Los retos educativos durante y después del confinamiento. Una mirada desde la...
Poniéndole trama a la vida
1. “La vida no tiene trama, se la ponemos
nosotros, que inventamos la literatura”
Enrique Vila-Matas. El viento ligero en Parma
2. «Hay que entrar a uno mismo armado hasta los dientes»
Paul Valéry. Monsieur Teste
CONTARSE
«La vida existe para ser hecha literatura. Michael Holroyd. Autobiografías. Cómo se escribe
una vida»
«La realidad, al pasar por la literatura, se organiza y cambia». Alejandro Rossi. Un
preceptor. Manual del distraído
«Solo entiende lo que ha vivido, o lo que está por vivir, cuando está escrito. No se narra
para recordar, sino para ver. Para hacer visibles las conexiones, los gestos, los lugares, la
disposición de los cuerpos » Ricardo Piglia. Un relato sobre Kafka. El Último Lector.
INCERTIDUMBRE
«El mundo podría tomar en cada momento todas las direcciones o, al menos, una cualquiera
de ellas; lo lleva, por decirlo así, en sus miembros. Por eso un modo original de vivir sería el
intentar alguna vez no comportarse como una persona determinada en mundo determinado,
donde yo diría que no hay más que dos o tres botones que apretar, lo cual recibe el nombre
3. de desarrollo; más bien habría que intentar vivir como un hombre nacido para transformarse
dentro de un mundo creado para la evolución, o sea, aproximadamente como una gotita de
agua en una nube. ». Ulrich en El hombre sin atributos de Robert Musil.
«El hombre sin atributos es precisamente el hombre del “aún no”, el que no considera nada
definitivo, el que detiene cualquier sistema, el que impide cualquier fijación, el que “no dice no a
la vida, sino aún no”, el que, en fin, actúa como si el mundo -el mundo de la verdad- no debiera
»
comenzar sino mañana . Blanchot sobre Musil y su búsqueda apasionada de la “utopía del
intento
«Entre los treinta y cinco y los cuarenta y cinco, todos hemos de doblar una esquina en el
camino de la vida, o bien estamparnos contra una tapia de ladrillos». Robertson Davies.
Mantícora. Trilogía de Deptford
LA ESENCIA
«Creer en el mundo externo, en la existencia del prójimo, en ciertas regularidades, creer que
de algún modo somos únicos, confiar en determinadas informaciones, corresponde no tanto a
una sabiduría adquirida o a un conjunto de conocimientos, sino más bien a lo que Santayana
llamaba la fe animal, aquella que nos orienta sin demostraciones o razonamientos, aquella que,
sin garantizarnos nada, nos separa de la demencia y nos restituye a la vida »
Alejandro Rossi. Confiar. Manual del distraído
4. «Siempre he tratado de no acercarme demasiado a la verdad o, cuando menos, a las grandes
verdades, prefiriendo decididamente los terrenos laterales, los callejones sin salida, las ideas
sin futuro ». Alejandro Rossi. Manual del distraído
EL FUTURO
«Era incapaz de grandes proyectos, de planes minuciosos, y si a veces los concebía, nunca
fue con la intención de realizarlos. Su falta de confianza en el futuro lo obligaba a limitar sus
aspiraciones casi a la esfera cotidiana, y nunca se preocupó realmente de saber qué haría o
»
comería al día siguiente . Julio Ramón Ribeyro. Para un autorretrato al estilo del siglo XVII
«Vivir es carecer a cada instante de algo -modificarse para alcanzarlo- y, con ello, tender a
colocarse de nuevo en el estado de carecer de algo. Vivimos de lo inestable, por lo inestable,
»
en lo inestable . Paul Valéry. La tentación de (San) Flaubert. Prólogo a la Tentación de San
Antonio.
«Pues bien: porque es un trabajo inútil, por eso mismo debo hacerlo. Estoy harto de perseguir
utilidades; hace ya demasiado tiempo que vivo apartado de mi propia espiritualidad, acorralado
por las urgencias del mundo, y sólo lo inútil, lo desinteresado, me puede dar la libertad
5. imprescindible para reencontrarme con lo que honestamente pienso que es la esencia de la
vida, su sentido final, su razón de ser primera y última ». Mario Levrero. La novela luminosa
«La mayor parte de las cosas las hacía según su humor; y el resto, por convencimiento, es
decir: todo lo hacía por necesidad». Joseph Roth. Fuga sin fin
«…no me interesa en absoluto progresar en la vida, solo quiero vivir con un mínimo de
decencia, nada más». Robert Walser. Los hermanos Tanner
«No quiero un futuro, lo que quiero es un presente. Me parece más valioso. Sólo se tiene
un futuro cuando no se tiene un presente, mientras que si se tiene un presente, uno hasta se
olvida de pensar en el futuro ». Robert Walser. Los hermanos Tanner
LOS RECUERDOS
«A partir de entonces los recuerdos existen, fugaces o persistentes, fútiles o de peso, pero
sin nada que los integre. Son como aquella escritura sin ligar, formada por letras aisladas
incapaces de soldarse entre sí para formar una palabra, que fue la mía hasta los diecisiete o
dieciocho años… Lo que caracteriza a esta época es ante todo su falta de puntos de referencia:
los recuerdos son trozos de vida arrancados al vacío. Sin amarras. Sin nada que los fondee,
sin nada que los fije. Casi nada los ratifica. Sin más cronología que la que yo, con el paso del
»
tiempo, he re-construido arbitrariamente . George Perec. W o el recuerdo de la infancia.
LOS DERECHOS
6. «Entre la múltiple enumeración de los derechos del hombre que la sabiduría del siglo XIX
recomienda tan a menudo y tan complacientemente, dos muy importantes han sido olvidados,
»
que son el derecho de contradecirse y el derecho de irse . Charles Baudelaire. Vida y obras
de Edgar Alan Poe. Prólogo para la traducción de Historias extraordinarias 1856
«Es necesario reivindicar el derecho de soñar. Quizá pueda parecer, a primera vista,
un derecho de poca monta. Pero, si se reflexiona sobre ello, aparecerá como una gran
prerrogativa. Si el hombre es capaz todavía de nutrir ilusiones, ese hombre es aún un hombre
»
libre . Antonio Tabucchi. El siglo XXI, balance y perspectivas.
Fragmentos escritos