Donar sangre salva vidas al proveer sangre a personas que la necesitan. Existen tres tipos de donantes: donantes familiares o de reposición, donantes remunerados o comerciales, y donantes voluntarios. Para donar sangre, una persona debe tener entre 18 y 65 años, pesar más de 50 kg, y tener niveles adecuados de hemoglobina y buena salud general.