1. CAPÍTULO I
LOS DIAGNÓSTICOS
En el siguiente capítulo mencionaré acerca del diagnóstico y todo lo relacionado a
este tema, así como el avance que he tenido desde que comencé mis estudios en
la Escuela Normal. Un diagnóstico es un proceso a través del cual conocemos el
estado o situación que se encuentra algo o alguien, con la finalidad de intervenir,
si es necesario, para aproximarlo a lo real. Es decir, es una recolección y análisis
de datos para evaluar algún problema de cualquier naturaleza. Existen diversos
tipos de diagnósticos, como lo son diagnóstico médico, diagnóstico ambiental,
emocional, etc., pero en este caso nos adentraremos al diagnóstico pedagógico
que tiene que ver con la educación.
El diagnóstico pedagógico evalúa el estado de desarrollo personal y el potencial
de aprendizaje, asimismo, tiene la finalidad de describir, clasificar, predecir, y/o
explicar el comportamiento de los niños.
Marí (2001) considera el diagnóstico educativo como “un proceso de indagación
científica, apoyado en una base epistemológica y cuyo objeto lo constituye la
totalidad de los sujetos (individuos o grupos) o entidades (instituciones,
organizaciones, programas, contextos familiar, socio-ambiental, etc.) considerados
desde su complejidad y abarcando la globalidad de su situación, e incluye
necesariamente en su proceso metodológico una intervención educativa de tipo
perfectiva” (p. 201)
Buisán Y Marín (2001) le conceptúan como “un proceso que trata de describir,
clasificar, predecir y explicar el comportamiento de un sujeto dentro del marco
escolar. Incluyen un conjunto de actividades de medición y evaluación de un
sujeto (o grupo de sujetos) o de una institución con el fin de dar una orientación.”
(p.13)
2. Estos autores definen al Diagnóstico Educativo o Pedagógico como una actividad
científica y representan como su objeto de estudio a sujetos e instituciones. Si bien
Marín ve al sujeto o a las entidades en su situación global, enfatizando la actividad
de intervención como constitutiva del diagnóstico. Buisán y Marín ven a un sujeto
inmerso exclusivamente en el contexto escolar y al proceso diagnóstico como una
actividad de orientación con tres funciones básicas: preventiva, predictiva y
correctiva, de esta manera, una vez realizado el diagnóstico sobre las
posibilidades y limitaciones del sujeto, sus resultados servirán para definir el
desarrollo futuro y la marcha del aprendizaje del objeto de estudio.
Los diagnósticos poseen características tales como:
- Instancia evaluativa, esto quiere decir que se debe iniciar en todo proceso
educativo.
- Es la primera de las evaluaciones formativas, como sabemos, a los alumnos
tenemos que estarlos evaluando constantemente y ésta es una buena manera de
empezar para ir determinando el dominio de su aprendizaje.
- Es dinámico, se parte de una situación real procurando llegar a lo ideal.
- Su función es de regulación, es decir, asegura una vinculación entre las
características de las personas en formación (alumnos) y las del sistema de
formación (educación).
- Su evaluación es cualitativa, es decir se califican las cualidades.
- Es propositivo, ya que su objetivo es pasar de los conocimientos previos que el
alumno posee a los aprendizajes significativos.
El diagnóstico también requiere de instrumentos:
- Fiable, que es la condición para llevar a cabo una acción exitosa;
- Válido por que tiene la cualidad de ser eficaz; y
- Factible porque se puede llevar a la práctica que se espera lograr buenos
resultados.
Un diagnóstico, también requiere de un aprendizaje significativo para ubicarse en
una zona de desarrollo próximo. Un aprendizaje significativo es el que procura
3. establecer vínculos entre el contenido por aprender y lo que la persona ya sabe
mediante sus experiencias que como lo había mencionado arriba, sus
conocimientos previos.
Las principales condiciones para el aprendizaje significativo son:
- Que el contenido por aprender sea potencialmente significativo, o sea que tenga
una lógica, una intención y no nada más sea superficial; que sea lógicamente,
psicológicamente, socialmente y didácticamente significativo, ya que debe ser
coherente, esté al alcance de su madurez cognoscitiva, que se relacione en
sociedad, y que tenga un propósito que contribuya a su aprendizaje.
- Que el alumno disponga de conocimientos previos.
- Que esos conocimientos previos estén disponibles, frescos.
- Que los alumnos estén dispuestos a aprender significativamente.
¿Qué función cumple aquí el diagnóstico? Pues la de activar los conocimientos de
modo que se facilite tender puentes cognoscitivos entre ellos y los nuevos
contenidos, o sea que a partir del diagnóstico se lleve a cabo un trayecto de
aprendizaje para que éste evolucione en el niño.
La zona de desarrollo próximo es la distancia entre el nivel real de desarrollo,
determinado por la capacidad de resolver independientemente un problema y el
nivel de desarrollo potencial, determinado a través de la resolución de un
problema bajo la guía de un adulto o en colaboración con otro compañero más
capaz.
Son las estructuras que todavía no han madurado, pero que podrían madurar
gracias a la interacción con un adulto o un par; entendido como un paso antes de
llegar al conocimiento.
En palabras de Vygotsky:
4. La Zona de Desarrollo Potencial es la distancia entre el nivel de resolución de una
tarea que una persona puede alcanzar actuando independientemente y el nivel
que puede alcanzar con la ayuda de un compañero más competente o experto en
esa tarea. Entre la Zona de Desarrollo Real y la Zona de Desarrollo Potencial, se
abre la Zona de Desarrollo Próximo (ZDP) que puede describirse como:
...el espacio en que gracias a la interacción y la ayuda de otros, una persona
puede trabajar y resolver un problema o realizar una tarea de una manera y con
un nivel que no sería capaz de tener individualmente... En cada alumno y para
cada contenido de aprendizaje existe una zona que esta próxima a desarrollarse y
otra que en ese momento está fuera de su alcance.
¿Qué vinculación tiene esta concepción de Vygotsky con el diagnóstico? Como la
zona de desarrollo próximo es el lugar de intervención del docente, se debe saber
dónde comienza para poder ubicarse correctamente, ya que el diagnóstico es el
medio para determinar qué tanto los niños pueden hacer solos y qué tanto pueden
a llegar a aprender si les brindamos ayuda.
El diagnóstico requiere de instrumentos para evaluar las dimensiones que
habíamos mencionado anteriormente.
1era dimensión: Conocimientos previos Los conocimientos previos pertenecen a
tres ámbitos:
- Conceptual, que se refiere al conjunto de información que caracteriza a una
disciplina o campo de saber (contenidos).
- Procedimental, conjunto de acciones que se llevan a cabo para conseguir una
meta que aumentan la capacidad de actuación del alumno: definir, hipotetizar,
ordenar, evaluar, resolver problemas; y
- Actitudinal, que tiene que ver con las actitudes, los valores, las normas que una
persona tiene.
Algunas maneras de diagnosticar:
5. Los contenidos conceptuales
-Oralmente: Como por ejemplo con debates, exposiciones, entrevistas.
-Por escrito: Resolución de problemas, mapas conceptuales, redes conceptuales,
pruebas o exámenes, cuestionarios, ensayos.
Los contenidos procedimentales
- Descripción teórica de cómo se debe realizar el procedimiento; cómo es que le
harán para llegar a la meta.
- Aplicación del procedimiento a situaciones particulares, de qué manera lo
realizarán.
- Elección del procedimiento más adecuado a cierto contenido conceptual, qué
camino tomarán y porqué. Los contenidos actitudinales Esta evaluación es
únicamente cualitativa, con qué seguridad se enfrentarán a las situaciones
problema, conlleva a analizar valores como la honestidad, confianza, aceptación,
respeto.
Algunos instrumentos para diagnosticar este tipo de contenidos pueden ser las
tablas de observación, escala de Likert, selección de valores, entre otras.
2da dimensión: Nivel evolutivo
Se menciona el método clínico de Piaget, que es un instrumento para la
evaluación del desarrollo del pensamiento y para detectar la estructura
cognoscitiva con la que el sujeto es capaz de operar en el momento y situación
presente.
3era dimensión: Disposición para aprender.
En esta sección, maneja un pequeño cuestionario con enunciados a los cuales
ellos mismos se tienen que calificar con un sí o un no, para que conozcan su
disposición al aprender y pidiéndoles que respondan de la manera más honesta
6. posible. No es conveniente que se pongan demasiados enunciados para que no
se torne aburrida y no contesten cualquier cosa solo por cansancio.
Me di cuenta que el diagnóstico no solo es realizar un test, un debate o una
exposición al principio de cada ciclo escolar o cada bloque, sino que es un gran
instrumento para elevar la calidad de la educación y que éste lleva un proceso
complejo para su elaboración y su detección, todo docente debe de estar
capacitado para saber elaborar un buen diagnóstico que le permita ir conociendo
los avances de los niños. Inclusive no nada más los docentes si no que todos los
que intervienen de una forma u otra sobre la institución educativa (docentes,
supervisores, directivos) Deben partir para incidir en el mismo objetivo, de
diagnosticar lo que en la escuela ocurre, lo que pasa con sus alumnos, para ir
modificando su acción docente, para darnos cuenta en qué estamos bien y en qué
estamos mal, en qué podemos cambiar y ser mejores, para ir transformando
nuestra práctica día con día.
Es necesario en las diferentes asignaturas y en cada grado, conocer el nivel de
logros alcanzado, en cuanto a los antecedentes de los conocimientos y
habilidades. Las diferentes formas de diagnóstico de los conocimientos que se
utilicen, deben permitir al docente determinar los elementos del conocimiento
logrados y cuáles faltan, así como los niveles con los que el alumno puede aplicar
y los procedimientos que emplea, debe verse este diagnóstico no como una
calificación, sino como un elemento actitudinal.
Entonces, el diagnóstico dentro del ámbito educativo es de mucha importancia
para el docente debido a que le permite adentrarse más acertadamente en la vida
de la escuela y utilizar una vía científica como punto de partida del diagnóstico
como proceso y resultado, ayudándole a dar pasos más concretos en las
estrategias para el trabajo diario, capaces de transformar su propia práctica en
busca de mayor eficiencia y eficacia. Comprender la importancia del diagnóstico
7. educativo es vital para desarrollar con éxito todo el proceso de enseñanza y
aprendizaje.
Los diagnósticos que he aplicado se han transformado constantemente, he
aprendido que existe una gran variedad de estos. En primer semestre mis
diagnósticos no eran muy completos, tenían muy pocos elementos para evaluar o
como su nombre lo dice diagnosticar realmente todo lo que influye en el proceso
de enseña- aprendizaje de los educandos, realmente no sabía cómo elaborarlos y
por ello solo ocupaba los elementos base como tipo de ubicación del jardín,
cuántos niños había, con que material contaba el aula, sin ir más al fondo, como
saber cuál es la principal fuente de trabajo de los padres de familia, cuántos
integrantes conforman la familia de cada niño, en dónde viven, quien les ayuda a
hacer su tarea, si llegan desayudados a las escuela todas las mañanas. Considero
que es esto lo que realmente importa pues es más fácil comprender el porqué de
las acciones y comportamientos de cada uno de los niños, y esta es una de las
finalidades de un diagnóstico, y de que los profesores lo lleven a cabo.
Comparando con los diagnósticos que realizo en la actualidad, me doy cuenta que
les faltaban algunos elementos clave para valorar realmente el contexto del área
de trabajo, de igual manera en cuanto a su aplicación, por ejemplo, la primera vez
que llevé a cabo un diagnóstico me sentía perdida, no sabía cómo empezar, como
llevar a cabo las anotaciones, en consecuencia, no entendía como realizar un
diagnóstico.
De modo que con el paso del tiempo, aprendí las características que este debe
contener, como elaborarlo de acuerdo a los elementos que debe llevar, y también
como realizarlo en el aula. Sin duda es una de las herramientas básicas en el
proceso de enseñanza-aprendizaje, a mí me sirvió para conocer el contexto en el
que se desarrollan mis niños del jardín, así como específicamente el de cada uno,
sus conocimientos previos y habilidades, permitiéndome así partir de ello para
elaborar mis secuencias didácticas y reforzar sus conocimientos e introducirlos a
8. nuevos aprendizajes, tomando en cuenta sus capacidades y sobretodo sus
necesidades.
Actualmente me siento competente al elaborar diagnósticos, he aprendido cómo y
cuándo llevarlos a cabo en el jardín, ha sido muy útil en mi práctica profesional ya
que me he basado en los resultados para crear aprendizajes significativos en los
educandos, así como para conocerlos a ellos más personalmente y permitiéndome
entender sus acciones dentro del aula. Pues he aprendiendo que los problemas
que traen de casa o alguna situación difícil para ellos repercute directamente en su
disposición para trabajar, entonces es cuando uno tiene que intervenir motivándolo
de la mejor manera para que participe y se involucre en las actividades
propuestas.