El documento describe cómo las empresas sustentan la sociedad civil a través de la capacidad de emprender e innovar, y cómo el potencial de progreso de un territorio depende de las facilidades que ofrece a las iniciativas privadas. También señala que los empresarios impulsan la economía de mercado a través de la riqueza, el empleo y las opciones que generan. Por último, menciona que el crecimiento empresarial en Andalucía creció favorablemente hasta la crisis, aunque se mantuvo a un nivel alto.