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POR EL FORTALECIMIENTO DEL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL
EL JUEVES 22 DE SEPTIEMBRE TOD@S A MARCHAR
Porque hoy, más nunca, es necesario generar una amplia solidaridad con los
estudiantes, porque hoy es más urgente que nunca lograr que toda comunidad
universitaria se integre y acompañe a nuestros estudiantes en la marcha por la
defensa de la educación chilena, el jueves 22 de septiembre. Nuestro llamado es a
todos los trabajadores y todas las trabajadoras de las universidades a multiplicar el
apoyo a la movilización de los estudiantes,
Porque no debemos permitir que se imponga el chantaje con que se pretende
paralizar un legitimo movimiento de protesta ciudadana liderado por la Confederación
de Estudiantes de Chile (Confech), junto a las organizaciones de estudiantes
secundarios que, en su accionar han logrado dar expresión a la voluntad de cambio
que el sistema educacional chileno requiere y que representa a la mayoría ciudadana
del país.
Hoy más que nunca es necesario que los trabajadores expresemos con decisión
nuestro resuelto apoyo a las medidas propuestas y que se requieren aplicar de forma
urgente para revitalizar un sistema educacional que hace crisis en todos sus niveles.
Es necesario poner fin al lucro porque el lucro es una verdadera gangrena que
debilita toda estructura del sistema educacional chileno. El lucro nada tiene que ver
con el derecho a una legítima ganancia, la ganancia es fruto de todo honrado
esfuerzo y/o inversión socialmente necesario; pero el lucro es ganancia excesiva,
usura, aprovechamiento indebido ante una situación de necesidad. Asimismo, toda
forma de segregación social por medio del sistema educativo, no es ética ni
moralmente aceptable, no puede seguir ocurriendo que los establecimientos
escolares seleccionen a sus estudiantes según su capacidad de pago, como
tampoco que se continúe mezquinando el financiamiento a las universidades
públicas para entregarlas a la voracidad del sistema financiero que ya tiene hipotecas
por más del 50% del patrimonio universitario perteneciente al Estado.
La gratuidad y la calidad de la educación son caras de una misma moneda, pues
mientras se continúe legitimando el lucro, la calidad de la educación sólo será “un
canto de sirena” y que detrás de sus versos no hay nada sustantivo y a través de
ellos, sólo se busca disfrazar el objetivo real que no es otro que seguir favoreciendo
al sector privado en la entrega de los fondos que el Estado destina a la educación.
Las universidades estatales están amenazadas por el sobreendeudamiento, los
directivos, de manera irresponsable han impulsado inversiones al margen del
financiamiento del Estado y han funcionado permanentemente bajo una estructura de
gastos y granjerías al margen de ingresos efectivos, con lo que han terminado por
hipotecar no sólo su patrimonio material, sino que también su riqueza cultural, capital
simbólico que es el prestigio logrado por el esfuerzo de generaciones de
académicos, estudiantes y trabajadores.
Los trabajadores y trabajadoras de las universidades públicas reafirmamos nuestra
política de avanzar hacia la democratización de las universidades; que se ponga
término al poder omnímodo de las autoridades unipersonales, levantando las
banderas de la triestamentalidad, como una forma de avanzar hacia una universidad
democratica y al servicio de las necesidades del país y comprometidas con las
mayorías nacionales.
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El movimiento estudiantil se encuentra en la etapa definitoria, después de hoy haber
sorteado exitosamente la arremetida que impulsó la autoridad de gobierno que
intentó dividirlo entre “moderados” y “ultras”, la cual fracasó estrepitosamente al
mantenerse unidad en la diversidad la Asamblea de representantes de la Confech;
hoy, enfrenta una brutal ofensiva burocrática que pretende por una parte, por la vía
de decretar por secretaria el éxito o el fracaso del año escolar; echándose en el
bolsillo su cacareada “calidad de la educación” y, por otra, determinando la perdida
de becas u otros beneficios económicos para aquellos que no se allanen a concurrir
a declarar su disposición a reanudar sus actividades.
Hoy, más allá de todo sectarismo, más allá de todo falso protagonismo inconducente,
los trabajadores y trabajadoras de las universidades debemos concurrir en apoyo del
movimiento estudiantil para desbaratar estas medidas administrativas que sólo
buscan inhibir y desbaratar sus grandiosas manifestaciones públicas, que han sido
un ejemplo y aliciente que ha hecho renacer las esperanzas del pueblo chileno, que
comienza a coordinar sus luchas para alcanzar un efectivo progreso social.
Desde el primer día los trabajadores de las universidades hemos estado apoyando el
movimiento de CONFECH. Nos hemos comprometido a que este colosal esfuerzo de
nuestra juventud no se diluya en vanas promesas, porque esto defraudaría las
esperanzas de miles y miles de familias que hoy son victimas de un alto
endeudamiento y que necesitan con urgencia liberarse de esta carga que les impone
un sistema educativo que sólo tiene como objetivo el lucro; ahora ha llegado el
momento de demostrar que somos sus efectivos aliados estratégicos.
¡ Todos y Todas a Sumarse a la Movilización¡
Santiago, 20 de Septiembre de 2011
FEDERACION NACIONAL DE ASOCIACIONES DE FUNCIONARIOS DE
UNIVERSIDADES ESTATALES DE CHILE (FENAFUECH)