Hacemos pública la conformación del Comité Popular en Defensa de los Derechos Humanos. Toda persona -sin distinción de sexo, ideología, credo, raza- por el simple hecho de serlo, le son inherentes Derechos Humanos, entonces, garantizar el respeto a los derechos de toda persona, significa también, garantizar el respeto de los derechos de los pueblos. Sin embargo, en México, actualmente vivimos tiempos no menos violentos que antaño; de conflictos y contradicciones, como de luchas que han surgido de los pueblos contra la opresión y explotación, como también es un tiempo que el imperialismo desarrolla nuevos mecanismos de dominación. En ese sentido, hacemos hincapié en las leyes neoliberales recientemente aprobadas en nuestro país en: educación (art. 3), trabajo y seguro social (art. 123), política, hacendaria y energética. Todas ellas, nos queda claro, en beneficio de la oligarquía nacional y extranjera. Estas “innovaciones jurídicas”, camuflaje de la hipocresía, demuestran su utilidad y sello clasista, en la libertad con que se entregan los recursos naturales de nuestro pueblo a través de las concesiones mineras, presas hidroeléctricas, parques eólicos, supermercados, etcétera....