Palabras del presidente de la federeción y del comite internacional de cr y mlr
1. PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA FEDERECIÓN Y DEL COMITÉ
INTERNACIONAL DE CRUZ ROJA Y MEDIA LUNA ROJA EN EL
MARCO DE LA CELEBRACIÓN DEL DÍA INTERNACIONAL DE
CRUZ ROJA Y MEDIA LUNA ROJA
Tadateru Konoé, Presidente de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y
de la Media Luna Roja, y Peter Maurer, Presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja
La acción humanitaria, neutral e imparcial, realizada por voluntarios ha estado en el
corazón de la labor del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna
Roja desde nuestros mismos inicios. Adoptados oficialmente hace 50 años, los
Principios Fundamentales –Humanidad, Imparcialidad, Neutralidad, Independencia,
Voluntariado, Unidad y Universalidad– sirven de base a nuestras decisiones y acciones
actuales y futuras. Viendo a nuestros abnegados voluntarios y miembros del personal en
acción para ayudar a quienes luchan por superar las consecuencias del violento
terremoto en Nepal, uno no puede tener ninguna duda de que siguen siendo
imprescindibles en el rol y los valores humanitarios que hoy celebramos. No obstante, a
medida que las necesidades humanitarias se disparan y se vuelven más exigentes, la
pertinencia de nuestros principios y nuestra capacidad de prestar servicios son puestas
a prueba.
Desde la adopción de los Principios Fundamentales, la naturaleza de las crisis y la
guerra se ha vuelto más compleja. En nuestros días, los conflictos armados se
prolongan y, agravados por el cambio climático, los desastres naturales son más
extremos. El aumento de los flujos migratorios, la recurrencia de las crisis de seguridad
alimentaria y las epidemias de salud dejaron a poblaciones en situaciones límite,
creando resentimiento y sembrando desconfianza.
En Siria, Yemen, la República Centroafricana, Myanmar y Sudán del Sur, docenas de
voluntarios de la Cruz Roja y la Media Luna Roja fueron asesinados o heridos en los 12
últimos meses. Los trabajadores de la ayuda que combaten el Ébola en Guinea fueron
blanco de agresiones a razón de 10 veces por mes, en término medio. En Siria y
Yemen, las instalaciones de salud son objetivos de ataques directos y los convoyes de
ayuda corren peligro a pesar de que los vehículos están claramente marcados con los
emblemas protectores de la cruz roja o la media luna roja.
Esa falta de comprensión, las malas interpretaciones comunes o la politización cada vez
más frecuente y, en determinadas ocasiones, el abierto rechazo de los Principios
Fundamentales comprometen nuestra capacidad de acceso para responder a las
necesidades de la gente en algunas de las situaciones más peligrosas del planeta.
Debemos redoblar nuestros esfuerzos para que el mundo tenga claro lo que nosotros
defendemos en el Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja y
llevar a cabo nuestras tareas con resolución y determinación para responder a las
necesidades de comunidades vulnerables que se ven afectadas por crisis o conflictos.
2. En el panorama humanitario de hoy en día, no podemos permitir que nuestros Principios
Fundamentales sean mal interpretados. Guiadas por el espíritu de humanidad, el único
propósito de la Cruz Roja y la Media Luna Roja es ayudar a quienes lo necesitan.
Nuestras acciones se rigen por la imparcialidad y prestamos servicios sin distinción
alguna por motivos de origen, nacionalidad, opiniones o creencias. Nuestra neutralidad
garantiza que todas las partes entiendan que no tomamos partido.
Ahora bien, en este cambiante panorama humanitario, quienes prestan asistencia, en
concreto nuestros voluntarios basados en la comunidad, se enfrentan a un riesgo
personal inimaginable. Estos principios son nuestro único medio de garantizar que los
17 millones de voluntarios de la Cruz Roja y la Media Luna Roja presentes en 189
países puedan prestar ayuda a personas afectadas por crisis y conflictos. De una u otra
forma, por más de 150 años han sustentado una acción humanitaria basada en
principios, asegurando que cuando está más desesperada, la gente tenga acceso a
protección y apoyo. Solo podemos llevar a cabo nuestra labor si nuestros principios y
nuestros emblemas son respetados: en resumidas cuentas, son nuestro único escudo.
Por lo tanto, hoy más que nunca, instamos a todas las partes, estatales o no, a sostener
los valores humanitarios plasmados en los principios de la Cruz Roja y la Media Luna
Roja. Eso es necesario para construir la confianza y la aceptación de las comunidades y
seguir prestando un apoyo vital a los más vulnerables. El compromiso de nuestros
millones de voluntarios con su labor es en sí una afirmación de la creencia de que puede
suceder y sucederá.
En celebración del medio siglo transcurrido desde su adopción, el Movimiento
Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja entabla un diálogo mundial sobre
los Principios Fundamentales y su continuo papel en la prestación de servicios
humanitarios. Conozca más en www.fundamentalprinciples.today