 sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la
herencia, porque a Cristo el Señor servís.
En esta tierra Dios también nos ha puesto una serie de
autoridades a las que debemos obedecer como dice la
palabra. Si lo llevamos a la iglesia enseguida lo
entendemos, nos resulta fácil. Pero cuando lo
trasladamos a la vida cotidiana, muchos piensan que
no es así porque otras personas no sean creyentes y
están equivocados.
Todas las autoridades están puestas por Dios y a todas
les debemos sujeción. Cuando no lo hacemos estamos
desobedeciendo a Dios.
Pongo un ejemplo:
Si estás trabajando para un jefe, ese jefe es tu
autoridad en el empleo y debes someterte y trabajar
dando lo mejor, lo excelente, como si para el Señor
mismo lo estuvieras haciendo. Piensa que ese jefe
tiene delante a un empleado cristiano, el cual debe dar
testimonio de Jesús para que el nombre de Dios no
sea vituperado por tu mal testimonio.
Tus padres son una autoridad sobre ti, lo sabemos. Tu
pastor, tu marido, pero también los son los

75
gobernantes de tu país, los diferentes cuerpos de
fuerzas del estado y los jefes de tu trabajo. Aunque te
sorprenda así es y a todos debemos sometimiento
según la palabra. Nuestra obligación es orar por ellos
para que la luz del evangelio venga a aquellos que no
lo conocen.
Por lo tanto, todo lo que hagas hazlo para Dios sin
mirar a quien tienes delante. Da de lo mejor, lo
excelente.

76
16. Fieles testigos de la verdad
Me pregunto si hoy estamos
siendo fieles a la verdad del
evangelio.
Es muy difícil ser fiel a las
verdades escritas en la palabra,
sin que te surjan personas que
discrepen contigo. Incluso, llegando muchos de ellos a
convertirse en tus enemigos.
La palabra del Señor no está hecha para los “queda
bien”. Si decidiste ser un pregonero de la verdad del
evangelio, afronta con valentía tu decisión contra
viento y marea.
La palabra es la misma hoy que la de ayer. El mundo
natural ha evolucionado, si, y es muy buena esa
evolución en su forma positiva. Pero hay muchos que
quieren que el evangelio también evolucione,
torciendo y acomodando la palabra a su conveniencia,
deseos y forma de vida.
Con la palabra no podemos hacer lo mismo que con un
guiso que no nos gusta, apartando los ingredientes
que no nos entran ni por el ojo, ni por el paladar.
Podemos observar, que muchas personas se han
desviado de la sana doctrina siguiendo otras corrientes
doctrinales, que en algunos casos, llegan a ser
heréticas y muchas son provenientes del ocultismo. Se
enmascaran y se filtran en nuestras iglesias como

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doctrinas evangélicas cuando no lo son. (la
prosperidad... etc.)
Pablo hace un llamamiento tremendo a predicar la
verdad le pese a quien le pese.
2Ti 4:1 Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que
juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su
reino,
2Ti 4:2 que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de
tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y
doctrina.
2Ti 4:3 Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana
doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán
maestros conforme a sus propias concupiscencias,
2Ti 4:4 y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las
fábulas.
2Ti 4:5 Pero tú sé sobrio en todo, soporta las aflicciones, haz
obra de evangelista, cumple tu ministerio.
Doy gracias a Dios por sus siervos, porque muchos de
ellos han tenido un despertar a descubrir las falsas
doctrinas que están encubiertas y que por desgracia
practican muchos creyentes. Doy gracias por esa luz
que están recibiendo de Dios para enseñar al pueblo.
Pero también pido a Dios, que siga iluminándoles por
que queda mucho trabajo por realizar en ese campo.
Pido a Dios que les de la valentía necesaria para decir
la verdad, aunque se levante contra ellos iglesias
enteras o sea quien sea.
No solamente está en la iglesia el peligro de las falsas
doctrinas, sino que también está la imposibilidad de
poder obrar muchas veces los siervos, porque la

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iglesia no admite que les digan la verdad o que se les
corrija. Algunos pastores no se dejan amedrantar,
pero otros por desgracia sí.
Si elegiste seguir a Cristo, tomaste una buena
decisión, pero, el rollo te lo comes enterito, aunque te
amargue al estómago, al igual que hizo Juan en la Isla
de Patmos.
Si la palabra te enseña lo que es pecado y quieres
seguir haciéndolo, acepta también la corrección y la
disciplina. Como dice el dicho: son lentejas, o las
comes o las dejas.
Apo 10:10 Entonces tomé el librito de la mano del ángel, y lo
comí; y era dulce en mi boca como la miel, pero cuando lo hube
comido, amargó mi vientre.
La verdad es verdad hoy y mañana. El pecado es
pecado hoy y mañana. El pecado no tiene una medida,
es pecado simplemente. Lo mismo es un lazo rojo
grande, como un lazo rojo más pequeño, ninguno de
los dos deja de ser lazos.
Dios no se moderniza, ni hay temporalidad en su
palabra. El determina y nosotros estamos obligados
como hijos de Dios a cumplir sus mandamientos y
exigencias. Él no te da la opción a que tu cambies lo
que Él ya ha establecido.
Ahora me dirijo a ti, tú que me lees, tú que quizás no
seas una persona muy visible, pero eres miembro del
cuerpo de Cristo.

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Te animo en el Señor a que no te comas todo lo que
oigas, a que escuadriñes cada palabra que llega a tus
oídos, aun siendo de personas que conozcas.
Investiga, indaga, lee, busca. Hay ocultas tantas cosas
que ignoramos que si lo supiéramos nos quedaríamos
asombrados.
Muchos están enseñando cosas erróneas, quizás por
desconocimiento, o alguno con plena convicción de lo
que dice, pero bien sea de una forma o de otra, es lo
mismo, te sigo animando a examinar y escudriñar
todo como hacían los de Berea.
No sigas la corriente de este mundo, ni las modas
cristianizadas. No te dejes arrastrar por el personaje
famoso del momento, sigue a Cristo.

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17. Tú no caducas
Recientemente he pasado por una experiencia muy
rica en enseñanza.
A veces no nos damos cuenta y dejamos entrar en
nuestros corazones y en nuestras mentes, pequeñas
semillas que van creciendo con el paso del tiempo.
Pasa de ser una simple semilla para convertirse en un
árbol grande que nos cubre con sus ramas.
Puede que alguien, en algún momento, te dijese que
tú ya no servías, que tu trabajo, tu servicio o tu don
ya esté pasado de moda.
Esas pequeñas frases van minando en nuestro interior
sin que nos demos cuenta. Al principio a penas les
prestamos atención, no nos fijamos, pero eso ya entro
por tus oídos y va a terminar plantado en tu corazón.
Esas frases de nos sirves, ya no vales, van resonando
en nuestra mente poco a poco y cuando te quieres dar
cuenta te mutila.
Me diréis, ¿Cómo que me mutila? Si, te mutila porque
dejas de ejercer aquello a lo que fuiste llamado y
rompes con tu labor. Bien sea predicar, cantar,
testificar, orar, servir, etc.
Cuando permitimos que estas cosas nos paralicen
suceden dos cosas:
 Dejas de ejercer y se pierden las bendiciones
que debían ser trasmitidas por ti.

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 Tú mismo no te bendices, porque no estas
utilizando aquello para lo que fuiste llamado y
se crea en ti una raíz de amargura.
Estos balbuceos del diablo te hacen sentir que
realmente ya no vales y siempre mirarás a otros como
superiores a ti mismo. Te sentirás poca cosa, incapaz
de dar lo que tienes porque te ha paralizado.
Ayer mismo escuchaba una predicación donde se
hablaba de la sal. Decía el siervo que la sal no
caducaba. (4)
Mat 5:13 Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se
desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada,
sino para ser echada fuera y hollada por los hombres.
Este siervo decía sobre este versículo, que Jesús
mismo les habló a sus seguidores sobre la
responsabilidad que tenían como hijos de Dios siendo
la sal de la tierra. Se les exhorta a que no pierdan su
sabor.
La palabra del Señor no tiene temporalidad y aquello
que fue dicho en el siglo primero, tiene el mismo valor
hoy.
Todo aquello que hacemos o dejamos de hacer, nos
afecta de unos a otros, porque estamos en un mismo
espacio y lugar.
______________
(4) Pastor Rober de Pamplona, Iglesia Evangélica Filadelfia de España

82
Seguía diciendo este hermano que la sal tiene 7
virtudes que no las tiene otro alimento. Yo quiero
mencionar solo 2.
1. No caduca
2. No tiene sucedáneos
Si tu coges una sal almacenada desde hace 20 años y
la sacas hoy, puede que se haya hecho como una
roca, pero si tú la rompes, es la misma sal y esa sal
sigue estando igual que el primer día sin perder sus
propiedades.
Tu no caducas, porque el cristiano al igual que la sal,
no tiene fecha de caducidad.
El ser cristiano y hacer lo que Dios te haya
encomendado no tiene fecha de caducidad. No
podemos decir que mi trabajo ya se terminó, que yo
ya hice todo lo que tenía que hacer, porque tu trabajo
terminará cuando llegues al cielo.
Apo 14:13 Oí una voz que desde el cielo me decía: Escribe:
Bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en
el Señor. Sí, dice el Espíritu, descansarán de sus trabajos,
porque sus obras con ellos siguen.
No podemos abandonar nuestro trabajo en Dios por
qué no somos una moda. El cristianismo vino y lo hizo
para quedarse.
A veces pensamos que aquello por lo que tanto hemos
trabajado, por lo que hemos luchado toda nuestra
vida, que nos ha costado nuestro tiempo y esfuerzo, al
venir nuevas modas, lo nuestro ya no vale.

83
Si nos fijásemos en el precio que pagó nuestro Cristo
dando hasta la última gota de su sangre, nos daríamos
cuenta de que nuestro ministerio, nuestro trabajo,
nuestra oración, no caduca, al igual que su sangre.
Como decía este hermano, la sal no tiene sucedáneos,
no hay nada que pueda salar a no ser que se sea la sal
misma. De la misma forma tú no tienes sustituto. Eres
único y exclusivo, por eso no debes imitar a nadie, ni
desear ser como otros, porque lo que te hace único es
lo que tú eres en Dios.
Dios te ha dado una serie de cualidades que son
exclusivas de tu persona. Otro no va a tener lo que tú
tienes, por eso es necesario que hagas tu labor con
todo el depósito que Dios ha hecho sobre tu persona,
porque es lo que Dios quiere utilizar para bendecir a
los demás.

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18. ¿Es Dios tu defensor?
Hoy he estado leyendo el libro de Jueces en el capítulo
9, la historia de Abimelec. De cómo Abimelec urdió un
plan para matar a sus 70 hermanos hijos de Gedeón.
Él, siendo hijo de su concubina, mató a sus hermanos
para reinar sobre Siquem.
El único hermano que escapó fue el pequeño Jotam.
Esté sobre esto expresó una alegoría en la cumbre del
monte de Gerizim que decía así.
Oídme, varones de Siquem, y así os oiga Dios.
Jue 9:8 Fueron una vez los árboles a elegir rey sobre sí, y
dijeron al olivo: Reina sobre nosotros.
Jue 9:9 Mas el olivo respondió: ¿He de dejar mi aceite, con el
cual en mí se honra a Dios y a los hombres, para ir a ser grande
sobre los árboles?
Jue 9:10 Y dijeron los árboles a la higuera: Anda tú, reina sobre
nosotros.
Jue 9:11 Y respondió la higuera: ¿He de dejar mi dulzura y mi
buen fruto, para ir a ser grande sobre los árboles?
Jue 9:12 Dijeron luego los árboles a la vid: Pues ven tú, reina
sobre nosotros.
Jue 9:13 Y la vid les respondió: ¿He de dejar mi mosto, que
alegra a Dios y a los hombres, para ir a ser grande sobre los
árboles?
Jue 9:14 Dijeron entonces todos los árboles a la zarza: Anda tú,
reina sobre nosotros.
Jue 9:15 Y la zarza respondió a los árboles: Si en verdad me
elegís por rey sobre vosotros, venid, abrigaos bajo de mi sombra;
y si no, salga fuego de la zarza y devore a los cedros del Líbano.

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Jue 9:16 Ahora, pues, si con verdad y con integridad habéis
procedido en hacer rey a Abimelec, y si habéis actuado bien con
Jerobaal y con su casa, y si le habéis pagado conforme a la obra
de sus manos
Jue 9:17 (porque mi padre peleó por vosotros, y expuso su vida
al peligro para libraros de mano de Madián,
Jue 9:18 y vosotros os habéis levantado hoy contra la casa de mi
padre, y habéis matado a sus hijos, setenta varones sobre una
misma piedra; y habéis puesto por rey sobre los de Siquem a
Abimelec hijo de su criada, por cuanto es vuestro hermano);
Jue 9:19 si con verdad y con integridad habéis procedido hoy
con Jerobaal y con su casa, que gocéis de Abimelec, y él goce de
vosotros.
Jue 9:20 Y si no, fuego salga de Abimelec, que consuma a los de
Siquem y a la casa de Milo, y fuego salga de los de Siquem y de
la casa de Milo, que consuma a Abimelec.
Leyendo esto he mirado en mi Biblia Textual BTX IV
edición las notas de abajo y mirar que encontrado.
Alegoría que combina toda la historia de Israel, representando la
higuera la posición nacional de Israel, la cual se marchitó y tuvo
que ser cortada (Mar_11:12-14); el olivo, los privilegios del
pacto de Dios con Israel, los cuales siguen vigentes (Rom_11:1-
36); la vid, las bendiciones espirituales de Israel (Jua_15:1-27);
y la zarza, el Anticristo, bajo cuya sombra vendrá Israel a
cobijarse, resultándole un fuego consumidor (Jer_30:7).
Me ha llamado mucho la atención, darme cuenta de
que toda la biblia está relacionada.
El Antiguo Testamento es un reflejo del Nuevo. Toda la
escritura debe verse como un completo libro, no como
dos partes, aunque este dividida así. Te animo a leer
las escrituras.

86
Continuemos.
Me asombra la forma en que El Señor escucho las
palabras de Jotam, como el mismo declaró, Oídme,
varones de Siquem, y así os oiga Dios. Fue escuchado por el
Señor y conforme a lo que el narró así le fue hecho.
Dios les hizo volver todo el mal que hicieron a los hijos
de Gedeón a Abimelec y a los que le seguían, y cayó la
maldición que Jotam expresó sobre ellos.
No me cabe la menor duda de que cuando traemos
nuestras ofensas delante del Señor jamás tendremos
mejor magistrado, mejor abogado, mejor juez, mejor
defensor de nuestra causa, que el mismo Dios.
Jotam dejó su causa delante del mismo Dios y como
testigos al propio pueblo. Esto me enseña mucho.
Aun cuando Jotam temía por su vida, no le importo
salir y pregonar el pecado de su hermano y ponerlo en
tela de juicio delante de testigos.
A veces tendrás que salir de tu escondite y dar la cara
para declarar lo que es pecado, aunque no te guste
Habrá momentos donde expondrás tus causas delante
de testigos para que sepan toda la verdad, pero
también habrá otras ocasiones, donde tengas que
mantenerte escondido. Pero eso sí, siempre poniendo
tu causa delante de Dios para que el medie en el
asunto.
A Dios no se le cae nada del bolsillo, como se suele
decir. Él no pasa por alto el pecado, y todo es

87
retribuido, todo tiene su pago, tanto lo bueno, como lo
malo que hagamos.
Pro 11:31 Ciertamente el justo será recompensado en la tierra;
!!Cuánto más el impío y el pecador!
El verso aparenta decir que el justo va a recibir
recompensa en la tierra, pero lo que el texto quiere
decir realmente es, que si el justo cuando hace lo
malo tiene su paga en la tierra, cuanto no más el
impío y el pecador recibirá su justa retribución.
Jotam maldijo a su hermano delante de Dios, para que
según sus actos le fuera hecho justicia.
No te digo que maldigas a tu hermano, por que la
biblia nos prohíbe maldecir, pero sí que puedes
contarle a Dios tu causa y esperar a que Él te defienda
y te justifique.
1Pe 4:19 De modo que los que padecen según la voluntad de
Dios, encomienden sus almas al fiel Creador, y hagan el bien.
Dios no promete en ninguna parte de la biblia que por
seguir el evangelio no se vaya a tener problemas y
que todo va a ir bien por hacer lo bueno.
Muchas veces nos adelantamos y queremos nosotros
mismos presentar defensa ante las injurias y los daños
recibidos, pero ¿sabes algo? En el mismo momento en
que lo haces Dios ya no es tu defensor. Perdiste la
oportunidad de que Dios actuara por ti y le ataste las
manos para que Él saliese en tu defensa.

88
Ciertamente, existen ocasiones donde nos vemos
tentados a defendernos a nosotros mismos (eso también
depende del carácter de la persona) por que la situación se
nos viene a la mano y cuesta mucho sujetarse,
retenerse, pero si utilizas el dominio propio que Dios
ha depositado en tu vida seguro que lo logras.
No te defiendas tú mismo, deja que actúe el Defensor
y Abogado por ti y de seguro que todo saldrá bien.

89
19. ¿Cómo es tu ofrenda?
Quiero hablaros sobre cómo es nuestra ofrenda
cuando venimos delante del altar del Señor.
Si hablamos de ofrenda agradable se nos viene
enseguida a la mente la de Abel.
Génesis 4: 3 Y aconteció andando el tiempo, que Caín trajo del
fruto de la tierra una ofrenda a Jehová.
4 Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de lo
más gordo de ellas. Y miró Jehová con agrado a Abel y a su
ofrenda;
5 pero no miró con agrado a Caín y a la ofrenda suya. Y se
ensañó Caín en gran manera, y decayó su semblante.
Comentario Bíblico Moody Antiguo Testamento:
La Biblia no dice por que Dios no aceptó la ofrenda de Caín...
... Tenemos Razones para creer que Abel Tenía un conocimiento
de su necesidad de una expiación sustitutoria. Por todas las
apariencias ambas ofrendas expresaban gratitud, acción de
gracias y devoción a Dios. Pero el hombre, que carecía de una
fe genuina en su corazón, no podía complacer a Dios a pesar de
que el don material fuera impecable. Dios no miró a Caín debido
a que ya le había contemplado lo que había en su corazón. Abel
vino a Dios con la actitud de corazón adecuada para la
adoración y de la única manera en que los pecadores se pueden
acercar a un Dios santo. Caín no lo hizo así. (5)
_______________
(5) Comentario Bíblico Moody Antiguo Testamento

90
William MacDonald dice sobre esto, que lo que
posiblemente diferenciaba las ofrendas era que en la
de Caín no hubo derramamiento de sangre. (6)
Las ofrendas que se hacían con derramamiento de
sangre eran para perdón de pecados, que en su caso
solamente eran cubiertos, no borrados.
El primero que hizo un sacrificio de animales fue el
mismo Dios, cuando cubrió con pieles al hombre y la
mujer después de la caída.
En Hebreos, según el Comentario Bíblico Moody,
tenemos una respuesta clave.
Heb 11: 4 Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio
que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de que era justo, dando
Dios testimonio de sus ofrendas; y muerto, aún habla por ella.
Según el mismo comentario, la ofrenda antiguamente
servía para expresar gratitud, efectuar reconciliación
con el Señor y acompañar a la adoración. (7)
Según esto, el relato de Caín y Abel ofrendando fue el
primer acto de adoración que menciona la biblia. (8)
Una vez visto lo que dicen los eruditos de la palabra,
traigámoslo a nosotros.
_______________
(6) Comentario Bíblico William Macdonald obra completa

91
Veamos los elementos de la ofrenda:
 Gratitud
 Reconciliación
 Adoración
 Fe
 Testimonio
Cuando vengo delante de Dios a ofrecer mi ofrenda,
debo reunir esos elementos.
Lo primero es venir con una actitud de gratitud,
recordando todos los beneficios que hemos recibido de
parte de Dios por medio de su sacrificio.
Después, es necesario antes de presentar ofrenda
estar reconciliados con Él y con los hermanos, para
que nuestra ofrenda sea aceptada.
Nuestra ofrenda debe ser toda ella un acto de
adoración.
Cuando la persona viene con la actitud adecuada
movido por la fe, esa misma fe da testimonio de lo
que es la persona y lo justifica.
Ese testimonio como cristiano avala toda la ofrenda en
sí misma y todo en un conjunto, es lo que hace que
sea agradable delante de Dios.
¿Cuál es la ofrenda que ofrecemos en la actualidad?
¡No matamos a ningún animal!

92
Heb 13:15 Así que, ofrezcamos siempre a Dios, por medio de él,
sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan su
nombre.
Según la palabra, sacrificio de alabanza, fruto de
labios que confiesen su nombre.
Otro texto que nos habla de la forma en que ofrecer
sacrificios a Dios (ofrenda) está en Romanos.
Rom 12:1 Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de
Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo,
agradable a Dios, que es vuestro culto racional.
Como podemos leer se nos invita a dos tipos de
sacrificios.
 Sacrificio de alabanza
 Sacrificio vivo, santo, agradable al Señor
Vemos por medio de estos versículos, que lo que
hemos dicho anteriormente tiene sentido a la luz de la
palabra.
Ofrenda:
Sacrificio de alabanza
Gratitud
Reconciliación
Adoración
Fe
Testimonio
Sacrificio Vivo, Santo
Gratitud
Reconciliación
Adoración
Fe
Testimonio
Culto racional

93
Me emociono al leer la palabra del Señor. Qué bonito
es darse cuenta todo lo que engloba cuando estamos
adorando al Señor. Una buena ofrenda debe tener una
buena actitud de fe en adoración.
“Señor, permíteme venir en una buena actitud, cuando
venga delante de tu presencia a traerte mi ofrenda de
adoración”

94
20. Una mirada hacia el futuro
Me gustaría echar una mirada al futuro que tenemos
por delante como cristianos.
El cristiano, el creyente, vive con la esperanza de
alcanzar el momento del arrebatamiento y ver a
nuestros seres queridos que partieron antes que
nosotros y nos tomaron la delantera.
Vivimos en esta tierra de paso como extranjeros,
como ya dije en otro capítulo.
Desde que vinimos al evangelio hemos abrigado en
nuestros corazones, como creyentes
pretribulacionistas, el arrebatamiento de la iglesia.
1 Tesalonicenses 4:16 Porque el Señor mismo con voz de mando,
con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del
cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.
17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado,
seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para
recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.
Sabemos que existen tres posiciones al respecto del
rapto de la iglesia:
1. Pretribulacionista
2. Med-Tribulacionista
3. Postribulacionalista
Pretribulacionista
Pertenece a la escuela Dispensacional, donde la
interpretación bíblica es literal.

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