El documento resume las enseñanzas del maestro taoísta Lao-Tsé, autor del Tao Te King. Lao-Tsé enseñó que el camino a la iluminación requiere integrar cuerpo, mente y espíritu, y vivir de manera holística sin separar lo espiritual de lo ordinario. También enseñó que la verdadera sabiduría se encuentra dentro y no fuera, y que la claridad mental viene de vivir de acuerdo a la virtud más que de rituales o conocimiento.
2. Alrededor del siglo VI a.C., vivió en China Li Er, personaje casi mítico
acerca de quien la historia ha entretejido incontables leyendas.
Sin tener datos precisos de su biografía, hay quien asegura que fue
contemporáneo de Confucio.
Lo cierto es que fue reconocido como un gran maestro a quien sus
discípulos le llamaban simplemente por su título honorífico:
LAO-TSÉ, que significa
“anciano erudito
y virtuoso”,
y es el nombre que
ha trascendido
hasta nuestros días.
3. A Lao-Tsé se le atribuye haber escrito el Tao Te King (o Tao Te Ching)
obra esencial del Taoísmo, en donde el Tao (“el Camino”) puede
verse como el cambio permanente, siendo por tanto, la verdad
universal.
Sin embargo, son pocos
los que saben que hay
otro libro:
el Hua Hu Ching,
en el cual se han
recopilado muchas de
las enseñanzas orales
que el venerable
maestro Lao-Tsé dio
para que los
contemplativos lograran
verdaderos avances en
el Sendero que conduce
hacia la Iluminación.
4. El contenido de este libro es algo así como un mapa de caminos y
senderos que el ser humano ordinario puede consultar para
desplazarse con éxito por el territorio de lo divino.
En la época en la que las luchas políticas chinas se desataron, la
lectura de este libro estaba prohibida, al punto que en algún momento
se ordenó que se quemaran todas las copias de estos textos.
5. Gracias a que la tradición taoísta establece que las enseñanzas de
más trascendencia deben ser trasmitidas oralmente de maestro a
discípulo -y a veces de labio a oído- , la humanidad habría perdido la
oportunidad de enriquecer su conciencia con la sabiduría que
contienen estos textos, de los cuales tenemos aquí una muestra de
algunos breves extractos.
6. No te dejes atrapar
por superficialidades
espirituales.
Cantar no es más sagrado que escuchar el murmullo del arroyo,
pasar entre tus dedos las cuentas de un rosario no es más sagrado
que respirar, vestir hábitos religiosos no es más espiritual que usar
ropa de trabajo.
Mejor encuentra satisfacción en la práctica de la virtud.
7. Si das de manera generosa y anónima, iluminarás tu oscuridad interior
y tu virtuosismo se convertirá en santuario que te beneficiará a ti y a los
demás.
8. En el terreno de los
pensamientos y de las
ideologías nada es absoluto.
La mayoría de las religiones refuerzan los apegos que se tiene
a los falsos conceptos.
9. Si te la pasas rindiendo culto a deidades y a instituciones religiosas
como si fueran la fuente de la verdad sutil, colocarás intermediarios
entre lo divino y tú y acabarás siendo un mendigo que busca
afuera lo que abunda en el interior de su corazón.
10. Las técnicas contemplativas que conducen a la inmortalidad y a la
Iluminación, sólo pueden ser comprendidas por los que han roto los
lazos que los conectan con el espeso reino mundano de la dualidad
y de los dogmas.
11. No traces una línea entre lo que
es espiritual y lo que no lo es.
Si separas tu vida espiritual de
tu vida ordinaria, no estarás en
el Sendero.
La suprema verdad no puede expresarse con palabras. Por eso, el
verdadero maestro no tiene nada que decir y, simplemente, sin
preocuparse, se da a sí mismo en el servicio que presta.
12. Las enseñanzas del Maestro
no son la medicina;
son sólo la receta.
El mentor no te lleva a tu
destino, sólo te da el mapa
que te servirá de guía para
que lo encuentres.
13. Un ser integral no ambiciona
iluminar a los que no son
conscientes, ni pretende
elevar al reino de lo divino a
las personas mundanas. Para
él no existe yo y el otro; por
tanto, no hay nadie a quien
elevar.
14. No creas que alcanzarás la verdad acumulando conocimientos.
El conocimiento engendra a la duda, y la duda te hace tener
hambre de más conocimientos.
15. Trata de vivir
de una manera holística.
No exageres
la importancia del intelecto.
Al contrario:
integra mente, cuerpo y espíritu en todas las cosas.
Si lo haces, llegarás a ser maestro del conocimiento,
en lugar de ser víctima de los conceptos.
16. Si la mente, el cuerpo y el espíritu
no están igualmente desarrollados
y plenamente integrados, no se
alcanzará ninguna cima espiritual.
Por eso, las religiones y las
ideologías extremistas no dan fruto.
17. De la misma manera que todo
está bien en las riberas cuando
el río fluye claro y limpio por el
cause apropiado, así tu vida
estará llena de armonía si
ejerces control sobre tu mente.
18. La conciencia total y la completa iluminación no se alcanzan sin una
disciplina y una práctica apropiadas.
19. Si quieres superarte, no realices prácticas y disciplinas parciales. Del
mismo modo que no se conoce al cuerpo estudiando al dedo, no se
entenderá al Universo estudiando una sola ciencia.
20. El ansia de iluminación y de inmortalidad no es diferente al ansia de
riquezas materiales.
21. No creas que porque meditas silenciosamente estás clarificando tu
mente.
La claridad de la mente no se alcanza con sólo huir del mundo.
22. Cuando honres a tus
padres, ames a tus hijos,
ayudes a tus hermanos,
seas leal con tus amigos,
cuides a tu pareja con
devoción, trabajes con
alegría y asumas tus
responsabilidades;
cuando practiques la virtud sin exigirla primero a los demás;
cuando, aunque comprendas las verdades supremas, mantengas una
forma ordinaria de proceder, entonces -y sólo entonces- habrá
claridad en tu mente y sabrás que tu forma de meditar es la correcta.
23. Pensar en el Sendero y hablar de él, no es lo mismo que trillarlo.
¿Acaso alguien se convierte en buen jinete sólo porque habla de
caballos?
24. Tu naturaleza y la naturaleza entera del Universo son la misma cosa:
indescriptibles, pero eternamente presentes.
25. El ego te hace creer que el mundo es vasto y las partículas minúsculas;
pero la verdad sutil es que el mundo y la partícula son lo mismo: ni el
uno es vasto ni la otra minúscula.
26. Es parte de la ley cósmica que lo que
digas y lo que hagas determinará lo
que suceda en tu vida.
Si defiendes una idea, otro luchará
contra ella.
Al poco tiempo, los dos entrarán en
conflicto con un tercero y, muy
pronto, toda tu vida será parloteo y
contradicción.
27. Cuando te des cuenta de que lo que haces a otro te lo haces a ti
mismo, habrás entendido la Gran Verdad.
28. Escoge alimentos, vestido y techo de acuerdo con la naturaleza.
Haz que tu trabajo y tu ocio sean la misma cosa.
Realiza ejercicios que desarrollen todo tu ser, no sólo tu cuerpo.
Trata de que la música que escuches conecte las tres esferas de tu ser.
29. Si tu disponibilidad de
dar felicidad es limitada,
tu disponibilidad de
recibirla también lo será.
30. Sólo cuando se sabe que el amanecer llegará se puede descansar
tranquilamente por la noche.
31. Todo momento es frágil.
Por hermosos que hayan sido los momentos del pasado, no pueden
conservarse; por gozosos que sean los momentos del presente, no
pueden guardarse; por deseables que sean los momentos del futuro,
no pueden atraparse.
32. La mente, en su empeño por detener el río en un lugar, deja pasar por
alto la simple verdad del momento.
33. ¡Ama la vida!
No tienes que esconderte
en retiros espirituales.
Puedes ser un bondadoso eremita contemplativo justo aquí, en
medio del ajetreo del cotidiano vivir.